40 Días

Por Mario Ortega Barba

Un paciente traumado por todas sus penurias a travs de su vida y de las veces que cruz la frontera o que lo intent, son lo que lo llev a consultar con una psicloga, la misma que al ir conocindole se interes tanto por el tema que termin, por una parte, a pedirle que le contara de esas vivencias para exponerlo en su convencin, para lo cual le propuso un trato: reembolsarle los honorarios pagados por sus servicios como psicloga.

La doctora en psicologa, quien en su cartera de clientes atenda solo personas de la alta sociedad, entre ellos polticos y empresarios, termina aceptando que en ese crculo al que ella misma pertenece es donde se encuentra la mayor ignorancia y que es debido a eso que el mismo pas se encuentre estancado y por dcadas alejado de un desarrollo sustentable. Ella misma sinti poner los pies sobre la tierra despus de algunas semanas de terapias mutuas.

Una novela!

El guin de la historia de una vida!

Un cuento hecho realidad!

Ya usted lo determinar amigo lector.

Porque slo usted que tiene la determinacin de terminar de leer este libro, sabr el final. Y siempre lo mejor est, al final!

• Idioma: Español
• Editorial: Palibrio
• Fecha de lanzamiento: 5 may 2015
• ISBN: 9781506502458

Mario Ortega Barba

Humilde, pobre, con la educación académica que la vida provee, es en ese concepto que la mayoría de personas tiene del autor: Mario Ortega Barba, quien ha escrito este libro no como una simple aventura, no lo ha escrito tan solo como pasatiempo, no ha sido una persona con suerte y que en esta ocasión la vida se la haya brindado, ¡No! Por cada logro en su vida, ha tenido que luchar hasta lograrlo, los éxitos no le han llegado a sus manos, él los ha perseguido hasta alcanzarlos. No es una persona con carácter envidiable, ¡no lo es! No es una persona metódica, ejemplar, ¡no, no lo es! Es una persona con tantos defectos y errores como muchos otros, pero con un espíritu de superación persistente. Aunque tan solo terminó el nivel de secundaria, es tan optimista que ya se encuentra estudiando el bachiller y que en su tiempo de desvelo se pasa las horas escribiendo su segundo libro. A sus 47 años ha trabajado desde albañil, vendedor (de diferentes artículos) ha sido contratista en Estados Unidos, jornalero, lavaplatos, plomero, electricista, hasta pequeño empresario, ha incursionado en el negocio de los alimentos (abriendo un pequeño restaurante, que no funcionó) Sin embargo y a pesar de todos sus defectos, su mayor logro ha sido haberse casado con Yolanda, su esposa y haber procreado con ella tres hijos los cuales menciona en este su primer de muchos libros. Es sin duda la genialidad en esta su obra que lo dará a conocer a nivel internacional. El autor que en sus narraciones se aferra a la realidad y que con ello lastima a algunos políticos con sus supuestas frases poético-políticas, intenta con ello despertar la conciencia de aquellos que no la tienen. Mario Ortega Barba, el autor de este libro y quien nació en un pequeño poblado al sur del estado de Puebla, en México, Cuexpala, para ser más exactos, y del cual se siente orgulloso porque como él dice: no somos de asfalto, somos polvo; somos los cinco elementos y ellos están en la tierra. [e-mail]

Vista previa del libro

Con dedicatoria especial para:

Mis hijos:

Alexander

Kevin

Patricia

Berenice

Mi esposa:

Yolanda

Y para mi amigo el profe Roberto Aguilar Rodríguez

Quien me brindó su total apoyo

Para la realización de este proyecto.

En este mismo contexto no podía faltar una persona: quien con su muy dedicado entusiasmo trabajó incontables horas para esta creación: Gracias Melissa

PROLOGO

E N MI AFÁN por entender el sistema que nos rodea me llevó a recopilar desde dentro de mi memoria detalles de las vivencias que en su momento tuve que pasar y que tan sólo la necesidad, la cual es una de las armas psicológicas que llevamos en nuestro ser se avivó más en mi existencia con el paso del tiempo.

Jamás en mi vida pasó por mi mente la psicología, sin embargo, fue tan natural y espontanea que no me dio tiempo de pensar en ella como tal.

A todo esto, se sumó la imperativa búsqueda de mí mismo espíritu por la realización de una idea que traía arrastrando desde pequeño: escribir un libro.

Por mi falta de escuela podrán apreciar muchos errores en el mismo, pero sin pretender lo que no se me dio, me veo en la situación de exponerlo lo más cercano posible al original, o de otra manera no sería tan real si lo tratara de maquillar.

A pesar de todo y por respeto a usted que tiene este libro en sus manos, tuve que hacerle algunos arreglos con ayuda de personas que sin interés personal hicieron una labor de altruismo al hacerlo entendible y legible.

A todas esas personas que sacrificaron su tiempo y que de alguna manera se volvieron indispensables en esta mi obra les extiendo mis brazos en señal de aprecio y cariño.

Y mis hijos y esposa que me dieron su entera confianza y que seguirán conmigo en las buenas y malas, de eso estoy seguro.

De igual forma y siempre apoyándome con comentarios positivos: mis hermanas Irene y Lupita y hermano David. Sobrinos: Jorge, Felipe, Omar. Mi cuñado Gerónimo y a mis queridos padres Alberto Ortega y Reyes Barba que en paz descansen y que me dieron la inspiración, y a esos seres que han representado mucho en mi vida: Raúl y Hono.

Un libro basado en hechos reales, con algunos personajes ficticios, pero en su gran mayoría de carne y hueso.

INTRODUCCIÓN

Razones por las que estoy traumado

C IENTOS DE HISTORIAS tristes, escalofriantes, de muerte, de sobrevivencia, de incertidumbre.

De no saber si llegaras o te quedaras en el camino. De historias que conmueven el corazón, historias de solidaridad.

De valientes que arriesgan su vida por la tuya, que arriesgan su empleo por darte a ti la oportunidad de tener una mejor calidad de vida.

Cientos de historias de milagros, de bendiciones.

Historias de personas de todo el mundo que emigraron por una razón; darle a su familia y a su vida un mejor nivel, el nivel digno de un ser humano.

Historias de personas que han huido de la violencia, de la miseria, de persecuciones injustas.

Traumado por todo lo vivido, de ver niños junto con sus padres encerrados en hieleras (celdas a muy baja temperatura) de 2x4 mts. De espacio.

Cómo no podría alguien salir traumado de la frontera norte de México y la del sur de Estados Unidos, ¿Cómo? ¿Cómo?

CAPÍTULO UNO

Un paciente nada ordinario

B UENOS DÍAS DRA.

Buenos días Yessy.

¿Cuantos pacientes tenemos el día de hoy?

Sólo dos Dra.

Muy bien, espero en este día llegar a tiempo para ver a mis hijos jugar un partido completo, es sábado y necesito un poco de relajamiento.

Sí Dra. Esperemos que así sea.

Por favor has pasar al primer paciente Yessy.

Si Dra. Ahora mismo.

Pase por favor Sr. Orbert la Doctora lo espera.

Gracias señorita.

Dra. El Sr. Orbert. (Dijo Yessy al mismo tiempo que extendía su expediente).

Si Yessy gracias.

Sr. Orbert tome asiento por favor, dígame en que puedo ayudarlo, cuénteme un poco de usted y su problema.

Y hágame el favor en descubrirse la espalda.

¡Disculpe Dra.! Pero el motivo de mi visita es por algo que me aqueja emocionalmente; nada que ver con mi espalda.

Lo sé Sr. Orbert pero si hay algo que mis años de doctora en psicología me han enseñado, es que su espalda me puede revelar mucho como persona y paciente, cualquier huella de su cuerpo me hablara de usted tanto como de su personalidad.

Espero no le moleste Sr. Orbert, sólo que considero mi desempeño más allá de lo ordinario y el que usted se quite la camisa es parte de mi inusual pero eficaz forma de tratar a mis pacientes.

Bien Dra. Lo haré por educación.

(No de muy buena gana este caballero se sacó la camisa mientras detenidamente yo observaba sus movimientos).

Sr. Orbert veo unas manchas rojas en su espalda me quisiera platicar de ellas.

Dra. Le podría explicar acerca de ellas y pasarme toda la tarde pero mi problema nada tiene que ver con las manchas, así que me gustaría escuchar como realmente me puede ayudar.

(Notó mi disgusto por su respuesta y se sonrojó apenado).

Perdón Dra. Le pido disculpas por haber sido tan rudo.

Está bien Sr. Orbert lo comprendo y si no quiere hablar sobre eso por ahora lo dejamos así.

Dra. Le agradezco su preocupación.

(Por un momento tuve la sensación de que el Sr. Orbert no tendría ni para pagar su cuenta y sentí el impulso de decirle que no podía ayudarlo, que no podría hacer nada por él y que se podía marchar sin pagar nada. Quise llegar a ver a mis hijos jugar y olvidarme este fin de semana de mi loca profesión, sobretodo de este en particular. No lo hice y dejé que continuara).

Bien Sr. Orbert lo escucho.

Dra. Hay días que me levanto con mucha ansiedad, como si estuviera preso, como si me faltara aire, mi cuerpo siente que en vez de sueños son pesadillas y aun despierto con esa zozobra, y es que ¿sabe?

La libertad es tan importante para el cuerpo como para la mente y eso lo sabe todo el mundo, y aunque a veces el cuerpo este preso la mente jamás…….. Sin embargo hay excepciones y a veces es lo contrario.

¿Qué quiere decir Sr. orbert? Suena contradictorio todo eso que dice.

¡No, no lo es!

Por favor explíqueme entonces.

Bien le explico: hay personas con toda la libertad del mundo pero con la mente atrapada en el odio, codicia, egoísmo y poder, gente con hambre de poder enfermizo que la sola intención es impedir el avance de un pueblo, personas con espíritus atrapados en la avaricia y muchas veces atrapados en la ignorancia, la cual es una enfermedad por así decirlo que conlleva a todas las actitudes anteriores.

Personas ignorantes y no por no haber tenido estudios, no por pertenecer a estratos sociales bajos, sino que hablo de empresarios, líderes religiosos, sindicales y de toda índole, políticos, que por mucho tiempo han ignorado para su conveniencia la realidad de nuestro país.

Disculpe Sr. Orbert ¿pero no cree que eso es política?, mejor platíqueme de su problema, hágalo con confianza. (Aunque tenía prisa por terminar la sesión e irme al partido de mis hijos, me intrigaba su coraje y determinación.)

Sí, tiene razón Dra. Sólo que me desvié un poco, por la conexión de lo que me pasa y la situación de nuestro país y de lo que esperamos para nuestro futuro de seguir así, como individuos y como emigrantes.

Sabe en el año 2005 compuse una canción que como título dice todos se van.

(Creí conveniente externarle lo que hasta ese momento había reprimido.)

Sr. Orbert me intriga usted, sólo que al final no sé si podré ayudarlo. (Pero de forma indiferente me contestó sin darme tiempo a insistir, era obvio él era una persona obstinada.)

Con el sólo hecho de escucharme Dra. Me ayudará mucho, después de todo es lo que un psicólogo hace, escuchar… (Por un momento pensé en lo que dijo al principio, refiriéndose a las mentes presas, tenía razón lo dejé que continuara, pareció adivinar mi pensamiento y aunque quiso decir algo al respecto, prefirió seguir adelante.)

En esa canción escribo como muchos de los talentos Mexicanos se van y seguirán emigrando, la falta de oportunidades seguirá siendo un rio arrastrando lo mejor de la sociedad, tonto sistema que nos educa y nos empuja a trabajar de lo que se nos ofrezca, a tener un título y no poder ejercer, a encontrar empleo y ganar una miseria. Como profesional a obtener un salario que un indocumentado en Estados Unidos ganaría en un día. ¿En México? ¡Una semana!

Quien en otra parte del mundo al ver un globo terráqueo y mirar la enorme extensión con que el país cuenta y mirando un atlas e informarse de los recursos que México ostenta, se imaginaría que aun con todo eso somos un país tercermundista, que gran parte de la familia mexicana (3 o 4 personas) sobrevive con menos de 10 dls. Al día (descansando las palabras, arrastrándolas dijo.) Países con menos territorio, mas áridos, son sin duda países con mucho mejor nivel de vida que el nuestro.

¿A qué se debe esto me pregunto y le pregunto?

¿A la herencia de una mala política?

¿A un sistema basado en corrupción?

¡Pagamos a las autoridades para que nos roben!

Dijo Manuel Cloutier; la sociedad en México se modernizara hasta que se dé un cambio de reformas políticas y educativas. Una reforma de leyes para que se respeten las mismas.

(Estaba a punto de comunicarle que la sesión había terminado cuando me sorprendió con una pregunta, estúpida, ingenua, precisa o imprecisa, no lo sé, pero sí muy directa).

Dra. ¿De casualidad usted tiene o ha tenido algún amigo, familiar o conocido que se haya ido a Estados Unidos legal o ilegalmente?

(¡Dios por un momento titubeé! Me quedé pensando no precisamente en lo difícil de contestar, pues algunos de mis amigos emigraron también y adivinando mis pensamientos continuó)

Dra. Por desgracia eso pasa en México a diario y no lo podemos ocultar, es la razón por la que estoy aquí, he sido un emigrante por muchos años. (Resonó en mis oídos, Sonó el teléfono, pasaron unos segundos. Yessy entró diciendo.)

Dra. Sus hijos han llegado a casa.

(Le di las gracias pero me enfadó no poder haber estado con ellos y sí con este loco, aunque después de todo, es mi trabajo).

También le informo que la Sra. Williams llamó para cancelar su cita.

Está bien Yessy gracias.

Dra. Si no me necesita me puedo retirar.

Por supuesto puedes irte.

Sabe Sr. Orbert tiene razón, tengo amigos y hasta familia que ha emigrado y no tan solo a Estados Unidos, han marchado a Europa también y una de las razones ha sido por la falta de buenos salarios, y sí tiene usted razón, muchas de las personas que han emigrado se van porque el sistema los educa pero no los emplea, (miré mi reloj y creí que podría darle unos minutos más así que pregunté) Sr. Orbert cuénteme solo un poco de su vida, quiero decir de su vida en general.

Bueno pues verá, me casé hace exactamente 15 años, la boda por lo civil fue el 31 de diciembre de 1999 y por la iglesia el 1 de enero del 2000.

Cuando muchos decían que el mundo se acabaría en esa fecha yo estaba iniciando una nueva vida, así que como verá, nunca he sido un tipo ordinario y siempre le he dado a mi vida un giro diferente y puedo decir con orgullo que: GRACIAS A LO QUE HE SIDO, SOY LO QUE SOY.

Me ha gustado viajar aunque sea por trabajo, he estado en más de 10 estados de Estados Unidos Incluyendo Alaska, he escrito un sinnúmero de poemas, canciones o como se le pudiera llamar a un montón de estrofas, soy desde un bohemio hasta un seguidor de la música de banda.

A todo esto, la pregunta por lo del familiar o amigo que haya emigrado es porque no es nada raro ni vergonzoso y me gustaría compartir con usted dos canciones que un buen día escribí y que vienen a este caso muy bien….

TODOS SE VAN

Bien que recuerdo que me decían

Estudia mucho para triunfar

y con el tiempo, ¿qué ha pasado?

Que hasta mi profe se ha ido ya de ilegal.

Yo no lo culpo no es el primero

Muchos talentos se han ido ya,

Esos muchachos que eran brillantes

Un día triunfaron, ganaron mucho

Pero ni eso pudo comprar

Estar tranquilo allá en su rancho

En su pueblito o en la ciudad.

y hasta el artista que yo admiraba

se fue al norte se fue de acá

Unos se marchan por la pobreza y otros temiendo

a la inseguridad.

y no es su culpa que se han marchado

Muchos talentos se han ido ya

Pues ni el dinero es suficiente

Para comprar…seguridad.

         y la segunda es esta

Pueblo grande pueblo chico

Mi pueblo era grande y prosperaba

Había familias no tan separadas

Eran otros tiempos en mi patria adorada

y hoy me duele tanto verla desolada

Veo casas vacías nadie vive en ellas

Se han ido sus dueños buscando salida

a esa vil desgracia en la que Vivian.

Para muchos suena divertido

Irse de ilegal

Pero no es un gusto es necesidad

yo sé que mi pueblo es duro de vencer

y que a todos no mueve la fe.

Un día alguien del pueblo a los pinos llegará

y espero no llegue solo a desangrar

ya