Abadón

Por Mario Escobar

La desaparición de varias jóvenes en la ciudad de Nueva Orleans aterroriza a sus habitantes.

Priscila Serrano ha conseguido convertirse en una famosa investigadora de asesinos ritualistas; no obstante, este parece más bien un caso de secuestros. Ante la aparición de los primeros cadáveres, el FBI envía a Priscila a la ciudad, y esta llega acompañada de Ray Charles. La misión es descubrir al peligroso secuestrador y asesino.

Junto a las víctimas se han encontrado vestigios de ceremonias vudú. Se descubre también que todas las jóvenes desaparecidas eran vírgenes que pertenecían a una organización similar a los Niños Exploradores. Las cosas se complican cuando la detective averigua que el caso está relacionado con un antiguo escándalo de Nueva Orleans, el cual hasta el momento muchos interesados han tratado de ocultar. Durante la investigación, Priscila y Ray descubren que, de manera sobrenatural, el poder del mal se cierne sobre la ciudad.

 

• Idioma: Español
• Editorial: Thomas Nelson
• Fecha de lanzamiento: 25 oct 2012
• ISBN: 9781602559479

Mario Escobar

Mario Escobar, novelista, historiador y colaborador habitual de National Geographic Historia, ha dedicado su vida a la investigación de los grandes conflictos humanos. Sus libros han sido traducidos a más de doce idiomas, convirtiéndose en bestsellers en países como los Estados Unidos, Brasil, China, Rusia, Italia, México, Argentina y Japón. Es el autor más vendido en formato digital en español en Amazon.

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SERIE

APOCALIPSIS II

ABADÓN

Mario Escobar

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© 2012 por Mario Escobar

Publicado en Nashville, Tennessee, Estados Unidos de América. Grupo Nelson, Inc. es una subsidiaria que pertenece completamente a Thomas Nelson, Inc. Grupo Nelson es una marca registrada de Thomas Nelson, Inc. www.gruponelson.com

Todos los derechos reservados. Ninguna porción de este libro podrá ser reproducida, almacenada en algún sistema de recuperación, o transmitida en cualquier forma o por cualquier medio —mecánicos, fotocopias, grabación u otro— excepto por citas breves en revistas impresas, sin la autorización previa por escrito de la editorial.

A menos que se indique lo contrario, todos los textos bíblicos han sido tomados de la Santa Biblia, Versión Reina-Valera 1960 © 1960 por Sociedades Bíblicas en América Latina, © renovado 1988 por Sociedades Bíblicas Unidas. Usados con permiso. Reina-Valera 1960® es una marca registrada de la American Bible Society y puede ser usada solamente bajo licencia.

Nota de la editorial: Esta novela es una obra de ficción. Los nombres, personajes, lugares o episodios son producto de la imaginación del autor y se usan ficticiamente. Todos los personajes son ficticios, cualquier parecido con personas vivas o muertas es pura coincidencia.

Editora en Jefe: Graciela Lelli

Diseño: Grupo Nivel Uno, Inc.

ISBN: 978-1-60255-947-9

Estos son los que no se contaminaron con mujeres, pues son vírgenes. Estos son los que siguen al Cordero por dondequiera que va. Estos fueron redimidos de entre los hombres como primicias para Dios y para el Cordero.

—APOCALIPSIS 14.3-5

CONTENTS

PRÓLOGO

CAPÍTULO 1

CAPÍTULO 2

CAPÍTULO 3

CAPÍTULO 4

CAPÍTULO 5

CAPÍTULO 6

CAPÍTULO 7

CAPÍTULO 8

CAPÍTULO 9

CAPÍTULO 10

CAPÍTULO 11

CAPÍTULO 12

CAPÍTULO 13

CAPÍTULO 14

EPÍLOGO

ACERCA DEL AUTOR

PRÓLOGO

La joven comenzó a sudar en cuanto cruzó Mariners Cove Boulevard, en la zona de Eden Isle, en las proximidades de Nueva Orleáns. Su cabello rubio brillaba bajo el sol y su piel pálida comenzaba a enrojecerse por el calor. El impecable chándal rosa y sus brillantes deportivas Nike blancas le daban el aspecto de una saludable y hermosa chica del sur. Eva Lafayette estaba en forma, pero aquel día era especialmente caluroso, y a las siete de la mañana el sol ya brillaba con fuerza en toda la vega del río Mississippi. Aquella zona residencial era nueva y la mitad de sus casas estaban todavía deshabitadas, lo que daba al lugar un aspecto fantasmal, una ciudad del futuro, pero en la que todavía muy pocos habitantes de la vieja Nueva Orleáns se atrevían a asentarse. El huracán Katrina había ahogado los sueños de muchas personas en la vieja ciudad del sur, y el gran crecimiento de los primeros años del siglo XXI se había detenido en seco.

Algunos creían que el pasado supersticioso y la brujería eran los grandes lastres de aquella zona del país, pero alguien que viviera en la ciudad durante algún tiempo, enseguida se daría cuenta de que la pobreza y la ignorancia eran los verdaderos problemas de la vieja y hermosa Nueva Orleáns. En los últimos años, se habían incorporado a las viejas etnias criollas y negras de la ciudad un gran número de hispanos. Eva Lafayette era del pequeño grupo de privilegiados blancos que componían poco más del 20 por ciento de la ciudad y llevaban rigiendo los destinos de Luisiana más de doscientos años.

Eva nunca salía de las inmediaciones de la zona residencial; la gente blanca no se sentía segura en algunos sitios de Nueva Orleáns, pero aquel día todas sus precauciones no le iban a servir para nada. En cuanto enfiló Oak Harbor Boulevard, en dirección al campo de golf, sin saberlo marcó su destino.

Una camioneta Ford blanca se situó a unas ciento cincuenta yardas de ella, y su ocupante, tras asegurarse de que nadie le veía, se situó a su lado, abrió la puerta corredera lateral y la introdujo dentro, sin que ella pudiera reaccionar. Su vida acaba de convertirse en un infierno para siempre.

CAPÍTULO 1

Priscila no aguantó más de una semana en Santo Domingo; después de visitar algunas zonas de la ciudad y ver a la familia decidió tomarse unas vacaciones en El Macao, lejos de las zonas de vacaciones con más aglomeraciones. Ella y su madre apenas habían hablado en aquellos primeros días, la casa siempre estaba llena de gente y ellas no paraban de visitar a familiares; por eso cuando Priscila le dijo a su madre que había alquilado un auto y que pasarían un par de semanas en un hotel, la madre se mostró reacia al principio y luego incrédula. Nunca había estado de vacaciones en toda su vida.

El hotel estaba enfrente de la playa; el mar de color turquesa brillaba en todo su esplendor y Priscila leía un libro en su iPad, mientras su madre paseaba a la orilla del mar. La joven estaba tan concentrada en su lectura que no se dio cuenta de que su madre estaba delante de ella, hasta que su sombra la