Crucero a La Tierra De Los Tríos

Por Chaz Alexander

Una pareja casada toma un crucero con ropa opcional para explorar cosas nuevas y mejorar su vida sexual. En el crucero, Bob experimenta la realización de muchas fantasías y amplía su repertorio sexual.

Un crucero de ropa opcional permite a una pareja casada explorar la actividad sexual y hacer realidad sus fantasías. Bob ha tenido visiones de ver a su esposa disfrutar de otro hombre mientras él participa como su pareja y cómplice. Es capaz de actuar sobre sus tendencias bisexuales y disfruta mucho del contacto masculino. Amanda despierta deseos desde su juventud y alcanza un nivel de satisfacción que no conoce desde hace muchos años. Se encuentran con varios hombres bien dotados, jóvenes y de color para ayudarlas en este emocionante período de sus vidas.

Comparta su primer encuentro bisexual de hombre a hombre, su primer hombre realmente bien dotado desde que se casó y su primera actividad sexual femenina desde sus días de universidad. Bob y Amanda están rompiendo las reglas y amando cada minuto.

Incluye temas y descripciones heterosexuales, bisexuales y homosexuales. No para menores de 18 años.

• Idioma: Español
• Editorial: Chaz Alexander
• Fecha de lanzamiento: 22 jun 2022
• ISBN: 9781005916848

Chaz Alexander

Chaz Alexander lives in Central Florida in an open relationship with his significant other of 19 years. Having discovered his bisexuality as a young man, he has pursued this relationship over the years. Several years ago, he met a couple with whom he established an instant attraction. He moved into their home (much to in-laws chagrin) and they lived as an MMF threesome for four years. Finally, before they separated, they even bought property together.Now he and his significant other welcome the occasional male visitor for an evening or perhaps a weekend and explore the erotic experiences available when sharing intimacy with three people.The stories in Chaz’s books are based on real-life experiences he has shared with his significant others.Warning: Each book is an erotic story between one woman and two men. The series contains graphic material that is not suitable for anyone under the age of 18, including M/M/F, M/F, and M/M sexual encounters.Go to my website for a new pdf with examples of all my books. Say "Hello." Thanks.

Vista previa del libro

Capítulo 1 – Embarque

La brisa del muelle era refrescante cuando Bob y Amanda subieron por la pasarela hacia el crucero. Mientras Bob caminaba detrás de su esposa durante 17 años, se dio cuenta de la forma de su trasero. Siempre había admirado sus nalgas, incluso cuando era estudiante de tercer año en la universidad cuando la vio caminar juntos hacia su primera clase. Estaba vestida de manera conservadora con una falda más larga que las otras alumnas en el salón. Pero la falda que había elegido se pegaba a su figura y perfilaba sus caderas. Se balanceaban sugerentemente mientras caminaba. Al mirar más de cerca, pudo ver el tenue contorno de su ropa interior. Las tangas no se habían vuelto populares y pudo ver que ella usaba bragas amplias que iban desde la cintura hasta el pliegue del muslo donde se unía con el trasero. En un momento se dio cuenta de que la estaba mirando mientras caminaba. Rápidamente miró a su alrededor para ver si lo habían atrapado. Los otros estudiantes parecían estar en su propio mundo y no se daban cuenta de la atención que le estaba prestando a su compañero de clase.

Para su placer, llegaron juntos a la misma puerta del salón de clases. Él se hizo a un lado y le tendió la mano de una manera algo caballerosa cuando ella lo precedió a través de la puerta. Tuvo la oportunidad de sonreír cuando captó su mirada. Ella le devolvió la sonrisa, pero rápidamente desvió la mirada hacia los escritorios. Se detuvo un momento para ver si podía determinar qué silla tomaría para poder sentarse más cerca de ella con indiferencia. Ella eligió un asiento varias filas atrás y él se deslizó en un asiento un par de filas más allá.

El bullicio de los nuevos miembros de la clase continuó y Bob la observó mientras acomodaba su cuaderno y su libro de texto en su escritorio, tomaba un bolígrafo y se preparaba para tomar notas. Casi lo atrapó mirándola, pero rápidamente se dio la vuelta mientras ella examinaba la habitación que se llenaba de estudiantes. Antes de apartar la mirada pudo completar el inventario de ella. Ella era guapa. No era voluptuosa, pero podía decir que tenía una figura agradable. Él pensó que sus senos probablemente no necesitaban un sostén para mantenerlos en su lugar y en lo alto de su pecho. Su blusa de algodón estaba abierta en el cuello pero no había escote a la vista. Llevaba zapatos planos todos los días. Tenía cabello castaño y ojos oscuros. Su cabello caía justo por encima de sus hombros y parecía ser natural. Parecía suave y Bob estaba tan cautivado que tuvo una imagen de sus dedos pasando por sus mechones.

Decir que estaba enamorado era quedarse corto. Mientras observaba al profesor de Literatura Inglesa abrir su cuaderno para prepararse para la clase, la mente de Bob estaba a un millón de millas de distancia en una fantasía sobre esta nueva persona en su mundo.

Fue devuelto al presente en lo alto de la pasarela.

Bob y Amanda continuaron subiendo por la pasarela tirando de sus maletas con ruedas y buscando indicaciones para llegar a su camarote. Bob observó a los demás pasajeros subir a bordo del barco. Había una gran variedad en la edad de las personas que los rodeaban. Este fue un crucero de ropa opcional por el Caribe. Esperaban encontrar relajación y tal vez incluso algo de emoción para estimular su vida sexual. Se sintió aliviado al ver que había un buen número de personas de edad similar. También había una playa de ropa opcional que visitarían. Habían estado en varios resorts, campamentos y playas nudistas durante su matrimonio y habían disfrutado de la libertad y la tensión sexual que les brindaba. Él y Amanda esperaban con ansias esta experiencia.

El mayordomo que estaba a la cabeza del tablón de la pandilla echó un rápido vistazo a sus boletos y señaló un pasillo a lo largo de la cubierta. Siguieron a varias parejas por la cubierta y giraron hacia la puerta y luego continuaron por el pasillo hasta que encontraron su camarote. Bob se había asegurado de que tuvieran una cabaña con un balcón con vista al océano. Pensó que era romántico. Abrió la puerta y entró en su cabaña.

Como ocurre con la mayoría de los cruceros, la cabina era pequeña pero cómoda. Había una cama doble, el baño y un sofá de dos plazas y una silla con una mesa pequeña. Las puertas corredizas de vidrio se abrían a un pequeño balcón con dos sillas y una mesa para beber. La decoración era muy tropical con colores pálidos de arena y azules.

Pronto Bob tuvo las maletas desempacadas y sus artículos personales en el baño y la mesita de noche. Se colgó la ropa y comenzaron a planear la cena. Bob tomó la mano de Amanda y la llevó al balcón. Se pararon junto a la barandilla y miraron hacia el agua. Incluso antes de que partieran y todavía estuvieran anclados, era bonito. El sol de la tarde se deslizaba hacia el horizonte. Bob abrazó a su esposa mientras la abrazaba por detrás. Su trasero estaba presionado contra su abdomen y él dejó que su mano se deslizara hacia arriba para acariciar su pecho. Ambos sintieron la agitación en su ingle.

¡Beto! dijo Amanda. ¿Ya?

Después de todos estos años, todavía me haces eso, amor, habló con la boca cerca de su oído.

Eso es tranquilizador, dijo. Es bueno que sientas eso por esta persona 'ol Mami'.

Mientras subíamos a bordo, pensé en la primera vez que te vi en el pasillo de camino a clase. Recuerdo haberte visto caminando hacia la clase y estaba fascinado por ti en ese momento y todavía me siento de la misma manera hoy.

Él la apretó un poco más fuerte y besó su cuello. Amanda cerró los ojos y se recostó contra su esposo.

Algunas cosas nunca cambian, pensó. Todavía estaba excitada por su atención. Estaba ansiosa por esta semana de vacaciones y exploración. Su vida amorosa había sido muy apasionada al principio, pero luego los niños, el trabajo y la vida parecían suceder. El sexo se volvió menos frecuente y más rutinario. Hacer el amor se había vuelto aburrido.

Una noche, mientras se acurrucaban en la cama, sintió la presión contra su parte inferior de una erección que despertaba.

"Ummm. ¿Qué está pasando ahí abajo? ella preguntó.

Estaba pensando en tu pasado. ¿Tuviste amantes antes que yo? Tengo curiosidad. ¿Acaso tú?

Este era un territorio desconocido para Amanda. Nunca había hablado de su vida sexual antes de que se conocieran. Había asumido que un hombre se sentiría incómodo al oír hablar de amantes anteriores. ¿Estaría celoso? Supongamos que él era físicamente más grande que su marido. La erección se estaba volviendo más prominente y presionaba con más fuerza contra su trasero.

¿Por qué lo preguntas? ella respondio.

Él tomó su pecho en la mano y rodó su pezón entre el índice y el pulgar.

No hace mucho, leí una historia sobre un esposo que tenía la fantasía de ver a su esposa con otro hombre. Mientras lo leía, lo encontré muy erótico. Investigué un poco y no es una fantasía poco común. Mientras lo leía, mi polla se puso muy dura, más dura de lo habitual. Encontré más historias como esa y todas me excitan mucho. Las últimas veces que tuvimos sexo, me he estado preguntando cómo sería verte en esa situación.

Oh, dijo Amanda consciente ahora de que el pene contra su trasero estaba realmente duro.

Nunca pensé en tener sexo con otro hombre, dijo.

Eso no era del todo cierto. De vez en cuando, veía a un hombre en el centro comercial o en la tienda de comestibles y algo en él le llamaba la atención y le causaba un temblor en la vagina. Se daría cuenta de un flujo de humedad en su cuerpo que dejaría sus bragas mojadas. Pero pensar realmente en llevar a otro hombre a la cama, especialmente con su esposo presente, era impensable. Hacía años que no se daba placer a sí misma, pero cuando lo hacía recordaba a varias de sus parejas sexuales de la época universitaria. Los que recordaba eran los jóvenes bien dotados que le habían estirado la vagina antes de que tuviera hijos. Ahora su esposo estaba sugiriendo alguna extraña práctica sexual que la había tomado completamente desprevenida.

¿Es este mundo de fantasía o una charla del mundo real? ella preguntó.

Las fantasías son deseos incumplidos, respondió.

Presionó su cadera para hacerla rodar sobre su espalda. La conversación y los recuerdos de amantes pasados habían comenzado a despertar una necesidad en ella. Él se levantó y deslizó sus piernas entre sus muslos y ella sintió que su pene tocaba el interior de sus muslos mientras ajustaba su cuerpo para colocar la cabeza de su órgano contra sus labios.

Déjame contarte un par de historias que me han emocionado mucho. Vamos a hacer un trato. Si encuentra la idea completamente repulsiva, entonces no la discutiremos más. Pero, si compartimos esto y lo encuentras erótico y emocionante, podemos hablar sobre cómo hacerlo realidad y las circunstancias. Te amo y nunca haría nada para hacerte sentir incómoda o infeliz.

Había hecho a un lado las mantas, doblado las rodillas y extendido. Era un movimiento que había hecho cientos de veces antes. Subió por su cuerpo y besó sus pezones mientras se arrodillaba entre sus rodillas. Su coño estaba húmedo en ese momento y se agachó y encontró su pene con la mano derecha y lo guió hacia su abertura vaginal. Él gimió