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Libro electrónico465 páginas5 horas

Un libro en respuestas

Por Th. Om

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Hemos olvidado cómo sorprendernos en nuestra sociedad.Todo está fragmentado, desglosado en sus partes individuales, que luego se disputan.Nos rodeamos de fragmentos de fragmentación, elevamos esta metodología a nuestro dios, nuestro ídolo.La separación es casi perfecta.Y así, y sin embargo, un gran asombro se apoderará de toda la gente.Porque la idea de creación es el conocimiento de la soledad.En lo profundo de nosotros mismos, oculto a nuestros ojos por las mismas sobras que nos impiden ver el amor y la impecabilidad en los demás, está el altar de la verdad, la luz.Al esforzarnos honestamente por amar sin ver el pecado en nuestras vidas, lo preparamos para la verdad, el gran amor de la creación.Te damos la bienvenida, te invitamos.¡Y con qué alegría acepta nuestra invitación!
IdiomaEspañol
EditorialTh. Om
Fecha de lanzamiento22 dic 2021
ISBN9783986473365
Un libro en respuestas
Autor

Th. Om

Th. Om es un vagabundo entre los universos. Sus letras quieren invocar el amor, llamar a la mente, traer de vuelta la vieja melodía de la creación.

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    Th. Om

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    respuestas

    Hemos olvidado cómo sorprendernos en nuestra sociedad. Todo está fragmentado, desglosado en sus partes individuales, que luego se disputan. Nos rodeamos de fragmentos de fragmentación, elevamos esta metodología a nuestro dios, nuestro ídolo. La separación es casi perfecta. Y así, y sin embargo, un gran asombro se apoderará de toda la gente. Porque la idea de creación es el conocimiento de la soledad. En lo profundo de nosotros mismos, oculto a nuestros ojos por las mismas sobras que nos impiden ver el amor y la impecabilidad en los demás, está el altar de la verdad, la luz. Al esforzarnos honestamente por amar sin ver el pecado en nuestras vidas, lo preparamos para la verdad, el gran amor de la creación. Te damos la bienvenida, te invitamos. ¡Y con qué alegría acepta nuestra invitación!

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    1. Concepción¿

    Búsqueda de sentido?

    ¿Descubrir las causas?

    En términos generales, el objetivo principal de una persona es comprender. Sondear el mundo y sus causas, al menos para poder afrontarlo. Este entorno suele ser relativamente limitado. Eso aparece individualmente, personalmente, y depende de una gran cantidad de componentes y parámetros. Por medio ambiente se entiende no solo la existencia material concreta de la persona, el medio, las circunstancias sociales y culturales, sino también todo lo que sucede en su pensamiento. Sus sueños, su subconsciente, sus acciones reflexivas, sus errores y las cosas que surgen de todas estas conexiones.

    ¿Por los árboles?

    No es posible que el afectado, atrapado en el entorno recién descrito, determine la enorme complejidad de todas estas influencias en sí mismo y mucho menos en otras personas, a las que siempre tiene un acceso muy limitado. Eso significa que no ve el bosque por los árboles. Entiende partes del todo, tal vez ve los árboles que están parados frente a él, tal vez encuentra un hongo o nota que los árboles también pueden ser talados o incendiados, pero siempre permanece en el bosque, que inevitablemente solo como esto puede verse como una limitación.

    ¿Estamos atrapados en este bosque?

    Esa es su visión de las cosas, basada en el hecho de que los árboles existen después de todo y, si no tienes cuidado, uno podría matarte. Los árboles están ahí, por lo que el medio ambiente, no se puede discutir. Uno tiene que comportarse de acuerdo con las circunstancias dictadas por los árboles y el camino a través de ellos, uno tiene que adaptarse para simplemente sobrevivir.

    ¿En algún lugar allá atrás ...?

    Lo que hacen las principales religiones ahora es proclamar que hay un hermoso paisaje montañoso al final del sendero del bosque, o al menos un claro en alguna parte. Todo esto que se acaba de describir está teñido de dualismo. Se trata de una actitud materialista pronunciada de las personas en su búsqueda de sentido. Aquí las grandes religiones, a la manera del sistema predominante de maximización de capital, han creado una especie de guía, con la ayuda de la cual se puede encontrar con bastante facilidad a través de la miríada de árboles. La Biblia, el Corán. Escrituras Santas

    ¿Aplaudir con una mano?

    Fuera del bosque, uno llega con esta convicción solo al final de la vida material y física. En contraste con esta creencia, que aquí se intenta aclarar con la imagen de los árboles, la verdadera visión de la vida ahora no tiene nada que ver con nada. Se esconde detrás del chisme de una mano que lleva el mundo dualista de las personas al absurdo. Somos inmortales, las envolturas materiales son solo herramientas para nuestra energía agrupada, que utilizan, en la infinidad de las energías de TODO.

    ¿La eternidad del polvo de estrellas?

    El mundo en el que se puede vivir, que es la infinidad de estrellas, la terminología, la lógica convincente de que TODO está conectado entre sí, interactúa entre sí, que hay un todo indescriptible, que como una creación maravillosa en gran paz y la perfección existe. Este gran todo consta de todas las cosas que tienen un lugar en la estructura energética del TODO, ya sea piedra, animal, humano o vegetal, ya sea estrella fugaz o núcleo atómico. Como también se puede demostrar científicamente en el dualismo, cada cosa tiene su propia estructura energética.

    Resumen

    De hecho, no hay una sola pregunta que no pueda responderse de inmediato. ...

    ¡Eres el soñador,

    no el sueño!

    2. Conceptión

    ¿Al principio existía la incondicionalidad sonriente?

    ¿La incondicionalidad es absoluta?

    Y ahí está, la eterna incondicionalidad. Pero al ser humano, en el desarrollo del libre albedrío que le fue otorgado, se le permitió soñar una pequeña ilusión de escepticismo. Profundamente conmocionado por esta libertad, ahora tenía miedo de lo que consideraba todopoderoso, y de cuya existencia había dudado. A partir de la minúscula partícula de incredulidad que creó, en potenciación de esta minúscula duda, este juicio, su mundo triste y solitario, en el que desde entonces trató de esconderse de la incondicionalidad de la creación.

    ¿No hay amor verdadero en el juicio?

    En este mundo de juicio, de duda, de fragmentación, del ego, el amor verdadero no tiene cabida. Cada palabra de la llamada comunicación operada por el ego no sólo la reduce al absurdo, sino que también la retrata como ridícula. Esto deja en claro que nada en absoluto que parezca percibirse de alguna manera fuera de esta incondicionalidad podría tener el más mínimo sentido.

    ¿La creencia de que la incondicionalidad es muerte?

    Ahí está el punto de salto: nos vemos, en momentos brillantes, frente a una incondicionalidad que solo nos asusta. Más aún: desde nuestro punto de vista, atrapados en el veredicto de culpa, vinculamos este sentimiento, ese algo realmente indescriptible, con la muerte, al mismo tiempo anudado con nuestro concepto de cualquier Dios. Eso es puro miedo. Terror, incertidumbre, puede ser, horror.

    ¿Viviendo con miedo a la duda?

    Pero, ¿dónde se basa en última instancia nuestro horror, nuestro miedo? Lo vimos. Es la duda, es la fragmentación. Es nuestra ignorancia, la incapacidad de nuestro sistema de pensamiento para ver el todo. Dudamos cada segundo en lugar de aceptar en silencioso agradecimiento. Y nos negamos a buscar la fuente. Nos contentamos con las acusaciones que surgen de nuestras ilusiones fragmentadas. Transforma estas superficialidades en nuestro pensamiento dividiéndolas una y otra vez en construcciones gigantes. 

    ¿Lo incondicional es amar?

    ¡Esta es la pintura negra que se vierte sobre la imagen luminosa del incondicional! ¡Este es el montón de estiércol apestoso que todos y cada uno de ellos arrojaron sobre ellos! Y nos parece tan infinitamente difícil reconocer que detrás de lo que soñamos juntos le hemos dado los atributos más terribles, la incondicionalidad - y que es una incondicionalidad amorosa. Podemos confiar en ella en todo.

    ¿No hay más motivos para temer?

    ¡Todos nuestros miedos son infundados! Pero mirarlos, ver el abismo que separa el engañoso subterráneo de nuestros sueños y nuestro negro miedo a la incondicionalidad significa, es decir, ir a la oscuridad que nos hemos creado, darnos cuenta de que nunca existieron. Saltamos de nuestra roca, nos adentramos en la garganta negra y al mismo tiempo aterrizamos en suelo dorado.

    ¿Alegría pura e inalterable?

    ¿Entiendes lo que eso significa cuando te das cuenta de que la incondicionalidad es amar? Eso es pura alegría. No se preocupe, no quedan preocupaciones. Podrías estallar de gratitud. Esta experiencia es un bautismo de sentido. Un verdadero renacimiento, un reconocimiento, un despertar. Un orgasmo, una concepción, un nacimiento, en absoluta confianza, como nunca antes se pudo experimentar.

    ¿Conocimiento confiable del camino correcto?

    Confía en la creación, en el Padre, por cuya mano nos movemos sin el menor atisbo de miedo, ciertamente que Él nos ha guiado por el camino correcto. Que el camino parezca rocoso de vez en cuando. Sabemos que cada guijarro que encontramos está donde está, en el lugar perfecto. Así como lo hacemos y somos exactamente lo correcto en nuestra vida, esta vida, que ahora está tan incondicionalmente, y cada vez más, inundada de un notable amor por la creación. Así es como es.

    Resumen

    Cuando nos damos cuenta de que todas las jerarquías desde las que hemos juntado nuestra vida se han disuelto del amor incondicional desde el principio de los tiempos, desde toda la eternidad, el infinito, entonces solo queda la feliz confianza del niño. El tonto sonriente. El Buda meditando. ¡Que vengan a mí los niños y los necios, porque de ellos es el reino de los cielos!

    3. Concepción

    ¿Es nuestra creencia egoísmo?

    ¿Un término fundamental?

    ¡Guau! Ahora hemos aterrizado en el fundamentalismo. El concepto de fe: parece que se hizo para separar opiniones. Un asunto completamente subjetivo, podría pensarse. Totalmente privado y más o menos íntimo. Pero, por supuesto, toda creencia tiene raíces. Por definición, por sí solos, estos son muy profundos. Están anclados en lo que uno llama vida, educación, aprendizaje de principios irrevocables, que uno dobla por sí mismo, al menos en la mente, si uno vive la fe es otra cuestión.

    ¿La verdad destrozada?

    Que pensamos ¿Donde? ¿Y en qué relación? ¿Como? ¿Por qué? Solo mirar un poco abiertamente nos dice que nuestra fe está profundamente fragmentada. Dividido, astillado. Existe esta bola de cristal, la creencia, y el pensamiento social la ha hecho añicos en miles y miles de astillas. Nuestra tarea como seres humanos ahora parece ser (al menos hacemos todo lo posible) encontrar al que entre estas esquirlas contenga la verdad.

    ¿La falta de plenitud duele sutilmente?

    De hecho, si uno de nosotros ve una de estas astillas brillando en su camino, él, de una manera muy humana, la reclama para sí mismo en su fe, se defiende hasta el final y solo la suelta cuando tiene una más hermosa. un fragmento, uno que le guste más. El hecho de que la gente busque la forma anterior de la bola rota, la plenitud, la soledad, que no llega a su conciencia, solo les duele muy sutilmente en el fondo.

    ¿Me gustaría hacerlo ya?

    Y aunque quieras reconocer una plenitud en tu espiritualidad, tu fe, estropea tu mirada sobrecargando el cuadro con dualidades, con cielo e infierno, con jerarquías de ángeles y dioses y santos, con secretos rituales, con magia.

    Creencia, es decir, específicamente, querer percibir la verdad en algo. 

    ¿Dónde encontramos la verdad en esta existencia, esta vez, este mundo?

    ¿Preámbulos y algoritmos?

    Creemos en diferentes cosas en diferentes categorías, todo explicado por los preámbulos y algoritmos de la comunidad mundial. No hay verdad objetiva; es más bien un marco completamente caótico e inestable de mentiras hechas de los fragmentos subjetivamente deformados de la verdad anterior, mezclados temblorosamente. No hay nada en lo que valga la pena creer en este algo, en el sentido de un Creador, en el sentido de creer en un Dios.

    ¿Está la verdad en el pasado?

    ¿Está la verdad en cosas transitorias? ¿Es en el futuro? ¿Está en la razón de la humanidad? ¿Qué es la verdad de todos modos?

    La pura verdad es, por definición, completamente libre de prejuicios.

    Eso excluye ... nuestro mundo. Nuestro sistema de pensamiento completo.

    ¿Pero lo que está completamente sin juicio, no conoce el bien ni el mal, es siempre solo positivo y siempre es digno de confianza? ¿Es siempre completo y no divisible? Amor absoluto. Ergo - la creación.

    ¿La fe es plenitud?

    Quiero decir, ¡echa un vistazo! Allí está la bola de cristal de la verdadera fe, gloriosamente resplandeciente, resplandeciente, la luz misma. ¡Nunca se rompió! ¡Y date cuenta de lo maravilloso! Ya no necesitamos buscar la verdad bajo las astillas, podemos enamorarnos con plena confianza. De esta manera, y solo de esta manera, es posible llegar a la plenitud, al darse cuenta de que cada acto de amor es un paso más hacia la cima sagrada.

    ¿La creación no conoce secretos?

    El amor vivido, mostrado, percibido, reflejado y en expansión volverá a unir la bola de cristal de la fe y la verdad para ti, muy personalmente, te darás cuenta de que nunca se rompió. ¡Decir ah! Dirás ahora Es demasiado facil para mi Solo amor, ¿y eso es todo? ¡Sí! De hecho, es así de simple. La creación no es un secreto, no conoce secretos. Dios está aquí ahora. Pon en práctica el amor. Ahora. Sin problemas. ¡Amor! ¡Ama con absoluta honestidad!

    ¿Es el amor el camino hacia la luz?

    Donde quiera que estés. Cualquiera que sea su opinión sobre el universo, sobre Dios, sobre la religión, cualquiera que sea su visión de la vida - amar, no en la perfección, pero lo mejor que pueda - involucrarse en el amor, creer en él, para ver la verdad en eso, confiar en él, ese es el camino hacia la luz. Esa es la verdadera creencia. Todos vamos por este camino, pero todavía rodeados de oscuridad. El amor disuelve suavemente esta oscuridad hacia la nada en la que siempre ha consistido esta oscuridad.

    Resumen

    La verdadera fe es amor, y el amor disuelve bondadosamente el pensamiento de cuerpos culpables, atrapados en la fugacidad, condenados a la muerte y al pecado. Quien toma esta decisión de amor vivido, la creación lo abrazará, ha escapado del miedo. Puede seguir su camino lleno de confianza de la mano del padre amoroso. La elección: lastimarse con los fragmentos de la ilusión de la verdad fragmentada del pasado o sumergirse en la bola de la verdad de la creencia en el amor completo. Solo hay dos opciones en la vida.

    4. Concepción

    ¿Solo podemos ver espinas?

    ¿Corona de dolor?

    Espinas? ¿Solo vemos espinas? Una declaración simbólica: se refiere a las espinas de la corona que se dice que Cristo (Jesús) usó cuando fue crucificado. Espinas, crucifixión, muerte agonizante, resurrección, un espectáculo realmente muy teatral y simbólico. ¿Se refleja aquí el pensamiento social? La forma de vida que uno soporta, con la corona del dolor (corona - cuán apropiado) se pone y luego se marchita, finalmente para morir sin poder hacer nada. Acerca de la resurrección, bueno. Eso aún está por verse. No se sabe nada específico. 

    ¿Al final, la muerte?

    Las espinas: son la imagen del dolor que uno tiene que soportar, de muchas maneras. Y siempre nos sigue, muy sutilmente, incluso en las ocasiones más bonitas. Así que el dolor es el precio de la vida, al parecer. Le pagas de nuevo todos los días y al final obtienes la muerte por ello. Las espinas significan el pecado, la culpa que uno se carga sobre sí mismo, inevitablemente, en su camino. Representan la desesperación por el significado de la vida, la cuestión del significado de la enfermedad, la guerra, la destrucción.

    ¿Crucifixión de nosotros mismos?

    No hay nada positivo en esta terrible imagen de la crucifixión de nosotros mismos, pero la elección es nuestra. Sostenemos la corona de espinas en una mano y en la otra flores blancas como la nieve del perdón. Pero, al ver las flores blancas brillantes, se nos niega. Lo hemos olvidado. Eso nos lo han quitado. Porque los ojos del cuerpo, sus sentidos, son incapaces de reconocerlos. Actuar como cuerpo significa actuar con espinas ¿

    ¿Damos cuáles son nuestras convicciones?

    ¿Está tratando de encontrar un lugar en su vida sin espinas? No se le permite, casi nunca es posible (aunque solo sea en momentos reales), en un mundo de espinas, asignaciones de culpa, juicios. Entonces, si damos - de este universo de espinas, entonces solo lo que ponemos en nuestro altar - dolor. Sin embargo, la realidad: el cuerpo no es en absoluto capaz de dar, tomar, aceptar, ofrecer.

    ¿Solo la mente puede apreciar?

    Solo la mente puede apreciar. Y solo el espíritu decide qué dar y qué tomar. Si ahora está pensando en la impermanencia y en la idea de un Dios vulnerable que hace a sus hijos cosas inconcebibles y malas por ellos, también las tendrá en su altar, y tratará de regalarlas como el valor más alto. Y este altar es también el lugar donde quiere venir el amor eterno, la creación.

    ¿Preparar un altar para el amor?

    Pero, ¿cómo se supone que esto es posible para ella? ¿No está todo cubierto de espinas? ¿No existe solo el pecado y la plaga de la muerte? ¿El miedo terrible? ¡Así que no ofrezcas esto al amor! No le ofrezcas tus espinas relucientes de color rojo sangre; si lo haces, habrás elegido el cuerpo y la corrupción, el pecado, el juicio, la culpa y la muerte. Levántate por encima de este velo de miedo, haz de tu hogar, tu altar, tu espíritu, un lugar donde el amor quisiera llegar.

    ¿Las flores blancas del perdón?

    Entonces vendrá, ya está ahí. Reconocerás las flores blancas del perdón, las pasarás a tus hermanos y hermanas, brillarás para ellos, con su brillo, el camino. La crucifixión nunca existió, la corona de espinas es una ilusión, el camino hacia la eterna, perdonadora y amorosa inocencia está preparado. ¡Dios nunca murió por nosotros! ¡Vive con nosotros! La crucifixión y la muerte de un Hijo de Dios son imágenes siniestras del ego espinoso.

    ¿El niño interior?

    Esta mirada de las flores blancas es la mirada de tu niño interior. Porque nada más que la visión del amor, de la verdad, es lo que define al niño interior. Nuestro niño interior duerme - llámalo Kundalini, llámalo serpiente arcoíris o Prana - llámalo iluminación o cosas más santas - es paz, amor, sin juicio, todo. Es creación. ¡Eres tu niño interior! Entonces eres dios. Prepárate un digno altar de amor. Sin espinas. 

    ¿Premisas de la impermanencia?

    Si definimos nuestra vida a partir de los juicios y premisas de una sociedad mundial, que tiene su base y cualquier lógica en el principio de la culpa, la muerte, el ego, podemos ver la increíblemente maravillosa belleza de la flor del perdón, de la creación, como nos da cada fracción del segundo que se ofrece en su aliento, no lo reconozco. Un velo oscuro de duelo por nuestra fugacidad, incluso la creencia de que Dios, la creación, está oculta en esta definición de caos, se extiende sobre nuestros sentidos. 

    Resumen

    ¡Cuidado! Este no es un pensamiento irreflexivo, no es un juguete que tiras de un lado a otro y luego lo vuelves a dejar. Pero solo abre tu corazón, solo trata de dejar que el amor entre en tu vida cotidiana, como sea que lo definas, se expandirá, en su verdad. Y verás más y más. Esto es tan indispensable como Dios es la vida eterna y estamos con él.

    5. Concepción

    ¿Clavado en la cruz de la vida con valores?

    ¿Palabras malvadas?

    Hay bastantes palabras que son consistentemente positivas, no encontrarás ningún negativismo en ellas con la mejor voluntad del mundo. Por ejemplo, habría confianza, paz, compasión y muchos más. Bueno, también hay combinaciones de letras que son consistentemente negativas, malas, podría decirse. De ninguna manera se quieren decir malas palabras, el ego trabaja mucho más sutilmente. La palabra especial que examinamos más de cerca es valores.

    ¿El sistema de valores es dualismo?

    Lo que se quiere decir son los valores de las personas en sus vidas. Tan pronto como tenemos esta palabra frente a nuestros ojos, ya nos ha atraído hacia la dualidad con una sofisticación improbable. Bastante fascinante. La palabra valores es simplemente otro concepto del pensamiento del ego. El dualismo. El sistema de valores. La fragmentación y la exclusión. La separación de Dios y la creación. Surgen conexiones de palabras. Indigno de la vida - muy amenazante. Pero también: valioso sin valor - completamente borroso, dividido en innumerables niveles de significado.

    ¿La coma de tropiezo?

    Y ese es el punto. Porque sería perfectamente posible llenar la Biblioteca Estatal de Baviera con un tratado sobre valores humanos. Y el ego aplaudiría con entusiasmo y sonreiría feliz. Valor: la misma palabra requiere una atención especial. También requiere juicio. Todo valor va precedido de un juicio. Juicio de valor. Entonces con lo que el punto comienza a rebotar.

    ¿Valores nobles?

    La bestia Wert se muerde la cola y aúlla de alegría. Y todos los que se acercan a ella son rociados con su baba. Muchos simplemente atribuyen la palabra al dinero. Su vida aparentemente consiste en valores materiales. Otros, un poco más espirituales, también piensan en el honor, la fama, el poder, etc. Pero estas son siempre manifestaciones del juicio, con la culpa, el miedo, la muerte y, por tanto, la impermanencia, y por tanto la vulnerabilidad de la idea de Dios, que sin embargo es eterna.

    ¿Sin punto cero de una valencia?

    Por eso nos es imposible en este revoltijo de escalas y juicios, opiniones y consejos encontrar una base sólida y confiable, un punto cero del concepto de valor. Debido a la falta de significado de la palabra, no puede haber tal cosa. Ese es el dilema humano. Intentan encontrar a Dios en este caótico sistema de valores, que el ego ha instalado tan bien. Es comprensible que eso no funcione. Dios no juzga. Él es.

    ¿Somos parte del pensamiento de valor?

    Mientras miremos el mundo desde la perspectiva de este sistema de pensamiento, este sistema de valores, y mientras seamos parte de la jerarquía, estamos atrapados. Un valor siempre requiere un bueno o un malo - significa bueno o malo. ¿Lo entiendes? Esto catapultó el mal en la mente de las personas. Sin valor, no puede haber mal. Y aquí está, escondido bajo las telas oscuras del consumismo, la solución, la disolución.

    ¿El amor no conoce valencias?

    ¿Existe un sistema de valores en el amor? ¿Conoce alguna diferencia? El amor, como todos pueden ver en muchos ejemplos muy prácticos en su vida, disuelve el sistema de valores. Eso suena amenazador ahora. ¿Qué seríamos sin nuestro sistema de valores? ¿Una horda de hippies fumando y jodiendo? (Lo que nos trae de vuelta, ese es el mal de esta palabra, aterrizó en medio del dualismo)

    ¿Un subsuelo del pecado, el miedo y la muerte?

    De hecho, una imagen del budismo describe este escenario mecanicista de la disolución de nuestro sistema de pensamiento, excelente: se trata de mucho más que de nuestro comportamiento social. Estamos con nuestro pensamiento sobre un fondo negro, formado por el pecado, la culpa, el juicio; el suelo contiene muerte y fugacidad, dolor y enfermedad. El sistema de valores. Frente a nosotros, un abismo oscuro y amenazante, las llamas parpadean.

    ¿Qué es el salto al abismo?

    El momento santo, el único momento en el que reconocemos que el ahora es amor, el pequeño momento en el que nos queda claro que ella, la creación, está completamente por encima de todo juicio, que nuestro pensamiento cruel y auto-atormentado es justo. un Sueño, sólo una ilusión, está en el rostro de un Creador misericordioso, cuyos amados hijos somos - ese es el paso hacia este abismo negro - y en el mismo momento estás parado en suelo dorado.

    ¿Proceso de transformación en el mundo del valor?

    Y permanecer en el mundo de los valores. Pero a partir de ahora comienza el proceso de transformación. Las puertas, portales, a nuevas capas de conocimiento se abren, los grilletes del sistema dualista de pensamiento, los valores, se desintegran lentamente - tiernamente tocados por la verdad - a la nada que siempre significaron. Tu mundo comienza a brillar de nuevo a la luz brillante de lo positivo. Los miedos se evaporan, nunca fueron reales.

    Resumen

    El amor verdadero tiene el poder de disolver el sistema de valores de la sociedad mundial que hemos ideado y aparentemente también vivido. De hecho, cada deseo de su omnipotencia ha sido una realidad desde el principio de los tiempos. Pero no hablamos su idioma, no podemos entenderlo, así que lo ignoramos. Nuestro medio de comunicación es la noción de valor. Veamos la verdad, dejemos de hablar y pensar en las lenguas equivocadas de culpa - ¡usemos el medio de comunicación del amor para siempre!

    Ahora no conoce valencias,

    solo aquí está el

    verdadero amor en casa

    6. Concepción

    ¿Somos niños pequeños estúpidos en el arenero?

    ¿El sentido de la vida?

    Una y otra vez se pregunta cuál es el significado de la vida. Es una cuestión de consideración. Una forma de ver el mundo sería un parque infantil, una caja de arena, imagínate . Los niños juegan en el arenero, construyen sus casas, sus palacios, tal vez hacen autos con la arena, luchan contra otros niños, conducen sus vehículos de arena por las calles de sus ciudades. Hay agresión y guerra. Celos y envidia. Otros tienen un castillo de arena mejor que yo.

    ¿Cenizas a cenizas?

    Sí, así es como se sientan y juegan. Y el sol seca la arena y todo se va. Todo es impermanente. Estalla un gran lamento porque los niños no comprenden que están sentados en un arenero. Pero gracias a Dios, en el verdadero sentido de la palabra, de pie lejos del arenero, con todos los maravillosos palacios y autos, las guerras, la culpa y los pecados, la fugacidad, de pie junto al arenero está el padre grande, fuerte y brillante, y brilla con toda su luz y les tiende la mano a los niños y les dice ¡Venid! ¡Sal del patio de recreo! ¡Deja de tonterías! ¡Ven a mi! ¡Ven a tu mano! ¡Nos vamos a casa!

    ¿Una cinta de ilusiones?

    Sí ... pero la gente es obviamente ciega. ¿O cegado? Manipulado? Permanezca en su cajón de arena, en su mayor parte. En primer lugar, ni siquiera comprendas que has encontrado alojamiento en uno de estos. La sociedad podría describirse como una cinta de correr que impulsa a las personas a correr cada vez más rápido, hacia una imagen que cuelga frente a ellos en un marco dorado, un auto hermoso, una casa nueva, vacaciones, lo que sea.

    ¿Persiguiendo zanahorias?

    Y patean y corren y fingen y hacen como el burro con una zanahoria delante de la boca. Y corre y corre. Y a veces incluso alcanzan la meta, luego ven, eso es solo una imagen. Lo derriba y cuelga uno nuevo. Y nuevamente comienzan a correr hasta que ya no pueden, y un día el cuerpo dice: Ya está y adiós. Y luego todo comienza de nuevo.

    ¿Cuál es realmente el objetivo?

    En lugar de saltar de esta cinta de correr y ver qué pasa con la imagen. ¿Qué hay quizás detrás del marco en el que se adjunta esta imagen? Qué es el marco en sí. No no. Se quedan en tu cinta de correr.

    ¿Demasiado simple?

    Realmente es así de simple. Si partimos de la premisa simple y realmente básica de que Dios es amor, y no se puede negar, porque aparte del amor todo contiene una antítesis en alguna parte. Pero el amor simplemente lo abarca todo e incluye todos los componentes que de alguna manera son imaginables.

    ¿El verdadero amor no permite el sufrimiento?

    Porque, pregunto, ¿cómo podría el amor universal permitir que uno de sus hijos experimente sufrimiento? Entonces, simplemente imposible. Es por eso que todo está diseñado de tal manera que nosotros, como en una nube de culpa y ruina y pecado y perdón y blablabla - todo lo que tiene que ver con eso - que lo pegamos a esta nube, flotamos allí y No vemos por nada En esta niebla, esas infinitas consecuencias y juicios que hacemos todos los días, no vemos cuál es en realidad la base. Es decir, amor infinito.

    ¿Expandiendo el amor? 

    Como la creación, es eterna, infinita, de modo que eso significa que no hay dualismo en el amor. Solo hay una cosa: el amor, el amor que todo lo abarca, que siempre se expande y que fluye. Esta es la creación. Si partimos de esta base, entonces vemos que si la creación ama a sus hijos, los hijos, los hijos de Dios, de la manera en que el amor se forma, infinitamente, fluyendo, sin límites, para siempre durante - entonces se vuelve muy claro que todo lo que sucede aquí en esta tierra en términos de sufrimiento, lo que vemos, lo que percibimos, el pecado y la culpa, la muerte y la enfermedad y lo que sea, sólo puede ser una ilusión. Es una pesadilla.

    ¿Viviendo en una realidad ilusoria?

    Pero estas neblinas en las que vivimos, solo vienen de dentro de nosotros mismos, las creamos nosotros mismos, de una manera completamente confusa tratamos de adaptarnos a los confusos e incomprensibles y nunca comprensibles hechos de esta ilusoria realidad. Adaptar. Para jugar con ellos. Jugando bien el juego. Y eso nunca, nunca, nunca funcionará. Eso no funciona en absoluto. El mundo esta loco. No puede ser de otra manera. Y esa es una locura perversa. Esta es una locura que genera culpa y sufrimiento. Desde este punto de vista, se encuentra en absoluta diametría, en completa oposición, a lo que es la idea real, la idea básica, la raíz del todo, y eso es el amor eterno que todo lo abarca.

    ¿La comprensión viene con la voluntad?

    Una pregunta que también se hace a menudo. ¿Cómo puedo afrontar el hecho de que el mundo que experimento, que percibo, es solo una ilusión? Bueno, ese de ninguna manera es el caso. No es una ilusión. El mundo es. La respuesta es bastante sencilla. Cuando empiece a reconocer, cuando tenga la voluntad, la voluntad firme de reconocer la verdad, cuando la esté buscando, cuando esté buscando este sentido de la vida, entonces llegará gradualmente al punto, donde una puerta se abre. Una puerta

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