Como construir la autodisciplina: Desarrolla la fuerza de voluntad para resistir tentaciones y lograr tus objetivos a largo plazo

Por José Rodríguez

¿Cuántas veces te has prometido mejorar tu autodisciplina, solo para encontrarte fallando solo unas cuantas semanas después?
Inviertes horas en crear un plan detallado sobre cómo va

• Idioma: Español
• Editorial: Publishing House
• Fecha de lanzamiento: 11 sept 2020
• ISBN: 9781636440088

José Rodríguez

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Uno

Conceptos básicos de la autodisciplina

Para empezar a poner en práctica cualquier conocimiento, es indispensable conocer primero todas las variables que participan en dicha temática, no podemos tirarnos a un barranco sin saber lo que hay allí abajo, ya sea un grupo de piedras filosas listas para desgarrar nuestra carne o un colchón suave y cómodo. En este capítulo veremos conceptos profundos de la autodisciplina, sus características y la importancia que tiene en nuestros objetivos tanto a corto, mediano y largo plazo, hallando con esto el verdadero poder de la autodisciplina en su máximo apogeo.

Asimismo, entenderemos las razones por las cuales ser disciplinado es la clave del éxito, y su relación con la capacidad de lograr resultados positivos en emprendimientos, en los estudios, en el trabajo o en algún negocio. Explicaremos detalladamente el porqué nuestras acciones tienen influencia en nuestros resultados personales. También veremos la verdadera clave de la autodisciplina, esto no se trata de qué aplicación de gestión de tiempo o planificador de día utilizamos, ya que hay un millón y muchas formas de planificar, pero todos son inútiles si no podemos formar buenos hábitos, recordemos que la autodisciplina es, en última instancia, un estado mental. Si deseamos entrenarnos para ser más disciplinado, debemos cambiar esa mentalidad de conformistas, ¿sabías que las mujeres prefieren hombres con proyección hacia el futuro y emprendedores? O incluso, los hombres desean que sus parejas los apoyen en todo o sean un equilibrio para ellos... También los cambios en nuestra forma de pensar pueden mejorar drásticamente nuestro comportamiento y ayudarnos a pasar menos tiempo haciendo cosas que realmente no queremos hacer, y más tiempo haciendo cosas que nos acerquen a lograr nuestros objetivos.

Por otro lado, trataremos sobre lo que no es la autodisciplina, esto no se trata de convertirnos en una máquina de productividad sobrehumana que nunca falla, tampoco se trata de golpearnos a nosotros mismos porque no logramos más de lo que podríamos haber logrado ayer y mucho menos se trata de esperar que nunca sintamos la tentación de dormir, comer pastelitos o desplazarnos por nuestras redes sociales favoritas, ya sea Facebook, Instagram o WhatsApp. Cultivar la autodisciplina no es sinónimo de rígido e inflexible, tampoco significa mantenernos a un nivel imposible de autodisciplina que solo vemos en historias fantasiosas. La verdadera autodisciplina no debería requerir enormes esfuerzos (y si lo hace, no es sostenible), simplemente requiere una cantidad normal de esfuerzo, administrado de manera efectiva. Aquí encontraremos todos los fundamentos necesarios para pasar al siguiente nivel.

Cuando buscamos la definición de autodisciplina, podemos encontrar diversas ideas que se conectan con ciertos aspectos de la vida, ya sea como un método de gestión en establecimientos de educación o algún tipo de ordenanza para llevar a cabo un proyecto en particular. Todas estas definiciones son verídicas y tienen sentido, sin embargo, la autodisciplina va más allá de todo esto.

La autodisciplina es la puesta en marcha de acciones que involucran un parámetro íntimo, social, y personal, esto quiere decir, que es la acción para enfrentar un hecho en particular en busca de resultados positivos, pero esto va más allá del verbo acción o del hacer algo, sino más bien apunta a la constante práctica de una actividad en particular, por ejemplo, imaginemos que un joven de 18 años desea ser el mejor escritor del mundo, sueña con publicar su primer libro y volverse famoso, todos los días él se levanta a las 6 am para escribir su novela, en vez de seguir durmiendo prefiere hacer esta acción, y termina tres horas después su rato de escritura. Además lee libros de reconocidos escritores, no se detiene ningún día, manteniéndose constante con aquella actitud, todo esto le resultará beneficioso en el futuro. O podemos poner el ejemplo de una persona con sobrepeso, este individuo anhela bajar varios kilos para recuperar su salud, diariamente organiza su tiempo y usa algún aparato ya sea para correr, hacer flexiones u otra actividad, se mantiene constante y rechaza sus placeres más anhelados, comer pasteles, dulces o comida chatarra, hasta que logra su cometido, bajar de peso.

Estos ejemplos anteriores son una clara muestra de la verdadera esencia de la disciplina, es hacer lo que en verdad deberíamos estar haciendo, es cambiar una rutina cómoda, es salir de la zona de confort en el que nos encontramos para desarrollar otra actividad, cuyos beneficios se obtendrán a mediano o a largo plazo. Hay muchos comentarios acerca de lo que es la autodisciplina, tenemos las palabras de Brian Tracy, que dice: Su capacidad para disciplinarse a sí mismo para establecer objetivos claros, y luego trabajar para alcanzarlos todos los días, hará más para garantizar su éxito que cualquier otro factor. También uno de los empresarios más importantes del mundo, Warren Buffett, dice: No tenemos que ser más inteligentes que el resto; tenemos que ser más disciplinados que el resto .

Todo esto nos apunta a un cuestionamiento importante, ¿cómo saber si se es disciplinado? Para responder esto es preciso entender las características de la autodisciplina como eje central para cumplir nuestros objetivos o nuestros sueños, esto nos ayudará a identificar los síntomas de la verdadera disciplina, así saldremos de dudas si en verdad lo estamos usando o no.

La primera característica trata sobre el resurgimiento del deseo de hacer dicha actividad, esto quiere decir la pasión o el amor que tenemos al realizar un trabajo, un emprendimiento o cualquier otra cosa. Cuando realizamos algo que nos apasiona, surge naturalmente la disciplina, como resultado se obtiene un beneficio anhelado: el disfrute de eso que nos fascina hacer, no obstante, en otras latitudes o más bien en otras personalidades, podremos notar un tipo de disciplina orientado al no disfrute de aquella actividad, pero cuya satisfacción será terminarlo cuanto antes para impulsar todo lo que se quiere en la vida.

Otra de las características más importantes de la autodisciplina es la eliminación de los distractores, esto quiere decir la puesta en marcha de la llamada concentración, aquí es fundamental tener los sentidos fijos en una sola actividad, ¿algún día has contestado el teléfono mientras andabas cocinando y luego se te termina quemando? Pues bien, sucede lo mismo con las actividades que deberíamos estar haciendo, cuando realizamos simultáneamente tantas cosas, el cerebro se termina fragmentado (división de pensamientos) en varias partes, este fenómeno es denominado multitasking, de las cuales el individuo se divide las tareas y las hace al mismo tiempo, como resultado baja la productividad y la calidad del producto o labor. Una base científica para entender la problemática de la multitarea es a través del comentario de diversos profesionales de las neurociencias, algunos sugieren lo siguiente sobre el multitasking:

Aunque el cerebro pueda almacenar información de toda una vida y una gran cantidad de conocimiento, por alguna razón solo puede expresar uno o dos pensamientos conscientes al tiempo, Tenemos un dilema: la sociedad espera que hagamos multitasking, pero no somos buenos en eso, Cuando la gente cree que está haciendo multitasking, lo que hace en realidad es pasar permanentemente de una tarea a la otra. Cuando cambiamos de una tarea a otra, le prestamos atención a una de ellas y no a la otra, aunque creamos que estamos concentrados en todas. Por ejemplo, siempre veo a gente manejando con manos libres y creen que eso resuelve el problema, pero no es así. Cuando uno está concentrado en una conversación por teléfono, no se está concentrando en el camino. Pero el cerebro da la ilusión de que sí lo está. (Miller)

Si comenzamos a realizar nuestras labores importantes y al mismo tiempo revisamos las redes sociales, o si nos distraemos o comenzamos a hacer otra cosa distinta, es muy probable que no le estemos dando la importancia suficiente a lo que realmente vale la pena, entonces, si queremos resultados positivos entreguémonos por completo a nuestro proyecto, dejemos a un lado las distracciones y sobre todo manejemos nuestro tiempo de forma óptima. Una tercera característica vinculada a una persona disciplinada es la toma de decisiones, cuando un individuo elige realizar una determinada actividad debe estar decidido completamente si en verdad desea hacerlo o no, cualquier duda puede apuntar a un conflicto interno que puede repercutir en el resultado esperado, ya sea positivo o negativamente, y al mismo tiempo se integran dos grandes fuerzas: el fracaso vs el éxito. Los atributos fundamentales de la autodisciplina son las siguientes:

Manejo del tiempo

Concentración óptima

Toma de decisiones (acción)

Superación de problemas

Desarrollo de objetivos

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¿Por qué ser disciplinado es la clave del éxito?

Esta es una de las preguntas más comunes cuando empezamos a conocer lo que realmente trata la autodisciplina. Para entender esta parte podemos hacernos una idea clara con dos ejemplos, veamos:

Ejemplo 1: Carlos desea ser el mejor jugador de fútbol de todo el mundo, desde muy niño ha soñado jugar en las grandes ligas. Él todos los días se levanta temprano para practicar en el campo de su barrio, junto a sus amigos juega sin parar bajo la supervisión y guía del entrenador. Sus familiares siempre lo ven investigando y mejorando sus pases, observa también videos de jugadores famosos y goleadores, aprendiéndose cada truco que ve en el campo de juego. Carlos sabe perfectamente que su futuro está como jugador profesional y ha creado un hábito con su mayor disfrute, el fútbol.

Ejemplo 2: Susana admira a una cantante que sale siempre en televisión, ella también tiene el don del canto. Susana desea ser una cantante famosa y exitosa, de vez en cuando canta delante de sus amigos o familiares, siempre la felicitan, sin embargo, ella nunca ha participado en