Descubre millones de libros electrónicos, audiolibros y mucho más con una prueba gratuita

Solo $11.99/mes después de la prueba. Puedes cancelar en cualquier momento.

Poemario
Poemario
Poemario
Libro electrónico139 páginas33 minutos

Poemario

Calificación: 0 de 5 estrellas

()

Leer la vista previa

Información de este libro electrónico

Magalí Morales nos invita a abrir su escafandra con éste, su primer libro; de a uno nos acumulamos aquí como gatos inquietos e indiscretos, curioseando cerca de un cartel que es advertencia y bienvenida a una intimidad ajena que, por lo que adolece, nos concierne.
Este preámbulo es el muelle desde el cual nos dejaremos caer para sumergirnos en una profunda, dulce y oscura identidad. Este poemario es el eco de un soliloquio, la sombra erecta de un árbol caído, una cárcel común para ángeles y demonios capturados a lo largo de una etapa de la vida.
IdiomaEspañol
Fecha de lanzamiento1 sept 2020
ISBN9789878707648
Poemario

Relacionado con Poemario

Libros electrónicos relacionados

Poesía para usted

Ver más

Artículos relacionados

Categorías relacionadas

Comentarios para Poemario

Calificación: 0 de 5 estrellas
0 calificaciones

0 clasificaciones0 comentarios

¿Qué te pareció?

Toca para calificar

Los comentarios deben tener al menos 10 palabras

    Vista previa del libro

    Poemario - Maga Nuit

    Cappa.

    Reincidir

    Caigo en otra fantasía, aunque esta vez con aviso. Terco mi deseo, se abalanza a la aventura.

    De sus bailes entre los ojos y notas sobre números.

    Sus pupilas maquilladas,

    sus ganas de morder, sus costillas flotantes.

    Los cartílagos sin alas,

    que me ataron a una danza en pijamas.

    Yo, su arlequín; ella, la reina de la fábula.

    Sin nada que perder, sin deber nada.

    Una noche de locura, y luego, volver

    a mi complejidad diaria.

    Ilógico

    Un ilógico suelto

    con el lazo de sangre eterno,

    juega a la mancha,

    esquiva, enferma.

    Con el fruto sagrado,

    como bandera o trofeo,

    aparece, entre sombras,

    riendo Maquiavelo.

    Al sarcasmo del tiempo,

    sin lengua, sin voz;

    dagas arroja,

    en donde duele.

    Por derecho

    legítimo de sangre,

    aunque no más que aquello,

    librarme no puedo,

    del destino caprichoso.

    Quiso que la inocencia,

    el desgano y la resignación

    voltearan hacia la serpiente,

    disfrazada según lo oportuno.

    Y ahora esa dicha,

    por obligación,

    aún no íntegra,

    baila entre dos.

    El contrario y el amor.

    Quiera ese destino,

    el sentimiento y la verdad,

    sepa abrir los ojos,

    elija lo mejor.

    Con conocimiento y sabiduría,

    y no por diversión.

    Transparencias

    Me había ennegrecido y marchitado

    en la primavera de mi vida.

    Esperaba impaciente el siguiente día,

    como si el sol trajera buenas nuevas.

    Conteniendo el aliento como si al exhalar

    expulsara mi ansiedad, como se exhala

    el humo del cigarrillo durante las noches

    desveladas, nerviosas.

    Como las expresiones sinceras de aquel

    barroco cansado que emerge de las sombras,

    mi energía convulsiona aparentando

    quietud; mis palabras, que a veces van

    en contra de mi cuerpo, me postergan,

    mientras este me lleva por donde mis deseos

    ya habían trazado una ruta ineludible.

    Períodos de gris trágico que provocan

    sacudidas, se intercalan con alguna que otra

    causalidad que me lleva a nudos

    inesperados, algún atajo encajonado.

    Vuelve a amanecer en mi paisaje inestable,

    mientras vuelvo a contener el aliento,

    quizá queriendo contener el tiempo.

    Soltar

    Tengo que dejarte partir con el ala quebrada.

    Yo, naturaleza desengañada y vuelta a engañar.

    Entre los arrebatos del alud te atrapé en vuelo.

    Tú, dejándote atrapar.

    Pero tengo que ser alud para volverme brisa.

    Porque cuando fui ave tardé en volar.

    Con el espíritu más grande que las alas

    Y corazón de temporal.

    Me desarmé de estas plumas suaves,

    del amor terrenal.

    Y aunque ame, sufra y goce,

    como viento iré más allá.

    Naif

    Te dedico mis soles, mi luz, mis nombres.

    Te dedico mis noches, su melancolía dulce,

    sus lunas, los cantos de las hojas de sus árboles.

    Te dedico mi escote, su caída, su simpleza,

    te dedico su perfume, su piel gastada, quebradiza.

    Te dedico mis palabras ocultas, mis ojos

    que las dibujan en el aire, mi cuerpo que las

    escribe en el tuyo.

    Te dedico las grietas

    ¿Disfrutas la vista previa?
    Página 1 de 1