El solitario del llano: José Ramón Mariscal Grandales

Por Guillermina Consuelo Sansaricq Gonzalez y Librerío editores

Desde niña tuve predilección por la literatura, por las artes en general. Gustaba de los libros, de los creadores que se destacaban en cualquier manifestación, José Ramón Mariscal Grandales fue uno de ellos.
Lo admiré porque además de escuchar los criterios que sobre él se emitían, pude conocerlo personalmente.
Casi todo lo decía en versos.
Logré contar con su libro Lira Viajera, disfrutaba leerlo.
Conocer a Mariscal fue un regalo. Pude saber que la miseria puede mantenernos alejados de riquezas, de bienes materiales, pero jamás de dones que nos da la vida como el de la inteligencia para crear.
De formación autodidacta, logró hacer una obra de contenido serio y también humorístico con una variedad increíble de temas.
Se vinculó a personas de pueblo, muchos de ellos poetas con los que compartía sus creaciones.
Una vida llena de carencias no le impidió mantener su sonrisa.
Resultan impresionantes los criterios que sobre el poeta emiten los testimoniantes.

• Idioma: Español
• Editorial: Librerío editores
• Fecha de lanzamiento: 2 dic 2023
• ISBN: 9798215541937

Vista previa del libro

Dedicatoria

A la memoria del poeta cubano José Ramón Mariscal Grandales, El Solitario del Llano, oriundo de Rodrigo antigua provincia de Santa Clara y radicado posteriormente en Yaguajay actual provincia de Sancti Spiritus. Hombre sencillo, honesto, afable, cuyas virtudes lo hicieron inmortal en un pueblo que desde 1926 lo acogió como a un hijo.

Agradecimientos

Mi agradecimiento a todas las personas que ofrecieron sus testimonios. Sin su colaboración, hubiera sido imposible recopilar la información contenida en este trabajo, imprescindible para hacer imborrable la huella de un poeta excepcional.

Agradecer a la Biblioteca Municipal Juan Oscar Alvarado Miranda y al Museo Capitán Sansaricq de Yaguajay Sancti Spiritus Cuba por sus atenciones.

Alberto Pérez Lara, (testimoniante), quien fuera el primer presidente de los órganos del Poder Popular en Yaguajay, puso en mis manos una valiosa investigación de dos grandes poetas del terruño ya desaparecidos Bernardo Amador Yunes y Luis Compte Cruz, donde de manera amplia recorre la biografía de Mariscal Grandales con insuperable conocimiento de su andar desde la llegada a este pueblo.

De igual forma quiero agradecer la colaboración prestada por José Luis Santana, un hijo de Sagua la Grande, provincia Villa Clara, quien aportó el Blasón y el documento explicativo del origen del apellido Mariscal, que encabezan este trabajo, los que obtuvo de manos de unos parientes venezolanos cuando cumplía una misión en ese país. José Luis también tiene de Mariscal de ahí su interés. Aunque no conoció a José Ramón si sabe del vínculo familiar que viene por su abuela materna.

Marisel Compte, hija del destacado poeta Luis Compte Cruz, tuvo la gentileza de mostrarme un recorte del periódico Vitrales de fecha domingo 19 de abril de 1987 donde aparece una publicación de Maritza Martínez Valdivia titulada En compañía de un solitario. Aunque un poco deteriorado se pueden leer aspectos relacionados con El Solitario del Llano y su obra.

El talentoso escultor espirituano Félix Madrigal, de su archivo personal me envió la foto del día en que se develó la tarja que se erigió a la memoria del poeta frente al Gobierno Municipal.

Otras personas donaron fotos de poetas que fueron amigos de Mariscal y que sus obras forman parte del libro Lira Viajera o son nombrados en él.

Mi agradecimiento para todos.

Introducción

Desde niña tuve predilección por la literatura, por las artes en general. Gustaba de los libros, de los creadores que se destacaban en cualquier manifestación, José Ramón Mariscal Grandales fue uno de ellos.

Lo admiré porque además de escuchar los criterios que sobre él se emitían, pude conocerlo personalmente.

Casi todo lo decía en versos.

Logré contar con su libro Lira Viajera, disfrutaba leerlo.

Conocer a Mariscal fue un regalo. Pude saber que la miseria puede mantenernos alejados de riquezas, de bienes materiales, pero jamás de dones que nos da la vida como el de la inteligencia para crear.

De formación autodidacta, logró hacer una obra de contenido serio y también humorístico con una variedad increíble de temas.

Se vinculó a personas de pueblo, muchos de ellos poetas con los que compartía sus creaciones.

Una vida llena de carencias no le impidió mantener su sonrisa.

Resultan impresionantes los criterios que sobre el poeta emiten los testimoniantes.

En ninguno de los casos hubo una opinión negativa, todos muy entusiasmados alzaron sus voces para bien.

Este hombre supo, además, reconocer a otros que como él se dedicaban al oficio de crear décimas u otras manifestaciones poéticas. Tanto es así, que en su libro Lira Viajera aparecen obras de bardos del terruño como:

Bernardo Amador Yunes (¡Oh Martí!)

Segundo Bello Escobar (La Paz)

Cherry Gándara (¿Quieres más?)

Justo Parra (Ayúdame verso amigo)

Diego Parra (Rompiendo capas de penas)

Pedro Salgueiro (Te sigo a ti maestro)

Carlos del Rio (Mujer cubana)

Rodolfo Ferrer (Mi Sonrisa Alusión al tiempo)

Nombra además a muchos poetas de Yaguajay y de diferentes lugares de la isla que se destacaban en aquellos tiempos y otros que trascendieron.

Pérez Triana, Veranio del Rio Aldereguía,Cirilo Hechevarría, (el cancionero de Urbaza), Lino Falcón, Paulino Ojeda, Genaro González, Carlos Figueroa, Marcial Benítez, Mongo Rojas, Julio Pino, Sarría, Celestino García, Juan Ruperto Limendux, Pablo González Bernal, Angelito Valiente, Alejandro Aguilar, Antonio Camino, Reinaldo Borrero, Antonia María, Jesús Ricote, Raúl Pérez Cruz, Huesito, Juan Domínguez, Juan Gualberto Montalvo, Fermín Navarrina, Fredesvinda Chamizo, Marino Mendoza Rizo, Miguel Puerta Salgado, Pedro y Macho Balmaceda.

Encontrarán en este trabajo, obras tales y como las escribió el poeta, sin las correcciones pertinentes, para hacerlas más auténticas.

En algunos escritos aparece su fecha de nacimiento el 9 de agosto 1891, otros aseguran que fue en 1892 lo cierto es que no pude localizar el acta de nacimiento a pesar de haberla solicitado.

Su fallecimiento ocurrió a las 3.50 pm en el Hospital Joaquín Panecas Consuegra de Yaguajay provincia Sancti Spiritus, el día 31 de octubre de 1980 a la edad de 89 años, siendo sepultado en el cementerio de Yaguajay según consta en el certificado de defunción.

Pienso en lo oportuno de este recorrido, para que las generaciones de hoy y las que están por venir conozcan de la existencia y calidad como persona y poeta de José Ramón Mariscal Grandales El Solitario del Llano.

En el imaginario popular de esta localidad y más allá José Ramón Mariscal Grandales ocupa un lugar muy importante.

Fue increíble el haber tocado tantas puertas y recibir una acogida llena de regocijo por parte de sus moradores, muchos de ellos me remitían a otras puertas. De esta forma he podido compilar los datos que hoy sustentan una experiencia muy halagüeña, reconfortante y necesaria.

Nunca imaginé que el poeta gozara de tan grande admiración y respeto proveniente de una generación que en su mayoría supera los sesenta años de edad, pero mantiene vivo el recuerdo de Mariscal, un hombre que revolucionó con su arte las entrañas de quienes lo conocieron y hoy ponen a nuestra disposición sus vivencias.

Complacida estoy con todos los aportes. Gota a gota se llena un vaso y éste se ha desbordado para bien.

SÍNTESIS BIOGRÁFICA

JOSÉ RAMÓN MARISCAL GRANDALES

Descripción: Descripción: E:\Fotos Consuelo\02\ok\Mariscal.jpg

––––––––

EL SOLITARIO DEL LLANO

Hijo de familia humilde, nació el 9 de agosto de 1892, en Rodrigo, municipio Santo Domingo, provincia Las Villas.

Su padre Miguel Mariscal y Campos, fue de aquellos gloriosos cubanos que se lanzaron a la manigua para conquistar la independencia. Su madre Olaya Grandales fue una humilde ama de casa.

En Rodrigo, cursó estudios primarios hasta el 5to grado, dedicándose después a las labores agrícolas presionado por las necesidades económicas de la familia. En 1926 vino a Yaguajay traído por Pablito Bernal, el contratista que hizo el ayuntamiento (hoy edificio del Poder Popular). El poeta vino como amasador de mezcla para la construcción de dicha obra. Vino también un ciudadano de apellido Peña que hacía labores de carretonero. Este obrero fue quien descubrió sus dones de poeta comunicándoselo a Hilario Jacomino, poeta de Yaguajay que se interesó en conocerlo y saludarlo en versos.

Soy Hilario Jacomino

Leiva Lagos y García

Morales, Pérez y Díaz

y con Hernández termino.

Y si te gusta este trino

o mejor dicho esta glosa,

y quieres saber más cosas

contéstale a Jacomino.

Cuentan que, al saberse descubierto, Mariscal protestó, pues tenía interés en mantenerse en el anonimato, pero contestó los versos de Hilario y a partir de entonces comenzó una profunda amistad entre ambos.

Terminado el ayuntamiento, se trasladó a la Finca Guabina propiedad de Antonio Miranda y allí fomento un sitio. Como vivienda, cuéntese que tenía un rancho en mal estado y fue allí donde nació el seudónimo de El Solitario del Llano.

Se supone que habitando ese lugar produjo su obra La Feria del Yareyal, mediante la cual quiso homenajear de alguna manera a Hilario Jacomino, porque Don Hilario es precisamente el personaje principal de dicha pieza poética. Allí también escribió Lamento del hijo ausente, una composición cargada de sentimientos y añoranzas.

Aquí vivo en plena lucha

con el pesar y el dolor

que me ocasiona el amor

porque mi tristeza es mucha.

...si pido nada me dan

si llamo no se me atiende,

hay quien me mira y se ofende

sin saber de dónde soy,

Y en el lugar donde estoy

hablo y nadie me comprende

...y mientras se va gastando

mi indumentaria sencilla

en un sillón de su villa

mi pobre madre llorando.

Es posible que la incomprensión aminorara desde temprano la voluntad del poeta y que aquel empecinamiento por el anonimato no fuese otra cosa que un intento de negación de su arte hacia una sociedad que no sabía reconocer los auténticos valores culturales que poseía.

De acuerdo con personas que en aquella época conocieron al poeta sabemos que alrededor del año 1928, ocurrió la muerte de su compañera que lo había acompañado a Yaguajay.

Abandonó la Finca Guabina y a partir de entonces, trabajó en distintos lugares alrededor de Yaguajay, entre otros, en el conocido sitio de Vitoriano, donde torcía tabacos que luego vendía al precio de dos centavos. En estas labores se mantuvo algún tiempo, quizás hasta 1939-40.

Enviaba trabajos para algunas publicaciones que existían por aquella época.

Se encontraba el poeta cortando caña para el Central Vitoria (luego Simón Bolívar). Una mañana, alrededor de las once y treinta, se personaron en el batey del central, dos hombres que dijeron ser periodistas y que tenían interés por hablar con José Ramón Mariscal, El Solitario del Llano.

El primer contacto de aquellos reporteros fue con Bernardo Yunes poeta y obrero del central y además amigo de Mariscal. Bernardo Amador les sugirió que esperaran por Mariscal porque seguramente estaba por llegar al comedor. Antes que Mariscal asomara por entre las cañas el amigo Bernardo Amador lo esperó adelantándose, y cuando el Solitario salió Bernardo le dijo:

¿Oye poeta, tú ves