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Descubriendo el verdadero éxito
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Libro electrónico123 páginas1 hora

Descubriendo el verdadero éxito

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Información de este libro electrónico

A lo largo de la historia, la palabra "éxito" ha tenido múltiples significados; cada individuo la ha interpretado a su manera.

Y el sistema social no se ha quedado atrás en su aporte, haciéndonos creer que el éxito es solo para el "famoseo" y aquellos que puedan aparentar una vida económicamente reluciente olvidando el verdadero significado de tan popular palabra, lo que está haciendo mucho daño en nuestra sociedad.

Este es un libro muy práctico y sencillo de entender para todo aquel que realmente quiera despertar de ese adoctrinamiento en el cual se encuentra sumergido por todos estos gurús de moda, a quienes solo les importa el populismo, mas no el estado de la persona.

Todos somos exitosos en distintas áreas de nuestras vidas. Capítulo a capítulo, encontrarás claridad para esas preguntas tan frecuentes que nos hacemos y comprenderás, a medida que te introduzcas en este libro, el éxito que tienes y no lo sabías.

Te invito a vivir una vida de abundancia desde ya, para no seguir por ese camino de angustia y frustración en el cual te han hecho creer desde un principio, haciéndote sentir como un mediocre sin capacidades ni talentos.

Descubriendo el verdadero éxito, la respuesta al cambio que tanto anhelas y esperabas con tanta pasión.

Disfruta de este libro y empieza a vivir tu verdadera vida, no la que los demás te dicen que vivas.
IdiomaEspañol
Fecha de lanzamiento8 jul 2021
ISBN9788468559360
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    Descubriendo el verdadero éxito - Odmady Santa

    PRÓLOGO

    En este libro resumiré una pequeña parte de mi vida en la cual encontrarás mucho valor a tu presente y te pondrá a meditar y a reflexionar en lo que haces y en cómo llevas tu vida en la actualidad. Faltarían muchas páginas más para transcribir todo este mundo de lecciones que me ha dado la vida a lo largo de mi existencia.

    Es un material 100 % empírico, vivido en primera mano. Los llevaré por un mundo fascinante, lleno de momentos especiales y críticos los cuales me llevaron a pensar y vivir de una manera distinta el día de hoy.

    Son sucesos fascinantes que, si no los hubiera vivido, no sería el hombre, padre, esposo, hijo, amigo, socio, jefe, etc. que soy. Gracias a cada persona que formó parte de este recorrido y ha hecho que mi vida cobrara un sentido ideal y que yo pudiera descubrir su verdadero propósito.

    Este libro será para ustedes como señales de tráfico en la carretera de sus vidas. En el cual aprenderán a respetarlas y valorarlas para no salirse del camino y llevar la velocidad apropiada en cada tramo de su existencia.

    Disfruten el viaje.

    I. ÉXITO

    Según la RAE (Real Academia Española), el éxito es el resultado, en especial feliz, de una empresa o acción emprendida, o de un suceso. A lo largo de nuestra existencia hemos escuchado la palabra «éxito» muchas veces. Aunque cada uno la ha interpretado de distinta manera, la sociedad nos la vende. Digo vende porque para mí, no es lo que el sistema dice: ser exitoso es poseer muchos bienes materiales y ser reconocido mundialmente.

    Esto nos ha llevado a vivir una vida prestada y totalmente diferente a la nuestra. Tanto es así que no vivimos nuestra vida por vivir la de otros. Esto sucede cuando no somos felices con lo que tenemos. Siempre queremos algo más y creemos que la vida de otra persona es la perfecta porque nos la hacen creer así.

    A lo largo de mi vida, pensaba que era un fracasado por no tener suficientes bienes materiales y de gran valor. Cuando empezó la era de Internet, fue un caos. Empecé a ver personas por todos los medios y hablaban aquí de ella y en otra parte y por todos lados. ¡Wow! ¿Y de mi vida quién habla? Eso en su tiempo me frustraba, como dije antes, pensaba que si no estaba en boca de tod@s, no era exitoso.

    Como colombiano de nacimiento que soy, crecí con un entorno (casa) de escasez, siempre faltaba algo. Mis padres nos daban a mis hermanos y a mí lo que para ellos era suficiente, o estaba en su capacidad económica. Mi otro entorno, el de afuera —amigos, vecinos, familia, conocidos—, era distinto y muy bueno según mi opinión, y comparado con el mío.

    En el colegio, los compañeros llevaban sus uniformes de marca bien planchados, lindas zapatillas, camisas de seda, pantalón de pinzas y moderno corte de pelo. Ni hablar de sus cuadernos argollados, plastificados y sus portadas, las más cool de la época. Yo tenía los que me daba el gobierno, sin argollas y con su portada publicitaria (recuerdo Caja Agraria). Ellos tenían dinero para el lunch (lonchera en mi país). Yo nunca tenía para comprar nada en ese maravilloso kiosco donde yo veía manjares y a los niños pijos (gomelos), comprando. Me sentía muy pobre, tanto que me afectaba en mi rendimiento escolar.

    Mis amigos, ellos tenían en sus casas un buen televisor, a color, grande, linda imagen y siempre podían ver la tele. Aclaro que yo soy hijo de campesinos y mi vida de infancia se desarrolló en el campo, y mi padre no tenía otra meta o visión que labrarlo, y que mi hermano y yo habíamos nacido para ello. Ocupaba todo nuestro tiempo en trabajos forzosos y el otro que quedaba, era el que dedicábamos al estudio. Era muy complicado cumplir con los deberes escolares.

    Vuelvo a mis amigos, vestían bien, comían bien, tenían siempre dinero para gastar en las tiendas. Se rodeaban de chicas lindas. Su casa era bonita, bien pintada (decorada) con todos los electrodomésticos de la época. Nosotros ni nevera teníamos, guardaba mi madre la carne en botes de plástico con mucha sal para conservarla varios días.

    Conocidos: linda ropa de marca en mi país, Colombia. Si tú no tienes para comer, eso hasta poco importa, pero tienes que estar bien vestido, eso sí que es importante hasta la actualidad. Lindas mujeres, máquinas de transporte solo creadas para ellos. Motos, coches, camionetas, etc. En mi casa, ni una sola bicicleta tuvimos. Nuestro único transporte era un caballo (yegua) llamada Gitana y tampoco podíamos disponer de ella cuando queríamos, era para el transporte de material de la finca y de mi padre.

    Al ver todo esto, tú ves tu vida como un verdadero fracaso. A ellos todo les iba bien según mi opinión, todo era excelente y mi vida un desastre. Me costaba entender por qué ellos podían comprar, tener, visitar, jugar, vivir sus vidas a su antojo, mientras en mi casa todo era limitado y estricto. El éxito del cual yo escuchaba estaba muy lejos de mi vida.

    Así en estas breves líneas, puedo resumir lo que fue mi infancia hasta los quince años, lejos de lujos, comodidades y una vida sin libertad juvenil (no teníamos tiempo ni para jugar). Nunca escuché a mi padre hablar de proyectos, objetivos, metas, negocios, si él pensaba eso, nunca lo compartió con nosotros, todo eso era un tabú.

    Supongo que esa idea de prosperar económicamente no estaba en su mente ni ADN ya que murió pobre y dejándonos deudas por pagar. Hasta aquí puedo resumir un poco lo que significaba el éxito para mí. Algo muy extraño y dado a gente y familias especiales, y no a la mía.

    Familiares: ellos vivían en la gran ciudad con sus centros comerciales, rodeados de citadinos y envueltos en esa gran metrópoli con sus vidas lujuriosas, fiestas constantes y con un nivel de léxico sorprendente para ligar con las chicas más bellas del entorno. Todo esto yo lo podía ver desde la finca (nombre dado al campo), desde donde se podía ver parte de

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