La información financiera y administrativa

Por Carlos Enrique Pacheco Coello

Durante años, en la mayoría de los libros de texto se ha convenido y aceptado que existen dos tipos de información para la toma de decisiones: por una parte, la información financiera enfocada en el usuario externo, quien con base en el análisis e interpretación de esta puede tomar decisiones de inversión, de financiamiento y opinar con respecto a

• Idioma: Español
• Editorial: IMCP
• Fecha de lanzamiento: 9 jul 2019

Carlos Enrique Pacheco Coello

Dr. Carlos Enrique Pacheco Coello Egresado de la Facultad de Contaduría y Administración de la Universidad Autónoma de Yucatán (UADY). Maestro en Administración por la Facultad de Contaduría y Administración de la UADY. Especialista en Comercio Exterior por BANCOMEXT-ITM. Dr. en Análisis Estratégico y Desarrollo Sustentable. Maestro a nivel de licenciatura y de maestría en las siguientes instituciones educativas: ❖❖ Universidad Autónoma de Yucatán. ❖❖ Universidad Autónoma de Ciudad del Carmen. ❖❖ Universidad del Mayab. ❖❖ Universidad Patria. ❖❖ Universidad Autónoma de Campeche. Actividades actuales: ❖❖ Coordinador de cursos de opción y actualización de la FCA de la UADY. ❖❖ Investigador financiero en la FCA de la UADY. ❖❖ Socio del Despacho Profesional en Asesoría Administrativa, Financiera y Auditoría. ❖❖ Expositor gerencial de temas relacionados con administración y finanzas. ❖❖ Integrante de la Comisión de Revista, IMCP. ❖❖ Coordinador de Estudios de Posgrado (UADY-FCA). ❖❖ Aseguradora Nacional Agrícola y Ganadera, S.A., Subgerente de Administración y Finanzas (Mérida, Yucatán). ❖❖ Contralor en Comercial Mexicana (Ciudad de México). ❖❖ Autor del libro Presupuesto, un enfoque empresarial. C.P. y M. en A. Gabriel Jesús Pérez Brito Contador General en Amerijet International. Contador Público egresado de la Facultad de Contaduría y Administración (FCA) de la Universidad Autónoma de Yucatán (UADY). Maestro en Administración por la FCA de la UADY. Docente a nivel licenciatura en la FCA de la UADY. Mejor promedio de la LXI Generación de la Licenciatura de Contador Público de la FCA. Reconocimiento al Alumno Distinguido otorgado por el Colegio de Contadores Públicos de Yucatán (CCPY). Reconocimiento al Mérito Académico otorgado por la UADY. Participación en el V Maratón de Conocimientos de Auditoría y Contabilidad organizado por el CCPY; en el Caso Deloitte, realizado en el Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Monterrey (ITESM) y en el II Maratón Fiscal de la Zona VI Sur organizado por la Asociación Nacional de Facultades y Escuelas de Contaduría (ANFECA). Participación en el Diplomado de Derecho en las Organizaciones, impartido por la FCA de la UADY.

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Prólogo

Las empresas mexicanas se encuentran involucradas en procesos de cambio que las orientan hacia modelos administrativos de mayor calidad y excelencia. Ante este escenario se observa que muchas de ellas deben adecuar sus estructuras de toma de decisiones —que no ofrecen soluciones integrales—, hacia nuevos modelos de gestión que las incorporen al mundo globalizado.

En este contexto desempeña un papel muy importante la innovación de procesos de toma de decisiones basada en información veraz, oportuna y generada mediante los sistemas de gestión de la entidad. Con esto es posible eliminar asimetrías de información, duplicidad de esfuerzos y mejorar la eficiencia de los procedimientos; en pocas palabras, incrementar la eficiencia en la gestión administrativa y dar un mejor servicio a los clientes.

La información es el elemento central para lograr ese propósito. Es indiscutible que la falta de información, confiable y válida es un problema que dificulta cualquier proceso de mejora porque entorpece el análisis, limita la evaluación y confunde el propósito de las políticas y programas de la entidad.

Durante años se ha convenido y aceptado, en la mayoría de los libros de texto, que existen dos tipos de información para la toma de decisiones: por una parte, la información financiera enfocada en el usuario externo que, con base en el análisis e interpretación de esta, puede tomar decisiones de inversión, de financiamiento y opinar con respecto a la eficiencia en la administración de la operación de la entidad. Por otro lado, la información administrativa, cuya finalidad es apoyar la toma de decisiones operativas del día a día, por parte de la alta gerencia, mediante la planeación y control presupuestal, el análisis de apalancamientos, de costos fijos y variables a diferentes volúmenes de producción, la planeación de flujos de efectivo y las proyecciones del negocio, entre otras.

En el contexto actual, la información debe ser vista por los administradores como un todo y de manera integral, ya que el entorno tan competitivo y ambiente obliga a utilizar todos los elementos disponibles para capear los elementos adversos y dirigir la entidad hacia el cumplimiento de su misión.

Las instituciones educativas, por su gran potencial científico y tecnológico, la calidad y experiencia de su personal docente y de investigación, así como por los cuantiosos recursos económicos que la sociedad invierte en ellas, están llamadas a ofrecer su decisivo aporte a la sociedad con la propuesta de nuevos modelos para hacer más eficiente la toma de decisiones empresariales.

La profesión docente es un trabajo complejo que requiere de grandes esfuerzos, ya que el profesor debe atender no solamente su propio desarrollo, sino el de los demás, entendiendo que cada ser humano es fuente de riqueza, de nuevos conocimientos y experiencias, y que cada alumno atesora un enorme potencial que el docente necesita descubrir para desarrollar.

Para el docente nada es estático, todo está en permanente evolución, por lo cual debe transitar por caminos de constante búsqueda. Debe modificar su pensamiento, cambiar e incidir de modo positivo en su entorno, mejorar el medio ambiente que lo rodea, romper esquemas establecidos y estar siempre preparado para asumir nuevos retos. Además, debe cambiar la triste imagen del profesor poco comprometido con su trabajo, sus alumnos, su alma máter y la sociedad, que solo busca estímulos económicos inmerecidos y que es incapaz de ser formador de individuos que trasciendan en la sociedad para ser agentes de cambio y de mejora para el país.

En este texto, uno más que agrega a sus éxitos, el Maestro Carlos Pacheco Coello proporciona un invaluable material para la formación estudiantil universitaria del país, y que ofrece al empresario mexicano una variedad de herramientas sencillas y de fácil utilización para una más eficiente toma de decisiones administrativas.

Es un deber y un privilegio para todos los mexicanos que hemos tenido la oportunidad de recibir una educación superior, compartir experiencias con los jóvenes que acuden a las aulas, para hacer nuestras aportaciones en el logro de su desarrollo personal y profesional, en la búsqueda de su trascendencia social y en la construcción de un país más equitativo, justo y libre.

C.P. y M.F. Aureliano Martínez Castillo

Director de la Facultad de Contaduría y Administración

Universidad Autónoma de Yucatán

Mérida, Yucatán, enero de 2016.

Introducción

La presente obra no pretende oponerse a la normatividad nacional e internacional que rige la vida de la profesión contable, sino complementarla con la visión de los empresarios que buscan tropicalizar la información para la adecuada toma de decisiones.

Con mucha frecuencia ocurre que los empresarios no le dan la importancia debida a los estados financieros elaborados por la profesión y solo son utilizados para solicitar préstamos bancarios, como información para fines fiscales o como requisitos para quienes cotizan en bolsa. Por lo tanto, desde esas perspectivas dichos estados financieros van a parar al cajón del escritorio del empresario, quien utiliza otras fuentes de información para la toma de decisiones, por ejemplo, los consejos en el café con amigos de confianza.

Por lo anterior es importante revaluar el trabajo del Contador Público como el profesional que proporciona información valiosa no solo financiera, sino administrativa, con un enfoque estratégico que tanto falta para dinamizar la economía; y, por otro lado, que responda a una inquietud de los profesionales de la administración financiera en su actividad dentro de las entidades en las que prestan sus servicios, así como de los académicos ante las preguntas de los estudiantes de negocios y los empresarios, en función de que en opinión de diferentes autores –respecto a la utilidad de las finanzas– enfatizan que la información plasmada en los estados financieros es para la toma de decisiones.

Sin embargo, en una plática con colegas y compañeros, ellos dijeron sentirse frustrados, pues dichos estados sirven para el sistema financiero, el pago de impuestos o para el auditor con fines de un dictamen para cumplir con el fisco hasta antes de la reforma fiscal.

Asimismo, otra inquietud radica en los cuestionamientos de un numeroso grupo de estudiantes de la licenciatura, de la Maestría en Finanzas y de empresarios ante la pregunta: ¿cuáles son los estados financieros básicos? A la cual responden que son el balance, el estado de resultados, el estado del flujo de efectivo contable, el de variaciones en el capital contable y sus notas y la balanza de comprobación.

En cuanto a los exámenes profesionales, ante la pregunta de cuáles preparan, contestan que solo el balance y el estado de resultados porque en la empresa no se los piden, pues los usuarios no saben contabilidad; por lo tanto, es importante reflexionar si el empresario necesita saber contabilidad o se le debe decir: mira, esta información te sirve para esta decisión y, en consecuencia, para dar un valor agregado a la información, con sentido y visión.

A continuación se enlistan algunas inquietudes importantes de los ejecutivos ante el análisis, interpretación de los estados financieros y la forma en que se tropicalizan las respuestas a los requerimientos de información de los usuarios.

Primera inquietud ¿Por qué balance general? Solo se trata de igualar:

Activo = Pasivo + Capital Contable

Respuesta. Lo anterior sería una respuesta débil, porque de lo que se trata es de conocer cuál es la situación en que se encuentra la empresa como consecuencia de las decisiones estratégicas ante el entorno interno y externo, así como sus posibles repercusiones.

Segunda inquietud ¿Por qué activos? En los libros solo se dice que son los bienes y derechos que posee la empresa.

Respuesta. A lo anterior se debe explicar que son los recursos o activos que al ejercerlos de manera eficiente y eficaz se convierten en utilidades y, por lo tanto, retorna la inversión, siempre y cuando su circulación no se detenga o se atoren en inventarios ociosos o cuentas que no se cobren, ya que se mentiría si se dice que se vendió y no se cobró.

Tercera inquietud ¿Por qué son activos fijos? ¿En realidad están inmovilizados? ¿Por qué se deprecian? Es porque ¿bajan su precio? ¿Pierden su valor?

Respuesta. Estos recursos circulan no como los circulantes, pero cada vez que se utilizan apalancan la operación, es decir si en realidad su vida es útil operativamente y no como consecuencia del tiempo o las tasas fiscales; estas últimas, es cierto, generan flujo de efectivo al pagar menos impuesto, pero en ocasiones no cumplen con el sentido esperado en su inversión, lo que se requiere es que trabajen para que la operación genere valor agregado y flujo; por ello, hay que explicar que cuando se utilizan no pierden su valor, sino que lo generan, es capital de mediano o largo plazo que circula con más lentitud y, por lo tanto, no están fijos como parece, están trabajando.

Cuarta inquietud ¿Por qué son pasivos? La definición