Descubre millones de libros electrónicos, audiolibros y mucho más con una prueba gratuita

Solo $11.99/mes después de la prueba. Puedes cancelar en cualquier momento.

Niño marica
Niño marica
Niño marica
Libro electrónico44 páginas23 minutos

Niño marica

Calificación: 5 de 5 estrellas

5/5

()

Leer la vista previa

Información de este libro electrónico

Poemario compuesto por dos partes.

Una primera en la que se narra la historia de un niño que se siente diferente y empieza a entender su homosexualidad.

En la segunda parte este niño ya es un adolescente, y se enfrenta a su realidad y sentimientos como adolescente homosexual.

Niño marica es el primer libro de Oscar Espirita.
IdiomaEspañol
Fecha de lanzamiento1 jun 2015
ISBN9788494952364
Niño marica

Relacionado con Niño marica

Libros electrónicos relacionados

Poesía para usted

Ver más

Artículos relacionados

Categorías relacionadas

Comentarios para Niño marica

Calificación: 5 de 5 estrellas
5/5

1 clasificación0 comentarios

¿Qué te pareció?

Toca para calificar

Los comentarios deben tener al menos 10 palabras

    Vista previa del libro

    Niño marica - Óscar Espirita

    NIÑO MARICA

    © Óscar Espirita. 2015

    © Andrés Sierra. 2015

    © Ediciones Hidroavión. 2015 

    Texto 

    Óscar Espirita

    Ilustraciones y portada 

    Andrés Sierra

    Editado por 

    Ediciones Hidroavión

    www.edicioneshidroavion.com

    ISBN:

    Depósito legal: A 490-2015

    Ejemplar digital autoridazo por Ediciones Hidroavión.

    Todos los derechos reservados. Esta publicación no puede ser reproducida ni parcialmente y en su totalidad. De igual forma no podrá ser registrada y/o transmitida por un sistema de recuperación de información bajo ningún concepto, sea éste electrónico, mecánico, por grabación, por fotocopia u otros medios sin el permiso explícito y por escrito del propietario de los derechos de autor. La infracción de los derechos mencionados puede ser constitutiva de un delito contra la propiedad intelectual.

    Mi primer amor

    ¿Te imaginas dos tetas de mandarina,

    sonrisa de sandía?

    Solía recolectar las pegatinas

    de las clementinas

    las colocaba una a una

    uñas largas sobre cada dedo.

    Y te acariciaba las mejillas

    y te peinaba las pestañas

    ojitos de avellana

    y no parábamos de soñar.

    Sonrisa de sandía

    era un niño de la misma barriada

    al que le encantaba verme bailar

    con la camisa anudaba en un cruce tan mágico

    como la curvatura sinuosa de mis caderas

    tan mágico que pasaba de triste camiseta a un top.

    Y luego ya sabes:

    ¿Disfrutas la vista previa?
    Página 1 de 1