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Supongo Que Seguire Caminando: RELATOS, #1
Supongo Que Seguire Caminando: RELATOS, #1
Supongo Que Seguire Caminando: RELATOS, #1
Libro electrónico312 páginas4 horas

Supongo Que Seguire Caminando: RELATOS, #1

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Continúa el viaje espiritual y físico iniciado en mi libro anterior El día fue hecho para caminar por el Camino de Santiago de Compostela, las antiguas rutas de peregrinación a través de Europa a Santiago en el noroeste de España.

IdiomaEspañol
EditorialBadPress
Fecha de lanzamiento19 nov 2020
ISBN9781071574638
Supongo Que Seguire Caminando: RELATOS, #1

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    Supongo Que Seguire Caminando - Noel Braun

    ACERCA DEL AUTOR

    Noel Braun comenzó su carrera como profesor de escuela de campo, luego se trasladó a una carrera corporativa, que lo llevó de Melbourne a Perth y Sydney. Ha tenido pasión  por la escritura de por vida y escribió las primeras palabras de sus novelas hace casi cuarenta años. Después de una ajetreada carrera y criado a una familia de cuatro, ha encontrado el tiempo en la jubilación para cumplir con su ambición de mucho tiempo y ver su trabajo impreso.

    Noel ha publicado dos novelas: Amigo y filósofo y Calle Whistler. También ha publicado un libro de memorias, No Way to Behave at a Funeral, que describe su viaje tras la muerte por suicidio de su esposa Maris, y El día fue hecho para caminar, su primera exploración de Le Chemin de Saint-Jacques-de-Compostelle y El Camino de Santiago de Compostela. Está trabajando en otros manuscritos y en el desarrollo de una nueva carrera en escritura.

    Noel vive en las montañas nevadas. Es un caminante entusiasta y disfruta  salir a los parques nacionales que rodean su casa.

    Dedicado a la memoria de mi querida esposa, Maris,

    cuyo apoyo, confianza y estímulo silencioso

    me inspiró, y continúa haciéndolo

    "Somos peregrinos en el viaje

    Somos hermanos en el camino

    Estamos aquí para ayudarnos unos a otros

    Camina por la milla y carga."

    – De 'The Servant Song' de Richard Gillard

    Contenido

    Preámbulo – Otro día para caminar

    1. Nadie puede llegar al amanecer sin pasar por la noche

    2. Hoy es un regalo

    3. Que esta vela sea un poco de mí mismo

    4. ¿Cuándo voy a disfrutar el momento?

    Tercer acto – Francia y España

    La Vía Tolosana Chemin d'Arles Camino Aragonés 39

    5. Si vas lejos, si subes alto, debes comenzar con un solo paso

    6. Bendito seas, peregrino, si tu mochila  se está vaciando de las cosas y tu corazón no sabe dónde colgar tantos sentimientos y emociones.

    7. Bienaventurado eres, peregrino, si lo que más te preocupa no es llegar, sino llegar con los demás

    8. Bienaventurado eres, peregrino, si descubres que un paso atrás para ayudar a otro es más valioso que cien pasos adelante sin ver quién o qué está a tu lado.

    9. El espíritu está dispuesto, pero la carne es débil.

    10. Bendito seas, peregrino, cuando no tengas palabras para dar gracias por todo lo que te sorprende en cada giro y vuelta en el camino.

    11. Cuando tu determinación cambia, todo lo demás comienza a moverse en la dirección que deseas.

    12. Toda la oscuridad del mundo no puede apagar la luz de una sola vela

    ––––––––

    ENTREACTO – El viaje está lejos de acabarse

    13 .Es sólo bajando al abismo que recuperamos los tesoros de la vida.

    14. Bienaventurado eres, peregrino, si buscas la verdad y haces del Camino una vida de tu vida.

    15. La mejor manera de encontrarse a sí mismo es perderse al servicio de los demás.

    16. Tren nocturno a Lisboa

    Cuarto acto – Portugal y España

    Camino portugués - La Vía Lusitana 181

    17. Bendito seas, peregrino, si descubres que el Camino abre tus ojos a lo que no se ve.

    18. Una fe que no duda es una fe muerta.

    19. Debemos aceptar una buena decepción, pero nunca perder la esperanza infinita.

    20. Bienaventurado eres, peregrino, si en el camino te encuentras y te regalas  el tiempo, sin apresurarte, para no ignorar la imagen en tu corazón.

    21. El agua desgasta la piedra.

    22. Nadie en el mundo puede cambiar la verdad. Lo que podemos hacer y debemos hacer es buscar la verdad y servirla cuando la hayamos encontrado.

    -Reconocimientos

    Preámbulo

    Otro día para caminar

    1

    Nul ne peut atteindre l’aube sans passer par le chemin de la nuit

    (Nadie puede llegar al amanecer sin pasar la noche)

    Khalil Gibran

    ¡Aquí vamos otra vez! El avión está listo para despegar. Lunes 22 de julio de 2013. El día ha llegado, tan rápidamente después de todo el trabajo preparando mi cuerpo. Mi guía francesa describe esta ruta del Camino como solitaria y mucho menos transitada. Gran parte de ella es en los bosques, sus terrenos son diversos, las colinas son serias, con altitudes elevadas incluso antes de subir a los Pirineos. Por lo tanto:

    'Le marcheur doit s'y préparer et étre en bonne condition physique.'

    (El caminante debe prepararse bien y  estar en buena forma física).

    Cada ruta del Camino requiere un nivel decente de forma física, éste sonaba mucho más arduo; Asistí al gimnasio cada dos días y me estuve a la vez con Jenni, mi entrenadora de gimnasio. Ella puso mucho trabajo en mi preparación para paseos anteriores; ya que es igualmente entusiasta, mandona y cariñosa. Yo era su cliente de más edad  (ochenta años) pero ella trabajó duro y no tomó prisioneros, en serio, estaba orgullosa de mí y le dijo a todos lo que su Noel estaba tramando. Con su aliento, asistí a clases de gimnasia de yoga, Pilates y estiramiento, a menudo era  el varón solitario en una clase de niñas mayores o muñecas jóvenes vestidas de leotardo. Fui a dar largos paseos con un paquete completamente cargado en el Parque Nacional adyacente a mi casa.

    Me dolía la pierna izquierda, la rodilla y la cadera algunos días, creo que me dolían por separado y otros días se unían en un coro doloroso; no quería mirar muy de cerca la causa, no iban a detenerme; visité a mi quiropráctico Steven, uno de mis exploradores en los años ochenta. Tuve sesiones con el fisioterapeuta del gimnasio, Gary; podía ver que  quedarme en casa no era una opción, así que prepare una hoja de figuras  de ejercicios después de caminar cada día. Tuve un chequeo con mi cardiólogo. Él había insertado un stent (pequeño tubo) en mi arteria anterior izquierda en mayo de 2007. Hice una prueba de esfuerzo y  me hizo caminar en la cinta de correr a 7 km por hora hasta un nivel de inclinación de 17 grados, con razón estaba exhausto; el especialista me dijo que había detectado algo y me hizo volver para una prueba de eco de sonido con uno de sus colegas, quien me hizo hacer más pruebas de esfuerzo; ya que quería ver mi corazón durante el ejercicio y en reposo.

    Este segundo cardiólogo dijo: "Puedes hacer las maletas. Puedo detectar una diferencia, pero es muy sutil. Mi cardiólogo no dijo '¡No te vayas!', pero subrayó que los hombres de mi edad por lo general no acostumbran a transitar largas distancias caminando en terrenos difíciles, no, por supuesto que no, van en cruceros y se sientan en tumbonas bebiendo cerveza y engordando.

    Una distracción fue  imaginar mi último libro después de su publicación. Esperaba ver la impresión final en la galería antes de ir al extranjero; empecé a escribir tan pronto como regresé de España y Francia en octubre de 2011. Mi objetivo era comprobar las copias, hacer cualquier corrección final y dar la aprobación para ejecutar. El libro estaría listo para su lanzamiento para cuando regresara, esperaba,  fustrado, revisé la casilla de letras todos los días hasta el último. Estaba molesto porque comprobar las galeras podría retrasar por otros tres meses y el libro no estaría disponible hasta 2014. Le di una dirección al editor en Montpellier, Francia. La impresión de la galera de mi primer libro me persiguió por todo el mundo en 2005 y finalmente me encontró en Oregón, Estados Unidos. Leí la impresión en vuelos internos y la terminé tarde en la noche en un albergue en Washington DC.

    Debí haber sabido qué empacar, después de haber caminado el Camino dos veces. En mi primer viaje, partí con una mochila de dieciocho kilos. Al final del segundo viaje había reducido el peso a diez; viajé con lo esencial. Sin embargo, tuve la tentación de tomar este y ese artículo por si acaso... Ya debería saberlo.

    Recordé las lecciones aprendidas de mis dos peregrinaciones anteriores.

    •Viaja ligeramente— eso también se aplica a la vida.

    •Quédate con el momento. No te preocupes por lo que pueda pasar. Lo que me preocupa nunca sucede.

    •Soy mucho más ingenioso de lo que creo. Puede que haya pensado que tendría problemas con los idiomas,  me desesperaría  si no tendría  las direcciones,  que sería torpe con gente nueva, o no podría hacer frente a una crisis que me arrojaria al fondo, y no sólo sobreviví, sino que prosperé.

    •Nunca pienses que tienes el control o que tus planes funcionarán. Es una ventaja si lo hacen. Reconoce que nunca puedes estar seguro de nada. La vida está llena de incertidumbres, ambigüedades y contradicciones. Déjalo en manos de Dios.

    Las cosas salen bien al final. Recordemos las palabras de Descartes: "Salvo nuestros pensamientos, no hay nada absolutamente en nuestro poder".

    Estaba a punto de viajar a Francia y partí en el Camino de Santiago, o en francés Le Chemin de Saint-Jacques de Compostelle, he estado siguiendo estas rutas, siendo su destino el supuesto lugar de entierro de Santiago Apóstol ; la práctica de la peregrinación ha resucitado en los tiempos modernos o en español, El Camino de Santiago de Compostela ,se trata de una serie de senderos de larga distancia por toda Europa que comprenden las grandes rutas de peregrinación hacia Santiago de Compostela en Galicia Occidental, España. Durante más de mil años, los peregrinos  han estado siguiendo estas rutas, siendo su destino, el supuesto lugar de entierro de Santiago Apóstol .La práctica de la peregrinación ha resucitado en los tiempos modernos

    Los peregrinos de hoy siguen muy por los mismos caminos tomados por los peregrinos medievales. Suben las mismas montañas, cruzan los mismos ríos y pasan por los mismos pueblos, iglesias, capillas y catedrales.

    Ya había atravesado dos de estas rutas. En 2010, caminé la ruta conocida como La Via Podiensis en Francia desde Le Puy-en-Velay hasta Saint-Jean-Pied-de-Port a los pies de los Pirineos. En 2011, regresé a Saint-Jean-Pied-de-Port, crucé los Pirineos y seguí la ruta conocida como el Camino Francés a través de España hasta Santiago de Compostela.

    Estaba a punto de abordar una tercera ruta. Dediqué mi caminata a la memoria de mi esposa Maris . murió ocho años y medio antes por suicidio después de años de sufrir depresión; su imagen nunca desaparecerá en las nieblas de mi memoria. Tengo ocho fotografías de ella en varias etapas de nuestras vidas, juntos posando en toda mi casa. En mi habitación, hay dos fotos de Maris y yo, tomadas unos meses antes de su muerte por mi hija Ángela. Actúas como si tuvieras dieciséis sentenció ella. Otra nos muestra acurrucados juntos, que es la que aparece en la página de dedicatoria de este libro. Una sonrisa enmascaraba su tormento. La otra foto nos tiene besándonos: un dibujo de,  Mi abuela  hecho por su nieta de seis años, Tessa, cuelga de mi cama. Con vistas a mi mesa de comedor hay cuatro fotografías tomadas en varias etapas de la vida de Maris; una es cuando la conocí, tenía veintidós años, la siguiente foto fue tomada el día de nuestra boda, tenía veinticinco años, luego tengo una foto de la familia: Ángela, Jacinta, Stephen y Tim, Maris y yo,  cuando debía  ir al hospital para una operación pulmonar, la extirpación de hongos de su pulmón. Decidió, de hecho, que se necesitaba una sesión de fotos con un profesional en caso de que no sobreviviera. Nunca nos habíamos sentado para una foto formal de la familia. Tenía treinta y nueve años; la cuarta fue tomada unos pocos meses antes de su muerte. Tenía sesenta y seis años; Su rostro muestra la tensión de años de lucha contra su opresor insidioso. En una librería hay una foto de nosotros firmando el registro de  nuestra boda, destila la belleza y la alegría de la anticipación de nuestra vida juntos. Estuvimos casados cuarenta y dos años.

    Frente a estas fotos hay velas. Enciendo una regularmente, tal vez cuando algo desencadena y se enciende mi corazón. Maris siempre está conmigo. Hablo con ella y a veces la siento hablando conmigo, castigándome o diciéndome qué hacer. (Cada vez que ella dijo '¡Noel!' con énfasis en las dos sílabas, sabía que estaba en problemas.) Viajó conmigo cada paso doloroso y alegre del camino a través de Francia y España. Encendí velas para ella en capillas e iglesias. Maris sigue conmigo, aunque en otra forma. Vive en mi corazón y en mi alma. Camina conmigo, cada paso doloroso e iluminador del camino.

    Hay muchas razones por las que la gente emprende el recorrido, Para algunos, es un paseo de larga distancia, un día de fiesta, un descanso de la rutina de su vida diaria; otros están allí para la aventura de viajar en otro país, otros son curiosos: ¿De qué se trata este Camino? Muchos disfrutan de los aspectos culturales; la historia rodea a los peregrinos a lo largo de esa ruta como pasar por un museo al aire libre. Para muchos, las motivaciones son espirituales. Se alejan del bullicio y, en silencio y soledad, buscan sentido en sus vidas. Pueden estar procesando el duelo, una crisis importante, una transición significativa como la jubilación. Aquellos que tienen anhelo religioso pueden tener un deseo de oración intensa o pueden sentir que encontrarán a Dios en el camino. La rutina diaria puede adormecer la conciencia de la posibilidad de ideas espirituales y emocionales en nuestra vida cotidiana.

    La peregrinación física es una metáfora de un viaje espiritual interior. Es como viajar a través de dos paisajes paralelos.

    El viaje físico está entrelazado y en diálogo con el viaje espiritual interior. La privación y las dificultades duraderas son una parte importante de la experiencia. Continuaba un viaje de autodescubrimiento que implicaría muchos pasajes oscuros antes de llegar a la luz. Emprender otra ruta del Camino era una compulsión tan fuerte como cualquier adicción. Mi pierna izquierda era un factor nuevo. ¿Cómo se levantaría otros 700 km? ¿Cómo me iría? Pensé en algunos graffitis franceses:

    'Il faut marcher doucement and lentement.'

    (Uno debe caminar suavemente y lentamente).

    Estaba decidido a no apresurarme. Me había dado mucho tiempo. Saborearía cada paso del camino. Estaba agradecido por la salud, la aptitud, la confianza y el entusiasmo para emprender un desafío tan arduo a mi edad.

    Cuando se lo dije a mis amigos, muchos se sacudieron la cabeza. ¿Por asombro o envidia? Todos me deseaban lo mejor. Sentí la presión de sus expectativas. Ahora que me había comprometido, sabía que tenía que completar la tarea. Jo, una de mis amigas  Lifeline, caminó por el Camino Francés con su hija. A menudo, en esos días en que casi terminaban, solían decirse unos a otros: 'Si Noel puede hacerlo, nosotros también'.

    A principios de ese año fui orador invitado en una reunión del club Probus (club de mente sana cuerpo sano). Hablé del Camino, de su historia y de las distancias que implica; uno de los miembros me preguntó si realmente lo había caminado. Su tono sugería que cualquier persona razonable no quería escuchar de ello. Cuando le contesté que había caminado 1500 km, primero por Francia y luego por toda España, sentí su incredulidad. La mayoría de mis oyentes tenían esa misma apariencia de escepticismo de no te engañes; un Inteligente Alec preguntó si la autoflagelación era mi próximo proyecto. Sentí que los viajeros en esta audiencia venían de los cruceros donde se cuidaba cada comodidad y el sentido de la aventura se expresaba al probar algunas bebidas nuevas de la lista de cócteles. (¿Escucho a mi Maris decir?: ¡ Noel ! ¡No seas tan despreciativo!')

    Yo era un aventurero de ochenta años. Este no era un paseo de domingo en el parque  y estaba desesperado por emprenderlo. Lo quería con una determinación que amenazaba con estallar de mi piel y unir las fuerzas de la creación. Me pondría en una tarea que probablemente haría que la gente  más joven por décadas se dedicara al mero pensamiento. Quería estar preparado para cualquier cosa, bueno, no exactamente nada, quería ver este Camino a través de mi sentido de la aventura, que estaba a punto de ser probado.

    2. Hoy es un regalo

    Mi hija, Ángela, me llevó al aeropuerto. Había hecho un gran esfuerzo de manejar a tres niños exigentes y equilibrar la vida familiar con el trabajo a tiempo completo, deseaba poder dejar atrás a su familia y escapar conmigo; Sus últimas palabras: ¡Ve por él, papá!. El avión estaba un tercio lleno, un contraste con mis vuelos anteriores al extranjero cuando todos los asientos estaban ocupados. Me senté en el asiento de la ventana y vi a Australia pasar por debajo de mí a primera hora de la tarde; otro contraste con los vuelos anteriores que salieron en la oscuridad de la noche. El avión pasó a través de un cielo azul en masas de nubes grises bordeadas de bultos blancos y emergió en un resplandor de luz solar.  Ya era un peregrino, pasando por un mundo atemporal y misterioso inaccesible. ¡Las partes remotas de Australia en un buen día! Colinas de arena roja onduladas como olas que se extendían a través del vasto paisaje. Las tribus aborígenes probablemente llamaron a esto hogar durante miles de años y probablemente todavía estaban en casa. ¿Alguien vivirá en esta tierra vacía? No había señales de vida moderna, ni casas, ni rastros a través de este terreno prístino e inalterado. Los antiguos aborígenes vagaban por esta tierra mucho antes que los europeos. En su silencio y soledad, conocían sus secretos, secretos que yo y otros pueblos no indígenas nunca conoceremos. Fue parte de la creación al igual que el hermoso campo y montañas francesas y españolas  que eran parte de mí en mis anteriores paseos  de Camino.

    Dejamos atrás la masa de tierra australiana y debajo no había nada que mirar o admirar. Ignoré el entretenimiento a bordo y reflexioné lo aprendido de mis dos peregrinaciones anteriores; es que soy el juez y el jurado de lo que mis límites son y de lo que soy capaz. Mientras espero con ansias esta próxima peregrinación, estoy armado con el conocimiento de que la edad no me había limitado. Me gustaría pensar que mi envejecimiento se detuvo aquí. Mi mundo se ha ampliado en lugar de estrecharse, lo que parece ser el destino de muchas personas a mi edad. Recuerdo mis C´s y S´s, la fórmula que desarrollé poco después de la muerte de Maris en Fairfield en las praderas nevadas de Idaho. Enfrenté  mis desafíos con CyS, eso es coraje, convicción, confianza y compasión; y no te preocupes demasiado por las S, eso es preocupación por la aprobación social, la seguridad y lo seguro. No tengo miedo de ir más allá de mis límites.

    El antiguo peregrino tenía que pasar a veces a través de países peligrosos en su camino a Santiago. Mi primera parada fue Singapur, no tan peligrosa, pero no sin sus peligros, llamé a mi sobrino James que había asumido un nuevo trabajo en enero. Fui el primer miembro de la familia en visitarle. Mi sobrina, su madre Anne, estaba interesada en saber cómo  estaba su hijo menor en su primera ida muy lejana al extranjero. Mi hermana María, la abuela, estaba ansiosa por un informe de primera mano.

    Me encontré con mi primer peligro en inmigración. El joven oficial no aceptó el hecho que no conocía la dirección de James. No me iba a  dejar perder en Singapur hasta tanto no informara donde me alojaba. Llamé a James. En realidad, podía verme desde el otro lado del recinto de inmigración. Nos saludamos el uno al otro. James voluntariamente dio su dirección no  sin antes  sugerirme que le comprara vodka libre de impuestos. James se autodenomina un entusiasta habitual, su tiempo en Singapur no había atenuado su exuberancia de  vida. Singapur le convenía. El ajetreo, el bullicio y el esfuerzo sin límites han transformado una isla tropical en uno de los países más ricos del mundo. Multitud de hombres y mujeres bien vestidos marchan hacia nuevos y brillantes rascacielos y edificios coloniales. Autobuses, coches y taxis transitan entre humo. El aire vaporoso está lleno de bocinas, sonidos del motor, chirridos y de los pasos repetidos de peatones.

    Me llevó a su casa en West Coast Gardens en un complejo de edificios de gran altura con tres piscinas y le dió, a su tío abuelo de ochenta años, un colchón para dormir en el piso de la sala de estar de su unidad del piso 18 que comparte con otros dos empleados de la compañía para la que trabaja: Waterworld en Universal Studios. James hablo sobre otras unidades en el complejo donde la compañía albergaba a su personal.

    Al día siguiente James me llevó a Universal Studios. Es un parque de atracciones de veinte hectáreas ubicado dentro de Resorts World Sentosa en la isla de Sentosa. Consta de siete zonas temáticas basadas en películas o programas de televisión como Battlestar Galactica, Shrek y Monster Rock. Waterworld está inspirado en la película estadounidense de ciencia ficción post-apocalíptica de 1995 protagonizada por Kevin Costner y dirigida por Kevin Reynolds. James es uno de los tres actores que interpretaron el papel de Diácono, el archivillano de la serie. James consiguió este trabajo sobre la base de su experiencia en Movieworld en la Costa de Oro, donde interpretó a personajes como Shrek y Scooby Doo. Es un aspirante a actor.

    Waterworld es uno de los espectáculos más grandes del parque temático. La acción cobra vida en una ola de acrobacias que desafían la muerte, junto con emociones y secuencias de explosiones reales de fuego y agua. James estaba programado para ese día, así que lo vi en acción en tres shows. Ciertamente disfruté del espectáculo, una compleja combinación de acrobacias, motos acuáticas, disparos de armas, explosiones, llamas, pirotecnia y un hidroavión para añadir a la acción – todo en su totalidad.

    Este peregrino, junto con el público, tuvo que hacer frente a sus propios peligros. Los artistas estaban decididos a mantener sus espectadores tan húmedos como fuera posible. El 'calentamiento' del espectáculo implicaba tirar cubos de agua sobre la gente. Las motos acuáticas enviaban grandes chorros de agua sobre su audiencia; igual de bien.

    Singapur tiene un clima caluroso, la gente que parecía amar su empapado  que se secaba en minutos. Me encantó la actuación de James. El papel le dio una oportunidad perversa para levantarse y dar  su risa malvada que se sumó a su villanía. Pude ver que le encantaba su trabajo y disfrutaba pavoneando sus cosas. El sacerdote  encuentra  su destino cayendo en llamas desde una gran altura y en el tercer espectáculo pude ver donde el doble tomo el puesto. Después del espectáculo, los espectadores competían unos con otros para  tomarse una foto con el elenco. Si no te importa empaparte, es un gran espectáculo.

    Después de los shows, James me mostró  Singapur; disfrutamos de un par de cervezas en el Hard Rock Café después de un agotador día en el calor. Me llevó a comer al Ayer Rajah Hawker Centre y food Hall. Antes de hacer nuestras reservaciones, bregamos nuestro camino alrededor de los muchos puestos de comida. Todos querían que le probáramos. Disfruté del Centro, un pedacito de auténtica Asia, en contraste con el mundo importado de Universal Studies, Hard Rock Café, Starbucks y McDonalds.

    El centro estaba cerca de la unidad de James, así que caminamos a casa y en el camino nos encontramos con nuestro próximo peligro; fuimos testigos de violencia doméstica; un grupo de indios se reunieron en un parque, algunos en la luz, pero muchos en las sombras. Un hombre estaba golpeando a una mujer, ella se encogía por sus golpes, llorando y gritando. James quería intervenir, yo también lo sentía por ella; me alegro  que no lo hiciera. El, un joven impulsivo y pudo haber cruzado una línea cultural en territorio desconocido. ¿Cuál es la historia detrás de esta escena? ¿Por qué estaba siendo castigada? Si hubiera tratado de detener al hombre, ¿qué habrían hecho los demás? Tuve visiones de una turba india saliendo de la oscuridad, descendiendo sobre nosotros y repartiendo represalias por nuestra interferencia; la preocupación por mi propia piel, superó mi sensación de injusticia, sentí temor.

    Al día siguiente tomamos el autobús de la comuna a la estación de MRT (Subway) en Clementi. Viajamos en tren algunas estaciones para visitar algunos jardines chinos y japoneses. Es extraño ver el espacio abierto en una ciudad tan bulliciosa y ruidosa. Aquí estaba Singapur

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