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El Niño: Muéstrale Al Niño El Camino Que Debe Seguir Y Se Mantendrá En El Aún En La Vejez. Proverbios 20,6
El Niño: Muéstrale Al Niño El Camino Que Debe Seguir Y Se Mantendrá En El Aún En La Vejez. Proverbios 20,6
El Niño: Muéstrale Al Niño El Camino Que Debe Seguir Y Se Mantendrá En El Aún En La Vejez. Proverbios 20,6
Libro electrónico178 páginas2 horas

El Niño: Muéstrale Al Niño El Camino Que Debe Seguir Y Se Mantendrá En El Aún En La Vejez. Proverbios 20,6

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Con lágrimas en mis ojitos y mi corazón apachurradito, leía y leía y en mi cabecita pensaba ¿Cuánto sabe la escritora? Pues realmente estas cosas nos suceden en la escuela; desafortunadamente a veces no se las platicamos a nuestros papas. Ojalá este libro lo lean todos!!!!!! Los niños y jóvenes estamos en peligro.

Laura Monserrat Altamirano, 8 años de edad.

El Niño me ayudo me ayudo a valorar los sacrificios que hace mi papá y mi mamá por ofrecernos un mejor futuro a mi y a mis hermanos.

Susana Domínguez, estudiante de 11 años.


Este libro me ayudo a confiar en mis padres, me asustaba la idea de contagiarme de una enfermedad sexual solo por vergüenza de platicar con mi padre.
Daniel Luna, 11 años.

Este libro me ayudo a prestar más atención en el comportamiento y acciones de mis hijos, de igual forma me ofreció la oportunidad de acercarme a ellos y al contrario de reprender su mal comportamiento me ayudo a entender y crear un lazo de amistad y confianza que antes no existía. Conocer cosas desconocidas que afectan y preocupan a nuestros hijos no tiene valor con el cual se pueda pagar. Gracias Esmeralda por tu gran corazón y dedicación hacia los demás.

Javier Ávila, padres soltero de dos adolescentes.

Mientras leía el libro del Niño, me di cuenta que cuando se junta la imaginación y la sensibilidad aunada con la excelentísima calidad humana de la escritora; solo podría dar como resultado el éxito. Gracias por escribir para todos, felicidades por una edición más.

Cesar Altamirano, enfermero y padre de dos adolescentes.


El Niño me cambio la vida, gracias a el aprendí a vivir el hoy al máximo sin preocuparme demasiado por las cosas superficiales y a disfrutar mas a mi familia.
Clemente Figueroa, 40 años de edad.
El Niño, me ayudo a ver algunos de los errores que estaba cometiendo como madre y afectaban directamente la vida de mi único hijo, la historia fuerte y cruel en determinado momento me ayudo a identificar cosas que yo creí que eran causas de la edad. Llego este libro a mis manos en el momento prefecto, gracias Esmeralda por ayudarme a comprender las cosas que estaba haciendo mal.
Alejandra Ríos, madre soltera de un niño de 10 años.

Este libro llego a mis manos por manos de la misma autora, debo aceptar que en algún momento me sentí ofendida por lo que leía, pero al terminar de leer la historia comprendí lo que con palabras no quería ver. El niño me ayudo a evitar que se repitiera la misma historia de mi hijo mayor que esta preso de por vida en una cárcel del estado de Texas.
Arcelia González madre soltera de 4 hijos.

Quiero agradecerte que a través de libros como este, podamos comprender muchas cosas. Tal es mi caso. Desgraciadamente para mi, ya no esta el niño, el cual no comprendí. Ahora estas en el cielo. Ojalá todos los padres puedan leer esta obra, la cual es una realidad para muchas familias.
Jeannette Ivette, madre de dos adolescentes.
IdiomaEspañol
EditorialXlibris US
Fecha de lanzamiento20 sept 2012
ISBN9781477155691
El Niño: Muéstrale Al Niño El Camino Que Debe Seguir Y Se Mantendrá En El Aún En La Vejez. Proverbios 20,6
Autor

Esmeralda Garcia Avila

1.- “El Niño es un llamado a los padres de adolescentes” Reclama, Northbrook, ill. 2.-“El Niño, un libro que nos invita a la reflexión” Nueva Semana, Palatine, ill. Esmeralda García Ávila en esta segunda edición de su primer obra literaria, nos adentra a un mundo que acecha la vida de nuestros jóvenes; las pandillas. Con base en su experiencia profesional de trabajadora social, nos presenta una historia verdadera donde la autora nos comparte sus experiencias vividas con jóvenes en pandillas y problemas de adicción como son las drogas y el alcohol. Con el carisma que la caracteriza, Esmeralda se dirige al lector utilizando una pizca de ficción y un lenguaje simple y fácil de comprender, ofreciéndonos una obra relevante y necesaria para nuestros tiempos. …una tarde como cualquier otra, me vi frente a un enigmático joven, con una mirada perdida, sin ilusiones, resentido con el mundo; de hecho con la vida misma. Con ojos irritados como fuego ardiente que reacciona a cual madera agregada a él; su ropa enterregada y diluida mostraba un joven descuidado y sucio. Su cuerpo segregaba un olor extraño. Olía a humedad como putrefacto. Las cicatrices de su cabeza, cara y brazos las había cubierto con tatuajes mal diseñados y aretes con los cuales intentaba disimular las heridas físicas que solo reflejaban la profundidad del daño en su alma. El lenguaje con el cual se expresaba era popular combinado con malas palabras y repitiendo constantemente, “ese pendejo”; “esa puta”; “ese maldito”; “la vida no sirve para nada”; “maldigo la vida”; “maldigo la felicidad de otros”; “maldigo al que me mira”, “maldigo al mismo Dios” como ejemplos de la agonía de su existir. Esta fue la primera vez que yo vi una persona más miserable y sola que yo.

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    El Niño - Esmeralda Garcia Avila

    Copyright © 2012 by Esmeralda Garcia Ávila.

    Library of Congress Control Number:   2012914166

    ISBN:   Hardcover   978-1-4771-5568-4

       Softcover   978-1-4771-5567-7

       Ebook   978-1-4771-5569-1

    All rights reserved. No part of this book may be reproduced or transmitted

    in any form or by any means, electronic or mechanical, including photocopying, recording, or by any information storage and retrieval system,

    without permission in writing from the copyright owner.

    This is a work of fiction. Names, characters, places and incidents either are the

    product of the author’s imagination or are used fictitiously, and any resemblance

    to any actual persons, living or dead, events, or locales is entirely coincidental.

    To order additional copies of this book, contact:

    Xlibris Corporation

    1-888-795-4274

    www.Xlibris.com

    Orders@Xlibris.com

    120176

    Traten a los demás como quieren que ellos los traten a ustedes . . . .

    Lucas 6, 31

    Contents

    PRÓLOGO

    NOTA DEL AUTOR

    INTRODUCCIÓN

    CAPÍTULO 1    La metamorfosis de mi vida.

    CAPÍTULO 2    El poder de una sonrisa.

    CAPÍTULO 3    Cambiar no significa dejar de ser quien eres.

    CAPÍTULO 4    Las casualidades de la vida.

    CAPÍTULO 5    Por naturaleza el hombre busca aquello que lo satisface.

    CAPÍTULO 6    La metáfora del amor.

    CAPÍTULO 7    Un mundo de fantasía.

    CAPÍTULO 8    Una nueva oportunidad.

    CAPÍTULO 9    Toda acción tiene una consecuencia.

    CAPÍTULO 10    El valor de la familia.

    CAPÍTULO 11    Preámbulo de la muerte.

    PRÓLOGO 

    En el momento preciso que puse mis manos sobre El niño nunca imaginé en lo que me adentraría. La duda emergente de mi limitada capacidad apoyaba la duda sobre la obra. En el transcurso de los días al adentrarme en la obra me percate de la sencillez, honestidad, y claridad en la que estaba escrita. Diferente a obras clásicas, y mostros de creaciones literarias, El niño es simple y con validez vivencial. Por varios días, dude en continuar la lectura de una obra que no retara mi insaciable necesidad de complejidad a la vida. Como profesional en el campo de la psicología y terapia humanística cuestioné puntos propuestos en la obra una y otra vez; sin permitir, en varias ocasiones, el adentrarme a un mundo fácil y de conocimientos vividos por la autora. Una madrugada en la que recorría las líneas de uno de los capítulos del libro, mi atención quedó plasmada al percatarme que en la tranquilidad de esa noche, mi mente se abría a sentir, a imaginar, y vivir lo que Esmeralda García propone en su obra. Con una sensación de culpabilidad por juzgar la obra, me recordé lo básico en el aprendizaje de la literatura: no juzgues el libro por su portada. Reconocer que te encuentras frente a una obra de valor intrínseco, y que contradice lo antes asumido por ti, como lector, es difícil. En ese momento retomé el libro y di vuelta hasta la introducción, hoja por hoja, viajaron mis ojos hasta retornar al comienzo; pero esta vez, decidí borrar mis esquemas prestablecidos sobre la obra. Puedo adelantarte, querido lector, que mi segunda ronda por el libro fue un viaje de aprendizaje, un viaje de imaginación y de concientización al percatarme que en nuestra comunidad latina, drogas tales como el alcohol, cocaína y muchas más siguen latentes como el corazón vivaz de nuestros niños, y jóvenes.

    La sencillez de Esmeralda García al presentar su obra, recalca nuevamente, la necesidad de los escritores de proveernos con obras frescas, fáciles de leer, y con impacto vivencial para nuestra comunidad. Esmeralda García presenta en su libro El niño, realmente eso un niño a través del cual nos permite ver las dificultades que un pequeñín tiene al adentrase al mundo de joven, e inevitablemente al de adulto. Con el carisma que la identifica, querido lector, serás guiado a un mundo de drogas, la función de estas, la forma de distribución, y un mundo de problemática comunitaria: las gangas. Tú, querido padre, te percatarás que tus hijos están en riesgo constante, y tu deber es salvaguardarlos, pero no con una obstinada sobre protección sino con consejos de esencia fundamental para el autoconocimiento de ellos mismos. Y claro, por qué no, tú querido joven te percataras de una realidad que tal vez no has vivido o en la que te encuentras envuelto ya.

    Como introducción, y guía plasmada en una historia basada en hechos reales, El niño, representa una oportunidad para la comunidad latina de conocer un mundo ignorado por muchas de nuestras familias; un mundo que detonará como cual bomba en combate, llegado el momento. La lectura de obras, verdaderas y sencillas permiten al lector vivir, sentir, y aprender para un crecimiento personal, y sobre todo ayudar a las nuevas generaciones a aprender sobre un terrible mal que acosa a nuestra sociedad hoy en día: las pandillas y drogas. Esmeralda García como autora, guía, y terapeuta presenta una obra directa, sencilla y vivaz para comprender desde sus experiencias un tema de cuidado urgente en nuestra sociedad.

    Yo, tuve la gran oportunidad de adelantárteme querido lector, a leer esta gran obra; pero, ahora tú, tendrás la misma oportunidad de adentrarte, y conocer una realidad, un mundo existente y una verdad que está cerca a nuestras familias, hogares, comunidades, estados, países, y universo. Sin miedo, abre tu mente, lee los pasajes venideros, y al igual que yo, no tengas miedo de regresar a los pasajes que han impactado tu imaginación; te insto a marcar, rayar, anotar sobre la obra; éstas también son maneras de leer.

    Esmeralda García, tu sencillez, audacia, entrega, y tu inteligencia emocional y desafío laboral están plasmados en tu obra. Inmensamente agradecido, querida colega, por la distinción de ser el primero en leer esta nueva versión de El niño.

    Gerardo Wence-Muñoz, M.A

    NOTA DEL AUTOR 

    Necesité caer en el suelo, llorar hasta que mis ojos no derramaban mas lagrimas, pasar noches en vela, temer a la obscuridad y aferrarme a lo único que desde niña conocía como un ser todopoderoso que jamás te abandona, ni olvida, Dios.

    Sin Dios y sin su infinito amor no fuera quien soy ahora: una mujer que se acepta tal y como es, soñadora, sin miedo al fracaso, quien cree firmemente que Dios permite que las cosas pasen por una razón especifica en nuestra vida. Mi fe en Dios es la que me permitió seguir adelante cuando creí que mi vida se había terminado y cuando más sola me encontraba en mi vida.

    Dios me ofreció la oportunidad de reconstruir mi vida por medio de dos grandes amigos Aíra Puistolahti quien me acogió en su regazo e infundio en mí cual madre a su hija, cariño, comprensión y consejos los cuales me ayudaron a enfrentar adversidades y no temer a lo que me depara el destino. Sin ella mi vida no tendría el mismo sentido y es y será para siempre mi madre adoptiva.

    Clayton Sommers, es otro regalo de Dios, sin conocerme me ofreció su amistad, confianza, tiempo y palabras de aliento en un momento crucial de mi vida. Momento en el que había perdido por completo las esperanzas de seguir viviendo; gracias a él, reafirmé que aún existe gente noble y con un buen corazón. Clayton me enseñó a creer y valorar la amistad y es uno de mis más grandes ejemplos a seguir de honestidad, constancia y lealtad.

    Estas dos personas me cambiaron la vida y este libro está dedicado especialmente a ellos dos, pues gracias a ellos recuperé mi confianza, creí en los sueños y en su realización, y por supuesto a Dios pues sin el, no existiría este libro que tienes hoy en tus manos.

    INTRODUCCIÓN 

    Desde que nacemos las personas buscamos sentirnos amadas y aceptadas. Si el amor falta en nuestra vida, nos sentimos vacíos, insatisfechos, enojados, frustrados y buscamos desesperadamente llenar este vacío que tanto daño le hace a nuestra alma. Por ello estoy convenida que la familia juega un papel fundamental en la vida de nosotros, pues el amor y comprensión recibido de los padres y hermanos nos proporciona la confianza para no temer a las adversidades y luchar por alcanzar nuestros sueños, pero si el amor, no existe en nosotros, en nuestra búsqueda de la felicidad cometemos errores que nos cambian la vida o simplemente llegamos al punto de perder el interés a la vida y en la muerte basamos nuestras esperanzas.

    Son maravillosos los avances científicos por los cuales estamos pasando. A diario nos sorprende la ciencia con nuevas alternativas que nos permiten vivir de una forma más práctica y sencilla. ¿Pero si estamos tan avanzados, como es posible que ahora la mayoría de nosotros, perdimos nuestros sentimientos de amor, atención, gratitud y nuestro valor dependa de estupideces como un auto nuevo, teléfono celular, ropa y accesorios?

    ¿Será que ahora solo vivimos por vivir, sin planear y disfrutar las cosas que nos rodean? La mayoría de nosotros tenemos una vida monótona y aburrida, y tristemente así se nos va la vida reaccionamos cuando nuestros hijos son adultos, llegamos a la vejez o cuando la muerte nos sorprende inesperadamente.

    Hoy en día existen cientos de libros y seminarios de superación personal, terapistas, doctores y asociaciones alrededor del mundo trabajando por el mismo fin; mejorar la calidad de vida, de aquellas personas que debido algún problema físico, mental o moral, vivían sufriendo ó sin encontrarle sentido a la vida, paradójicamente, así como aumentan las soluciones así se incrementan los problemas y adicciones.

    Los problemas nos impiden ver y pensar con claridad. Buscamos sin saber lo que deseamos; nos da miedo preguntar por los prejuicios del que dirán, hacemos caso omiso de los consejos, si las respuestas no son las que esperábamos y lo más importante, ignoramos los acontecimientos que suceden a nuestro alrededor, desaprovechando de esta manera las oportunidades que nos pueden cambiar la vida. Oportunidades que no siempre vienen con la mejor apariencia y pasan frente a nosotros en cuestión de segundos. Es tan simple lo que quiero expresar; pero suele pasar que lo mas sencillo es lo mas difícil de entender.

    Querido lector, antes de continuar, me disculpo si mis palabras en algún momento te ofenden, pero a las cosas hay que llamarlas por su nombre, sin mentiras; de igual forma me disculpo si mis conocimientos son mínimos a tu lado y en algún momento mis ideas ó comentarios se te hacen incoherentes ó sin sentido. Me expreso en estas paginas como un simple ser humano que sufre, siente y piensa, igual que tu; me expreso como esposa, amiga, tía, hermana y como alguien, que tiene la obligación de evitar que la gente que amo, pierda la vida por tonterías como son las drogas, alcohol o pandillas.

    Por ello me dirijo a ti, y me atrevo a sugerirte, que antes de criticar lo que lees, ofrécete la oportunidad de analizar las cosas buenas que te rodean y que otros anhelamos tener, no olvides nunca que si tú estas bien todo lo que te rodea estará en armonía contigo; el abrir nuestro corazón puede mostrarnos caminos favorables que nos cambian la vida, todo depende de como deseamos ver las cosas y vivir nuestra vida. Gracias por leer mi trabajo y compartir mi sueño.

    Estaba convencida, que solo aquellos niños que vivían en hogares donde el dinero no alcanzaba ni para un pan, hogares donde los niños fueron espectadores ó victimas de violencia domestica o sexual, ó hijos de padres alcohólicos y drogadictos (por nombrar algunos de los problemas sociales), estos niños eran quienes en un futuro pertenecerían a una pandilla o destruirían su vida entre las drogas y el alcohol. Estaba muy equivocada y el destino mismo fué quien me mostro mi error.

    Una tarde como cualquier otra, me vi frente a un enigmático joven, con una mirada perdida, sin ilusiones, resentido con el mundo; de hecho con la vida misma. Con ojos irritados como fuego ardiente que reacciona a cual madera agregada a él; su ropa enterregada y diluida mostraban un joven descuidado y sucio; complexión física delgada y apariencia de niño; características que lo hacían pasar inadvertido. Su cuerpo segregaba un olor extraño. Olía a humedad como putrefacto. Las cicatrices de su cabeza, cara y brazos las había cubierto con tatuajes mal diseñados y aretes con los cuales intentaba disimular las heridas físicas que solo reflejaban la profundidad del daño en su alma. El lenguaje con el cual se expresaba era popular, combinado con malas palabras y repitiendo constantemente, ese pendejo; esa puta; ese maldito; la vida no sirve para nada; maldigo la vida; maldigo la felicidad de otros; maldigo al que me mira, maldigo al mismo Dios como ejemplos de la agonía de su existir. Esta fue la primera vez que yo vi una persona más miserable y sola que yo.

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