Vivir Nuevamente

Por Ray Anyasi

Cuando estalla el malestar civil en Damakuli, Dami y sus colegas del Cuerpo Juvenil se encuentran perdidos y varados en la vasta jungla del Sahara. Ella empieza a perder a sus amigos uno tras del otro por la turba enfurecida de manifestantes y bestias mortales. Si ella quiere ir a casa junto a su viuda madre en una sola pieza, debe encontrar la ruta más corta a la civilización más cercana antes de que, lo que sea que está tras ella, la encuentre.Cuando estalla el malestar civil en Damakuli, Dami y sus colegas del Cuerpo Juvenil se encuentran perdidos y varados en la vasta jungla del Sahara. Ella empieza a perder a sus amigos uno tras del otro por la turba enfurecida de manifestantes y bestias mortales. Si ella quiere ir a casa junto a su viuda madre en una sola pieza, debe encontrar la ruta más corta a la civilización más cercana antes de que, lo que sea que está tras ella, la encuentre.

• Idioma: Español
• Editorial: Naphtali Books
• Fecha de lanzamiento: 31 mar 2021
• ISBN: 9781071593219

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VIVIR NUEVAMENTE

RAY ANYASI

Vivir Nuevamente

Copyright © 2012 Ray Anyasi.

Todos los derechos reservados

ISBN:  9781980555209

Publicado en Nigeria por

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Naphtali Books

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Esta es una obra de ficción. Nombres, personajes, lugares y cualquier otro incidente son producto de la imaginación del autor o son usados ficticiamente y cualquier parecido con personas actuales vivas o muertas, eventos o lugares son pura coincidencia.

En memoria de Eucharia Remmy.

Graciosa Eukay...

Q.E.P.D. noviembre, 2011.

"Igual que las gotas de lluvia

cayendo de tus ojos...como lágrimas del cielo.

Es como una bendición,

una bendición disfrazada

de la que no nos damos cuenta..."

-TuFace Idibia.

1

Oye Kayode,

Esta no es una carta de amor; lleva un mensaje poco romántico. Mira, el tiempo ha cambiado, mucho ha sucedido y ya no soy la misma Damilola de siempre. Esta historia rompió la Dami que tu conociste y re – hizo un nuevo yo que tú nunca llegarás a comprender.

Si nosotros teníamos una unión que funcionaba, entonces estamos rotos porque una parte ha sido alterada. Porque esto lo vale, tú eres un gran chico y esto no tiene nada que ver contigo. Eres el perfecto chico para la chica que solía ser.

Cuando fui llamada a servir a la patria, todo lo que tenía en mi mente era ir a tener una vida divertida, no del tipo rompe cuellos, sino la diversión habitual con la que una joven fantasea antes de un campamento para jóvenes. Si sabes a lo que me refiero.

Si la historia que estas a punto de leer te empuja al borde del asiento debes saber que a mí cada vez me acerca más a la muerte. Fue un tiempo que probó mi alma con pruebas que como ahora he llegado a entender, no necesariamente me dijeron quién soy, sino que, me presentaron la pregunta de quién soy. Una pregunta que no me dejaron responder por ningún otro medio sino con mi reacción directa a esas pruebas.

No te voy a recordar esos felices románticos momentos que compartimos, eso podría ser torturante para ti, pero me gustaría que supieras que solían ser el mundo para mí. Cómo vimos las estrellas en los brazos del otro en la terraza de maami y planeamos nombrar ese brillo, usualmente en el cielo del suroeste, por nuestro primer hijo. Cómo cantábamos canciones de amor cada noche lo suficientemente fuerte como para molestar a los vecinos. Cómo fuimos por las vitrinas por vestidos y anillos de bodas. Cómo... maldita sea Kayode, prometí no traer de vuelta esos tiempos.

Aquí hay algo que te ayudará a superarme, no tuvimos la más perfecta unión de todos los tiempos, tuvimos nuestros defectos y no estábamos de acuerdo en muchas cosas. Por ejemplo, tartamudeas vergonzosamente y mi hábito hablador te molesta. Mi color favorito es el rojo, pero tú eres tan supersticioso, que ves el rojo como un mal presagio. Quieres gastar la mayor parte de tu vida en el interior de Ile -Ife mientras que yo ansiaba el Igboro de Eko

Mientras jurabas amarme, venga la lluvia, venga el sol, en el paraíso o en el infierno, has tenido a Bukky, Shade y la otra beldad de mejillas regordetas. Eso es todo lo que puedo decir. Me has mentido muchas veces y tampoco soy inocente en ese sentido.

En todo esto nosotros teníamos lo que otros podrían morir por tener, una amistad y un entendimiento inexplicables. Terminamos las oraciones del otro y algunas otras falacias emocionales que uno puede encontrar en un típico arlequín de los más vendidos. Has roto mi corazón antes, pero venias corriendo con apologías. Eso es verdadero coraje. Ahora estoy dando la espalda sin las disculpas adecuadas porque ninguna cantidad será adecuada.

Desearía poderte decir que te extrañaré, pero debes saber que la Dami que te echaría de menos se ha ido. Sin embargo, si te hace sentir mejor puedes seguir adelante y creerlo.

Todo eso está detrás de nosotros ahora, yo estoy acelerando este autobús hacia mi nuevo mundo sin plan de regreso. Estoy escribiendo esta carta, teniendo profundos pensamientos sobre ti quizás por última vez. Eres un buen chico; yo soy una chica diferente.

Haz lo que quieras con este diario cuando lo tengas. Conociéndote, creo que primero no tendrás idea de qué hacer con él. Después determinarás ponerlo sobre esa biblioteca de hierro en tu habitación en el medio de tu devastación para sentarse entre tus títulos menos leídos. Si alguna vez quieres complacer a la chica que tu bien sabes que yo era, vas a encontrar la manera de publicarlo, tal vez el mundo lo encontrará tremendamente convincente. Podrías hacer una fortuna después de todo, dejar que ese sea el legado de esa chica que te amó.

En todo esto, por favor encuentra un corazón liberal que me desee el bien en mi nueva vida. Desde lo profundo de mi corazón realmente deseo que encuentres esa nueva chica que te complementará en la forma en que la vieja yo lo hizo. Que te amará en la manera en que la vieja yo lo hizo. Que criticará y al mismo tiempo respetará tus decisiones en la forma en que la vieja yo lo hizo. Y, sobre todo, que domestique tu ego como la vieja yo lo hizo.

No soy ignorante del hecho de que esto te va a herir mucho. Después del incidente de ayer pensé que era apropiado hacerte leer este diario. Si vas a ser afectado por este drástico cambio en mí, entonces es sólo justo que intente lo mejor en darte conocer la causa de esto. Si alguna vez miré a tus ojos para decirte que te amo, entonces mereces saber del tornado que arrasó con ese amor.

Aunque nunca contamos con romper el corazón dentro de la trama del romance, sucede de todos modos. Es la ruptura de la cuerda que nunca está escrita en la sinfonía. Es la salpicadura de pintura sobre el lienzo que no ha sido concebida por el artista. En su peor momento, es el gran iceberg a miles de millas náuticas que el creador del titanic no previó.

Estas palabras de Robert Burns siguen sonando en mi cabeza,

Si nunca hubiéramos amado amablemente,

si nunca hubiéramos amado ciegamente

nunca nos hubiéramos encontrado o separado,

nunca habríamos tenido el corazón roto.

Espero que aún te gusten los poemas.

––––––––

Domingo, 11 de julio, 2010. 5:45pm

(Lahadi, Yuli goma sha daya, shekara 2010. Karfe biyar da minti arbain da biyar na rana)

El comandante de nuestro campamento es un fantástico mentiroso. Cuenta fábulas de hazañas militares y compromisos que le hubiera gustado tener en su carrera. Es el tipo de mentiroso que da vida a sus sueños y fantasías dentro de tu cabeza. Es tan bueno, que, en sus buenos días, podría mentirte hasta la muerte más rápido de lo que su arma puede matar.

Por ejemplo, anoche nos reunió afuera de nuestro hostal alrededor de una flameante llama de neumáticos gastados y algunas maderas de muebles viejos. Escuchamos con sólo pocas interrupciones su historia sobre una misión de paz de la ONU en la que participó. Dijo que fue en el 2006 en Kigali.

Mirando melancólicamente al aire narró con orgullo los detalles del papel que desempeñaba en la misión, cómo el honor se hinchaba en él cada vez que disparaba a los malos.

Tan intrigantes como eran sus historias, eran en su mejor estado, ficción. En mi memoria no había constancia de una crisis en esa tierra, en ese momento, como para exigir la participación de él y sus compañeros de disparar a los chicos malos. Él astutamente falló en dar una clara respuesta cuando lo presioné a dar detalles fácticos, pero supe no presionar demasiado para no dañar la diversión de la noche. Estaría condenada si lo hiciera.

Las otras chicas tampoco querían dañar la diversión o no sabían una cosa acerca del tema para detectar incluso la mentira más grande. Aunque, uno no contaría una falsa historia acerca de Lindsey Lohan o cualquiera de esas estrellas del pop occidental en MTV sin atrapado. Conocemos mejor esas historias.

El capitán Mahmoud es un buen soldado de valor y formación – lo de valor es lo que no puedo afirmar bajo juramento. Tiene tensos y voluminosos músculos y mide seis pies, ponle una pulgada más o menos. El deleite de una dama si lo imaginas sin camisa ­– lo cual me descubrí haciendo varias veces. Compartimos la misma tez, una brillante, oscura y suave piel, más suave de lo que esperaría de la piel de un soldado.

A diferencia de la mansedumbre de su rostro, su cabeza totalmente afeitada agregaba un poco de dureza a su apariencia. Lo que usualmente también es contrarrestado por su generosa sonrisa ocasional, que revela una orientación dental bien espaciada, una sonrisa que desaparece demasiado rápido. Especialmente cuando está nadando en una tormenta.

También lo considero patriótico. Sé que no hay una vara confiable para medir eso después de sólo unos momentos con él o con cualquiera. Sin embargo, puedo dar fe de eso por el triste tono de su, a menudo expresado, desdén por las amenazas en diferentes regiones del país... cuán uniforme es esto. Quiero decir que su entusiasmo por eliminar a los chichos de la bomba de Boko Haram coincide con sus deseos de que JTF aplaste a los militantes del sur.

Ahora me he vuelto aficionada a él, y sus bien cocinadas historias son parte de las pocas cosas que voy a extrañar cuando deje el campamento.

Es mi diecisieteavo día en este campamento Walio y mi experiencia ha sido equivalente a una mezcla de diversión y sudor. Sé que una gran porción de ambas cosas me espera aquí, pero como todos los demás, espero encontrar más de la primera.

Mi pereza se ha manifestado en gran medida, no gracias a las marchas matutinas y el estúpido entrenamiento militar por el que nos hacen pasar aquí. La caminata de resistencia es en cuatro días y aún tengo que encontrar la manera de evitarlo. Hacerle ojitos a Mahmoud no ha producido aún resultados tangibles, pero, no planeo darme por vencida.

Mis peores pesadillas en este campamento son los mosquitos. Me desperté esta mañana para encontrar que mi mosquitero había sido robado, y no era un problema para mi compañera de cama. Alguien tiene que estar haciendo bromas pesadas. Aunque, por lo menos estaba molesta porque usualmente no me ocupo de cosas así. Pronto, muy pronto, después de que las luces se apaguen, voy a encontrar a la siguiente persona o personas en perder su mosquitero. El ladrón sólo me dio una buena idea para terminar con un mosquitero de repuesto esta noche.

Viernes, 16 de Julio, 2010. 2:15pm

(Jumma’a, Yuli goma sha shidda, shekara 2010. Karfe biyu da minti goma sha biyar na rana)

¡Los hombres son tímidos! Luchan duro por ocultarlo. Es un hecho que he venido a confirmar por mí misma en las últimas dos semanas – por favor una ronda de aplausos para mí.

Un hombre joven a quien le encantaría decir Hola se detendría por casi la eternidad antes de reunir el adecuado coraje para hacerlo. A veces cuando él eventualmente lo hace, tartamudea al empezar la conversación. Qué vergonzoso.

Como es típico en mí, he sido más afortunada con los tipos que una puñada de chicas. Aún tengo que entender por qué me convierto en su favorita.

Podría ser el grácil movimiento de mis pies o el balanceo que producen mis curvas caderas. Podría ser también el atractivo de mi sonrisa, la inexplicable inocencia de mi mirada o quizá la vitalidad de mi risa. Podría ser un combo de dos o tres de esas. Incluso podría ser ninguna. Quizás algo que no he notado por mí misma. Supongo que puede ser la Maya Angelou en mí, que soy simplemente una mujer fenomenal. Me encanta decirme eso a mí misma. No me culparías por elegir creer algunos de los muchos halagos que recibo de los chicos.

Aún en los chicos de aquí, parece que cada uno de ellos tiene un cumplido – la mayoría insinceros – en su boca esperando por la menor oportunidad de derramarlo sobre ti. Desde mi temprana adolescencia, aprendí cómo manejar los cumplidos y halagos como esos, especialmente, cuando vienen del vecino con problemas estéticos. De todos modos, cuando viene de ese chico de rosados labios que ha logrado ocupar todo mi espacio de fantasía...pierdo las palabras en el mejor de los casos.

Un buen ejemplo sucedió con Francis hace unos pocos días. Para mis estándares él es el más encantador que haya visto en el campamento. Y fíjate, mis estándares son bastante altos.

Ofreció comprar mi almuerzo, lo cual acepté después de mucho resistirme.

Antes y durante el almuerzo Francis fue un completo caballero, pero no fue nada fuera del usual gesto de saludo del bien conocido compañero, típico en los chicos de estos días. Abrió la puerta para mí, cargó mi plato hasta la mesa, empujó mi silla, no se sentó hasta que yo me senté y después de haber tomado cerca de tres cucharadas paró para preguntarme si estaba disfrutando de la comida. Si hubiera preferido arroz joloff. Y el resto de gestos de eres la reina de mi imperio. Sabía que no debía ser conmovida por eso, y aun así no podía dejar de sonrojarme imprudentemente.

Debería estar avergonzada de mí misma, de verdad.

No pude más que apuntar cuan atípico era para el hombre africano promedio ser tan caballeroso, y ... ¡boom! Eso detonó la bomba de halagos en su lengua.

Dejó caer sus cubiertos suavemente, puso su mano derecha sobre mi izquierda y fijó una cálida mirada en mi rostro para decir, Para mi eres la presentación corporal más cercana de una mujer africana completamente desarrollada y fabulosamente dotada, mereces el más fino tratamiento que el mejor hombre africano pueda ofrecer.

Maldita sea, cruzaste la línea, serpiente de lengua dulce.

Si no hubiera sabido nada mejor, me hubiera caído de mi silla y desmayado. Incluso con lo que sabía de los hombres y sus lenguas, no pude esconder mi tímido rubor, ¿Qué puedo decir? dije con una amplia sonrisa.

Ese no fue solo el más profundo halago de mi vida; sino la simulación en presentación más fluida y firme.

Lo dejé esa tarde sin estar segura de qué hacer con su personalidad o cuán real era, pero estaba segura de que no obtendría lo que fuera que quisiera de mí. Eso habría funcionado conmigo cuando tenía dieciséis.

El tipo estaba siete años tarde.

2

Viernes, 23 de Julio, 2010. 9:30pm

(Jumma’a, Yuli ashirin da uku, shekara 2010. Karfe tara na rana)

Los eventos de los últimos días han sido, en su mayoría, dramáticos y divertidos. Primero, hubo una pelea de chicas en el corredor de nuestro hostal para el pervertido deleite de los chicos que miraban emocionados. La causa de la pelea fue una incógnita. No pude obtener la esencia completa pero estaba en la desvergonzada línea de, alguien le contó a alguien que alguien más estaba besando al chico de alguien. Un chico que era lindo para ambas chichas. Resultó algo enfermo cuando descubrí al chico en cuestión. Por lo que a mí respecta, es un idiota con músculos grandes y un coeficiente intelectual menor a su edad.

Liderando a la multitud gritando y abucheando estaba el Capt. Mahmoud y algunos otros uniformados hombres que ayudaron a examinar a las mujeres-gladiadoras después de que alcanzaron lo que creían que era el clímax. Toda la ropa rota y los rencores afuera.

A veces mis chicas pueden ser descaradas.

También, mañana será nuestro último día en el campamento. La emoción en el aire hablaba de la anticipación de una fiesta. Era como la víspera de algún festival tradicional en las cosas de Achebe se desmoronan.

La emoción no se trata tanto sobre las fanfarrias y pasarelas ensayadas para mañana, sino de la oportunidad de volver eventualmente a casa con las familias.

Había también sentimientos encontrados entre las chicas en mi vestíbulo. Era hora de reflexionar cuidadosamente sobre las últimas dos semanas, la sucia compañera de litera que han criticado, el chico de dulce boca que han besado y todas las otras cosas que extrañarían.

Por mí, haría ese largo viaje a casa con oraciones silenciosas en mi mente, esperando encontrar a maami en buen estado de salud o algo parecido. Aunque me aseguró que estaba bien la última vez que hablamos, el estrés en su voz la vendió. Sin embargo me siento un poco avergonzada al darme cuenta que yendo a casa a ver a mi Kay me emociona más que ver a maami.

La distancia creo que ha fortalecido hasta cierto grado nuestra relación. Tener que pasar las últimas tres semanas alrededor de chicos que son terriblemente infantiles y en su mayoría poco sinceros, me reveló cuán bendecida soy de tener a mi Kay.

Hablando de bendiciones, me senté esta tarde con algunas de las chicas y dos chicos, Michael y Rotimi, bajo el amplio dosel de un árbol frutal cerca del mercado mammy. El sol se estaba poniendo, una gran bola dorada rodando grandiosamente dentro del lejano horizonte sobre un cielo sin nubes. Como si estuviéramos bajo los ojos de Dios, alguien señaló cómo debemos contar nuestras bendiciones, las bendiciones de estar vivos.

En la apertura del campamento había habido temores por los rumores de un posible ataque bomba en ciertos campamentos. Esta amenaza fue disipada como sin fundamentos por las autoridades para evitar que entráramos en pánico. Quizás dejamos de estar en pánico, pero nunca faltaba en nuestras oraciones.

Al unísono reconocimos nuestra gratitud, pero Rotimi escépticamente mencionó que no se había acabado. El gobernador viene de visita mañana y todo es simplemente posible.

Jueves, 21 de septiembre, 2010. 10:30pm

(Talata, Satumba ashirin da daya, shekara 2010. Karfe goma da rabi na rana)

De todo mi viaje desde casa a Gumau, el trayecto en bus desde Bauchi central hasta Samunaki fue el más agotador. Viajamos en un cacharro aparentemente de archivo, que otro miembro del cuerpo descaradamente describió como una locomotora. El hecho de que se moviera era por sí mismo una maravilla, sin mencionar que llevaba gente y su equipaje a través de un viaje de veinticinco millas.

No es que no hubiera visto nada como eso en Ibadan, pero nunca había sentido de primera mano semejante milagro en movimiento, sin mencionar que parecía arrastrándose. Puedo apostar que yo corro