Cuentos de hadas para niños Una gran colección de fantásticos cuentos de hadas. (vol. 2): Cuentos únicos, divertidos y relajantes antes de dormir que transmiten muchos valores y hacen que los niños se apasionen por la lectura.

Por Wonderful Stories

Había una vez...

 

Duendes traviesos, dulces hadas y animales parlantes que vivían felices en el bosque. También había niños, príncipes y princesas, flores mágicas y brujas en escobas voladoras. H

• Idioma: Español
• Editorial: Wonderful Stories
• Fecha de lanzamiento: 15 dic 2023
• ISBN: 9798869066053

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Cuentos de hadas para niños

Una gran colección de fantásticos cuentos de hadas.

(vol. 2)

Cuentos únicos, divertidos y relajantes antes de dormir que transmiten muchos valores y hacen que los niños se apasionen por la lectura.

Wonderful Stories

«La reina de las hadas y la búsqueda de la luz»

Había una vez un reino encantado gobernado por la Reina de las Hadas. El reino era un lugar maravilloso, con montañas imponentes, ríos resplandecientes y bosques frondosos. Pero un día, el reino quedó cubierto por una inquietante oscuridad. La Reina de las Hadas comprendió de inmediato que se acercaba el mal y decidió emprender una misión para encontrar la fuente de luz que pudiera alejar la oscuridad.

La Reina de las Hadas llamó a su ejército de hadas y juntas partieron en busca de la luz. Viajaron durante días y noches, cruzando ríos y montañas, hasta llegar a la casa de un viejo y sabio mago. El viejo mago sabía mucho sobre las fuerzas del Mal y la Luz, y la Reina de las Hadas le pidió ayuda.

El viejo mago le dijo a la Reina de las Hadas que la luz estaba en el corazón de una montaña muy lejana, pero que para alcanzarla tendrían que superar muchas pruebas difíciles. La Reina de las Hadas y sus hadas estaban preparadas para cualquier desafío, así que aceptaron el desafío y partieron hacia la montaña.

El viaje fue difícil y peligroso. Las hadas tuvieron que cruzar un río infestado de monstruos, enfrentarse a una tormenta de nieve y cruzar un puente colgante sobre un barranco. Pero la Reina de las Hadas y sus hadas fueron valientes y decididas, y al final llegaron a la base de la montaña.

La montaña era alta y empinada, con paredes empinadas y peligrosas. La Reina de las Hadas y sus hadas tuvieron que subir a la cima, pero cuando llegaron a la cima, solo encontraron otra prueba. Había una puerta dorada sobre la cual estaba escrito: «Solo aquellos que conocen el verdadero nombre de la luz pueden abrir esta puerta». La Reina de las Hadas y sus hadas estaban confundidas. No sabían el nombre de la luz, así que, ¿cómo podían abrirla? Pero de repente, una pequeña hada se acercó a la puerta y dijo: «El verdadero nombre de la luz es esperanza». Y la puerta se abrió.

Detrás de la puerta había una habitación iluminada por la luz más brillante que habían visto en su vida. Era tan brillante que las hadas tuvieron que taparse los ojos. Pero la Reina de las Hadas estaba feliz, sabía que había encontrado la fuente de luz que podría alejar la oscuridad de su reino.

La Reina de las Hadas cogió un poco de luz y la devolvió a su reino. Cuando llegaron, las hadas usaron la luz para iluminar el reino, alejando la oscuridad que lo había cubierto. El reino volvió a ser un lugar maravilloso, con montañas imponentes, ríos resplandecientes y bosques frondosos.

Y la Reina de las Hadas sabía que, gracias a la esperanza, su reino permanecería iluminado para siempre.

«La princesa de las estrellas y el secreto de la felicidad»

Había una vez una princesa que vivía en el reino de las estrellas. La princesa estaba muy triste porque no podía encontrar la felicidad. Un día, decidió pedir ayuda a la estrella más brillante del cielo, que también era la más sabia.

La princesa le preguntó a la estrella: «¿Cómo puedo encontrar la felicidad?» La estrella respondió: «La felicidad no es algo que puedas encontrar, es algo que tienes que crear. Tienes que encontrar la fuerza dentro de ti para crear tu propia felicidad».

La princesa no entendió de inmediato lo que significaba la estrella, pero decidió seguir su consejo. Comenzó a buscar en sí misma la fuerza que necesitaba para crear felicidad. Viajó por el reino de las estrellas, encontrándose con criaturas