Revelaciones De Vida En Poesía

Por Katia N. Barillas

Esta antologa potica es la recopilacin de vivencias en versos, tratando de sumergir al lector en un mundo fantstico y a la vez real; en donde se ven envueltos sentimientos encontrados y escenas acaecidas en la vida misma... en la cotidianidad. Cada poema, distinto uno del otro, cuenta con la musicalidad, ritmo, rima, metforas, sintaxis, semntica y un exquisito vocabulario; son obras de forma, mtrica y tema libre, lo que hace de este libro una joya genuina, enriquecida con la sutileza y romance de la lengua castellana. Sentimos que el lector se sumergir en el mundo de imgenes creadas por la imaginacin.

• Idioma: Español
• Editorial: Palibrio
• Fecha de lanzamiento: 23 dic 2011
• ISBN: 9781463312602

Katia N. Barillas

Katia N. Barillas adems, ha sido reconocida como fundadora y directora del movimiento y programa cultural y literario Noches Bohemias de Pura Poesa, que se transmite peridicamente desde www.youtube.com/nochesbohemiasdepurapoesia. Asimismo, es fundadora y directora de varias pginas culturales y literarias, en diversos sitios web. Conductora del programa El Rincn de las Artes en Radio Voces Unidas (RVU) radio por internet- y del Segmento Lrico del Programa Radial Dominical en Radio Amplitud Modulada, AQU NICARAGUA. Corresponsal autorizada de la US PRESS ASSOCIATION #6794116, para el libre ejercicio del periodismo dentro y fuera de los Estados Unidos de Amrica. Los sitios oficiales de Katia N. Barillas, son: www.katianbarillas.com www.youtube.com/nochesbohemiasdepurapoesa www.google.com/+NochesBohemiasdePuraPoesa www.facebook.com/katia.barillas.9 www.twitter.com/@b67_kc www.linkedin.com/pub/katia-n-barillas/51/566/508/es www.mundopoesia.com/foros/poetas/30923-katia-barillas.html [e-mail] [e-mail] 1 [phone]

Vista previa del libro

Contents

AGRADECIMIENTOS

ABANDONO

ABREVIATURA

ABSURDA REALIDAD

ACANTILADO EN EL ALMA

A CIEGAS

ADIÓS A UN AMOR

ADVERSIDAD

¿ÁGUILA O HALCÓN?

AGUJERO AZUL

AHÍ EN LA MONTAÑA

AIRES DE PECADO

A JANISKA

A KARINA

ALBA Y AURORA

AL FINAL DEL CAMINO

ALONDRA

ALQUIMISTA

AL COMPÁS DEL BOLERO DE MAURICE RAVEL

AMADA

AMIGA INCONDICIONAL

AMOR CHAJÁ

AMOR DE ENSUEÑO

AMOR ENTRE ESPINAS

AMOR IMANTADO

AMOR OTOÑAL Y ETERNO

AMOR, PECADO Y OLVIDO

AMOR PERDIDO

AMOR POR INFIDELIDAD

AMOR UMBRÍO

AMOR Y ESPERANZA

ANÉCDOTA

ANEGAD@ DE ANGUSTIA

ÁNGEL

¿ANHELO?

ANÓNIMO

ANÓNIMO SENTIMIENTO

AÑOS VIVIDOS

ÁRBOL DE LA VIDA

ARENA, VIENTO Y OCASO

AROMA A CAFETAL

ARTESANO

ATESORAN LOS MARES

ATRIBUTOS

ATURDIDA DE DOLOR

AURA

AUSENCIA

AVANTI (ADELANTE)

AVE

BALSA Y ABISMO

¡BASTA YA!

BATALLA EN EL CORAZÓN

BATALLA POR UN AMOR

BESANDO A UN ÁNGEL

BESOS ROTOS

¡BIENAVENTURADO EL AMOR!

¡BIENVENIDA AL MUNDO!.

BOHEMIO DEL AMOR

BOHEMIO Y POETA

BORRANDO EL PASADO

BRAZOS VACÍOS EN

LUNA LLENA

BRUMA

BORRASCA AL ATARDECER

BULLE EL VIENTO

BULLICIO EN LA VEREDA

CAEN BESOS DEL CIELO

CALENDARIOS DE CRISTAL

CAMINANTE DEL QUERER

C A P R I C H O

CARNAVAL EN EL CIELO

CENSURA DE AMOR

CLAMOR

CLAVE DE HISTORIA

CLAVE PARA ENAMORAR

COBARDÍA

CÓDIGO SECRETO

COMETA

COMPARACIÓN

COMPENSACIÓN

CONCUSPICENCIA

CONDICIÓN

CON EL CIELO COMO HERENCIA

CONFUSA CONFUSIÓN

CONFUSIÓN ENTRE PARÉNTESIS

CONJUGACIÓN

CON LA PIEL EN BRASAS

CON LA PLUMA DEL ÁNSAR

CON LA VISTA EN LA BAHÍA

CON PALABRAS ELEGIDAS

CONQUISTADORA

COPLAS

CORAZÓN

CORAZÓN DE MIEL

CORAZÓN SACRÍLEGO

CORRIENDO TRAS DE VOS

CREPÚSCULO

CRÓNICA

CRÓNICA DE UNA ANGUSTIA

CRUZ ANTIGUA

CRÚZAME EL CORAZÓN

CON TU NOMBRE

CUANDO CANTA EL ZORZAL

CUANDO DUERME LA LUNA

CUANDO LE PIDA UN DESEO A UNA ESTRELLA FUGAZ

CUANDO SEA UN TULIPÁN

CUENTO DE UNA MUSA

CUERNO Y JORNADA

CULPA Y CASTIGO

DANZA DE FLORES

DE COLORES

DEJÁ – VU

DEL LADO SOLEADO

DE LA CALLE

DESACIERTO

DESASTRE

DESCARNADA

DESCRIPCIÓN

DESDE EL V PISO

DESENCANTO

DESEOS DE NAVIDAD

DESFALLECEN LOS RECUERDOS

DESPEDIDA

DESPERTAR

DESPIERTA

DESPOJO

DESPRECIO

DIARIO DE UN SENTIMENTAL (EN SIETE DÍAS)

DÍA SOLEADO

DIME ¿CÓMO?

DIVAGANDO POR EL BOSQUE

DIVINA INSPIRACIÓN

DÓLAR

DOLOR POR SONRISA

¿DÓNDE?

¿DÓNDE ESTÁ LA MUERTE?

¿DÓNDE ESTÁ EL AMOR?

DOS ALMAS

¿DÓNDE QUEDÓ EL AMOR?

DONDE TERMINA EL ARCOÍRIS

DUDOSO PADECER

DULCE INOCENCIA

ECLIPSE DE AMOR

ECLIPSADO SOL,

ECLIPSADA LUNA

EL AIRE DE TU TORMENTO

EL ALJIBE DE TU PIEL

EL BALCÓN DEL RUISEÑOR

EL BOHEMIO ROMANCERO

EL EDÉN DEL OLVIDO

EL LETARGO DE LOS SIGLOS

ELIXIR

EL LLANTO DE LAS NUBES

EL MITO DE TU MIRAR

EL OLOR DE LAS GARDENIAS

EL PRÓXIMO ABRIL

EL TESORO DE MAMÁ

EL VIAJE

EMBRIAGADA

EMBRUJO DE LUNA LLENA

ENAMORADA

ENCANTAMIENTO

ENCLAVE DEL DOLOR

ENCUENTRO

EN EL BOSQUE BOREAL

EN EL BOSQUE DE LAS ESMERALDAS

EN LA OTRA CARA

DE LA LUNA

ENGAÑO

ENIGMA

EN MARZO Y ABRIL

ENSAYO DE UN QUERER

ENSÉÑAME EL

CAMINO A CASA

ENTONACIÓN

EN TRAVESÍA EL LLANTO

ENTRE AYES Y LAMENTOS

ENTRE EL AMOR Y EL PLACER

ENTRE LUZ Y SOMBRA

ENTRE PLUMAS Y VERGELES

EN VANO

ERES

ERRANTE

ESA NUBE MAMATUS

ESCAPE

ESCLAVA DEL DESTINO

ESCLAVO Y CONVICTO

ESO ES AMOR

ESPEJISMO DE AMOR

ESPÍA

ESPINA

ESPÍRITU AVENTURERO

ESPÍRITU CONFESO

ESTE VERSO ES ODA

ESTIGMA

ESTO NO PUEDE SER AMOR

ESTOY AQUÍ

ETCÉTERA

E U R E K A (LO ENCONTRÉ)

¡E V A N G E L I N A!

EXCLAMAN LOS LAURELES

FALSA IDENTIDAD

FANTASÍA

FUE EN EL ATALAYA

FUERA DE SI

FUGA

FUGA II

GEMIDO

GRANADA

GRIETAS

HABLEMOS BAJO

HERÁLDICO CABALLERO

HE TRATADO

HIELO EN EL ALMA

HIELO Y PASTEL

HIJO: . . . ÉSTE ES TU PADRE

HISTORIA

HISTORIA SOBRE HIELO

HIT

¡HOLA! . . . SOY YO

HOMENAJE A LA REALIDAD

HUELE

HUELLA

HUÉSPED

IDILIO

IDILIO INDECOROSO

IDOLATRADA

INDIFERENCIA

INGRATITUD

ÍMPETU

IMPULSO

IMPUREZA

INSPIRACIÓN SUTIL

INSPIRACIÓN Y TALENTO

INVENCIBLE PADECER

JARDÍN

KARMA

LADRÓN

LA FOTO DE MIS OJOS

LA FUERZA DEL AMOR

LA GLORIA DEL AMOR

LA GRAN SULTANA

LÁGRIMAS DE HIELO

LÁGRIMAS DE METAL

LÁGRIMAS DE SAL

LA MONARQUÍA DE LA MARIPOSA

LA NOSTALGIA DEL RUISEÑOR

LA PARTIDA

LA PARTIDA DE UNA HERMANA

LA RUTA DEL DESTINO

LAS GOLONDRINAS LLORAN

LAS LUCES DEL PUERTO

LAS SÁBANAS DEL AMANTE

LA SOMBRA DEL AMOR (I)

LA SOMBRA DEL AMOR (II)

LA SOMBRA DE LA LUNA

LA VALLA DE LA CONCIENCIA

LA VENGANZA DE LA ABEJA

LA VOZ DEL PENSAMIENTO

LA VOZ DEL SILENCIO

L E A L T A D

LEGAJO DE EMOCIONES

LETANÍA

LISONJERO GRITO DE AMOR

LO INUSUAL

L O Q U E V Í

LO SUTIL

LÚCIDO SUEÑO

LLANTO

LLORARÉ

MAÑANA DE INVIERNO

MANDALA

MÁNDAME BUENAS VIBRAS

MAREA ROJA

MARINERO DE CONCRETO

MATICES

ME ARRASTRÓ EL VIENTO

ME CONTÓ EL VIENTO

MÉDANO DE ARENA

MELODÍA SENSITIVA

METAMORFOSIS

METÁSTASIS

MEZQUINO PADECER

MIEL DEL CORAZÓN

MIEL DE MANZANA

MI SOMBRA

MISTERIO DE AMOR

MITOLOGÍA

MOMENTOS

MONTAÑAS DE AMOR

MUJER DIVINA INSPIRACIÓN

MUSA

MUTISMO

NÁUFRAGO

NICARAGUA MÍA

NÓMADA

NOSTALGIA DE AMOR

NO EXISTE NADA MEJOR

NO LLORES MI BIEN AMADO

NO ME DEJES SOLA

ESTA NOCHE

NO PUEDO DARTE

NADA… SÓLO AMOR

OCULTO

ODA A LAS HORAS DEL SOL

ODA A LA INCLEMENCIA

DE TU PARTIDA

OJOS LATINOS

OJOS NEGROS

OJOS TRAICIONEROS

OLORES

ORÁCULO Y RUNA

ORÁNDOLE AL MAR

ORO, INCIENSO Y MIRRA

PALABRAS

PALADEANDO HIEL

PALOMITA BLANCA

P A N T A N A L

PASARELA

PASARON LENTAS LAS HORAS

PECADO CAPITAL

PENA

PENA DE AMOR

PENSANDO

PÉRDIDA

PESADILLA

PIEDRA PRECIOSA

PIEDRA REBELDE

POEMA A LA DUDA

POEMA A LA ESPERANZA

POLOS OPUESTOS

POLVO DE LUNA

¿POR QUÉ LLORAS?

POR UN ANILLO DE RUBÍES

PRESUNCIONES

PROMESA PERDIDA

PURGATORIO DE AMOR

QUEBRANTOS

QUÉDATE CONMIGO

¿QUÉ LLEVAN LAS AGUAS?

¿QUÉ SERÁ MEJOR?

¿QUIÉN SOY?

QUIERO CREERTE

¿QUO VADIS? –

(¿A DÓNDE VAS?)

REALIZACIÓN

REENCUENTRO I

REENCUENTRO II

REFLEJO DEL RECUERDO

REFRACCIÓN

RELAJACIÓN

RENACE EN ESTE DÍA…

RENUNCIACIÓN

RENUNCIA Y DESAPEGO

RÉQUIEM A UN DESLIZ

RESPETO:

UNA ENSEÑANZA DE VIDA

REVENTARON LOS GERANIOS

RIMA Y VERSO A UNA FLOR

RODAJE

RONDA DE PIEDRAS

¿SABES?

SALMODIA AL DESTINO

SANTUARIO DE UN DÍA

SECRETO

SEDUCCIÓN

SE ESCRIBEN CON A

SE EVAPORÓ LA VIDA

SELVA DE CEMENTO

SE FUGÓ EL SENTIMIENTO

SE LLEVA LA OLA

SEÑOR DE LAS HUESTES

SE PERDIÓ EL DESEO CUANDO MURIÓ EL AMOR

SERENATA A LA LUZ

DE LA LUNA

SERPENTEANTE DOLOR

SE TERMINÓ EL MARTIRIO

SEXO

SEXTO SENTIDO

SIETE

SILENCIO

SINCERIDAD

SI NO TE IMPORTA

SI SE APAGA TU SOL

SI TAN SÓLO PUDIERA

SOLAMENTE VOS Y YO

SOLLOZO

SOLSTICIO

SOMBRA

SONRISA DE LUNA

SOÑANDO

SORTILEGIO

SOY

SUDAN LOS JACINTOS

SUEÑOS

SUMATORIA

SÚPLICA Y TENTACIÓN

SUSPIRA EL VERGEL

SUTILEZA

TEMPERAMENTO

TENGO QUE…

TE DIJE QUE LO SABÍAS

TE QUIERO DECIR

TE VERÉ

TIMONEL

TODO Y NADA

TORBELLINO DE PASIÓN

TRAVESÍA

TRÉBOL DE CUATRO HOJAS

TRINIDAD

TRISTE PEREGRINO

TU ESTRELLA SE DETUVO EN MI ALMA HIPNOTIZADA

TU NOMBRE

UNA AVENTURA

LLAMADA VIDA

UNA DAGA EN EL CORAZÓN

UNA GOTERA EN EL ALMA

UNA HISTORIA CON SONIDO

UNA MAMÁ SE ESTRENA

UNA MIGAJA DE CARIÑO

UNA NOCHE ENTRE

SÁBANAS BLANCAS

UNA VIDA LLORA

UN BESO AL VIENTO

UN CENTAVO CAÍDO

DEL CIELO

UN CUENTO DE CONTAR Y NO ACABAR

UN MUSTIO ADIÓS

UN PARCHE EN EL ALMA

UN ROSAL SE MARCHITÓ

UTOPÍA

VAGABUNDA

VELO DE OLVIDO

VENERACIÓN

VERBO, VERDAD Y VIDA

VERDAD Y PERDÓN

VERDE ESPERANZA

VIACRUCIS DE UN QUERER

VIDAS CRUZADAS

VIENTRE Y LUZ

VISIÓN

VIVIENDO SOLA

VIVIR A TIEMPO

VOLVIENDO A LOS

VIEJOS TIEMPOS

VUELO DE ESTRELLAS

VUELVE CONMIGO

YA NO TIENES QUE DECIR QUE ME AMAS

Y GRAJEAN LAS CORNEJAS

Y LA BRISA ME ABRAZA DESNUDA

Y SOY VERSO

Y TE DI UN NOMBRE

Y TENÍA MIEDO

ZURCIENDO VOY

LOS HUECOS

ACRÓSTICO I – A MI PADRE, RENÉ CASTILLO URBINA, EN SU CUMPLEAÑOS #69

ACRÓSTICO II – A MI ESPOSO

ACRÓSTICO III – A LA NIETA DE MI ESPOSO

ACRÓSTICO IV – A MI HIJO

ACROSTICO V – A MI HIJASTRA

ACRÓSTICO VI – A UN AMOR

ACRÓSTICO VII – A MI MADRE

ACRÓSTICO VIII – PARA UN AMOR INGRATO

ACRÓSTICO IX – EN UN CIELO MARCHITO

ACRÓSTICO X – ABIGAIL {Dedicado a mi sobrina-nieta (por nacer) Abigail Flores}.

SONETO I – RESULTADO

SONETO II – ALIANZA

SONETO III –

REGALO Y ACEPTACIÓN

SONETO IV –

HIELO DEL CORAZÓN

SONETO V –

LA NOSTALGIA AVANZA

DATOS DEL AUTOR

AGRADECIMIENTOS

Agradezco:

Primero a Dios por haberme proveído con el don de la escritura y el buen discernimiento.

A todos los espíritus elevados y de luz en los que creo.

A las fuerzas positivas que habitan el universo y que han estado siempre dispuestas a colaborarme en todo este proceso.

A mi esposo Guillermo A. Barillas, quien me ha apoyado en concretizar la publicación de esta antología.

A mi hijo Hans E. Varela Castillo, porque aun en la distancia ha sido parte de mis éxitos.

A mi padre, René Castillo Urbina, quien me enseñó los valores que he puesto en práctica a lo largo de mi vida.

A mi madre, Norma Vado Martínez.

A mi hermana, Patricia Lorena Castillo Vado, al resto de mis familiares, amigos y a todos aquellos que se deleitan leyendo poesía.

GRACIAS,

ABANDONO

Me abandoné al cariño que me daba su querer,

entre las sábanas blancas del embrujo del placer;

junto a los cientos de estrellas que van cayendo del cielo,

bajo el manto de la noche y la magia del vergel.

Y navego en el lago de las nobles emociones,

abrazándome a la almohada donde anidan las pasiones,

o al río que sereno sigue su ruta al ancho mar.

Descubrí en el espejo el reflejo del amor,

el sabor de aquellos besos que no daba por temor;

a la luz de la luna se dibujaron los cuerpos,

me abandoné de nuevo, le entregué el corazón.

Cada ápice de hormona llega al clímax en mi piel,

me hicieron enloquecer y eclipsarme de deseo en el largo anochecer.

Hoy abandono mis querencias porque no le he vuelto a ver.

Sólo sueño en encontrarle y en volver entre sus brazos

de placer a enloquecer.

ABREVIATURA

Estoy escribiendo entre líneas al amor una canción,

estoy dispuesta a robarle en un suspiro el corazón.

Este verso es para el hombre que abrevió mi querer,

en mis noches de lujuria, bajo el manto del placer.

Si por alguna razón no pudiese amarlo como pienso de verdad,

cristalizaría con mi alma, mis lágrimas en soledad;

sería un gorrión cansado de volar por el jardín,

sin poder tomar el néctar de sus labios carmesí,

o el deleite que adormece a las notas del violín,

que en una abreviatura traspasaría como una espina

al níveo y casto jazmín.

Soy la diva apasionada que no entiende de razón…

la que abrevia entre líneas como sufre por su amor,

la que soñando se pierde por la espesura del bosque,

con el canto de los gansos, garzas verdes y cenzontles.

Y aquí termino abreviando al amor de mis quereres,

que perturba y amenaza al delirio y sus placeres.

ABSURDA REALIDAD

El ave Fénix renace de una cenicienta nube.

 . . . Un día de poco sol, confundió su transitar.

Ella fue tras del lamento de un sonido que volaba

queriendo domar al viento…

Y se arrastró por la alborada tras del gemido del tiempo,

sobre parajes con brizna

donde las olas del mar se ven reventando lento.

Aun escucha el palmoteo de su llanto doloso;

parece agua de cascada cayendo suavemente en la senda del olvido,

donde el río ya no canta, sólo sueña arrepentido

por las horas que ha perdido,

sufriendo de tanto amar y no valorar lo vivido.

Incoherente en soledad, se refugia clandestina

entre un grupo de flamencos que han hermanado su rumbo;

ella vuela a las estrellas… va en busca de su amado,

más no ha de encontrarle en la capilla celestial.

Sin embargo, en la puerta del altar,

ve al príncipe de sus sueños alejarse

sobre el iris apagado de sus ojos,

huérfanos del cariño que ha opacado su mirar.

Y desde el bicolor inmenso del infinito universo,

su mente iba pariendo los más nobles sentimientos;

el sol en refulgencia daba vida al horizonte,

a la sombra de los montes,

al plumaje negro y verde de pericos y tucanes

y al canto enmudecido de las garzas y cenzontles.

Las flores amarillas danzaban jubilosas al compás de la esperanza.

Aun guarda con ahínco en el fondo de su alma

el engaño traicionero que se asiló alevoso

en el nubarrón inmenso que confundió su camino

justo en el sendero donde se devolvía el viento.

De la puerta de la iglesia se regresa entristecida.

Se dio cuenta que la vida, se le escapó por ahí,

con el vapor de la lluvia confundido entre la niebla;

cerca del celaje de las quejas y lamentos,

de los anhelos frustrados al borde del precipicio

en donde algún día se suicidará ese amor.

Hoy ríe sin temores a la angustia que cubría de gris su realidad.

Ya no castiga sus pasos, ni esconde entre sus alas el deseo por un beso.

Está perdida en un nuevo cariño

que ha borrado de su terrible destino

el dolor y la ansiedad que produjo un sentimiento

que perduró sin madurar,

y que hasta hoy sigue verde en los potreros

como hojas de platanal.

ACANTILADO EN EL ALMA

Voy subiendo despacio para alcanzar la cima

donde se esconde el amor;

cabalgo sigilosa por la ruta que construyen

las gaviotas al pasar;

 . . . y me uno con cautela a su vuelo desdeñoso

sobre el verde y ancho mar.

Caen gotas del cielo que encierran mi alma

en burbujas de cristal;

una mariposa se posa cautelosa en el

espejo de los lagos y en el reflejo de la sombra

de las ramas del manglar…

y suben los escalones de un acantilado mas,

 . . . se escucha llorar al cenzontle

sobre el rojo del coral.

Salpica al horizonte la luz del sol al pasar,

enamorando con rosas a mi espíritu inmortal;

un acantilado en el alma del amor que me amó más,

hoy sucumbe a la tormenta en el cenit de la mar.

A CIEGAS

Voy buscando a ciegas tus ojos enamorados,

mis pensamientos encontrados, la verdad de lo vivido,

consumando en el olvido, cada rincón de mi alma.

A ciegas cae la lluvia…

copiosas gotas de agua y serpenteantes rayos plateados

van golpeando el matorral.

La vecina soledad se despierta de sus miedos…

¡Que inquietante ansiedad!. ¡Qué sombría realidad!.

A ciegas voy caminando por la penumbra del sueño,

en el viaje sin retorno donde se traza lo astral,

 . . . mi espíritu se desprende y visualiza lo banal.

Y revientan olas altas por allá en alta mar…

y se me pasó la vida, con el pendiente de amar.

ADIÓS A UN AMOR

En sonoro llanto el mar

ha arrojado una estrella;

Las llamas de los cirios que hasta ayer

estaban encendidos,

se van extinguiendo en la humedad de la arena;

le están diciendo adiós a un amor invisible;

a la textura suave de unos labios sedientos;

al anhelo de una boca desbocada por un beso;

a los poros cerrados de una piel viva

que no se atreve a morir

ante el olor de la muerte.

La santa blanca ha cruzado la sombra del espejo;

se siente su presencia envolviendo cada molécula de aire;

entre aromas enredados en azahares amarillos

y las hebras acolchadas que daban vida a su pelo.

El cogollo de los cocos son alma y espíritu que claman

por el oxígeno de una mirada pretensiosa…

de ojos confundidos

entre el verde de los mares

y el semi-azul de los cielos.

¡Amantes de su amante!.

¡Amantes de su eco!.

Se marchitan los naranjos,

se han secado los cerezos;

las ánimas de los zapotes en el limbo aun penan;

el calor de tanto infierno derrite como mantequilla

a cada rayo de sol.

En la arena blanca y rosada

se dibuja la silueta

del vicio por un beso;

las bocas arden desveladas en la noches

buscando a tientas y a ciegas

la llama apagada de lo que fue el amor…

y lágrimas encendidas se derraman clandestinas

sobre el fuego del coral,

alumbrando con su lumbre

el agujero azul de los cráteres de la luna

ahí donde congelados

yacen los pesares sobre las dunas de las dudas.

El amor se resigna a la angustia del ahogo y del enojo.

Como avellana desnuda que anhela ser amada,

condena la lujuria de los enamorados

y vierte ácido sobre los eslabones rotos

de sus cadenas errantes;

se deshace de las promesas, de las esperanzas, de los sueños,

y de las perlas blancas y negras,

cafés y azuladas,

enclaustradas en el ébano clandestino

de los brazos que apretaban

la espalda de quien amaban…

hoy, solamente se escucha el gemir de la marejada

 . . . diciéndole adiós a un amor,

desvanecido en la nada.

ADVERSIDAD

Se ha desintegrado un misil celestial.

Sus mágicos charneles se han precipitado

[hacia el fondo del mar.

Han caído migajas de luna

y fragmentos pequeños de sol;

era índigo el reflejo que bañaba al horizonte

y al ébano del cielo con añicos de diamantes.

Las huestes del universo sumidas en letargo

dan fe de la hecatombe causada por aquella roca

[formada de hielo y polvo.

No se medía el espacio en la física del tiempo,

tan sólo el presentimiento despidiendo los momentos

impregnados del olor a naranjo y a laurel

con el que muchas veces se identifica a la muerte.

Volverá la humanidad a sumirse en la frialdad.

Aprenderá de nuevo a luchar para lograr

poner harina en el horno y hacer barras de pan.

Millones de sueños se evaporan.

Las pesadillas espantan y se elevan como humo

hacia un rayo azafirado que emerge del cielo gris;

y, como un manto transparente de burbujas de jabón,

se desvanecen en la arena y se pierden en el brillo

de los ojos de los niños

que claman por los suspiros de las penas y el perdón.

¿ÁGUILA O HALCÓN?

Se visten los campos del color del jade.

Mis penas se esconden tras de la corriente del agua del río.

Montañas y sierras se alzan arrogantes.

Sopla fuerte el viento cerca de los llanos…

y las avestruces dan la bienvenida

a trozos de hielo que suave han caído de las nubes blancas.

Por el cielo azul aves de rapiña van revoloteando

una y otra vez cerca del pantano;

buitres, gavilanes, águilas y halcones,

se dejan caer entre los rincones,

hacia aquel olor que está despidiendo con el viento inerte,

el negro de muerte que impregna el ambiente.

¿Águila o halcón? . . .

¡No!. Es el paraíso donde reina Dios.

AGUJERO AZUL

Mi espíritu enamorado cayó dentro de un agujero

inundado de puro azul;

azul que llevan los mares;

azul que visten los cerros;

azul que pinta de gloria a las nubes en el cielo.

El sol realza más al abrazarse con la noche

deja escapar el coraje más allá de los mares

adentrándose en los siglos y milenios de soledad,

ahí donde muere el mundo en armonía con Dios,

bajo el miedo de mis miedos con el tesoro de un cuento,

bajo un oráculo de luna en una semilla de amor.

Ese tigre de metal es jardín nuevo que renace

como amo de mi mundo en las rosas del vestal.

Tanto azul ha inundado de la cabeza a los pies

halo que ayuda a escapar más allá de sus encantos;

aunque los campos se cubran con el fluir de mi llanto.

AHÍ EN LA MONTAÑA

Recubren las piedras a la alta montaña

donde están grabados tu nombre y el mío;

es la sintonía que me hace pensar

en los días felices que han pasado ya.

Besos a las rosas, perfume de azahar,

ha entonado el río su canto al andar…

Y algunas piedras se han desprendido de la alta montaña,

cayendo hacia el río que lleva su ruta

hacia el brazo del mar… cerca del palmar;

sólo al caer al fondo del agua,

logro capturarlas llegando al manglar,

y no se han perdido en su gris andar,

ni se ha erosionado tu nombre y el mío con su transitar.

El amor que late en mi corazón,

sigue ahí presente como un soneto cantado a los mares,

o a todos los lares que anidan consigo…

Tu nombre y el mío.

AIRES DE PECADO

Se solapa el deseo en mi carne débil,

entre sábanas blancas de brillante seda,

y un caballero en sus años mozos me brinda un saludo.

Con mucha cautela se viene acercando hacia mi balcón,

como mariposa que ha perdido el rumbo.

Se ha desvanecido el ruido del viento,

con el eco fuerte que arroja la mar…

flotan margaritas blancas y amarillas

por donde el pecado habrá de pasar.

Siento como el mundo se rinde a mis pies,

siento las palmeras rendirse con él,

junto a cada flor que habita el vergel

 . . . azúcar, sonrisa, beso, verso y miel.

¡Aires de pecado soplando queditos al amanecer!.

Aura y aurora… mi espíritu fiel;

mi vida y su vida… una sola piel.

Astuto se esconde de nuevo el querer,

parece dormir al atardecer,

y en mi noche obscura, la orgasmada luna,

alumbra quedita a todo el vergel.

POEMA DEDICADO A LA SRTA. JANISKA HAYDÉE

VARELA VARGAS EN SU 20 ANIVERSARIO.

A JANISKA

Hoy hago poesía para alguien especial.

A una niña bonita alejada del mal.

Está hoy reluciente, mas radiante que el sol,

vestida de nobleza y rojo corazón.

Es una bella rosa reventando en primavera,

derrocha veinte años… sonriéndole a la pradera.

Es fiel poseedora de una galante sonrisa,

que se ondea al caminar… como el campo con la brisa.

Y ella es JANISKA, la que yo conocí,

de dulces ojos negros y labios carmesí.

Te deseo linda un cumpleaños feliz,

recibe bendiciones… te las doy desde aquí.

POEMA DEDICADO A MI HIJASTRA KARINA

BARILLAS EN SU 24 ANIVERSARIO.

A KARINA

Hace veinticuatro años el sol brilló como hoy,

porque nacía una estrella de increíble refulgencia.

Las nubes en el cielo esbozaban fiel sonrisa

y en un cacho de luna se osgarmaban en caricias.

Y las rosas volaban con alas rojas y amarillas,

querían posarse arriba con las nubes clandestinas.

Los abedules lloraban con lágrimas

del azabache que le robaron a tus ojos de chaquira

y de pistilo de lirio.

Los autores de tus días decidieron darte

el nombre de KARINA;

no hay mujer en la tierra que lo lleve con más honor,

ni para ellos una hija

que les produzca tanto amor.

Recibe pues con cariño

un fuerte abrazo especial

y tantas bendiciones como bellas Marie

en la pila bautismal.

ALBA Y AURORA

Amanece tierno el día, con bellos rayos de sol,

guardando fiel el color del alba en el corazón.

Rayo de sol clarito como agua de manantial,

haz que mi amado me ame, como el río al ancho mar.

Alba y aurora son odas al señor sol,

gorrión que tímido canta, aleteándole a la flor;

aura de mis quereres… llévame a la ostra perdida,

que atesora en su guarida a la perla más preciosa…

de negra o blanca extrañeza, nacarado azul del mar,

rojo es mi corazón por el preludio de amar.

Si tan sólo feneciera el alba en el alma mía,

aurora multicolor en el aura yo tendría;

se mojaría la arena de agua de mar salina,

y en la corriente cantarían los peces a la colina.

Mis palmas aplaudirían a la voz del nuevo día

y el alba enternecida cantaría dulcemente

a mi aurora clandestina.

Mariposas, colibríes, gaviotas y ruiseñores,

en coro le cantarían al Señor de los Señores.

Se desvanecería mi alma ante el alba y la aurora juntas,

dándole paso al cariño, clavel rojo y blanca flor,

en la montaña se oiría el canto triste de los cenzontles,

que perdidos volarían hacia el sombrío horizonte.

Y un rayo claro de sol, del manantial agua pura,

hará que mi amado borre con su amor todas mis dudas.

Aura y aurora son odas al señor sol,

como el canto del gorrión cuando le aletea a la flor.

AL FINAL DEL CAMINO

Anegada de angustia en anónimo anhelo,

al final del camino no siento lo que siento.

Esclava del destino que aprisiona y mata

y anida en la conciencia por donde escapo yo,

lágrimas que caen cual gotas de granizo

y se encuentran absortas en mi reseca piel.

Se escucha allá lejos, cerca de la vereda,

cómo susurra el viento a las avellanas…

Dudoso padecer de un amor imantado,

que es sobra de un idilio y pasado de un engaño.

Batalla singular que he ido librando en aguas tormentosas,

con la declamación que hacen los claveles al llanto de las nubes…

Al ostentoso ocaso viajando hacia el deseo

que esconde el manantial cuando el alma gotea

sangre y angustia en pedazos de cristal.

Al azar la vida rechaza así mi suerte,

en mezquino padecer y confusa confusión,

ahí donde vuela lento la pluma del ánsar,

bajando suavemente hacia el médano de arena

llegando al atalaya… al final del camino.

ALONDRA

Y te vi volar sobre el verde prado,

solita y pensativa, oh dulce y bella alondra.

Te encontrabas cansada de buscar aquel árbol,

que de la lluvia fría un día te cobijara.

El canto habías perdido, oh dulce amada mía,

eras grano de sal perdido entre la arena;

fue tanta tu tristeza que embraveció la mar,

sus gigantescas olas no pueden reventar,

y el sol embrujado no quiso salir más.

Perdida en el cielo inmenso te aventuraste lejos.

Entre tanta pena, el tiempo te apremiaba,

veías como el lirio desmayaba en zozobra,

con el viento soplando… cayéndose en la sombra.

Las llamas de las velas yacen desvanecidas,

perdiste candidez en campo florecido…

El llanto de los ríos es tu canto extraviado,

cual candor de amapola en la selva dormido.

¡Resucitas alondra en pluma del poeta!

Y eres inspiración para estas bellas letras,

que con tinta indeleble se quedarán plasmadas

en el papiro inerte que hoy descansa en mi almohada.

Y te veré volar ahí por los sembrados,

irás sin rumbo fijo sobre los verdes prados,

los murmullos del olvido habrán ya fallecido,

junto a la débil llama que ardía entre los cirios.

ALQUIMISTA

Viaja conmigo la ilusión cautiva del cajón de los recuerdos.

Las olas agitadas de tu agitado mar

me han arrastrado al fondo de la cueva de los cangrejos,

donde no encuentro sosiego

 . . . sólo ganas de escapar.

El velo que me ciega todavía no se ha caído.

Es el símbolo perdido de la sombra de mis miedos

venciendo lo ya vencido.

Conspiración y serenidad…

Soy como un alquimista en busca de la piedra filosofal,

tratando de encontrar la panacea universal,

entrando en armonía en la posada del alma

con la fuerza de gravedad devolviendo lo que ha subido…

Un espíritu desprendido,

un espíritu que disfruta con aires de aventurero

la libertad esperanzadora de ese viaje placentero

donde en comunión entramos hacia el reino de los cielos.

Ahí donde Dios es el arquitecto, el albañil, el justiciero.

Ahí donde Dios es el constructor del puente aéreo y colgante

que sereno me conducirá sin duda al limbo donde flotan

margaritas, acacias, gencianas, mirtos,

avellanas y rosas amarillas de soberano terciopelo;

todo eso dirigido por la mecánica que sepulta

a la química primitiva de tanto celo y pecado;

a la química primitiva que no tuvimos

cuando el destino nos juntó para vivir lo vivido,

cuando la vida nos obligó a olvidar el pasado,

pasando sobre él una cortina nebulosa,

una persiana cubierta del humo clandestino

fluctuando entre las sombras de un amor fallecido,

flotando como el humo desvanecido del cigarrillo semi-apagado

en la casa de cartón que hoy arde con el aire seco que sopla

trayéndose el aroma de mil lirios fenecidos.

AL COMPÁS DEL BOLERO DE MAURICE RAVEL

El azul del cielo ha teñido de zafiro el agua del océano.

Los veleros blancos al vaivén de las olas,

son nubes celosas navegando lento,

meciéndose suave al ritmo de caracolas

revolcadas en la arena

y dejándose arrastrar con la fuerza del oleaje.

El viento caliente soplaba con fuerza

azotando las murallas de una prisión mohosa

cubierta de musgo…

al fondo una isla.

Árboles soltando hojas secas que flotan

llevando un mensaje a los huéspedes que habitan

la cárcel de Alcatraz.

De repente se acerca un barco carguero.

Se escucha el fuerte ruido de sus motores al pasar…

Hay un marinero silbando con fuerza.

La música que silba tiene ritmo para ser bailada

en el vacío silencioso que envuelve su alma

de caballero de altamar.

Es algo confuso… de repente se escucha música clásica,

 . . . y más para allá, suena un cd de música rap;

hay un hombre al este de la proa

que no deja de chiflar sin parar un bolero;

mis oídos se afinan, tratan de averiguar

y logran recordar que es aquel bolero magistral

ese que compuso Maurice Ravel.

En el otro extremo, un violín sonaba.

Dejaba escapar notas de pecado

que se confundían en deseosos gemidos

de un par de amantes ausentes del bullicio

cerca de la proa de un barco crucero

desnudos al cielo… se hacían el amor.

Entre los veleros los yates navegan.

Los pasajeros de los cruceros

se ven motivados ante la belleza

que ha creado Dios en la naturaleza.

Van fotografiando dentro de su mente

cada detalle que cubre su vista de gracia y de gloria.

Han descubierto en la lejanía

los finos detalles que el hombre esculpió,

para construir sobre el mar salado

el tácito orgullo de los san franciscanos,

 . . . es el Puente rojo de entrada dorada

en inglés conocido como The Golden Gate Bridge.

¡Un día soleado!.

El sol calentaba cada parte bella.

El paisaje en sí era como un sueño.

Un rojo naranja revestía al sol

anunciando el ocaso que iba cayendo…

se veía al astro rey cansado de un día más

y lentamente desapareciendo

con el abrazo que le daba el mar

al final del horizonte dormido.

Y aun no terminan los diez y siete minutos

que sabemos que dura la melodía del bolero

de Maurice Ravel.

AMADA

Con el polvo de una estrella

he sellado una carta de amor;

entre las constelaciones dejé vagando el dolor;

he llegado con el tiempo a rozar los brazos del viento

que me abrazan muy contentos

por donde ha de pasar

el río de los sentimientos.

Toco de nuevo a tu puerta.

Te doy otra oportunidad.

Dejo entrar los rayos del sol

por la hendija que ha hecho en mí la bondad.

Mi alma se ha escondido y está durmiendo con los ángeles

[Sobre el paraíso de la mente…

En el lugar donde tu ego

siempre estuvo presente.

¡Ámame de nuevo y para siempre!.

¡Ámame con la furia de la leña que arde!.

El aire de la pasión ha sido atizado por la lujuria y el deseo

[como la ultima vez,

en que me arrancaste con furia los besos de los labios

y empapaste tu boca con los jugos de mi cuerpo.

¡Cómo deseo tu amor!.

Este sentimiento hace que deje de ser yo misma

 . . . y me hace esperar por vos.

El placer de amarte regresa a mí a cualquier hora

 . . . me he envuelto dentro de una caja con papel de regalo

y lazo rojo.

Rojos, púrpuras, rosados,

Hacen de este calypso mi color enamorado

y me hace perseverar la respuesta ansiada.

¡Ámame otra vez que de nuevo estoy naciendo!.

¡Ámame!, y si quieres puedes cambiar mi nombre.

Simplemente llámame Amada.

AMIGA INCONDICIONAL

Amiga incondicional hubiese querido llamarte por siempre.

Tú me llevaste en tu vientre como una obligación, no como un tesoro preciado.

Me arrullaste en tus brazos porque debías hacerlo, no con paciencia y cariño.

Me vistes crecer porque sí, no con orgulloso placer,

yo era un bebé que como el sol iba dando luz a cada uno de tus amaneceres…

cuando tropezaba, buscaba yo tus manos para no caer,

y me desanimaba al ver que estaba sola levantándome otra vez.

Te perdoné sin reclamar tu cruel indiferencia.

Te entregué en la magia de un abrazo… el alma y mi querer…

Y siempre te daré mis gracias infinitas,

porque, aun sin amarme,

me hiciste la amapola más dulce del vergel.

Yo te creí perfecta, inmaculada, recta.

Pero, ahora, soy una mujer.

Sí, una mujer que sabe quien le quiere bien.

Hoy día en mis fracasos… nadie me consuela con sus besos,

pero a pesar de mis defectos, me río de mi misma,

pues me contagian mis éxitos.

Quiero decirte que ahora yo me encuentro en tu lugar,

déjame contarte que tu cruenta indiferencia la he olvidado ya.

Trataré de ser en este caminar, la amiga fiel, pura e incondicional.

Guardaré de mi hijo con celo sus íntimos secretos y sus más