Requisitos del Estudiante Espiritual

Por Rubén Cedeño y Fernando Candiotto

SOBRE LA OBRA
Este libro es la compilación y evolución de dos textos: el primero de ellos se llamó “El Sendero de Ascensión”, publicado en 1985 como manual para un grupo de estudiantes de Metafísica que el autor mantuvo por algunos años en La Boyera, en Caracas. En el YMCA de la ciudad de New York, bajo las fuertes nevadas del mes de Diciembre de 1989, escribió y, luego, en Caracas, publicó “El Discípulo”, que, en una edición posterior, al unirlo con “El Sendero de Ascensión”, se editó con el título de “Cómo Vivir”. Tiempo después, el 25 de febrero del año 2005, fue reeditado, corregido y reformado, y apareció como “Cartilla Metafísica”. Para el año 2013, nuevamente corregido, aumentado y mejor ordenado, reaparece bajo el nombre de “Requisitos del Estudiante Espiritual”.

• Idioma: Español
• Editorial: Editorial Señora Porteña
• Fecha de lanzamiento: 30 nov 2020
• ISBN: 9789878390666

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BREVE HISTORIA DEL LIBRO

Este libro es la compilación y evolución de dos textos: el primero de ellos se llamó El Sendero de Ascensión, publicado en 1985 como manual para un grupo de estudiantes de Metafísica que el autor mantuvo por algunos años en La Boyera, en Caracas. En el YMCA de la ciudad de New York, bajo las fuertes nevadas del mes de Diciembre de 1989, escribió y, luego, en Caracas, publicó El Discípulo, que, en una edición posterior, al unirlo con El Sendero de Ascensión, se editó con el título de Cómo Vivir. Tiempo después, el 25 de febrero del año 2005, fue reeditado, corregido y reformado, y apareció como Cartilla Metafísica. Para el año 2013, nuevamente corregido, aumentado y mejor ordenado, reaparece bajo el nombre de Requisitos del Estudiante Espiritual.

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ESTUDIANTE ESPIRITUAL

El estudiante espiritual es aquel que decide, mediante el estudio, Vivenciar la Enseñanza Espiritual que le comunica un facilitador espiritual o un Maestro de Sabiduría, poniendo en práctica las Siete Leyes Universales, los Siete Rayos, el Cristo, la Divina Presencia de Dios Yo Soy, transmutando su mal karma con la Llama Violeta, purificándose con la Llama Blanca, encaminado al servicio de los demás hasta lograr su Ascensión.

Se puede pensar que mediante el estudio de libros espirituales se llega a ser estudiante espiritual; sí, pero hasta un punto limitado, ya que, para ir adelante en este sentido, se necesitan determinadas vivencias junto a sabidurías específicas que no están prescritas en los libros, y solo un facilitador o Maestro Ascendido las puede suministrar a viva voz; esto es lo que se conoce en Oriente como Darshan.

CÚANDO ERES UN ESTUDIANTE ESPIRITUAL

1. Eres un estudiante espiritual, si te comunica la Enseñanza Espiritual un facilitador físico o un Maestro Ascendido, de forma personal, tangible y visible, no por mediumnidad ni canalizaciones.

2. Eres un estudiante espiritual, si has superado las etapas de la Búsqueda y del Probacionismo, y tú aceptas a un facilitador o Maestro Ascendido afín a ti –a veces de tu mismo Rayo de acción–, que te ha observado, amándolo inmensamente, y este te toma cariño e interés.

3. Como estudiante espiritual, un facilitador o Maestro Ascendido te toma como estudiante para sutilmente orientarte, darte sugerencias en el trabajo que hay que hacer en beneficio mundial y así llevarte a la cumbre de la realización de la Primera Iniciación, que es el Despertar definitivo de tu Cristo Interior, para iniciar, en un futuro, tu membresía dentro de la Jerarquía Espiritual de Shamballa.

4. Como estudiante espiritual, aceptarás que te instruyan en la Enseñanza relacionada con la Vivencia Espiritual, sobre cómo servirle a los demás, la realización del Cristo, tu Presencia Yo Soy y, posteriormente, la Ascensión.

5. Tu contacto con el que te comunica la Enseñanza Espiritual es una relación real y natural, sin dependencia, imposición, autoritarismo ni presiones.

6. Ni el facilitador ni el Maestro Ascendido te exigen obediencia. Con ellos participas de la Enseñanza Espiritual de forma libre y espontánea, aceptando lo que tu estado de consciencia te permite, sea poco o mucho; todo depende de ti, esto se hace de forma consciente. Si de tu interior te surge el anhelo de hacer lo que hay que hacer, sin ningún tipo de presiones ni obligaciones, lo haces, no porque el facilitador o Maestro te lo ordene, sino porque tú lo deseas. Tu progreso o atraso dependerá de la medida en que aceptes o no las sugerencias de tu facilitador.

7. Cuando, como estudiante espiritual, se te está despertando el Cristo y estás participando con el facilitador o Maestro, ya aprendes muy poco de los libros, y mucho menos de conferencias oportunas que dan por allí personas que no son tu facilitador. Aprendes de todo lo que te rodea, sobre todo por la observación del cumplimiento de las Leyes y los Aspectos de Dios en tu propia vida y en las vidas de otras personas o de personajes históricos, bien sea por lecturas, películas o documentales. Aprendes de las vivencias que el facilitador o el Maestro hacen que vivas en el diario acontecer, de los aparentes problemas que surgen, y también solucionándole situaciones a las personas que acuden a ti en busca de auxilio. Así, vivencias la Sabiduría en cuerpo, corazón y mente, y no en el plano teórico,