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Esperanza Alpazada
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Libro electrónico219 páginas3 horas

Esperanza Alpazada

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Información de este libro electrónico

Toda vida experimenta crisis, decepciones, incertidumbres y dificultades. Si bien algunos de estos problemas se pueden superar fácilmente, hay otros que amenazan con asfixiar la vida fuera de nosotros. Pero ¿por qué ocurren?  ¿Por qué nuestro mundo se ha vuelto al revés? 
En la más oscura de la noche cuando la esperanza parece elusiva, o ha desaparecido definitivamente, en lugar de ser aplazada.  Incluso cuando usted intenta ver el revestimiento de plata, las dificultades de la vida insisten en mantenerle por la garganta mientras usted está tratando de entender la crisis.   
Los retos que nos rodean con la esperanza de que nos aplazemos ocurren por una razón. A medida que leas este libro serás mejor capaz de entender los tiempos tumultuosos y las

IdiomaEspañol
Fecha de lanzamiento16 ene 2024
ISBN9798224250615
Esperanza Alpazada
Autor

Sophia Elizabeth Lambert

Sophia Elizabeth Lambert is a Jamaican author who has published four books titled Hope Deferred, Rise Up: Mentoring Boys to Become Men of Integrity, Esperanza Aplazada, and A Guide to Effectively Mentor Boys to Become Men of Integrity.                                                    She is passionate about mentoring boys into productive young men and has used her counselling skills in mentoring some of them. Her desire to see boys and young men become their best has propelled her to become the content creator for the series on Mentoring Boys to Become Men of Integrity on the YouTube Channel, Sophia Elizabeth Lambert. Her intention is to inspire others to help change a young man's future history today. As an author and motivational speaker, she seeks to challenge, refresh, and restore hearts.

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    Vista previa del libro

    Esperanza Alpazada - Sophia Elizabeth Lambert

    Sophia Elizabeth Lambert

    Derechos© 2020 by Sophia Lambert

    Todos los derechos reservados. Ninguna parte de esta publicación puede ser reproducida, almacenada en un sistema de recuperación, o transmitida en cualquier forma o por cualquier medio- electrónico, mecánico, fotocopia, grabación, o cualquier otro, excepto para breves citas en revistas impresas, sin el permiso previo del autor.

    A menos que se identifique lo contrario, Las Escrituras están tomadas de las biblia NVI® (La Nueva Versión Internacional)®) copyright © 2020 by Sophia Lambert.

    ––––––––

    Publicada en Jamaica.

    Sophia Lambert.

    Para más  información, póngase en contacto con nosotros en sophiaelizabethlambert01@yahoo.com

    ISBN—  978-976-96525-2-1 (Libro electrónico)

    ISBN -  978-976-96525-1-4  (Libro de bolsillo)

    Dedicado a

    Este libro esta dedicado a mi magnánimo Señor y Salvador Jesucristo por llévame a través de cada dificultad. Su disciplina me ha convertido en lo que soy hoy. Te amo mi Senor.

    ––––––––

    Por su inestimable apoyo...

    Gracias a la Fundación de Apoyo a las Células Falciformes de Jamaica, su apoyo ha sido inestimable para mí.

    A Chantella Morgan Peart, gracias por todo.

    ––––––––

    Este libro también está dedicado a ti, amigo que lo lees. Confía en que el mañana viene y el Señor se ha adelantado a todos tus mañanas trabajando todas las cosas para tu bien. No te preocupes, tu cambio está por llegar.

    ––––––––

    Animán dote

    Sophia Elizabeth

    Índice de contenidos

    INTRODUCCION....................................i

    CAPITULO 1

    La pena es mejor que la risa .....................1

    CAPITULO 2

    Naomi habla..........................................20

    CAPITULO 3

    Procesado para crecer  ...........................46

    CAPITULO 4

    El tiempo señalado por Dios........................83

    CAPITULO 5 

    El appo..............................................113

    CAPITULO 6

    Esperanza............................................134

    CAPITULO 7

    Transición al Propósito.............................167

    CAPITULO 8

    Acción de Gracias, Alabanzas y Adoración............................................194

    ––––––––

    CAPITULO 9

    Rezando Fervientemente....................................204

    CAPITULO 10

    Con la respiración contenida............................................207

    EPILOGO..........................................209

    REFERENCIAS..................................213

    INTRODUCCION

    ¿Alguna vez has sentido que tu esperanza ha sido postergada, o peor aún, que el Señor Dios es completamente ajeno a todo lo que esperaras y rezas? ¿Te has senito alguna vez decepcionado porque crees que a Dios no le importa lo que esperas? 

    Esto sentimientos son íntimos para mí porque, durante algunos años en mi camino con Cristo, he sentido que mis esperanzas se han aplazado hasta el punto de que se han archivado, e incluso he olvidado algunas de ellas. Hay que admitir  que pueden haber sido archivadas prematuramente porque puedo ser muy impaciente cuando se trata del Señor. Esas esperanzas pueden parecer aplazadas porque he renunciado demasiado pronto a creer que el Señor iba a responder a mis oraciones o puede que simplemente haya dudado de que lo hiciera. 

    Otra de mis esperanzas es ser un empresario establecido con múltiples negocios de éxito. Tenía la esperanza de lograr todos mis planes, pero en cambio, esas esperanzas han estado llenas de decepciones debido a mi incapacidad para realizarlas en el pasado. Tal vez fue por la inmadurez para llegar hasta el final, soni desistió o simplemente por mis propias acciones, abandone los negocios y otras metas.

    Aplazadas o pospuestas intencionadamente, las cosas que se esperaban parecen estar eternamente en la lista de espera. Me he preguntado si no solo se han retrasado o pospuesto, sino que se han arrojado al mar del olvido. 

    Mi deseo de casarme es una de las cosas que he esperado. En una conversación con el Señor, le pregunté por qué no me permitió casarme hace anos. La respuesta que me dio fue que El es intencional en todo lo que hace. ¿Qué le dices al Señor cuando te dice que te ha mantenido soltero intencionalmente? O te pones de morros o aceptas su respuesta. Francamente, esa no era la respuesta que esperaba de Él. Mi expectativa era algo profundo, como, Hija mía, te estaba moldeando para una gran obra, pero escuchar que era Su intención que yo permaneciera soltera todos estos años no me hizo gracia en ese momento. Aun así, Dios es  Dios; ¿quién puede discutir con Él y ganar? Ciertamente yo no. ¿Te suenan mis sentimientos o experiencias? ¿Qué esperanzas tienes que parecen postergadas?

    ¿Te has sentido alguna vez como Job cuando decía: Aun hoy mi queja es amarga, su mano es pesada a pesada a pesar de mis gemidos? Si supiera donde encontrarlo, si pudiera ir a su morada. Expondría mi caso ante él y llenaría mi boca de argumentos (Job 23:2-4; NVI). Yo me hago eco de esos mismos sentimientos similares a los deseos de Job . Mi deseo ha sido visitar al Señor en su casa, acercarme a una silla y exponer mi descontento, si tan solo El me dijera como llegar allí para poder hacerle saber realmente que la vida aquí abajo en la tierra no es fácil. Le diría: Es difícil, así que por favor, escucha y actúa rápidamente cuando clamamos a ti, pero no ha aparecido ninguna dirección con las indicaciones para llegar a su casa en el cielo. Así que el viaje continua.

    Durante muchos años, fue un reto financiero, y las luchas fueron duras. Ore y ayune sobre esa difícil situación, pero en lugar de una resolución inmediata, se volvió aun mas abrumadora. Era tan difícil que sentí que me hundía sin salvavidas. Nada de lo que intente produjo el avance o el éxito esperado; fue extremadamente difícil. Con todas las oraciones y ayunos, seguía igual. Seguía esperando que mañana llegara mi cambio, pero mañana se convirtió en otro mes y otro ano, y así sucesivamente, volviéndose más evasivo a medida que pasaba el tiempo. Ore y ayune con mas ahínco, pero parecía que el gigante no se doblegaba. A pesar de esto llamados a ser implacables, así que me aferre persistentemente al Señor y libre una guerra contra ese espíritu de insuficiencia. Como resultado de mis desafíos, he aprendido que hay una postura que debemos tener al pasar por nuestras pruebas. Esa postura debe ser correr hacia el Señor, no alejarse de E, y nunca debemos cansarnos. 

    Me gusta lo que dice Hebreos 4:16 (NVI): Acerquémonos, pues, con confianza al trono de la gracia, para que recibamos misericordia y encontremos gracia que nos ayude en nuestros momento de necesidad. De ahí viene nuestra ayuda, así como de donde se autorizan nuestros desafíos. Hemos de soportar nuestras dificultades, sabiendo que nuestra Victoria es segura. Debemos confiar en el Señor para que lo haga de acuerdo a su voluntad para nuestras vidas, porque solo El tiene el proyecto. En esta vida para todos, especialmente para los santos de Dios. La perseverancia es una disciplina que debemos soportar porque nos hace madurar y completar.  Santiago 1:12 (NVI) nos asegura que hay una bendición en perseverar bajo la prueba, porque una vez que hayamos superado la prueba, recibiremos la promesas son inquebrantables.

    Por favor, recuerda que la vida viene con muchos desafíos, y parece que su intención es hacemos o rompernos. Dios usa los desafíos como sus herramientas para moldearnos para ser mas como El. Se lo dolorosos que pueden ser, pero el paun sirve para muchos propósitos en nuestras vidas. Se usa para trabajar en diferentes cosas en nuestras vidas, una de las cuales es quitar lo que no glorifica a Dios. Otra es la de acompañar Su voluntad en nuestras vidas para que podamos avanzar en el Reino de Dios. O bien nuestras respuestas a esta herramienta nos formaran para ser mejores personas, o podemos permitir que nos amargue. El dolor es parte del plan de Dios en nuestras vidas, y E lo utiliza. Este pensamiento desafía tus creencias, ¿no es así? Tal vez pienses que Oh, Dios nos ama demasiado para permitir el dolor en nuestras vidas, pero la verdad es que El nos ama hasta el punto de permitirnos soportar algunas dificultades y cosas horribles. Leo en 1 Pedro 3:7 y 1 Pedro 4:19 que es la voluntad de Dios que suframos, incluso por el bien que hemos hecho, y que sigamos haciendo el bien. Si, el permite el dolor en nuestras vidas para lograr lo que El quiere en nosotros. También creo que se utiliza para impulsar el curso de nuestras vidas..

    caso, estos retos se produjeron a raíz de la finalización de este libro. El mundo se ha visto obligado a defenderse de un nuevo virus llamado Coronavirus o COVID-19 para abreviar. Ha estado robando al mundo sus recursos más preciados -nuestra gente- matando y afligiendo a millones de personas. El mundo moderno nunca ha experimentado una plaga semejante como comunidad global. Se siente como si estuviéramos siendo atacados por un enemigo invisible que está tratando de impulsar el miedo y causar un profundo dolor que nunca hemos conocido. Ha habido razones para que las naciones experimenten una profunda angustia. De hecho, para algunas naciones, la angustia es algo cotidiano porque están siendo asoladas por la guerra, lo que hace que miles de personas huyan de sus fronteras. Sin embargo, este virus ha nivelado el campo de juego para todas las naciones, invitándose a sí mismo a muchos países de todo el mundo y obligando a los estados a cerrar sus puertas contra otros. Este extraño ataca y nos obliga a rechazar a nuestros visitantes por miedo a que venga de visita. Trae consigo la posibilidad de muerte y dolor para sus inocentes anfitriones. Todas las naciones, tras conocer su ataque a su anfitrión de origen, China, esperaban que no viniera a nosotros, pero nuestras esperanzas no se hicieron realidad. Estoy atento a este desafío para ver cómo unimos nuestras fuerzas contra él como comunidad global. Si somos resistentes y estamos unidos, podemos y venceremos.

    Es en los momentos difíciles cuando se pone a prueba nuestro sistema de creencias. He vivido tiempos tumultuosos y me ha parecido un reto dominar la fusión del conocimiento con la experiencia. Hubo días en los que los desafíos eran tan abrumadores que me sentí como Job cuando le dijo al Señor: Retira tu mano lejos de mí, y deja de asustarme con tu terror (Job 13:21; NVI). Sentí que la intención del Señor era asustarme con la plétora de desafíos que he tenido. Pero en todo, tengo que recordar que Dios es bueno; su intención nunca es asustarme, sólo podarme para que pueda ser fructífero. Para ser sincero, necesito mucha poda.Hubo una temporada en la que sentí que el Señor me había encerrado entre un muro muy alto y Él mismo. No podía ir a la derecha o a la izquierda, y ciertamente no podía escalar el muro. Me sentía como un pequeño animal atrapado entre Dios, Su voluntad, y la necesidad de que yo fuera podado para que reflejara a Cristo. Mientras gimoteaba porque mis pruebas y tanteos me tenían encerrado sin escapatoria, lo único que podía hacer era relajarme donde estaba cercado. Su mano gentil me levantó, y ese toque quitó el aguijón de mis circunstancias dolorosas. Los desafíos permanecieron porque Él todavía quería que yo fuera procesada. El dolor nos está procesando para Su gran plan. Y ¿Cuál es ese plan?, te preguntarás. Su gran plan para nosotros como la Esposa de Cristo es ser sin mancha ni arruga, para que junto con el Espíritu Santo, podamos decir, Ven, Señor Jesús. El gran plan de Dios es tenernos con Él: una gran familia feliz y unida en el cielo, alabando y adorando eternamente, así como obteniendo algunas comodidades mientras estamos aquí en la tierra. Cuando nuestra esperanza se posterga, el corazón se entristece. Estar triste es un estado difícil porque tiene una forma de ensombrecer todo nuestro ser. Nubla nuestra visión, perspectiva y percepción. De hecho, hace que momentáneamente la vida parezca no tener futuro. La vida se ha reducido a que tengamos una actitud de ay de mí porque estoy triste. Ese es el impacto que tiene en nosotros estar tristes. Es imperativo tener mucho cuidado cuando nos encontramos en este estado, porque si nos quedamos aquí demasiado tiempo

    Hay momentos en los que no logramos dejar pasar las cosas. Soy un firme creyente de que porque buscamos fervientemente al Señor, Él ha respondido y nos responderá. A veces, nuestra esperanza parece aplazada debido a algunos deseos insatisfechos, necesidades y oraciones aparentemente sin respuesta. ¿Son insatisfechas o sin respuesta porque no son la voluntad de Dios para nuestras vidas? Desarrollamos una visión de túnel e incluso nos volvemos sordos al Espíritu Santo debido a nuestros deseos. La Biblia dice en Santiago 4:3 (NVI), Pedimos pero no recibimos porque pedimos con motivos equivocados. Nombramos y reclamamos cosas sin preguntarle al Señor si es Su voluntad que tengamos eso que estamos clamando. Perdóname si me equivoco, pero todavía no he visto ese principio o declaración escrita en la Biblia. Debemos pedir y creer por fe que recibiremos. Dios es nuestro Padre, que nos dará buenos regalos, pero no todo lo que creemos que es bueno para nosotros lo es realmente. Nuestra madurez debería permitirnos ver que no se consigue nada con nombrar y reclamar. En cambio, debemos buscar el Reino de Dios y dejar que Él añada lo que quiere que tengamos según su voluntad. Hacer esto aliviará muchas de nuestras decepciones debido a las esperanzas que aparentemente han sido postergadas. Podemos fácilmente engañarnos a nosotros mismos cuando le decimos a Dios lo que queremos en lugar de preguntarle si es Su voluntad. Yo mismo he estado allí y he hecho eso demasiadas veces. Algunas personas se han sentido tan decepcionadas que han perdido su fe en Dios porque Él no hizo lo que le habían pedido, aunque creyendo que Él les había dicho que se lo daría. Es simplemente una situación de instruir a Dios en lugar de ser instruido por Él. Cuando llegamos a situaciones como esa, no solo nos deja tristes sino desilusionados. Ese es un lugar innecesariamente doloroso para estar. Al esperar, esperemos en Dios (como siempre digo), que es fiel en darnos buenos regalos según su voluntad y propósitos para nuestras vidas, porque el anhelo cumplido es árbol de vida (Proverbios 13:12; NVI).

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    CAPÍTULO 1

    Más vale la tristeza que la risa: porque con el semblante triste se mejora el corazón

    ––––––––

    Mientras reflexionaba sobre el título de este capítulo, debo decir que me resultaba un poco desconcertante cómo la tristeza podía ser mejor que la risa. Soy consciente de que la tristeza, si no se tiene cuidado, puede convertirse en depresión. También soy consciente de que la risa es una medicina, pero me impresionó escribir sobre este verso. En primer lugar, permítanme exponer los significados de la tristeza y la alegría. El diccionario Webster II define la pena como sufrimiento mental o causa de tristeza o aflicción. Y alegría significa Gran felicidad, deleite.Entonces, ¿por qué Salomón, el presunto escritor de este proverbio, cree que la tristeza es mejor que la risa? Mientras pensaba en ello, consideré que para nosotros, como humanos, siempre preferimos la risa a la tristeza. La sensación que produce la risa es bastante deliciosa y embriagadora; sin embargo, nuestro deseo es evitar a toda costa sentirnos apenados porque la vida es muy sombría cuando está cerca. Además, es difícil ver cómo puede ser mejor que la risa. Personalmente, prefiero la risa a la tristeza. Sin embargo, he soportado desafíos y he experimentado la pérdida de seres queridos. Pasar por estas experiencias me ha hecho desarrollar un aprecio por la temporada de tristeza. Esto no es una cruzada para persuadirnos de que debemos estar tristes; ¡en absoluto! Se trata de arrojar algo de luz sobre la tristeza, porque cuando nuestra esperanza se aplaza, por lo general, nos sentimos mal de corazón, ya que la tristeza está presente en esos momentos.

    Creo que experimentar el dolor puede ser un estado santo del ser por lo que puede producir en nosotros. El dolor puede ayudarnos a llegar a un lugar en el que seamos receptivos a ser utilizados para la gloria de Dios, incluso cuando nos rehace. Nuestra emoción cruda y nuestra vulnerabilidad, así como nuestra fragilidad, nos llevan a un lugar de intimidad con nosotros mismos y, en algunas culturas, con la comunidad. Y lo que es más importante, nos lleva a un lugar de comunión con nuestro Señor.

    El dolor tiene el potencial de refrescar nuestra alma y nuestro espíritu. Nunca volvemos a ser los mismos después de haber pasado por un periodo de dolor. Nos cambia permanentemente en formas que no son inmediatamente obvias. Está bien soportar el sufrimiento; nuestro dolor nunca es un desperdicio en el plan de Dios para nuestras vidas. Por el contrario, sirve para que surjan oportunidades que nunca habíamos previsto. El dolor hace que nuestro corazón anhele al amante de nuestra alma. Mientras caminas por el valle del dolor, anímate, porque Dios está contigo.

    El dolor tiene el potencial de refrescar nuestra alma y nuestro espíritu. Nunca volvemos a ser los mismos después de haber pasado por un periodo de dolor. Nos cambia permanentemente en formas que no son inmediatamente obvias. Está bien soportar el sufrimiento; nuestro dolor nunca es un desperdicio en el plan de Dios para nuestras vidas. Por el contrario, sirve para que surjan oportunidades que nunca habíamos previsto. El dolor hace que nuestro corazón anhele al amante de nuestra alma. Mientras caminas por el valle del dolor, anímate, porque Dios está contigo.

    El dolor tiene el potencial de refrescar nuestra alma y nuestro espíritu. Nunca volvemos a ser los mismos después de haber pasado por un periodo de dolor. Nos cambia permanentemente en formas que no son inmediatamente obvias. Está bien soportar el sufrimiento; nuestro dolor nunca es un desperdicio en el plan de Dios para nuestras vidas. Por el contrario, sirve para que surjan oportunidades que nunca habíamos previsto. El dolor hace que nuestro corazón anhele al amante de nuestra alma. Mientras caminas por el valle del dolor, anímate, porque Dios está contigo.

    Creo que experimentar el dolor puede ser un estado santo del ser por lo que puede producir en nosotros. El dolor puede ayudarnos a llegar a un lugar en el que seamos receptivos a ser utilizados para la gloria de Dios, incluso cuando nos rehace. Nuestra emoción cruda y nuestra vulnerabilidad, así como nuestra fragilidad, nos llevan a un

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