La Vida Resucitada Debajo De Las Vendas: Experimentar La Libertad Del Pecado Y Restauración En Cristo [Fuiste Resucitado A Una Nueva Vida]

Por Javi Martínez

¿Alguna vez te has preguntado por qué Dios no hace todo instantáneamente en nuestras vidas?

La vida debajo de las vendas es un poderoso libro cristiano que te desafía a reflexionar sobre el papel que tenemos en el proceso de sanación y transformación en nuestras vidas y la de los demás.

 

Es una invitación a aceptar la intervención de otros en nuestra vida y a reflexionar sobre el rol de la iglesia en la libertad del pecado personal y la restauración.

Fuiste resucitado a una nueva vida.

 

• Comprende el papel que juegan los demás en el proceso de Dios.
• Camina hacia la restauración y experimenta la gracia en el proceso de restauración.
• Deja la vieja vida y vive plenamente en Cristo, abrazando la vida nueva.
• Participa activamente en su obra, transfórmate en un faro de esperanza y amor.
• Sé testigo del poder de Dios al servir a otros.
• Aprende a celebrar tus logros y aprendizajes en el camino de la fe.
• Descubre cómo la iglesia es la respuesta divina y cómo encontrar el equilibrio entre verdad y misericordia.
• Deja atrás la condena y celebra la nueva vida en Dios con liderazgo transformador y restaurador.
• Entiende la importancia de la ética de guardar lo privado y cultiva relaciones de confianza y empatía.
• Aprende a dejar de lado el juicio y abraza la misión de restauración en comunidad.
• Encuentra tu lugar en el proceso de restauración de los hermanos.

Descubre junto al autor que, debajo de las vendas de nuestras luchas interiores y heridas, hay una vida resucitada esperando ser liberada.

 

Adéntrate en La vida debajo de las vendas y transforma tu manera de concebir tu vida en Dios.

• Idioma: Español
• Editorial: Javi Martínez
• Fecha de lanzamiento: 16 abr 2023
• ISBN: 9798215824788

Vista previa del libro

Capítulo 1:

La obra de Dios en nuestras vidas

Confiando en su plan y siendo sus obreros

Me alegra mucho que hayas tomado el tiempo para leer este texto y reflexionar sobre el poder y la obra de Dios en nuestras vidas. Como bien sabes, él es omnipotente y puede hacer todo lo que quiera en un instante. Pero a menudo nos encontramos en medio de un proceso en el que hay ciertas tareas inconclusas, y es ahí donde Dios nos envuelve y utiliza a otras personas para terminar su obra.

Dios es el creador del universo y de todo lo que hay en él, incluyéndonos a nosotros. Él nos da la vida y la sanidad interior, pero a menudo utiliza a sus obreros para completar la tarea que comenzó en nuestras vidas, y esto es algo que se puede ver claramente en el relato de la resurrección de Lázaro.

Lázaro había muerto y había sido enterrado en una tumba, pero cuando Jesús llegó, lo llamó a salir de ella y a volver a la vida. Aunque Jesús tenía el poder para resucitar a su amigo en un instante, decidió involucrar a las personas a su alrededor para terminar su obra.

Primero, les pidió a Marta y a María, las hermanas de Lázaro, que removieran la piedra de la entrada de la tumba. Luego, pidió a los discípulos que desataran las vendas que envolvían a Lázaro. Jesús podría haber hecho todo esto él mismo, pero decidió involucrar a las personas a su alrededor para que fueran parte de la tarea que estaba realizando.

¿Por qué haría eso Dios? ¿Por qué nos involucraría en su obra en lugar de hacerlo todo él mismo? La respuesta es simple: porque nos ama y quiere que seamos parte de lo que está haciendo en la tierra. Él nos da la oportunidad de ser sus obreros, de ser parte de algo más grande que nosotros mismos; y, al hacerlo, nos da la oportunidad de crecer y de ser transformados por su amor y su poder.

Entonces, ¿qué podemos aprender de este relato?, y ¿cómo podemos aplicarlo? En primer lugar, podemos aprender que Dios está involucrado en nuestras vidas, en nuestra transformación, y que a menudo utiliza a las personas que están alrededor de nosotros para ayudarnos en ese proceso. Así que, no debemos tener miedo de pedir ayuda y apoyo cuando lo necesitemos.

En segundo lugar, podemos aprender que Dios nos da la oportunidad de ser sus obreros y de ser parte de su obra en la tierra. Así que, debemos estar atentos a las oportunidades que se nos presentan para servir y amar a los demás, sabiendo que estamos haciendo la obra de Dios.

Finalmente, podemos aprender que Dios siempre tiene un propósito y un plan para nuestras vidas, y que a menudo ese plan incluye un proceso en el que debemos confiar en su amor y su sabiduría. Aunque puede haber tareas inconclusas y situaciones difíciles, podemos estar seguros de que Dios está trabajando en y a través de nosotros, para completar lo que comenzó.

Así que, te animo a confiar en el poder y la obra de Dios en tu vida, sabiendo que él siempre está presente y trabajando en cada uno de sus hijos. No importa cuán difícil sea la situación en la que te encuentres, recuerda que el Señor tiene un propósito y un plan para ti, y que está utilizando a las personas a tu alrededor para completar esa obra.

Además, recuerda que tú también puedes ser un obrero de Dios. Hay tantas oportunidades para servir a los demás y ser parte de su obra en la tierra. Ya sea con una sonrisa amable, una palabra de aliento o una acción de servicio, cada pequeña acción que hacemos puede ser parte de la obra de Dios.

Por eso te animo a confiar en él, a confiar en su amor y en su plan soberano. A medida que lo haces, sigue adelante y sé un obrero de su obra. Descubre las oportunidades que tienes para servir a los demás y amarlos, sabiendo que cada pequeña acción que haces es parte de lo que el Señor quiere hacer en la tierra.

La realidad es que Dios es capaz de hacer su labor en un instante, pero a menudo nos envuelve en un proceso en el que utiliza a otras personas para terminarla. Así que, confía en él, confía en su amor y en su plan para ti; sé parte de su obra en la tierra. ¡Que Dios te bendiga en tu camino!

●  Dios utiliza a otras personas para completar su obra en nosotros.

●  Jesús involucra a las personas a su alrededor en la resurrección de Lázaro, demostrando que quiere que seamos parte de su obra.

●  A pesar de las dificultades y tareas inconclusas, debemos confiar en el amor, la sabiduría y el propósito de Dios para nuestras vidas.

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Padre, nos maravillamos de cómo trabajas en nuestras vidas y que lo haces a menudo a través de las personas que nos rodean. Que siempre recordemos que estás moldeándonos y transformándonos con tu amor.

Ayúdanos a ser pacientes y a comprender que a veces nos involucras en un proceso de crecimiento y transformación. Danos la fuerza y la valentía para seguir adelante en la dirección que tú nos guías. En el nombre de Jesús, te pedimos estas cosas. Amén.

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Preguntas de reflexión

¿De qué manera Dios ha estado presente en mi vida, incluso en momentos difíciles?

¿Cuándo fue la última vez que pedí ayuda a alguien para enfrentar una situación difícil? ¿Cómo fue esa experiencia?

¿Cómo puedo ser más consciente de las personas a mi alrededor que podrían estar siendo utilizadas por Dios para apoyarme en mi proceso de crecimiento y transformación?

¿Cómo ha trabajado Dios a través de otras personas en mi vida? ¿Puedo identificar momentos específicos en los que he sido bendecido por la ayuda de otros?

¿Qué temores o inseguridades necesito superar para permitirme recibir ayuda de los demás y también para ofrecerla?

¿Cuál es mi actitud hacia el proceso de crecimiento y transformación que Dios tiene para mí? ¿Soy paciente y confiado, o impaciente y ansioso?

¿Cómo puedo identificar las áreas en mi vida donde Dios aún tiene trabajo por hacer, y estar dispuesto a permitir que él actúe en mí y a través de mí?

Capítulo 2:

Confía en el plan de Dios, aunque no siempre lo entiendas

Los amigos y parientes de Lázaro estaban enojados con Jesús. La gente lo cuestionó: él podría haberlo sanado.

A menudo, cuando enfrentamos situaciones difíciles en nuestra vida, tendemos a preguntarnos por qué Dios no actúa como pensamos que debería hacerlo.