Crecimiento En El Espíritu

Por Jorge Gallo

Ah! Las formas de Dios van en contrava de las nuestras. Crecimiento en el Espritu son meditaciones que nacen de la profunda ansia del hombre por vivir su vida desde la perspectiva de Dios. Una autntica vida en el Espritu, conduce al creyente a la armona interior, fortalecindolo en la fe, la esperanza, la paz interior, la salud, la relacin con los otros, la felicidad y el sentido ltimo de la existencia. En una palabra: la espiritualidad es un estilo de vida con la inspirada magia de producir cambio profundos en nuestro ser.

• Idioma: Español
• Editorial: Palibrio
• Fecha de lanzamiento: 1 abr 2014
• ISBN: 9781463377441

Jorge Gallo

Jorge I. Gallo Sacerdote Católico, escritor y conferencista de origen colombiano residente en USA. Realizó estudios de Filosofía y Teología en la Universidad Javeriana de Bogotá. Estudios de Postgrado en la Universidad Antonio Nariño. Estudios sobre Teología y Sociedad en el DEI, Costa Rica y Ginebra Suiza. Impulsador de obras sociales para el desarrollo de las comunidades. Obras: “Viaje Interior” (2005), “Dinámicas y estrategias de trabajo con grupos” (2005). “Grupos” (2008), “Caja de Herramientas” Obra didáctica con recursos pedagógicos. (2010). “Crecimiento en el Espíritu” (2014).

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Copyright © 2014 por Jorge Gallo.

Número de Control de la Biblioteca del Congreso de EE. UU.: 2014900872

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El texto bíblico es derivado de La Biblia Latinoamericana. Edición revisada 2005. Editoriales San Pablo y Verbo Divino. Impresa en Paises Bajos.

Fecha de revisión: 05/05/2014

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526087

INDICE

Prólogo

A solas

Al despertar del nuevo día

Consciente y despierto

Creo contra toda desesperanza

Cuento de una noche de Navidad

Despertar del alma

Discípulos de Jesús al estilo de los Apóstoles

El camino de la oración

El cielo en la tierra

El poder oculto y profundo

En las manos de Dios

Espíritu Santo

Jesús: Una mirada desde la Cruz

La corona de rosas

María de Nazaret

María, madre y discípula de Jesús

Oración de la familia

Oración por el compromiso

Regalos de la espiritualidad

Restableciendo la unicidad

Santuario interior

Sentido de la Navidad

Sin pena ni gloria

Prólogo

La oración y la meditación son al espíritu, lo que el alimento al cuerpo, por eso mismo es preciso sentir hambre y sed de Dios. Y como toda experiencia de amor, ha de ser constante, evitar la dispersión, saber digerir y degustar, ir al encuentro íntimo y de este a la acción transformadora.

La vida en el Espíritu, exige humildad, discreción, sencillez, entrega, pasión, coherencia. Guiado por el Espíritu Santo aprenderás a escuchar la voz de Dios en el silencio íntimo del alma y a sentir su presencia interior. Déjate conducir, haciendo las rupturas necesarias, abandonando la oscuridad y avanzando hacia la luz.

El Espíritu Santo que habita y trabaja en ti, hace su tarea restauradora y sanadora; pero, permite a Dios ser Dios y que haga su voluntad, a su forma y manera, en su tiempo y como le plazca. Con todos tus problemas, carencias y necesidades, aprenderás a volar en las alas del Amor, solo basta tu decisión: arrójate en la hondura de su misterio… y podrás caminar por la vereda de la santidad.

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A solas

Y el hombre, en su orgullo, creo a dios a su imagen y semejanza

Friedrich Nietzsche

A solas

Amado, amadísimo Dios;

me abandono en tu misterio,

y quedo absorto y arrobado

ante tu divina gracia y hermosura.

Antes de conocerte

caminaba a ciegas y vacío;

hambriento, indagando, inquieto:

¿Oh, si hubiera algo distinto y diferente

que llenara y rebozara mi sentido?

Tú mismo sembraste la pregunta en mí;

oculto en la noche, robaste mi corazón

y la oscuridad se fue disipando,

lenta, lentamente.

Pero, ¡qué largo sueño…!

Tú estabas ahí, y no te veía,

y siento vergüenza y dolor

pues estabas más cerca

y más íntimo que yo mismo.

¡Válgame la vida!

qué duro desconsuelo del alma:

estar sin estar.

Entonces, como inquieta enredadera

me adherí a tu cuerpo infinito

y me fuiste modelando

y manifestando tu amor inmerecido.

Me confabulé con tus amoríos,

y ya nada podrá cambiar en adelante,

que no sea para desearte más y más…

y ahora como Jeremías puedo decirte:

"Me has seducido, Señor,

y me dejé seducir por ti.

Me tomaste a la fuerza y saliste ganando".

y dejé todo al instante;

instante humano… de largas horas,

de incontables días.

Dejé mi casa,

y con ella cuanto tenía,

y no quedó remedio,

allí ya no viviría

solo un lugar quedaba:

en tu corazón habitaría.

Y me olvidé de mí.

Todas mis certezas se pulverizaron.

Tu presencia es un ciclón que nada deja en pie.

Familia, patria, amistades,

sueños, mezquindades.

Nada quedó. Para que Todo quedará.

Y así, mientras más me olvidaba…

más me purificaba,

y más pequeño me hacía.

Ya no dirijo nada,

eres tú el capitán de este frágil velero

que avanza hacia ti.

Ya no haré nada para ti mi Señor,

solo dejaré que todo sea hecho por ti en mí;

a tu tiempo, y a tu manera,

y conforme a tu voluntad.

¡Nada me desvela!

Tú significas todo para mí.

Te amo, amado amante.

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Al despertar del nuevo día

…Y digo que el amor es el mejor sacramento,

que os amo, que amo y que no tengo sitio en el infierno.

Jorge Debravo

Al despertar del nuevo día

Agradecido y alegre estoy

por el nuevo día que me regalas;

y mi espíritu se regocija de amor

ante tu grandeza Señor.

Viviré a plenitud este instante;

trataré con delicadeza a cada uno de tus hijos.

Dejaré tu huella en cada acto

y seré tu voz y tu mirada.

Mis manos despertarán inquietas para bien servirte.

Solo quiero que todos con quienes trate

puedan congraciarse ante tu presencia

viva, amorosa y sentida entre nosotros.

Cuidaré de mis pensamientos y palabras.

Seré positivo, honesto, respetuoso y

tendré gestos de bendición para con todos.

Me alejaré de toda situación

que pueda hacerme daño.

Rechazaré toda invitación de la oscuridad.

Cuidaré con esmero de mi familia,

mis amigos, y de cuantos Tú, mi Dios,

pongas en mi camino.

Actuaré responsablemente y

y no abandonaré mis compromisos.

Será desde este momento

un día único y admirable,

pues, Tú lo sabes:

mi vida está entrañablemente

unida a Ti: Dios-Amor,

Trinidad Santa y Bendita,

Suma belleza y grandeza.

Gracias, eternamente gracias.

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Consciente y despierto

Espérenme, no tardo, voy por mí.

Jorge