Descubre millones de libros electrónicos, audiolibros y mucho más con una prueba gratuita

Solo $11.99/mes después de la prueba. Puedes cancelar en cualquier momento.

La estrategia del bienestar
La estrategia del bienestar
La estrategia del bienestar
Libro electrónico644 páginas6 horas

La estrategia del bienestar

Calificación: 0 de 5 estrellas

()

Leer la vista previa

Información de este libro electrónico

Conoce y fortalece tus zonas emocionales, controla la inflamación de tu cuerpo y conquista un alto grado de bienestar; conecta tu sistema emocional con tu cuerpo.

La estrategia del bienestar te permite conocer cómo estás manejando tu sistema emocional, si estás utilizando estrategias que te mantienen en un estado defensivo de sufrimiento, o si por el contrario estás desarrollando estrategias de crecimiento y bienestar. Cuando descubres cómo está tu vida emocional, puedes tomar la decisión de realizar cambios para expresar todas tus fortalezas, transformar tu vida, alcanzar tu mejor desempeño y conectarte con la vida que realmente quieres vivir.

Al fluir en tu sistema emocional, disminuyes el estado de inflamación de tu cuerpo y tus células salen de ambientes tóxicos.

En estas páginas encontrarás cómo alinear tu vida emocional con una buena nutrición de diseño, una mejor composición de tu cuerpo y el desarrollo de objetivos claros de éxito y liderazgo. Es una guía para relacionarte mejor y tener una experiencia de vida fluyendo en el bienestar.

Conquista tu libertad emocional paso a paso con el programa de las siete zonas, tus células te lo agradecerán.

IdiomaEspañol
EditorialCaligrama
Fecha de lanzamiento24 jun 2020
ISBN9788418104688
La estrategia del bienestar
Autor

Carlos Alberto Camacho Palacios

Carlos Alberto Camacho es un médico especialista en cirugía gastrointestinal y endoscopia digestiva, además, es coach certificado, experto en psicología, nutrición y obesidad. Con una amplia trayectoria como profesor de Medicina, comprometido con el bienestar integral de sus pacientes. Miembro de la Sociedad Colombiana de Gastroenterología.

Relacionado con La estrategia del bienestar

Libros electrónicos relacionados

Medicina para usted

Ver más

Artículos relacionados

Comentarios para La estrategia del bienestar

Calificación: 0 de 5 estrellas
0 calificaciones

0 clasificaciones0 comentarios

¿Qué te pareció?

Toca para calificar

Los comentarios deben tener al menos 10 palabras

    Vista previa del libro

    La estrategia del bienestar - Carlos Alberto Camacho Palacios

    Índice

    Introducción 11

    Capítulo uno. Tu sistema emocional 17

    Capítulo dos. Cómo te relacionas con tus zonas emocionales 39

    2.1. Nuestro núcleo emocional esencial 43

    2.2. La zona emocional de supervivencia 45

    2.2.1. Nivel de neuroprogramación 45

    2.2.2. Nivel de neurorreacción 60

    Capítulo tres. Zona de resistencia al cambio y de neurotransformación 95

    3.1. Diez herramientas para el cambio 101

    3.2. Cómo desbloquear tus estrategias emocionales defensivas 114

    3.3. Conocer la estrategia del dolor 116

    3.4. Puertas de entrada a la estrategia defensiva 125

    3.5. Sanar el niño herido, reconfigurar la plataforma emocional 151

    3.6. El perdón como fuente liberadora de la zona del bloqueo emocional 157

    3.7. Desafiar tu diálogo interno autodestructivo 164

    Capítulo cuatro. Zona de crecimiento emocional 167

    4.1. Nivel de neurodiseño dirigido a un objetivo 172

    4.2. Nivel de neurobienestar 186

    4.3. Trece ejercicios para tener experiencias emocionales más positivas 192

    4.4. Ejercita el optimismo 194

    4.5. Siete ejercicios para aumentar el estado de gratitud 195

    Capítulo cinco. Integra tu sistema emocional 199

    Zona de neurointegración 201

    5.1. Cómo puedes fluir en tu sistema emocional 202

    Zona de neuroconexión 213

    5.2. Ejercicios para definir tu propósito 216

    5.2.2. Alinea tus valores con los de tu familia y los de tu organización 219

    Capítulo seis. Redes cerebrales donde se manifiestan las zonas emocionales 227

    6.1. Algunas malas costumbres de nuestro cerebro 233

    Capítulo siete. Zona 7. Zona corporal. Cómo se inflama nuestro cuerpo 235

    7.1. La composición de los alimentos modernos es una bomba inflamatoria 251

    7.2. Diseñar el tipo de las bacterias intestinales es fuente de bienestar 254

    7.3. Las bacterias intestinales modulan nuestro organismo 257

    7.4. Bacterias sanas en el intestino y el consumo de fibra 260

    7.5. La dieta modula el tipo de bacterias intestinales 262

    7.6. Las bacterias intestinales afectan tu metabolismo y tu cerebro 264

    Capítulo ocho. El impacto del malestar en nuestro cuerpo 269

    8.1. Cuando el sistema nervioso se pone hipersensible 272

    8.1.1. Fatiga crónica 272

    8.1.2. Fibromialgia 273

    8.1.3. Síndrome de intestino irritable 275

    8.1.4. Migraña 286

    8.1.5. Malestar en la boca del estómago y llenura, dispepsia 288

    Capítulo nueve. Cuando se altera el metabolismo 289

    9.1. Obesidad 291

    9.2. Alimentos adictivos 302

    9.3. No dejes que se te acumule grasa en el hígado 313

    9.4. Qué es lo que te inflama el estómago. Gastritis 318

    9.5. Sensibilidad al gluten/sensibilidad al trigo 326

    9.6. Artritis 329

    9.7. La inflamación del colon 331

    Capítulo diez. El cerebro también se inflama 333

    10.1. Qué puede ayudar en el alzhéimer 338

    Capítulo once. El cáncer, las células sin control 341

    Capítulo doce. Activa tu metabolismo 349

    Capítulo trece. Nutrición de diseño en el programa de las 7 zonas 365

    13.1. Dieta antiinflamatoria 376

    13.2. Los colores que te cuidan 379

    13.3. Qué tipo de grasa podemos consumir 384

    13.4. Cómo podemos controlar el sobrepeso y la obesidad con el programa de las 7 zonas (7Z) 398

    13.5. Doce pasos para un resultado efectivo en el manejo de sobrepeso y obesidad 405

    13.6. Dieta anticáncer 412

    13.7. Quince consejos para prevenir el cáncer 415

    13.8. Lo bueno de la fibra y el calcio 420

    13.9. Dieta antidepresión 423

    13.10. Dieta antidiabetes 425

    13.11. Dieta para la enfermedad cardiaca 429

    10.12. Los diez pasos para prevenir la enfermedad del corazón 437

    13.13. Dieta en la enfermedad autoinmune/artritis 440

    13.14. Dieta en colitis, enfermedad inflamatoria intestinal 444

    13.15. Pasos en el control del síndrome de intestino irritable (SII) 447

    13.16. Dieta en la gastritis 457

    13.17. Prebióticos, alimentos para nuestras bacterias sanas 459

    13.18. Probióticos, bacterias sanas que mejoran la salud 460

    Capítulo catorce. El programa de las 7 zonas (7Z) 463

    Glosario 481

    Referencias 487

    Libros y notas 519

    Introducción

    Cuando intentas conectarte con un proceso que te lleve a estar en un ambiente interior de bienestar necesitas que estén coordinados todos tus sistemas, tanto tu sistema emocional como los otros sistemas de tu cuerpo, en uno solo y a tu favor, que se comuniquen en un mismo lenguaje, en un estado de neurointegración. Este se nutre de diferentes elementos que van desde el amor, el autoconocimiento, el autodesarrollo, conectarte con tus fortalezas en una estrategia de bienestar, una nutrición de diseño de origen natural y la activación de tu metabolismo.

    ¿Cuáles ingredientes estás usando para nutrir tu cuerpo, tu corazón, tu alma?

    Nuestro cerebro está diseñado evolutivamente para darle prioridad a desarrollar múltiples estrategias de supervivencia más que de bienestar, por tanto, hay una gran resistencia a salir de un estado en que te sientes amenazado. Tus emociones y tu cuerpo son un solo sistema en continua comunicación y retroalimentación. Tus emociones se expresan en todas tus células creando un ambiente que puede ser tóxico o de bienestar. En el primero, de persistir, activamos todos los sistemas de defensa como son la inflamación y la hipersensibilidad del sistema nervioso, que se asocian a la preferencia por una alimentación de rápida recompensa que desestabiliza el metabolismo y la composición corporal, lo que termina en la aparición de síntomas y de enfermedad, donde se expresa el lenguaje del dolor y del sufrimiento. En el segundo, el de bienestar, es donde podemos evolucionar en nuestros niveles de consciencia, abrimos un espacio de sensación de armonía interior, permitimos que haya una conexión vibrante entre la emoción creativa y nuestro cuerpo. El resultado es que aprendes a fluir en todo tu sistema alineando e integrando tus valores con tus objetivos, lo que quieres y te gusta hacer en la vida y tu propósito en consonancia con tu estado de paz interior, una mejor conectividad de tu cerebro.

    Vamos aprendiendo diferentes estrategias emocionales desde el nacimiento que siempre están tratando de resolver nuestras necesidades fundamentales, es decir, sentirnos reconocidos, seguros y amados, pero también podemos desarrollar otras, con las que expresamos nuestras fortalezas dirigidas hacia nuestros objetivos, el disfrute y propósito de vida. Nuestro cerebro quiere sentir, ser reconocido como una identidad y lo hace según la zona en que se encuentre o desarrolle. En la zona de supervivencia nos conectamos con el lenguaje y estrategias del dolor, la agresión y el miedo; en la zona de crecimiento con el lenguaje y estrategias de bienestar, desafío, intuición, desarrollo de nuestras fortalezas, la creatividad y el amor. Toda una red interconectada con tu mundo interior y exterior. Puedes decidir libremente entrenar tu sistema emocional de una manera más integradora e identificarte con él —programa de 7 zonas—.

    Tenemos la capacidad de renovar y reestructurar nuestro cerebro a través de lo que pensamos y experimentamos —la neuroplasticidad es la capacidad de renovar nuestro cableado cerebral—, pero es una labor de todos los días.

    Nuestro cuerpo se puede relacionar con el lenguaje del dolor, que se expresa incluso a nivel celular como inflamación —estrés celular—, y también con el lenguaje de nuestras fortalezas —bienestar celular—. Nuestra comunicación interna la hace nuestro cerebro, no solo con todas nuestras células, sino también con la microbiota y los nutrientes.

    Estar en la zona emocional de supervivencia obstinadamente es dejar que pensamientos distorsionados, emociones defensivas y conductas inadecuadas controlen tu vida, lo que te lleva no solo al sufrimiento, sino además a desarrollar una cascada de eventos inflamatorios en tu cuerpo, es decir, permanecer en esta zona de confort disfuncional va a desencadenar una cascada inflamatoria en tus diferentes órganos.

    Realizamos una encuesta en cincuenta y un pacientes con síntomas psicosomáticos —sobrepeso, gastritis, intestino irritable…— entre los veintitrés y los sesenta y dos años, la mayoría mujeres (73 %), sobre sus emociones, relaciones y tolerancia a los alimentos cuyos resultados aparecen en los diferentes capítulos del libro.

    Veremos cómo podemos potenciar nuestro sistema emocional con el programa de 7 zonas (7Z), con el que haremos consciente este sistema que se integra en seis zonas emocionales y cómo es el impacto que estas tienen en la zona corporal —órganos de nuestro cuerpo, la séptima zona— donde se establece una comunicación con el tipo de bacterias intestinales, la clase de nutrición que se elige, el tipo de activación del metabolismo y con el nivel de inflamación en los diferentes tejidos.

    El programa de las 7 zonas (7Z) lo que busca es optimizar todo tu sistema, fluir en el sistema emocional, controlar la inflamación, mejorar la función celular, aplicar una nutrición de diseño y obtener los beneficios de una composición corporal equilibrada, además de balancear la microbiota intestinal. Cuando esto se logra se obtiene un alto desempeño emocional y corporal.

    En las zonas emocionales se desarrollan tres tipos de estrategias: defensiva, creativa y de bienestar. Cada una se va a expresar de manera diferente en nuestro cuerpo. ¿Qué estrategia emocional estás aplicando en tu vida que te está causando malestar, dolor e inflamación? ¿Estás atrapado en alguna estrategia defensiva donde expresas dolor, rabia, ansiedad o tristeza que te afecta a ti y a los demás? ¿Estás bloqueado en un conflicto interno que te agota y te impide vivir en pleno bienestar?

    El libro está dividido en tres partes. La primera parte explica el programa de zonas con un modelo teórico en el que se puede estructurar el sistema emocional —las primeras 6 zonas—, que nos permite conocerlo, hacerlo consciente, transformarlo y fluir en él (capítulos 1-5). La segunda parte explica cómo se relaciona el bloqueo de este sistema emocional con la aparición de diferentes expresiones en nuestro cuerpo —séptima zona— como es el de la cascada de la inflamación persistente —gastritis, artritis, depresión—, la hipersensibilidad del sistema nervioso —migraña, fibromialgia, síndrome de intestino irritable—, la alteración del metabolismo —obesidad, diabetes, hígado graso—, la enfermedad neurodegenerativa —Alzheimer— y la alteración de la proliferación celular —cáncer—, que son diferentes manifestaciones de un sistema adaptado al dolor (capítulos 7-11).

    Una dieta de tipo occidental —con abúndate grasa, carbohidratos refinados, azúcar y alta en calorías— y el estrés persistente causan cambios en las bacterias e inflamación intestinal con daño en el sistema inmune y aparición de las enfermedades mencionadas anteriormente en personas genéticamente susceptibles. El tipo de bacterias que cultivamos en el intestino regulan nuestro estado de ánimo y hasta el apetito.

    En la tercera parte encuentras la manera de cómo puedes aprender a buscar los mejores ingredientes para fluir en tu sistema emocional, activar el metabolismo, el control de la inflamación y conocer la dieta de las 7 zonas —de diseño y de tipo antinflamatoria—, con diferentes consejos para conectarte con el bienestar, prevenir las enfermedades y manejar mejor las que ya están presentes (capítulos 12-13), además de un resumen de cómo poner en práctica el programa de las 7 zonas en el capítulo 14.

    Puedes alinear tu cuerpo con la zona de confort en el bienestar, ya verás cómo hacerlo.

    Al comienzo de cada tema encuentras un recuadro llamado los puntos clave, allí hay un pequeño resumen que siempre es bueno leer. Si algún tema no es de tu interés, puedes leer solo los puntos clave. Te recomiendo que leas los primeros siete capítulos y luego puedes profundizar en tus temas de preferencia, pero siempre teniendo en cuenta los puntos clave.

    Crea tu propio mapa mental que te lleve al bienestar y al éxito con las pautas del programa de las 7 zonas.

    En la bibliografía aparecen los libros con el sistema autor-fecha que corresponden al listado en orden alfabético por el autor principal. Los artículos científicos están citados en sistema numérico, son los pequeños números entre paréntesis que van apareciendo en el texto y que corresponden al listado al final del libro.

    Capítulo uno

    Tu sistema emocional

    Puntos clave

    •El programa de 7 zonas (7Z) te permite fluir en tu sistema emocional y acercarte a vivir en un estado de bienestar.

    •Si vives en un continuo malestar esto impacta tu cuerpo como inflamación.

    •Los problemas digestivos empiezan a resolverse trabajando en la paz interior y no en el tubo digestivo.

    •Tienes seis zonas emocionales, bloquearte en algunas zonas es causa de dolor, inflamación y sufrimiento, en cambio, vibrar en todo tu sistema de zonas es aprender a fluir en todas ellas, conectándote con tu bienestar.

    •Las zonas emocionales están interconectadas y se expresan en los órganos del cuerpo —zona 7—.

    •Cuando sincronizas tu «sistema emocional», los demás sistemas entran en armonía y congruencia con el bienestar.

    •Tú puedes crear tu propio ambiente emocional que facilite la prevención y curación de las enfermedades. Eres el arquitecto de tus propios circuitos emocionales.

    •La zona de supervivencia, con sus estrategias defensivas, es un circuito cerebral que nos mantiene alerta ante cualquier amenaza, pero mantenerla activa nos enferma, nos hace más vulnerables a la depresión y a la ansiedad.

    •Podemos diseñar dos estrategias que nos acercan a nuestro más alto desempeño: la creativa y la de bienestar.

    •En la medida que te conectas con cada zona emocional y le das un espacio en tu vida desarrollas otros niveles de consciencia y tomas mejores decisiones.

    •El objetivo final de este programa de 7Z es que conozcas tu propio sistema, el modelo emocional que por ahora estás poniendo en práctica y que, si no te sientes bien con él y te produce síntomas, lo puedas transformar.

    El nutriente más importante del sistema emocional, sin lugar a duda, es el amor.

    Desde que nacemos se empiezan a mezclar las emociones con los alimentos de una manera muy íntima, el apetito se confunde entre las necesidades de amor y de energía, entre aliviar la ansiedad, el desamor o el estómago. Cuando se nos coarta la expresión aparecen nudos en la garganta; si estamos rechazando algo o a alguien, el alimento se devuelve; cuando no podemos digerir la vida, los alimentos no pasan; cuando hay tensión permanente, el intestino se inflama, deja de funcionar. La comida también es un momento de fantasía, de conexión con la tierra, entre el sabor y los recuerdos, una explosión sensorial, un momento de escape.

    No hay alquimia más bella que la que se experimenta en la cocina.

    Sara, una profesora universitaria de treinta y cinco años, consultaba permanentemente por un dolor en la parte alta del estómago. Había sido sometida a todo de tipo de exámenes endoscópicos y tomográficos sin mostrar la causa del dolor. En las últimas consultas, además, presentaba distensión abdominal y no toleraba ningún alimento. «No tolero ni el agua y nadie me dice qué tengo». Al mismo tiempo que daba clases estaba realizando un posgrado, se exigía bastante, no tenía mucho tiempo para ella, se sentía sola y se levantaba cada día con la sensación de no haber dormido lo suficiente, agotada, sin energía.

    Casos como el de Sara son un patrón que se repite en mi consulta diariamente. Vamos a ver cómo estos síntomas son parte de una estrategia, una expresión de un bloqueo emocional que al no ser liberado va a permanecer con la persona toda la vida. Siempre me han preguntado los pacientes: «¿La gastritis se cura?, ¿cuál es el mejor medicamento?». Lo que les digo es que el mejor tratamiento viene inicialmente desde el corazón, de desarrollar un sistema emocional que no necesite expresar dolor.

    Sara estuvo de acuerdo en conocer cómo era su sistema emocional, descubrió cómo sus síntomas eran la expresión de una estrategia emocional nociva en su cuerpo y cómo podía liberarse de ella. Lo logró haciendo algunos cambios en su vida, desestructurando esta estrategia e integrando todo su sistema emocional, siguiendo los pasos del programa de las 7 zonas, entrando en su zona de bienestar.

    Adela es una contadora de cuarenta y cinco años, presentaba distensión abdominal en horas de la tarde en los últimos años con dolor en algunas zonas del abdomen, además de dolores en el cuello, en la zona lumbar, en las piernas y crisis de migraña. Se le habían realizado también múltiples estudios, incluida una endoscopía, pero solo aparecía «gastritis» y el tratamiento no le funcionaba. Hace unos años dejó su trabajo en una compañía metalúrgica para dedicarse a su hogar y cuidar de sus hijos. Refiere algo de ansiedad y tristeza por haber perdido el buen ambiente de su trabajo y depender económicamente de su esposo, se ha dado cuenta de que esta sensación la compensa con un alto consumo de carbohidratos, lo que la ha llevado a sentirse peor por su aumento de peso. En el caso de Adela estos síntomas provenían de un sistema emocional en el que se exigía a cumplir con unas reglas muy rígidas de comportamiento, de una alta presión emocional. «Si no soy la madre perfecta, mis hijos serán un fracaso», este tipo de pensamientos controlaban su vida. Pudo empezar a mejorar de sus síntomas solo al sentir que fluía mejor en su sistema emocional, al desarrollar una estrategia de bienestar y concentrarse más en disfrutar de la vida, con mayor flexibilidad y libertad emocional —programa 7Z—.

    Claudia es una persona de cuarenta y dos años dedicada a su hogar y madre de dos hijos. Desde hace tres meses presenta dolor abdominal en la parte alta derecha del abdomen, por lo que consulta repetidamente para que le descarten si tiene algo grave. El dolor la mantiene en un estado de ansiedad permanente al no saber de qué se trata. Su dolor era la manifestación de una estrategia emocional defensiva, la del miedo a enfermar, esta emoción controlaba su vida; en la medida en que pudo desarrollar otros espacios emocionales con más seguridad, dejó de focalizar el miedo en su cuerpo.

    Cuando no te sientes bien y no estás vibrando con la armonía de tu corazón, sientes que estás viviendo en un continuo malestar, es hora de buscar, como en el caso de Sara, Adela y Claudia, una solución que puede empezar por conocer tu sistema emocional y su relación con el de tu familia y cómo lo puedes llevar a otro nivel, a un nivel de alto desempeño que no necesite expresar estos síntomas.

    Mostrarles cuáles son las estrategias de sus zonas emocionales o, mejor, que puedan descubrir cómo las están utilizando, cuál es su modelo mental y cómo están impactando con él en su cuerpo —zona corporal— fue fundamental en su recuperación. Que puedan construir también un modelo emocional nuevo con zonas emocionales que les brinden más equilibrio y bienestar.

    Los problemas digestivos empiezan a resolverse trabajando en la paz interior y no en el tubo digestivo, pero ello necesita un entrenamiento constante.

    El programa de las 7 zonas permite no solo mejorar tu sistema emocional y el de tu familia, sino ser la base para construir empresas saludables, prevenir y mejorar trastornos como el intestino irritable, la depresión, la gastritis y el cáncer. Acompañarte en un viaje hacia tu bienestar emocional y celular.

    Tu sistema de 7 zonas:

    Todo el sistema comprende seis zonas emocionales —redes cerebrales— y la zona corporal —esta última con sus sistemas gastronutricional, endocrino, metabólico, inmune y cardiovascular—. Como vamos a ver, el bloquearte en algunas zonas es causa de dolor, inflamación y sufrimiento, en cambio, vibrar en todo tu sistema de zonas es aprender a fluir en todas ellas, conectándote con tu bienestar.

    Tu cuerpo tiene varios sistemas interconectados con su lenguaje propio, las células se están comunicando de manera permanente y depende del ambiente interno que hayas creado, este lenguaje se modifica expresándose en un estado de sufrimiento o de bienestar. La mala comunicación lleva a un ambiente de enfermedad y destrucción celular; en este capítulo vamos a conocer cómo es este lenguaje para luego aprender a optimizar todo nuestro sistema, dejarlo fluir y poder alcanzar un estado de máximo bienestar.¹

    Tu sistema nervioso es una gran red con la que te interconectas y comunicas con tu medio ambiente interno —intestino, tus órganos…— y externo —con las bacterias, con los nutrientes, con los demás—. Este nos permite desarrollar un sistema emocional con múltiples alternativas, amplio y flexible.

    El objetivo principal del programa de las 7 zonas es hacer consciente cada uno de los componentes del sistema emocional y que te puedas conectar cuando quieras con tus estrategias defensivas, creativas y de bienestar.

    Cuando sincronizas tu «sistema emocional», los demás sistemas entran en armonía y congruencia con el bienestar.

    El enfoque básico de este modelo cumple con la concepción de Von Bertalanffy, en su libro Teoría general de sistemas (1969), donde el sistema es un conjunto organizado de partes interdependientes que interactúan entre sí. Tiene la capacidad de mantenerse organizado, equilibrado —homeostasis—, aunque sea en forma disfuncional, y cumple con el principio de retroalimentación, donde cada causa se convierte en efecto y este efecto afecta la causa. Hay una circularidad constante en este sistema entre efectos y causas.

    Hay una inevitable circularidad de las interacciones. Un cambio en alguna parte del sistema provoca un cambio en las demás y en todo el sistema.

    Nuestro conocimiento ha de interpretarse no como imagen del mundo real, sino tan solo como una llave que nos abre caminos posibles (Glaserfeld, 2005. Mencionado en el libro Práctica de la psicoterapia, de Fernández Liria, A.).

    Si crees que solo hay una verdad en un contexto determinado esto te impide tomar una multitud de opciones que están más cerca de la realidad.

    Tú puedes crear tu propio ambiente emocional que facilite la prevención y curación de las enfermedades. Eres el arquitecto de tus propios circuitos emocionales. Tú puedes rediseñar tu sistema emocional, el de tu familia, el de tu empresa. Tomar el poder emocional. Para que logres un estado de bienestar debes tener libertad emocional y eso depende de la manera de cómo te comuniques contigo mismo.

    Como eres el único responsable de crear tu propio ambiente interno, te voy a mostrar cómo lo puedes lograr de una forma que sea favorable para ti —programa de las 7 zonas, 7Z—.

    Si realizas una intervención en tus emociones, tu nutrición y tu metabolismo puedes llegar a un estado de alto desempeño y bienestar y desarrollar una experiencia diferente de conexión contigo, contrarrestando los efectos de pensamientos negativos propios y los que escuchas de personas tóxicas que pueden estar a tu alrededor, tratando de vaciar todo su malestar emocional en ti.

    Descubres el efecto sanador de conectarte con amor a ti mismo, con el amor y la pasión por lo que quieres lograr y con el amor y servicio a los demás y a tu entorno. Si exploras en lo más profundo de tu ser, vas a encontrar una fuente de amor inagotable, es tu esencia, lista para entregar lo mejor de ti mismo. Desde allí tu cuerpo vibra en un estado de plenitud y bienestar. Si estás desconectado de tu esencia, tu cuerpo vibra en un estado de inflamación, dolor y desgaste energético.

    Recuerda que el mejor analgésico contra el dolor emocional es la reconexión con el amor interior. Entonces, sincronízate con la música de tu corazón, vuelve a danzar con tu propia vibración. La fuerza del amor se expresa en todo tu cuerpo a través del sistema nervioso, cuando esta se pierde en la zona de supervivencia —zona de expresión defensiva, que ya explicaré—, se expresa entonces la fuerza del dolor y del miedo, plasmada con multitud de lenguajes en tu cuerpo.

    Si consigues tus metas, serás exitoso, pero, si fluyes en tu sistema emocional, serás feliz.

    En este programa (7Z) tienes primero que reconocer cuáles son tus zonas emocionales o neuroemocionales.

    Para poder intervenir en ellas las vamos a visualizar en una estructura que comprende:

    1.Zona del núcleo emocional: Tu esencia. Donde están tus valores esenciales como el amor, la bondad o la justicia. Tú energía vital, todo tu potencial. Esta zona se desconecta del sistema en la zona de supervivencia, se reconecta en la zona de neurotransformación y permanece conectada con la zona de crecimiento.

    2.Zona de supervivencia: Esta zona contiene los programas o circuitos cerebrales emocionales de donde se desprenden conductas que te permiten sobrevivir. Tiene dos niveles.

    •Nivel de neuroprogramación: Es la carga emocional hereditaria y aprendida, donde están tus necesidades emocionales no satisfechas, la autocalificación de tus creencias emocionales fundamentales, cuánto te valoras, tu grado de confianza y seguridad, de amor a ti mismo y de aceptación de tu imagen. Es allí donde construyes tu imagen —tu yo interior— y la comparas con respecto a la imagen que consideras como ideal. En esta programación puede haber calificaciones bajas de tu yo interior que tratarás de ocultar a los demás. Es la calificación de tu autoestima. Cómo procesas la información de tu yo interior.

    •Nivel de neurorreacción: Desde aquí expresas tus emociones de manera defensiva. Es cómo expresas el malestar y el dolor por el vacío de tus necesidades emocionales no satisfechas —del nivel anterior—. Lo haces a través de estrategias defensivas de comportamiento. Conectado con el contenido de tus estrategias, te identificas con ellas. Contenidos de defensa, de escape o de agresión hacia ti mismo, hacia los demás o hacia el mundo. Expresas constantemente estrategias de conflicto y no eres consciente de ello. La persona herida puede agredir fácilmente a otros o a ella misma.

    Es el nivel al que más nos apegamos, así nos haga sufrir. Se produce una adicción a las emociones defensivas o reactivas —ira, miedo, tristeza—. Proyectas desde aquí una imagen irreal que quieres que los demás vean —imagen reactiva-yo defensivo—, una imagen que no es la tuya y que tiene un costo mantener. Nuestro cerebro está más listo para ver las amenazas —a ver lo negativo, a ser catastrofista y a exagerar lo que nos pasa—, pero es mejor acostumbrase a pensar en el desenlace más probable, no en el peor. Construimos nuestra realidad en cada una de las zonas donde creemos estarnos moviendo y nos identificamos con ella. Si la persona no está equilibrada en su sistema neuroemocional, no podrá generar una identidad y creencias potenciadoras, lo que se reflejará en una conducta inapropiada —incapacidad de actuar, síntomas o enfermedad—, un desequilibrio neuroinmunoendocrino —alteración metabólica— que causará una mala comunicación y expresión de malestar corporal, por ejemplo, colon irritable, obesidad o migraña. En este nivel es donde aparecen las enfermedades psicosomáticas. Es donde la emoción se toma el poder.

    3.Zona de neurotransformación: Desde este lugar somos conscientes de nuestros problemas emocionales generados en la zona de supervivencia; es también la zona de resistencia al cambio, donde te resistes a reconocer que estás atrapado en la zona de supervivencia, en tus vacíos emocionales, que creaste estrategias de comportamiento para disimular tu dolor, pero también es una zona de transformación, de reparación y aprendizaje. Donde logras desidentificarte y tomar distancia del contenido conflictivo de tus estrategias defensivas. Vas desde la resistencia al cambio al aprendizaje. Es donde puedes editar —transformar— los niveles de la zona de supervivencia a tu favor. ¿Qué estrategia defensiva te está haciendo daño? ¿Qué puedes hacer para mejorar tu yo interior? ¿Qué necesidad de tu yo interior no está siendo satisfecha?

    Podemos hacer consciente la información de nuestras estrategias personales (Freud), familiares (Szondi) y colectivas (Jung).

    Solo desde esta zona tienes la flexibilidad para hacer cambios.

    4.Zona de crecimiento: En esta zona tienes la oportunidad de desarrollar objetivos importantes para tu vida y conectarte con el bienestar. Tiene dos niveles.

    •Nivel de neurodiseño: Es donde te conectas con el desarrollo de un plan de acción comprometido a lograr un objetivo basado en tus valores. Hacia dónde enfocas tu vida, te indica en dónde gastar tu energía, te motiva a ir hacia adelante. Es un nivel de autorrealización. Es donde expresamos estrategias creativas. La acción se toma el poder de la estrategia con una expectativa positiva hacia el futuro.

    •Nivel de neurobienestar: Conexión con tu paz interior, con el presente, donde te conectas y permites la expresión de tu esencia. Un espacio para practicar la compasión, la gratitud y la serenidad. Es el lugar donde desarrollamos nuestras fortalezas y las emociones positivas. Es donde te puedes especializar en optimismo y en apreciar el momento presente.

    5.Zona de neuroconexión: Desde aquí te observas como un ser consciente de tu conexión con otros sistemas y ser parte de un sistema universal. Desarrollas tu propósito.

    6.Zona de neurointegración: Desde este lugar observas y eres consciente de todo tu sistema, eliges dónde estar y cómo fluir en él. Tenemos la flexibilidad para cambiar de zona y la manera de ver nuestra experiencia. Somos conscientes de cada una de las zonas emocionales y de que somos un todo, no una de sus partes. En términos sencillos, nuestra prioridad en la vida es sobrevivir, pero estar en esa zona de supervivencia —sentirse en riesgo— de manera permanente puede generar dolor —bloqueando emociones como el amor, por el miedo a ser lastimado—, sin embargo, nos es difícil cambiar estas estrategias —apareciendo la resistencia al cambio, no queremos mostrarnos vulnerables ni mostrar nuestras necesidades emocionales, no parece adecuado amenazar las estrategias defensivas y arriesgarnos al rechazo— ya que están relacionadas con nuestra supervivencia; para acercarnos al bienestar debemos superar esta barrera de resistencia al cambio y entrar en la neurotransformación, empezar a construir estrategias más amables con nosotros y con nuestros objetivos —basadas en valores en el nivel de neurodiseño— y poder reconectarnos con nuestra esencia, con nuestro amor interior.

    Construimos nuestro propio destino y realidad en la medida en que aprendemos a manejar el sistema emocional desde nuestra consciencia.

    Desde esta zona podemos conectarnos con todas las fortalezas de nuestro sistema al desarrollar estrategias de bienestar.

    Prepara tu mochila para este viaje a través de tu sistema emocional, donde iras recolectando todas las herramientas que te permitirán una más bella travesía.

    7.Zona corporal: Cómo se expresa el cuerpo en respuesta a la zona que estemos interpretando del sistema emocional. El impacto de las emociones en tu cuerpo. En esta zona nuestro objetivo es encontrar una buena relación en la composición corporal —magra-grasa-ósea— con un equilibrio en el grado de inflamación y la activación del metabolismo, asociada a una nutrición de diseño —bioactiva—.

    La única manera de liderar y modificar a tu favor todo el sistema emocional es conocerlo, observarlo y tomar las mejores decisiones con respecto a él.

    Este sistema lo puedes tener en un estado de bloqueo o puede estar en continua evolución, remodelación y aprendizaje. Puede ser un sistema dinámico, es decir, que cambia en el tiempo y se retroalimenta con cada una de las experiencias, pero usualmente se mantiene muy rígido. Al ser un sistema complejo, vamos a estructurarlo en un modelo teórico —subjetivo, que lo construyes y reconstruyes cuando quieras— que nos permita hablar un mismo lenguaje en sus diferentes espacios y tiempos.

    Desde la zona de neurotransformación puedes observar la zona de supervivencia y hacerla consciente para poderla transformar.

    Desde la zona de neurointegración puedes observar todo tu sistema emocional, cómo se relacionan las diferentes zonas, lo haces consciente, puedes fluir donde quieras según el contexto, sin quedarte atrapado en una sola zona. Esta zona es tanto de observación de todo el sistema como de expresión de las estrategias de

    ¿Disfrutas la vista previa?
    Página 1 de 1