De Potrillos: Una amistad para toda la vida

Por Anahí Zlotnik

Este libro está enfocado en los primeros pasos del potrillo y en el modo de criarlo sano. Momento en el que el futuro del caballo se marca con intensidad en su memoria. La calidad del manejo en este período puede marcar una gran diferencia con los caballos tratados de un modo mecánico.

• Idioma: Español
• Editorial: Editorial Maipue
• Fecha de lanzamiento: 11 sept 2017
• ISBN: 9789874413062

Anahí Zlotnik

Anahí Zlotnik es Médica Veterinaria graduada en la Facultad de Ciencias Veterinarias de la Universidad Nacional de Buenos Aires. Especializada en Comportamiento Animal, Medicina Homeopática y distintas técnicas de Masajes Terapéuticos contando con una extensa trayectoria en el tratamiento de caninos, felinos y equinos. Sus artículos de información y opinión son publicados en Revistas Especializadas y otros medios de: Argentina, Chile, España, Uruguay, México y Estados Unidos. Invitaciones: Congreso del IAATH (International Alliance for Animal Therapy Healing) en E.E.U.U en el año 2001. Integró el Equipo Español del Servicio Veterinario de los Juegos Mundiales Ecuestres de Jerez de la Frontera – 2002 - España; fue expositora en el Congreso de Neurología y Comportamiento del Caballo realizado en la Facultad de Veterinaria de Córdoba – España – 2003 y al Congreso de Manejo Veterinario Natural del Equino y Doma India en la misma Facultad en el 2005, así como en varios Congresos de Homeopatía en Argentina y Brasil. Coordinadora de la 1ra. Comisión de Bienestar y Protección de los Equinos de la Asociación Argentina de Veterinarios de Equinos –AAVE en el 2001 Atiende caballos deportivos, de trabajo y de amistad, y está brindando Cursos de Masajes y Comunicación con el caballo en Argentina, Chile, Uruguay y España. Continúa su investigación del comportamiento y la comunicación con los caballos, así como el trabajo de terapias físicas y medicina homeopática, con la intención de seguir construyendo una terapia holística para los caballos.

Vista previa del libro

DE POTRILLOS

Una amistad para toda la vida

Anahí Zlotnik

De potrillos. Una amistad para toda la vida

Anahí Zlotnik

© 2012 Editorial Maipue

ISBN: 978-987-4413-06-2

Diseño de tapa: DisegnoBrass

Corrección y colaboración en la edición: María Valle

Diagramación: Paihuen

Foto de tapa: Mariana Dominic

Zufriategui 1153 - Ituzaingó (1714) - Provincia de Buenos Aires

Tel/Fax: + 54 (011) 4458-0259 / 4624-9370

Contacto: [e-mail] / [e-mail]

www.maipue.com.ar

Queda hecho el depósito que establece la Ley 11.723.

Libro de edición argentina.

No se permite la reproducción parcial o total, el almacenamiento, el alquiler, la transmisión o la transformación de este libro, en cualquier forma o por otro cualquier medio, sea electrónico o mecánico, mediante fotocopias, digitalización u otros métodos, sin el consentimiento previo y escrito del editor. Su infracción está penada por las leyes 11.723 y 25.446

Índice

A manera de prólogo

Relinchos de agradecimiento

Introducción

El caballo

CAPÍTULO UNO

¿De dónde vengo?

Los espejos

El boqueo: una señal típica de los potrillos

Aromas personales

Armonía entre las yeguas

Interacciones

El contacto visual

El círculo y la calma

La amistad

Escuela de aprendizaje

El aseo

La manada duerme y reposa

La sincronía

CAPÍTULO DOS

Algunos detalles sobre la yegua y el padrillo

Ciclo estral de la yegua

Acercamiento y cortejo

Apareamiento

CAPÍTULO TRES

Tesoros

El lazo selectivo o lazo filial

Relación de las yeguas con las personas durante el posparto

La primeriza

¿Qué dificultades pueden presentar las yeguas en su vínculo inicial con los potrillos?

¿Cómo y cuándo ayudar?

Consejos: usar nuestro sentido común

Yeguas madres que trabajan

¿Cuáles serían los factores a tener en cuenta para hacer que la yegua vuelva al trabajo?

Yeguas melliceras

Midnight Stone, el potrillo que tuvo que ganarse a su mamá primeriza

Una veterinaria paciente e intuitiva

Finalmente el potrillo al pie de su madre

CAPÍTULO CUATRO

Llegué al mundo

El parto

Desarrollo prenatal y perinatal

Dar a luz

¿Cuáles son los signos del parto?

Formas en que puede aparecer el potrillo o potranca cuando se rompe la bolsa del agua

Signos y primeras conductas del recién nacido

Vencer la gravedad

Amamantamiento

El calostro: el primer alimento

Función del calostro

¿Dónde estoy?

La identidad

El mundo de los sentidos: tacto, olfato, visión, audición, gusto

Capacidad de adaptación

Nunca se sabe lo que surgirá

Especie precoz

Bienvenido al mundo

El aroma personal, el mundo de los olores

Los primeros días después del parto

Sintonía

Doctora: ¡mire a su potrillo!

Los primeros pasos, trazando el camino

Balance y coordinación

A dormir

Una potranquita se quedó dormida

Comportamiento normal del potrillo

La fuerza de la vida

Llegué al mundo. Apéndice

Prevención en neonatos y huérfanos

Prevención

Casos en los que se debería suministrar calostro

El banco de calostro

Mamaderas

Preparación de leche artificial

Otros sustitutos

Las ayudas

El balde

Ordeñe de la yegua

Los huérfanos

Alimentación del potrillo huérfano

Un intercambio de energía

Las nodrizas

Los potrillos no son mascotas

CAPÍTULO CINCO

Brisas

Nasruddina

Los distintos tipos de comunicación y contacto

El potrillo y la madre

Iiiiiiiiiiii…El relincho, un identificador individual

Zona de confort o seguridad

El aprendizaje por observación social

La curiosidad como acto de investigación

La experiencia de vida

Pandiculación

Desarrollo del comportamiento de los potrillos

Los límites

El lamido del potrillo

Una anécdota respecto del lazo filial

Familiarización, observación social

Las expectativas al tener o criar potrillos y potrancas

Personalidad, temperamento, sus relinchos y sus nombres

El futuro empieza ahora

Equinidades (como diría una colega)

Fuego

Tierra: ¡dame de comer!

Paso a paso, metal y respeto: trabajo duro

Agua: liviandad, timidez. Sensibilidad y sentimientos

Madera, la valiosa

Los remolinos: otro detalle para estudiar la personalidad

EL ALAZÁN

CAPÍTULO SEIS

Lejos de casa. Un destete más humanizado

Destete sin estrés

Destete natural

Destete a los seis meses

Ideas positivas: una yegua por vez

¿Entonces, qué ocurre durante el destete?

El destete gradual: el factor nutricional

Evitar el amamantamiento manteniendo la comunicación

Potrillo de nueve a diez meses

Una experiencia en Carlos Casares

Alimentos

Destete temprano para yeguas que vuelven al trabajo

Aprovechar el momento de la educación

Cuidar a la yegua

¿Qué pasa cuando no hay destete?

Las dificultades por falta de socialización

CAPÍTULO SIETE

Descosquillar

¿Qué es la impronta?

Frutillito

Regla de oro: trabajar junto a la madre

¿Cómo lo hacemos?

Unos días después del parto

¿Cuáles son las ventajas de este trabajo?

¿Qué dice la ciencia, cuáles son los interrogantes, cómo podríamos seguir investigando este tema?

Impronta filial: lazo de unión de la madre con el hijo

Socialización con especies amigas

El espíritu de los cursos

¿Cómo hacemos?

Parado sobre sus pies

Paciencia

El caballo del lechero

¿Qué pasa con los potrillos que no han sido descosquillados o que no están acostumbrados a la presencia del hombre?

CAPÍTULO OCHO

Aprender a aprender

Algunos aspectos del trabajo con los potrillos

Ni muy suelto ni muy tirante. Estar atados

Ser llevado

Algunos primeros ejercicios

El lazo invisible

Seguir a la madre, seguir a los humanos

¿Qué hacer si el potrillo se resiste a ser llevado?

Evitar la pelea

Los paseos

Lazo en ocho alrededor del cuerpo.

Las actividades cotidianas

Los huérfanos

Ser elegidos

El sistema nervioso

Los instrumentos aliados: la mano amiga, el cepillo, la bolsa de plástico, la arpillera…

El cepillado

El baño: cómo usar la manguera de manera amistosa

Cielos argentinos, cielos santafesinos: mis vivencias

No me toques las patas

Me ahogo, me ahogo

Atención a los signos

¿Qué pasa con los potrillos que muerden?

Otros casos

Los pantanos

CAPÍTULO NUEVE

El trabajo gentil

Zona de seguridad o confort

¿Qué es una zona de seguridad?

Como las olas: técnica de acercamiento y retirada

Una idea brillante

Cuidado

El horizonte, la expansión

Algo más sobre el baño

Zona de confort emocional

La femineidad en el mundo de los caballos

Mi tierra. Ejercicios de piso

El llamado, que venga hacia nosotros

Paso atrás, retroceder

Cuidar

Es fundamental aprender a estar quieto

Un ejercicio en ele

Bajar la cabeza

Lo ondeante y ruidoso: las banderas…

Las bolsas de arpillera

Trabajo con sogas

Estar tranquilo enredado en las patas

Condiciones de trabajos con sogas

Otros cielos argentinos, cielos correntinos

El espíritu despierto

¿Y cómo los agarramos?

El modo de tocar

Pasos de la técnica

Doc Tucán

El mandil y la cola

Arandú

Apreciar el conocimiento y hacer el mejor uso de este conocimiento

Princess Florence, paciencia, paciencia y sentido común

Vamos a iniciar una nueva vida

La ida

La mudanza: el viaje

La llegada

Primer día

Segundo día

Tercer día

Cuarto día

La flexibilidad de las neuronas equinas

CAPÍTULO DIEZ

Pegasos, de la tierra al cielo

La boca: una joya

La erupción

¿Qué dificultades pueden surgir con los dientes de leche?

La mejor prevención

Otras joyas, los pies

Los mitos: las acciones mecanizadas

Los casquitos del potrillo: su salud asegura su futuro

Los efectos del ambiente

¿Qué pasa cuando esta superficie no toca el piso?

La suela y las barras

Desvasado fisiológico o terapéutico

El águila

CAPÍTULO ONCE

Pequeños centauros

Algunas técnicas de trabajo corporal

El masaje es un proceso evolutivo de comunicación

El ser único

El punto de contacto

Ida y vuelta

Crines y ligamento nucal

Comunicación y terapias corporales

Una delicadeza: la frente

Más allá del desconcierto y la turbación

La zona de la cincha

¡No me aprietes, no me aprietes que me quedo sin aire!

Prevención

La tensión

El silencio

Las yeguas

Manos y patas

Y la boca

CAPÍTULO DOCE

Homeopatía y terapias afines: una medicina de la unidad

Introducción a la medicina homeopática

Situaciones de la práctica

Algunos casos

Tota, una yegua primeriza

Otro caso, un desgarro después del servicio

Un caso de celos a repetición

Agalactia

¿Y con la influenza?

Casos agudos

Un caso

Casos crónicos

Preoperatorio y posoperatorio

Trastornos de conducta

Trastornos por estrés

Trastornos colaterales y secundarios

Forma de administración

Manejo de la preñez, el parto y la lactancia

¿Por qué es una medicina preventiva?

¿Cómo podemos ayudar durante el destete?

¿Qué son las Flores de Bach?

Otros casos

Pispireta, una potranca con arpeo

CAPÍTULO TRECE

Bienequistar, bienequivivir, bienequitratar

Intención

¿Qué pasa con los potrillos en la familia humana?

El camino viejo, el camino nuevo

GLOSARIO

Bibliografía

A manera de prólogo

La mano acaricia el lomo, las crines, la cara.

La voz susurra en la oreja, el caballo mueve su cabeza afirmando.

Esta imagen, que tengo siempre en mi mente, es como una entrañable síntesis de la infatigable dedicación, de la perseverancia sin límites y del amor con los que Anahí Zlotnik trabaja con estos animales.

Ahora, sumergida en la lectura de su libro, De potrillos, una amistad para toda la vida, me vuelvo a sorprender. Ella también ha escrito hasta la más pequeña palabra acerca de su gran pasión, y nos transmite así su experiencia, de manera muy poética, vivencial y científica.

En lo que yo llamaría un ensayo, comparte una nueva manera de acercarnos a ese gran compañero natural. Nos demuestra que existe una atmósfera física y espiritual alrededor de él. Y nos invita a participar en una experiencia vivificante y sanadora.

Como hechicera de la relación hombre-caballo, Anahí convoca, de manera sutil, la percepción que todo ser tiene entre sí, que posibilita a su vez un conocimiento más amplio de la realidad y una armonía más acabada.

Por lo que, de manera sencilla, le estamos muy agradecidos.

Carolina Menapace

Relinchos de agradecimiento

A mis amigas y amigos compañeros del camino.

A Andrés Gabor y Maipue por continuar caminando juntos.

A mi amiga del alma, Carol Menapace por su prólogo.

A todos los asistentes a mis cursos que colaboraron con sus comentarios o casos. También a los organizadores.

A quienes me estimulan y me estimularon a seguir estudiando.

A Laura González mi compañera de ortografía y lengua, que me estimuló a mejorar mi escritura y seguir adelante con estos pequeños equinitos.

A Julia Peñalva, estudiante de veterinaria, por su colaboración sensible que me aportó seguridad y alegría en el proceso de revisión.

A Lissy, Natalia, Verónica que con sus e-mails aportaron detalles al contenido de este libro.

A Gabriela Abram por prestarnos su lugar y potrillos para las fotos.

Fotos y algo más

A Mariana Cianca, veterinaria locadeloscaballos, quien sigue descubriendo maneras de trabajar con sus potrillos y yeguas, y sus preguntas y anécdotas me estimulan a seguir evolucionando como veterinaria.

A Ana Díaz y su marido Juan Miguel García Gil, de Andalucía, que compartieron una parte de sus vivencias con los maravillosos caballos españoles.

A Gustavo Di Gioia, criador y preparador de caballos para endurance que colaboró con fotos y anécdotas afectuosas.

A Merces Malano, veterinaria, y Gastón Garino por sus aportes.

A las hermanas Kessler, Claudia, Patricia y Susana, que incursionan en este mundo-de-los-caballos con ganas. Comparten sus vivencias y fotos en este libro.

A Eugenia Fuentes y Natalia Lema por sus fotos tan amables hacia los potrillos y sus madres.

A Adriana Failoni, Fernando Peñalva y Denise Langlois, por el clima de sus fotos y aportes.

A Alejandra Rey y Gabriel Giovanetti por sus fotos vivientes, sensibles y bellas.

Mucho agradezco a Mariana Domic, quien con generosidad aportó su pensamiento y maravillosas fotos que enriquecen este libro.

Cada foto fue ubicada con cuidado donde mejor me pareció para ilustrar el contenido de este viaje.

Como siempre a los equinitos con sus vidas y compañía

Introducción

Ernesto Sábato, durante un reportaje para la TV francesa expresó:

Yo creo en la reencarnación. Si se pudiera elegir, a mi me gustaría reencarnarme en un caballo... No bromeo en esas cosas... bromeo en otras menos importantes.

Entrevista realizada por Alejandro Virginillo para el documental El fuego purificador como parte del programa Un siglo de escritores; Canal France 3 de Francia.

El caballo

Gracia, poder, belleza y nobleza.

Me fue concedido el don de volar sin alas, volar con cuatro patas.

Shakespeare le ha dedicado estos sentimientos y pensamientos. Del poema Venus y Adonis, me gustaría compartir este fragmento:

"A veces trota como contando el paso,

Con gentil majestad y modesto orgullo,

O se levanta de manos, corcovea y salta,

Como diciendo: aquí estoy.

Y esto lo hago para cautivar los ojos

De esa hermosa yegua que pasta en la pradera".

El trabajo con los potrillos y potrancas es uno de los más gratificantes que aún disfruto mucho como ser humano de profesión veterinaria. No solo por la belleza de estos animalitos, sino también por la ternura que despiertan en mí como en aquellos que son capaces de sentirla. Durante los cursos de descosquillado, socialización y aprendizaje temprano, me impactó ver como en los seres humanos hay una tendencia natural para relacionarse de manera armoniosa con los caballos en particular y la naturaleza en general. También me complace por estos comentarios: Bueno Ani, la parte buena del trabajo es que hemos entrado los potrillos a cuida. Son la generación que traje al mundo y amancé desde pequeños... ¡NO TE EXPLICO LO QUE SON! ¡Se comportan como si conociesen el box de toda la vida! No escarban la cama, se dejan cepillar, pasan toda la noche sueltos y sin escándalo. Estoy orgullosa (Mariana Cianca MV).

Vivir esta experiencia con los potrillos y potrancas, así como con los asistentes a los cursos, ha sido muy positiva para mí. Nuestra verdadera naturaleza, nuestro ser esencial, tiene un impulso de protección y hermandad hacia toda la naturaleza. Este impulso nos lleva a buscar un encuentro con nuestros aspectos salvajes, libres, primitivos. El caballo nos acompaña en esta búsqueda, nos enriquece, nos ayuda a sanarnos.

Este libro está enfocado en los primeros pasos del potrillo y en el modo de criarlo sano. Cuando el futuro del caballo se marca con intensidad en su memoria. La calidad del manejo en este período puede marcar una gran diferencia con los caballos tratados de un modo mecánico.

Es además, el resultado de mi trabajo, evolución y búsqueda como médica veterinaria holística especializada en el manejo veterinario natural del caballo e investigadora en la comunicación con él. Y en mis vivencias durante los distintos cursos, entre ellos los que llamaba de impronta, junto con la investigación bibliográfica y las conclusiones a las que fui llegando. Conclusiones que comparto con mucha gentedecaballos del mundo.

La experiencia siempre fue conmovedora, al comprobar cómo tratando a estos animales recién nacidos (o de algunos días, semanas o meses), de una manera adecuada a su forma de ser, los resultados fueron excelentes en los potrillos y en las personas.

Podrán compartir en este viaje una visualización del desarrollo del potrillo, desde el concepto de su organización social y su sistema de comunicación. A partir del encuentro entre la yegua y el padrillo, el contexto donde se crían los potrillos, los primeros pasos, hasta llegar a su primer año de vida.

Encontrarán información que puede ser útil para quienes se interesan por conocer a los caballos de modo perceptivo y quieran continuar investigando el modo en que funcionan los equinos. Para quienes el caballo ya no es una máquina, sino un animal de presa que necesita ser comprendido en su propia dimensión. También encontrarán material fotográfico de distintas personas amantes de los caballos, con sus cualidades personales.

Hay biólogos y zoólogos con un punto de vista holístico y actualizado que a través de sus investigaciones, sostienen que las conductas complejas podrían demostrar que detrás de estas podría haber indicios de conciencia. La manada aprende a conocer detalladamente a los predadores así como sus próximos pasos. Son expertos y muy inteligentes para leer los más mínimos detalles del lenguaje corporal, como el famoso Clever Hans que podía responder a cualquier persona que le daba la respuesta correcta durante sus exhibiciones. Además son mejores reconocedores del ambiente que nosotros, inclusive más inteligentes (preguntemos a quienes hacen cabalgatas por la cordillera). Según estos mismos investigadores, su memoria podría ser ordenada: cuando recuerdan un lugar, parece que primero miran a un lado y luego al otro, hecho que pude corroborar cuando montaba. Por lo tanto, como nosotros damos señales todo el tiempo, siempre estamos comunicando algo, así que deberíamos ser conscientes por aquello que estamos comunicando.

Algunos momentos de este libro están orientados a mostrar cómo se puede enseñar fácilmente y con cuidado algunas acciones que el potrillo necesita aprender para su futura convivencia con los humanos.

Knowledge is king: Apreciar el conocimiento y hacer el mejor uso de este conocimiento.

Estamos viviendo un intenso momento de poner en duda los prejuicios de las viejas escuelas en distintos ámbitos de las ciencias. Los viejos hábitos de aquellos que lo saben todo, de que siempre se hizo así y funcionó. A qué precio, con qué costo, cuántas vidas fueron truncadas en ese saber mecanizado y heredado. ¿Con qué referentes se manejaban? O se manejan cuando dicen: este caballo es un mañoso… Muchas ideas, conceptos y pautas acerca del trabajo con los caballos están en permanente evolución. Creo que los etólogos más enfocados en el estudio científico de esta bella ciencia irán iluminando y aclarando varios de estos conceptos en el futuro así como los veterinarios interesados en el tema y los domadores, jinetes, amazonas, entrenadores y peones que trabajan con un enfoque natural y humano.

Sigo pensando en que es posible despertar corazones y mentes ávidas de conectarse y comunicarse armoniosamente con estos seres alados de cuatro patas. Nuestra inteligencia como especie, debería estar enfocada en mejorar nuestra actitud hacia la naturaleza. Inteligencia es resolver problemas. Es un momento del planeta único y maravilloso por la transformación en la que nos compromete.

La situación del caballo en una manada en su ambiente natural, como la de los caballos de las estepas de Mongolia, es diferente a la de las manadas que están en contacto con el hombre. He trabajado con manadas de yeguas domésticas, grupos manejados por el hombre que viven sueltos en amplios espacios sin el padrillo y que crían a sus potrillos sin demasiado contacto con el hombre, al menos al principio. Estas manadas se encuentran en un ambiente controlado por el hombre, con poca o ninguna exposición a los predadores naturales.

Aunque no son caballos salvajes, sus instintos están despiertos y son un buen modelo de estudio, experiencia y aprendizaje.

La yegua que confía en el hombre, permite que nos acerquemos dentro de su espacio de seguridad, aunque siga atenta a su bebé y en general, va a preferir estar entre nosotros y el potrillo. El potrillo hará lo que hace su madre, tendrá confianza en las personas conocidas y desconfiará de los desconocidos.

Tomamos como principio para conocer y acercarnos al caballo nuestra propia naturaleza animal, intentando comunicarnos con el potrillito o la potranquita con empatía.

El hombre domesticó al caballo por su necesidad de comida, de transporte, de asistencia en su trabajo. Esta relación fue evolucionando, en los mejores casos, hacia una relación de compañerismo con el caballo de deporte o de esparcimiento, pero en muchos otros casos, aún se tiene al caballo sometido al ego de su propietario que lo quiere solamente como objeto de estatus o para cubrir carencias: inseguridad, afectos, hijos, familia.

Mi intención es aportar ideas y vivencias para mejorar nuestra relación con el caballo a través del conocimiento. Conócete a ti mismo, así conocerás al mundo.

Los potrillos naturalmente son curiosos. Aprovechamos esta curiosidad para relacionarnos con ellos a través del juego y la cognición y para transmitirles información útil que los modelará para el futuro contacto que tengan con los humanos.

Es conmovedor observar a muchas personas que se vinculan con estos animalitos por primera vez, cómo se sienten a gusto cuando son elegidas por el potrillo o potranca y pueden experimentar esa unión tan especial, que recuerda que todos somos parte del mismo universo.

Los caballos tienen una zona de seguridad a su alrededor. Las personas que se acercan a ellos con ganas de conocerlos y aprender, creo que se sienten seguros y a gusto en esa atmósfera de calma y calidez.

Según algunas antiguas tradiciones religiosas, los animales tendrían una voz para honrar a su creador.

Dice Rumi, un poeta persa: "Todos los demás animales tienen un grito, una lección y una doxología con la que conmemoran a su Hacedor y Proveedor. Así, existe el grito de anhelo del camello, el rugido del león, el balido de la gacela, el zumbido de la mosca, el susurro de la abeja..."

"Los ángeles del cielo y los genios también tienen sus doxologías, e incluso el hombre tiene su doxología, su Magnifitat, y diversas formas de adoración para su corazón (o mente) y para su cuerpo".

Los caballos forman un alma con su amigo humano.

Compartimos con ellos

el silencio

una sanadora amistad.

Son estas brisas una manera de honrar a este bello aspecto de la creación.

Anahí Zlotnik

CAPÍTULO UNO

¿De dónde vengo?

The mare and her foal inhabit the same tent with the Bedouin and his children. The neck of the mare is often the pillow of the rider, and, more frequently, of the children, who are rolling about upon her and the foal: yet no accident ever occurs, and the animal acquires that friendship and love for man which occasional ill-treatment will not cause him for a moment to forget.

El potrillo aprende a ser caballo en su grupo, es un seguidor que va donde va el grupo. Tolerancia y apego son dos factores de cohesión y orden. Foto de Mariana Domic

Este capítulo está enfocado en el grupo social en el que los potrillos se desarrollan, la manada o tropilla: sus interacciones, los primeros pasos, las experiencias, prácticas y el aprendizaje de la comunicación. En la foto podemos apreciar un grupo de madres con hijos atentos a alguien. Las crías imitan como un espejo el lenguaje corporal de las madres. Incluso las orejas de los potrillos parecen copiadas y pegadas como se hace con la computadora. Las cabezas y cuellos en la misma dirección. Los potrillos y potros aprenden a comportarse imitando a los adultos. Esto se denomina observación social.

Criadero Santa Isabel, 5ta región, Catemu, Chile. ¡Qué capacidad para enfocarse tienen las yeguas: atención y dirección, todos los sentidos despiertos! ¿Tú quién eres?. Foto de Mariana Domic

Los caballos son animales gregarios. Su régimen alimentario varía de acuerdo con el lugar donde viven, con gran flexibilidad en su comportamiento individual, lo que los hace tan interesantes. Es un animal de ritmo, porque hace un uso del tiempo bastante parejo. Pastan entre 13 y 16 horas, se desplazan mientras comen, buscando los mejores pastos y mirando a sus compañeros. Conociendo esta necesidad, se puede comprender lo difícil que es para un caballo vivir estabulado muchas horas y comiendo a horas que son cómodas para las personas pero no para su fisiología. Duermen dos a cuatro horas, con dos a cinco minutos de sueño paradojal en decúbito, excepto los potrillos, que duermen más tiempo. En términos generales se desplazan alrededor de dos horas y reposan de cinco a seis horas. Estos son sus ritmos.

Los espejos

Es posible apreciar en algunas de las fotos de las yeguas con sus crías la actitud de éstas en espejo con sus madres. Ejemplo, la postura de atención. Por observación social aprenden las señales corporales, las vocalizaciones y los mensajes odoríferos o químicos. Y aprenden a discernir lo peligroso de lo no peligroso.

Señales

• Acústicas

• Olfatorias: feromonas

• Táctiles

• Visuales

El grupo se mantiene unido por la comunicación entre los individuos. Las yeguas llaman a sus crías cuando no las ven. El llamado será más agudo y vibrante cuanto más lejos esté su potrillo o cuanto más tiempo tarde éste en contestar. Aparentemente, las vocalizaciones son personales, de modo que los caballos reconocen de dónde provienen. Investigaciones realizadas con grabaciones de relinchos, tipo susurros, de yeguas y potrillos determinaron que son capaces de reconocerse entre sí.

El boqueo: una señal típica de los potrillos

Los potrillos aprenden las distintas señales de convivencia. Una de ellas, el boqueo, consiste en abrir y cerrar la boca con las orejitas paradas, con las comisuras bucales retraídas y los dientes cubiertos; algo así como una señal de apaciguamiento o inhibición de la agresión de los adultos, como cuando los cachorritos caninos se ponen panza arriba como gesto de sumisión ante los adultos y como gesto de inhibición de la agresión. Algunos boquean hasta los dos años o más, según sean más o menos tímidos.

La potranca quedó lejos de su mamá, a medida que se acerca a ella y a la persona que trabaja con ella, lo hace boqueando. Fotos de Anahí Zlotnik

¿Cuántos significados tendrá el boqueo? ¿Es sólo un signo de inhibición de la agresión o una búsqueda de aceptación o algo que aún desconocemos?

¿Cuántos significados tendrá esta señal?

• ¿Búsqueda de aceptación?

• ¿Transmisión de olores?

• ¿Transmisión de información?

• ¿Dice: Soy pequeño, tratame bien?

• ¿Preocupación por algo que ocurre?

Aromas personales

La comunicación olfatoria es vital porque madre e hijo se huelen permanentemente para reconocerse. Imitamos este contacto soplando sus ollares o mostrando el dorso de nuestra mano curvada para invitarlos a que la huelan. O les permitimos que nos olfateen a su aire para que tomen confianza. El potrillo bayo de la foto satisface su curiosidad oliendo la cabeza de Ana como la potranca que huele a Susana. Ambas están haciendo contacto a través de los olores. Algunos son más corajudos y, si bien nos dejamos oler, lo hacemos cuidando nuestro espacio personal, estamos atentos para evitar que nos invadan.

Existen unas glándulas a los costados de la boca, llamadas circunorales, cuya función es la de enviar señales olfatorias. La saliva y la transpiración también tienen los aromas personales.

¡Qué sensación única el olor de nuestro caballo o yegua! . Foto de Anahí Zlotnik

Armonía entre las yeguas

Muchas yeguas con las que trabajé en distintos establecimientos están acostumbradas al contacto con las personas, viven sueltas día y noche en un ambiente natural a su aire, tomando sus decisiones según los momentos del día, cuándo ir a beber, buscar pasturas, caminar, revolcarse. Estas yeguas no son montadas e incluso algunas de ellas ni siquiera han sido domadas. Aunque sean domésticas, pueden mostrar comportamientos instintivos, como las reacciones básicas de miedo, huída, defensa, ataque, o curiosidad.