Una Atea En La Presencia

Por Tamara Valérie Gozzi

Este libro fue escrito bajo la gua del Espritu Santo, con el fin de tocar el corazn de muchas personas que en este momento viven una vida apartadas de Dios, o personas que quisieran que sus amigos y familiares aceptaran a Jess como Seor y Salvador, y sin embargo, despus de vanos intentos, no saben cmo dar a luz esa salvacin. Este libro le ayudar a sentir y percibir la presencia de Dios a travs del testimonio, la palabra y las enseanzas, usted podr descubrir que Dios es real, que nos ama y quiere tener una relacin con cada uno de sus hijos e hijas. Hay una sola cosa que Dios nunca har por nosotros y es dar el paso de fe por nosotros. l es un Seor en todos los sentidos de la palabra y por lo tanto, respeta nuestras decisiones, dndonos siempre libre albedro. Por lo dems, l promete en su palabra estar con nosotros todos los das, hasta el fin del mundo. Hoy, es el da para darle una oportunidad a nuestro creador de glorificarse en su vida.

• Idioma: Español
• Editorial: Palibrio
• Fecha de lanzamiento: 29 jun 2015
• ISBN: 9781506506128

Tamara Valérie Gozzi

Tamara Valérie Gozzi, born and raised in Belgium, of a Belgian mother and an Italian father, grew up in an atheist home where speaking about God was a taboo. However, at the age of thirty, there began a search for the supernatural that would soon lead her to know Christ and have an intimate relationship with Him. The author did not know that this encounter would forever change her existence. Beginning in Liège, Belgium, she was born again through the Internet and became a disciple at King Jesus Ministry in Miami, where she started under the teachings of her spiritual father, Apostle Guillermo Maldonado, and her spiritual mother, Prophet Ana Maldonado. Throughout the process, the author relates her experience “with the presence of God” from the time she began to perceive it until her arrival at the supernatural ministry.

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Copyright © 2015 por Tamara Valérie Gozzi.

Número de Control de la Biblioteca del Congreso de EE. UU.:   2015909584

ISBN:   Tapa Dura                978-1-5065-0613-5

             Tapa Blanda             978-1-5065-0611-1

             Libro Electrónico   978-1-5065-0612-8

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Las opiniones expresadas en este trabajo son exclusivas del autor y no reflejan necesariamente las opiniones del editor. La editorial se exime de cualquier responsabilidad derivada de las mismas.

Fecha de revisión: 11/06/2015

El texto Bíblico ha sido tomado de la versión Reina-Valera © 1960 Sociedades Bíblicas en América Latina; © renovado 1988 Sociedades Bíblicas Unidas. Utilizado con permiso.

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ÍNDICE

Introducción

1/Prólogo

2/Prólogo

1/ El Encuentro con Su Presencia

2/ El Factor más Importante: La Humildad

3/ ¿Cómo Desarrollamos el Espíritu?

4/ Creados para Creer

5/ Solamente una Verdad

6/ Un Padre Amoroso

7/ Seguir a Dios Requiere Valentía

8/ El Método de Transacción de los Cielos: La Fe

9/ Desenmascarando la Religión

10/ El Llamado y Propósito de Dios

11/ El Poder de la Resurrección Ahora

12/ De Generación en Generación

13/ Lo Sobrenatural y su Favor en la Temporada

14/ El Inexplicable Amor de Dios

15/ Urgencia por las Almas

Agradecimientos

INTRODUCCIÓN

Cuando me propuse escribir este libro tenía dos propósitos en mi corazón: el primero de ellos, y el más elocuente era y es agradar y glorificar a Dios, exaltarle y honrarle por todo lo que Él representa en mi vida; además anhelaba y anhelo aportar a Su Reino. El segundo propósito era y es tocar los corazones de muchas personas que en este momento se encuentran en un lugar que me es muy familiar: perdidas en un mundo hostil, de lucha continua y sin Dios. Durante prácticamente treinta y cinco años rechacé a Jesús, no queriendo escuchar ningún sermón de nadie.

Nacida y criada en una familia atea, toda mi vida había escuchado el mismo consejo: ¡no te creas esas tonterías! Aún así, ya desde pequeña sentía que algo o alguien velaba por mí desde lo alto; sentía que me tenía que comportar bien porque alguien que me quería me estaba viendo en todo momento y en todo lugar.

De adulta entonces, Dios me sacó de mi nido y de mi familia para que pudiera contemplar otras opciones y abrirme a otras posibilidades. Recorrí el mundo durante varios años por trabajo, lo que me enseñó a considerar otras perspectivas y ponerme repetidas veces en los zapatos de los demás. Entendí más tarde, que ya en aquel momento, Dios había empezado un proceso en mí, ya me estaba cambiando y preparando para un día decirle que sí, y posteriormente emprender una aventura que me cambiaría la existencia. Dios me buscó antes que yo le buscara, confirmando así que Él nos ama antes de nosotros amarle.

Recibí al Señor a través de Internet, y a partir de ese mismo instante empezó una nueva vida, un nuevo comienzo.

Dios me trajo entonces al Ministerio El Rey Jesús, de Miami, donde iba a poder desarrollarme y lograr convertirme en una mujer de Dios. Al principio no fue nada fácil, pues tenía muchas fortalezas debido a mi pasado y a las cargas ancestrales. Hoy puedo testificar que Dios es real y sigue haciendo milagros; los cambios que realizó en mi persona, no habrían ocurrido sin Su presencia, sin Su poder, sin Su amor.

No podía dejar de compartir mi testimonio, o no difundir lo que Dios puede hacer en la vida de cada uno, sin importar si somos ateos, religiosos o pecadores de todo tipo; Él nos ama de igual manera y no hace ninguna diferencia entre Sus hijos.

Querido lector o lectora, declaro que desde el momento que tomes este libro en tus manos, Dios empieza a hablarte como nunca antes, y que los ríos de agua viva contenidos en tu espíritu son desatados por el poder del Espíritu Santo. ¡Tu vida será transformada en la presencia de Dios!

Tamara V Gozzi

1/PRÓLOGO

Me complació mucho descubrir recientemente este don para la escritura de mi amiga, y también puedo decir a estas alturas mi colega en el ministerio y servicio a nuestro Señor Jesucristo. En su primer libro, creo que está plasmada la frescura, el asombro y los cambios en el nuevo despertar a la vida espiritual que experimentó y está experimentando mi amiga Tamara, y creo que puede ser muy útil y convincente en las manos de una persona que todavía no abrió su corazón y le entregó su vida a Dios. Para una persona incrédula puede parecer algo ingenuo creer en Dios, pero puedo asegurar junto con la autora de este libro, que elegir la fe y creer, en medio de las vicisitudes que a diario se nos presentan a todos, nos lleva a descubrir y experimentar la más maravillosa vida que podamos haber tenido. Es mi deseo que tú experimentes, querido lector o lectora, el toque de Dios en tu corazón, y también seas muy pronto un ateo o una atea en Su presencia.

Pastor Nicolás Losasso

Centro Familiar Cristiano de Martínez

Buenos Aires, Argentina

2/PRÓLOGO

Vivimos tiempos donde carecemos de principios morales, éticos, humanos; donde carecemos de amor y fe, y donde tener un punto de referencia se ha vuelto complicado. Necesitamos creer en algo que va más allá de la lógica humana.

El hombre, a través de su conocimiento mental, lógico y natural, y a través de su percepción física y sensorial, ha permitido que el corazón, que es el depósito de sentimientos, actitudes y pensamientos, se endurezca. Esto le lleva a creer solo en sí mismo, a tener un espíritu adormecido, vacío, y sin espacio para lo que realmente vale la pena.

Los seres humanos fuimos creados para creer, no solamente en lo que vemos a través de nuestros ojos naturales, sino en aquello que nuestro sentido de la vista no alcanza a ver. Humanamente hablando, esto parecería ilógico; sin embargo, déjame decirte querido lector, que existe un ser espiritual, eterno, inmutable, con atributos y habilidades sobrenaturales; y aunque Él sea invisible a nuestros ojos, es tangible por la grandeza de Su creación.

Creo firmemente que éste es uno de los pocos libros que hasta ahora han sido escritos con la capacidad e intención de llevar al lector a vivir, experimentar y descubrir quién es en realidad DIOS.

Quiero animar a cada criatura a leer este libro por la riqueza de revelaciones, verdades y realidades que el hombre, en su propio conocimiento no podría explicar.

Es verdaderamente una obra literaria única, donde puedo expresar con franqueza que la autora TAMARA VALERIE GOZZI fue un instrumento de DIOS, quien a través de Su Santo Espíritu guió su corazón y su mano para expresar cada detalle. DIOS es el mismo ayer, hoy y por los siglos; por ende, en este mismo instante es posible que aquellos que no conocen a DIOS, puedan tener un encuentro maravilloso con Su presencia.

Doy gracias a DIOS y a mi hermana en Cristo TAMARA VALERIE GOZZI por el privilegio tan grande de escribir este prólogo, así como un pensamiento acerca de lo que DIOS revela al comenzar a leer, y sigue revelando a lo largo de cada capítulo.

Pastor Edwin Núñez

Ministerio Internacional El Amor de Jesús

Varese, Italia.

1/ EL ENCUENTRO CON SU PRESENCIA

Todo empezó en Ferrara (Italia), cuando mi hija entró en el coro de San Francesco para dedicarse a la música y al canto, que mi vida dio un giro de 180 grados.

Todavía no le encuentro ninguna explicación, pero poco a poco empezamos los tres, mis hijos y yo a hablar con Dios solos en casa. Recuerdo las veces que hablando con Dios, mi hija y yo nos poníamos a llorar sin saber por qué. No entendía ni sabía por qué caían las lágrimas cada vez que me sentaba a hablar con El Señor, pero sentía que Él estaba allí escuchando nuestras palabras. Recuerdo una vez en particular, cuando la niña se puso a llorar sin parar; y fue solo más adelante que entendí que Su presencia era la causa de tal efecto, tanto en ella como en mí.

Nadie nos había predicado ni nadie nos había llevado a ninguna iglesia. Fue el Señor mismo quien nos llevó poco a poco —como solo Él sabe hacerlo— al lugar que más le conviene. En aquel entonces, no estaba preparada para escuchar a nadie hablarme de Dios o de Jesús, y cualquiera que lo intentara, perdía su tiempo. Quería acercarme a Dios y hablar con Él, sentía que quería tener comunión con Él, sin embargo no sentía atracción ninguna por la religión ni por la iglesia, tal como la conocía en Europa. Cierto era que iba a la iglesia a veces con los niños para pasar un rato con el Señor, pero las misas no me atraían, ni me convencían, más bien me alejaban. Era algo raro, que no podía explicar. En casa era donde más sentía que Dios estaba presente entre nosotros. La iglesia no me producía ningún efecto, así que llegué a la conclusión que Dios era algo personal, una relación personal que cada uno de nosotros puede o no desarrollar si le buscamos de corazón y de verdad.

La vida de Jesús empezó a interesarme y cada libro que encontraba sobre su vida en la tierra, me llamaba mucho la atención.

Durante una escala en Londres, pude coincidir con una prédica de Joël Osteen en la BBC. Escuchar a ese hombre hablar de Dios me fascinaba; así que seguí buscando mensajes parecidos por diferentes medios de comunicación, y logré aterrizar en varios ministerios gracias a YouTube e Internet. Era una realidad completamente nueva para mí, sin embargo, muchas cosas y preguntas seguían sin respuestas. Esos predicadores me atraían, y sentía como sus palabras llegaban a mi corazón; sentía que todo lo que ellos explicaban y predicaban en los sermones necesitaba ser experimentado por mí.

Me sentía perdida, en una realidad diferente y opuesta a la mía, pero una realidad que me gustaba, que me hacía sentir bien y con esperanza. Al contrario del mundo que conocía, sentía que en aquella realidad había posibilidades y oportunidades para todos; no sólo para los millonarios, famosos o personas de poder, sino para cada uno de los seres humanos.

Seguí indagando más y más, y vía Internet conocí a otros predicadores como Joyce Meyer, que me fascinó casi de inmediato. Cada uno tenía su manera de llegar a los corazones, y cada uno de ellos, desde mi perspectiva, tenía algo que muchos en el mundo no tenían.

Seguía sin tener idea de una serie de cosas y seguía con muchas dudas, pero tenía curiosidad de aprender y conocer esa realidad, para mí, todavía desconocida.

Leer acerca de Jesús, escuchar las prédicas e incluso escuchar a los niños cantar en el coro me hacía llorar, y por ende daba por hecho que era pura emoción. Lo mismo me pasaba cuando me postraba a hablar con Dios. Me preguntaba constantemente: ¿Qué sentido tenía aquello? No entendía si era tristeza o alguna otra clase de sentimiento.

Me acordé entonces de algunos comentarios que pude escuchar durante mi juventud, que afirmaban que los seguidores de Jesús que lloran durante las reuniones religiosas, demuestran que son gente débil y fanática.

Eso pensaba yo también en aquel entonces, hasta que me vi en la misma posición y situación. Me di cuenta que estaba muy lejos de la verdad. No me sentía ni débil ni fanática, y mucho menos religiosa; no podía ni quería retener las lágrimas cuando escuchaba hablar al Señor. Para mí, ése fue el descubrimiento y el encuentro más importantes de toda mi vida; Dios de repente era real. Fue mucho más adelante, meses e incluso años más tarde, cuando llegué al Ministerio El Rey Jesús, en Miami,