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Avances en la Logoterapia y el Análisis Existencial: Aportes de Logoterapeutas del mundo. Diversidad en la Unidad de la Logoterapia de Viktor Emil Frankl
Avances en la Logoterapia y el Análisis Existencial: Aportes de Logoterapeutas del mundo. Diversidad en la Unidad de la Logoterapia de Viktor Emil Frankl
Avances en la Logoterapia y el Análisis Existencial: Aportes de Logoterapeutas del mundo. Diversidad en la Unidad de la Logoterapia de Viktor Emil Frankl
Libro electrónico855 páginas11 horas

Avances en la Logoterapia y el Análisis Existencial: Aportes de Logoterapeutas del mundo. Diversidad en la Unidad de la Logoterapia de Viktor Emil Frankl

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En la Conferencia Mundial sobre "El papel de la Universidad en la lucha por la paz", realizada en Viena, Austria entre el 25 y 29 de agosto de 1969, Viktor Frankl pronuncia un discurso donde utiliza la palabra Monantropismo, y nos dice:
 
"La mera supervivencia no puede ser el valor supremo. Ser hombre significa estar orientado y ordenado a algo que no es uno mismo. La existencia humana se caracteriza por su autotrascendencia. Cuando la existencia humana no apunta más allá de sí misma, la permanencia en la vida deja de tener sentido, es imposible".
 
"Pero si la humanidad quiere encontrar un sentido que sea válido para todos, debe dar un nuevo paso. Después de haber alcanzado, hace miles de años, el monoteísmo, la fe en un solo Dios, debe llegar a creer en una sola humanidad. Hoy necesitamos más que nunca un monantropismo" (Viktor Frankl, en El Hombre doliente pág. 53 y 54. Editorial Herder. 2009).
 
Hagamos que la vida valga cada día. Finalmente, no sabemos cuánto durará. Pero sí sabemos que el Hoy es nuestra posibilidad y realidad. No perdamos cada momento que la vida nos regala.
 
Lo que hacemos en la vida resuena en la eternidad. No es lo que somos, ni lo que tenemos, ni lo que nos sucede. Durará por siempre lo que realicemos con destino de eternidad.
 
Hagamos que los valores sean nuestra brújula existencial para lograr una sola humanidad: el Monantropismo, propuesto por el Dr. Viktor E. Frankl.
 
Las velas mueren dando luz. Que toda nuestra vida sea luz para la humanidad. Luz alimentada por el sentido de nuestra existencia. Y que logremos trascender la misma, iluminando.
IdiomaEspañol
Fecha de lanzamiento10 abr 2024
ISBN9789505009190
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    Vista previa del libro

    Avances en la Logoterapia y el Análisis Existencial - Roberto Juan Mucci

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    Tabla de contenidos

    Presentación

    Prólogo

    Introducción

    Agradecimientos

    Capítulo I. Logoterapia y Filosofía

    1.Sentir el sentido: hacia una comprensión emocional de la existencia

    2. Aprendiendo a pensar lo pensado

    3.Dialogando sobre la dimensionalidad del sentido como realidad existencial

    4.Ser persona en-circunstancia y más allá de ella

    5.Permitir que lo que es… seaAportaciones fenomenológico-existenciales a la Logoterapia

    6.Paradojas de la temporalidad humana

    7.Nuestro lenguaje construye nuestro mundo: tal como lo nombramos, así es que vivimos

    8.Fenomenología del ejercicio de la libertadUna propuesta desde la logoterapia y el análisis existencial

    9.La vida, nuestra única oportunidad para ser nosotros mismos

    10.Historias como fuente de cambio y de sentido

    11.Para un instante y piensa conmigo

    12. La Escucha Activa como apertura a la Coexistencia

    13. Ética de la subjetividad: Para un examen de conciencia

    14.La Inteligencia Espiritual Desde la Mirada De Viktor Frankl

    Capítulo II. Logoterapia y Salud

    15.La logoterapia frente a la crisis espiritual de nuestro tiempo

    16. El sentido de la lealtad y el sentido de la vida

    17. ¿Unidad Psicosomática o Cuerpo-Existencia como un todo?

    18 .Alma Sin Ansiedad

    19. Importancia de la logoterapia como factor de salud cultura

    20. Apuntes sobre el bienestar psicológico

    21. El secreto de la voluntad de sentido

    22. Mirada existencial de la vejez: apertura a nuevos sentidos y compromisos.

    23. Encuentros terapéuticos a través del uso de la tecnología, Tele Salud mental transformación personal y profesional

    24.De la hoja roja de la vida a la plenitud existencial en la vejezAportes de la Logoterapia a la intervención Psicogerontológica

    25. Abuelidad, generatividad y sentido de vida

    26. Calidad de vida y logoterapia

    27.Significado respecto a la calidad de vida que han construido pacientes intervenidos por cirugía bariátrica desde una perspectiva logoterapéutica

    28. Adversidad como oportunidad de vida

    29. Vacío existencial y redes sociales

    30. Encontrando el sentido del dolorLogoterapia en el cáncer infantil y del adolescente.

    31. La logoterapia en Japón, una propuesta necesaria para el mundo de hoy

    32. Incidencia del Síndrome del Duelo Migratorio Extremo (Síndrome de Ulises) y Logoterapia

    33. Diálogo entre la logoterapia y la pedagogía ignacianaUna propuesta de intervención logoterapéutica

    Capítulo III. La Logoterapia y su aplicación en la clínica

    34.Psicoterapia fuera de la consulta a partir del Análisis Existencial y la Logoterapia

    35. El Sentido en la Cura y Prevención del Agotamiento Profesional

    36. Utilidad y significado del sufrimiento. Autotrascendencia

    37. Aportes de la intervención clínica en la infancia para la prevención del suicidio y el vacío existencial

    38. La Logoterapia como psicoterapia específica en el tratamiento de adolescentes que viven en Barrios Vulnerables.

    39. Depresión. Un reto para el profesional de la salud.

    40. Los valores de creación, experiencia y actitud en tiempos de crisis.

    41.Del duelo al sentido: contribuciones de la Logoterapia en el espacio de acompañamiento en el duelo.

    42. Logoterapia aplicada al terapeuta

    43. Logoterapia y desarrollo personal

    44. Logoterapia y Depresión

    Capítulo IV. Logoterapia y Educación

    45. Las decisiones como instrumento de crecimiento y de cambio personalUna reflexión basada sobre un escrito de Viktor E. Frankl

    46. La culpa en el contexto penitenciario

    47. La pareja como oportunidad de cambio y sentido

    48. Educadores profetas del sentido

    49. El arte y la creatividad en el proceso de aprendizaje

    50. La escritura, medio transmisor de valores

    51. El camino de la ofensa al olvido

    52. La contribución de la Logoterapia a la orientación vocacional de los adolescentes desde la escuela pública

    53. La adolescenciaSentido de Vida en la adolescencia

    54. Los adolescentes en la vida actual empezando su trascendencia y su autodistanciamiento"

    55. ¿Qué implica vivir desde la dimensión espiritual?

    56. Logoterapia: apreciaciones a la educación, específicamente sobre los estudiantes con discapacidad y el abordaje del equipo de orientación educativa

    57. Notas para el alma: la enseñanza musical y la logoterapia

    58. Logoterapia y Educación: Un reto hacia la Rehumanización

    Capítulo V. Logoterapia y Valores

    59. El Sí constructor de Vida y Sentido

    60.La ecuación existencial en el contexto hipermoderno

    61. Los Valores de Viktor Frankl y la Naturaleza

    62. Tomar conciencia de lo cotidiano con sentido y esperanza

    63. La finitud, motivación para el sentido

    64. El llamado de la vida, el honor de la persona

    65. La presencia ignorada del sentido la voluntad de sentido

    66. La revolución ética mundial aún pendiente

    67. La espiritualidad en la logoterapia

    68. El amor como intentio espiritualPresente en todos los valores y alcanza todos los sentidos

    69. El hombre en busca de ser feliz

    70. Construyendo una cultura de vida en paz desde la musicoterapia y la logoterapia: musicologoterapia

    Capítulo VI. Dimensión Organizacional, Social y Política de la Logoterapia

    71. Autotrascendencia en los vínculos familiares: Presencia y Acción

    72. Familia y el sentido del encuentro

    73. El Fondo Monantrópico Internacional FMI, una vía para vivir la triada positiva: Fraternidad, coraje y esperanza

    74. PNL y Coaching para la Búsqueda de Sentido en las Organizaciones

    75. El trabajo como oportunidad y puente hacia la Autotrascendencia

    76. Hacia una democratización de la Logoterapia

    77. El sentido del trabajo y la capacidad de oposición personal del trabajador de las universidades en Venezuela

    78. Logopolítica: Dimensión Social y Política de la Logoterapia

    logo_ebook

    ISBN 978-950-500-919-0

    Mucci, Roberto Juan

    Avances en la Logoterapia y el Análisis Existencial : aportes de Logoterapeutas del Mundo : diversidad en la unidad de la Logoterapia de Viktor / Roberto Juan Mucci. - 1a ed - Ciudad Autónoma de Buenos Aires : Guadalupe, 2024.

    Libro digital, EPUB

    Archivo Digital: descarga y online

    ISBN 978-950-500-919-0

    1. Psicoanálisis. I. Título.

    CDD 150.195

    Avances en la Logoterapia y el Análisis Existencial

    Aportes de Logoterapeutas del mundo. Diversidad en la Unidad de la Logoterapia de Viktor Emil Frankl

    Dr. Roberto Juan Mucci - Compilador

    Presentación

    En la Conferencia Mundial sobre El papel de la Universidad en la lucha por la paz, realizada en Viena, Austria entre el 25 y 29 de agosto de 1969, Viktor Frankl pronuncia un discurso donde utiliza la palabra Monantropismo, y nos dice:

    La mera supervivencia no puede ser el valor supremo. Ser hombre significa estar orientado y ordenado a algo que no es uno mismo. La existencia humana se caracteriza por su autotrascendencia. Cuando la existencia humana no apunta más allá de sí misma, la permanencia en la vida deja de tener sentido, es imposible.

    Pero si la humanidad quiere encontrar un sentido que sea válido para todos, debe dar un nuevo paso. Después de haber alcanzado, hace miles de años, el monoteísmo, la fe en un solo Dios, debe llegar a creer en una sola humanidad. Hoy necesitamos más que nunca un monantropismo, Viktor Frankl, en El Hombre doliente pág. 53 y 54. Editorial Herder. 2009).

    Hagamos que la vida valga cada día. Finalmente, no sabemos cuánto durará. Pero sí sabemos que el Hoy es nuestra posibilidad y realidad. No perdamos cada momento que la vida nos regala.

    Lo que hacemos en la vida resuena en la eternidad. No es lo que somos, ni lo que tenemos, ni lo que nos sucede. Durará por siempre lo que realicemos con destino de eternidad.

    Hagamos que los valores sean nuestra brújula existencial para lograr una sola humanidad: el Monantropismo, propuesto por el Dr. Viktor E. Frankl.

    Las velas mueren dando luz.Que toda nuestra vida sea luz para la humanidad. Luz alimentada por el sentido de nuestra existencia. Y que logremos trascender la misma, iluminando.

    Dr. Roberto J. Mucci.

    Prólogo

    No es habitual en el campo de la Logoterapia y el Análisis Existencial la organización y producción de un libro como el que tengo el honor de prologar: Avances en la Logoterapia y el Análisis Existencial. Aportes de Logoterapeutas del mundo. Diversidad en la Unidad de la Logoterapia de Viktor Emil Frankl.

    Es un esfuerzo formidable pensado y organizado por el Dr. Roberto J. Mucci, del Centro Bonaerense de Logoterapia (Argentina) que ha sabido conducir al éxito a nada menos que 78 autores. Esto solamente puede hacerse por amor y admiración a nuestro Maestro, el Dr. Viktor E. Frankl.

    En julio de 1990 publicaba la Sociedad Australiana de Logoterapia una nota mía en referencia al Dr. Viktor E. Frankl en la que subrayaba la importancia de la relación Maestro-Discípulo basada en el amor. Decía yo en aquel año: Un verdadero Maestro no surge de las aulas de la Universidad, no surge de las conferencias magistrales en los recintos de la ciencia, ni siquiera de las publicaciones que podría ofrecer a la humanidad. El Maestro surge, realmente, del espíritu. Es el espíritu en la búsqueda constante de aquello que le permita encontrar su desarrollo y, lo encuentra con su propio lenguaje, con su propia fuerza, con su propia luz. Tal encuentro es así final. La autotrascendencia mutua realmente existe. El Maestro lo siente o lo percibe. El discípulo aprende a conocerlo. Éste sabe que es un sentimiento único que se dibuja perfectamente cerca del Maestro. Entonces absorbe su sabiduría. Bebe del elixir que surge de la experiencia de vida del Maestro. Alimentando su propio yo. E inmediatamente el discípulo se siente completo y listo de salir al mundo. Mostrar su experiencia como Pastor de Almas. La divisa del Maestro surge de la reflexión de su propia vida: He encontrado sentido a mi vida ayudando a otros a encontrar sentido a la suya. Divisa que él ha experimentado en las peores circunstancias. A pesar de todo siempre dijo a la vida. Se convierte, así, en inspiración para completar la propia experiencia de alguien que desee ayudar a otros a encontrar sentido a sus vidas. Y así autotrascender."

    Siete años más tarde, en 1997, el Dr. Roberto J. Mucci iniciaba la difusión institucionalizada de la Logoterapia organizando conferencias, cursos, encuentros y asistencia desde su Centro en la Provincia de Buenos Aires, Argentina. Ya van 26 años de incesante y riguroso trabajo desinteresado.

    Creo firmemente que todos los que han colaborado desinteresadamente en esta publicación han deseado transmitir a los lectores su experiencia en este campo tan especial del Análisis Existencial y la Logoterapia. Es el amor que los une. El amor que une a cada uno. Unión del Maestro, el discípulo, los seguidores, la gente que sufre, la gente agradecida, las manos unidas en solidaridad.

    Esto es el amor por el Maestro que nos une a nosotros todos: discípulos, pacientes, alumnos, lectores, todos los que nos hemos fascinado por su presencia en conferencias. En mi caso constatar ante su presencia el carisma y la sabiduría transmitida en las Conferencias que dictara en Buenos Aires, Mendoza y Caracas en el año 1985. Él nos une a todos nosotros.

    Esto es el amor, no hay duda. A pesar de todo el odio, el sufrimiento, el fracaso, la avaricia del poder, la agresión, las luchas, es la abnegación y el amor lo que da sentido. A través de los otros, ayudando y ayudándose. a vencer la frustración y el vacío existencial. Es el amor de la humanidad expresado de ser humano a ser humano. ¿Será suficiente? Citemos, una vez más, el deseo que debiera ser ya universal: Pero si la humanidad quiere encontrar un sentido que sea válido para todos, debe dar un nuevo paso. Después de haber alcanzado, hace miles de años, el monoteísmo, la fe en un solo Dios, debe llegar a creer en una sola humanidad. Hoy necesitamos más que nunca un monantropismo. (Viktor Frankl, en El Hombre doliente pág. 53 y 54. Editorial Herder. 2009).

    Siguiendo estas ideas es que 78 colegas logoterapeutas de tres continentes han aceptado ceder un artículo personal que, en conjunto, configuran un libro de relevante importancia. Será accesible intelectualmente, pero no menos profundo. Será accesible económicamente porque así lo han decidido coordinador, autores y editorial. No es un emprendimiento empresarial (como muchos otros que, lamentablemente, conocemos) pero sí tiene que contar con la máxima difusión. Entre todos lo lograremos.

    Nos recuerda su Coordinador, el Dr. Roberto J. Mucci, que este emprendimiento es la respuesta a una pregunta que muchos nos hacíamos en el comienzo y auge de la pandemia por COVID-19 en el año 2020. El espíritu solidario que siempre anima al Dr. Mucci, al que conocemos desde hace muchos años, lo llevó a aprovechar los medios virtuales de comunicación para llegar al mayor número de oyentes posibles. Logoterapeutas, Analistas Existenciales y gente del común interesadas por la temática presentada.

    Recordaba yo un comentario que me hiciera el Dr. Mucci: La Logoterapia busca dar respuesta a situaciones conflictivas que se presentan en nuestra vida real y esas respuestas deberán satisfacer o ser útiles en nuestro proceso de construir nuestra persona. Y agregaba: La peste del COVID-19, las guerras, el paso del tiempo, los acontecimientos, el cambio y los conflictos que éste genera, los esperables y los no esperables, los transitables y los insolubles. Todo esto constituye la Partida de Ajedrez de la vida personal, social y mundial, que va cambiando a medida que nos jugamos nuestra existencia. Me tentó hacer de este comentario el recurso motivador para mi presentación en uno de sus conversatorios: La partida de Ajedrez de nuestra existencia.

    ¡Menuda tarea! En tres sucesivos años, 2020, 2021 y 2022 se llevaron a cabo 165 encuentros internacionales. El control de la pandemia y el regreso a la presencialidad en los actos profesionales llevó a su Coordinador a dar por finalizada su emisión. No era sencilla la tarea de programación, coordinación, registro y publicación de cada uno de esos encuentros virtuales. Hemos visto a un Roberto cansado a veces, enfermo otras, con problemas personales casi siempre, pero firme en su puesto sin claudicar. Obra única e inédita, dice él. Y nosotros lo reafirmamos enfáticamente agregando el matiz de solidaria y casi imposible de concebir en otros tiempos.

    Repetir, sin peligro a redundancias, uno de los objetivos que nos propone el Coordinador: "La fraternidad, la solidaridad y la amistad deben prevalecer por sobre los intereses particulares, y regionales. monantropismo, una sola humanidad, un mismo mensaje, un trabajo en común por un mundo con dignidad y sentido para todos. Los personalismos y las grietas no pertenecen a la logoterapia creada por V. Frankl. Es así, como muchos se conocieron por primera vez en este espacio virtual, porque desconocían todo lo que otros hermanos y colegas estaban realizando en las distintas regiones del mundo, es más, muchos fueron los que ni conocían quienes estaban en sus mismos países".

    Pero ¿Quiénes son los autores que colaboraron y en qué temas, que incumben también a la Logoterapia, se han detenido para ilustrar? Seis capítulos con los siguientes temas: Logoterapia y Filosofía, Logoterapia y Salud, Logoterapia y su aplicación en la Clínica, Logoterapia y Educación, Logoterapia y Valores, Dimensión Organizacional, Social y Política de la Logoterapia. Entre los autores, colegas que he conocido y con los que he intercambiado conocimientos desde mi primer acercamiento al Análisis Existencial y a la Logoterapia allá por los años 1970 del siglo pasado. Otros muchos, igualmente referentes a través de sus libros y publicaciones. Y una sorpresa personal al encontrar en el libro aportes de colegas que no conocía y a los que he podido apreciar en sus valores en sus presentaciones en los conversatorios. Creo haberme perdido solamente uno o dos por compromisos personales inevitables.

    Representantes de países latinoamericanos que he recorrido por años antes de mi exilio voluntario, hace ya 20 años, en mi amada Galicia: Argentina, Uruguay, Perú, Paraguay, Brasil, Venezuela, México, Estados Unidos. Algunos que incluiría en un viaje imaginario futuro: Chile, Guatemala, Bolivia, Colombia y Canadá. No rechazaría encontrarme con colegas de España e Italia, tan cerca geográficamente de mi residencia, pero inexplicablemente lejos en opciones.

    No estuve inactivo desde el inicio de la pandemia en 2020. Quise contribuir al acercamiento de Logoterapeutas y Analistas Existenciales de Europa y propuse, mediante cartas enviadas a numerosos colegas, la constitución de la Red Europea de Logoterapia y Análisis Existencial, una plataforma sin fines de lucro que proponía como objetivos el contacto directo entre colegas, el intercambio de información sobre eventos, conferencias, cursos, seminarios o congresos de la especialidad, así como la propuesta de trabajos de investigación. Trataba de contribuir a la superación el aislamiento, la distancia corporal y los controles para mostrarnos la importancia del verdadero encuentro entre pares y la valoración del sentido, aún en las peores circunstancias. A pesar de la pandemia, inaugurar una nueva forma de comunicación compartiendo nuestras emociones, sentimientos y pensamientos tan cerca como sea posible. Una nueva era que debería ser la era del ENCUENTRO del hombre con el hombre. Y los Analistas Existenciales y Logoterapeutas debiéramos meditar la forma de encarar el desafío de ser líderes en esa comunicación.

    Pocas respuestas. Insuficientes para constituir una red. Intuición de personas e instituciones ego sintónicas. Poco abiertas o abiertos al diálogo en otros idiomas y con referentes culturales muy diversos. Todo lo contrario, a la respuesta dada a nuestro Dr. Roberto J. Mucci en Latinoamérica. Intereses y culturas similares o interdependientes que facilitaron la comunicación. Me consta haber oído al Dr. Frankl mencionar que Latinoamérica era donde mejor se le había entendido y recibido. A él y a su esposa Elly, siempre a su lado en esos viajes por Argentina, Brasil, Venezuela y Estados Unidos.

    Poco queda por agregar a lo dicho en este Prólogo. Insistir en que el lector considere la importancia de contar con tantos y tan interesantes aportes de Logoterapeutas y Analistas Existenciales.

    Felicitar al Coordinador de esta gigantesca obra, Dr. Roberto J. Mucci, deseándole que tenga éxito en su difusión para que nos pueda sorprender, en el futuro, con la edición de un nuevo tomo dedicado a la Logoterapia Aplicada. Sabemos de su capacidad para tal propósito y deseamos encuentre la fuerza psíquica y física necesaria para tal obra.

    Un abrazo cordial desde España a todos los lectores.

    Dr. José Martínez-Romero Gandos

    jmrsentido@gmail.com

    Introducción

    Queridos amigos todos, es para mí una gran alegría presentarles este libro, construido en forma conjunta y fraternal por 78 profesionales de la salud y la educación, procedentes de tres continentes, América, Europa y Asia.

    Con esta obra contribuimos a sumar nuestro aporte para lo que Viktor Emil Frankl, creador de la Logoterapia y el Análisis Existencial llamara el Monantropismo, una sola humanidad.

    Haciendo un poco de historia, desde el Centro Bonaerense de Logoterapia Por Amor a la Vida fundado en San Justo, provincia de Buenos Aires, Argentina; en el año 1997, venimos trabajando con la comunidad llevando el legado frankliano al alcance de todos, según Frankl; al alcance del hombre común de la calle, según el Dr. F. Bretones, mediante conferencias, cursos, talleres, encuentros, jornadas y congresos sobre Logoterapia, de modo gratuito y abierto a todos.

    No todas las personas tienen los recursos económicos como para pagar esas actividades y lo habitual es que quedaran excluidos del mensaje de nuestro maestro, problemática que planteé en el Primer Congreso de Logoterapia en Viena, en el año 2012. Considero que, si Frankl viera ciertos emprendimientos empresariales logoterapéuticos, seguramente reaccionaría como reaccionó Jesús ante los mercaderes, en la puerta del Templo de Jerusalén.

    Llegado el año 2020 y, con el comienzo de la pandemia, la pregunta fue cómo poder ayudar a la comunidad en esta situación de encierro y, así surge el proyecto de los Encuentros Internacionales de Logoterapia y Análisis Existencial, que hemos organizado y coordinado desde nuestro Centro de Logoterapia, y, hacerlos de modo virtual para poder llegar a todos los hogares. Para ello se invitó a expositores de los tres continentes mencionados y se realizaron un total de 165 encuentros a lo largo de los años 2020, 2021 y 2022, tiempo en el cual se vuelve a la normalidad y presencialidad. Esta actividad como todas las otras, fue dirigida al público en general y de modo gratuito tanto para los asistentes virtuales como para los expositores, quienes generosamente donaron su tiempo y sus conocimientos.

    A mi humilde entender esta construcción conjunta de tantos profesionales de la Logoterapia es una obra única e inédita, siendo el primer libro así construido en el mundo de la logoterapia, lo cual es mérito de todos.

    Nuestros objetivos son:

    Que ningún hombre quede en la periferia de la Logoterapia, sin poder tener acceso a ella y, la única forma era llegar nosotros a ellos, saliendo de los cómodos ámbitos del consultorio y de la academia y hacerlo en forma gratuita, con un lenguaje accesible a todos y, abarcando las problemáticas que angustian a nuestras comunidades.

    Contribuir a conocernos entre nosotros, los logoterapeutas, sus lugares de procedencia y acción, sus saberes y sus prácticas desarrolladas en cada país, descubriendo la diversidad de profesionales, como así también de la aplicación de la Logoterapia y el Análisis Existencial, en cada territorio concreto de nuestro querido planeta.

    La fraternidad, la solidaridad y la amistad deben prevalecer por sobre los intereses particulares, y regionales, Monantropismo, una sola humanidad, un mismo mensaje, un trabajo en común por un mundo con dignidad y sentido para todos. Los personalismos y las grietas no pertenecen a la logoterapia creada por V. Frankl. Es así, como muchos se conocieron por primera vez en este espacio virtual, porque desconocían todo lo que otros hermanos y colegas estaban realizando en las distintas regiones del mundo, es más, muchos fueron los que ni conocían quienes estaban en sus mismos países.

    Trabajar por democratizar la Logoterapia y el Análisis Existencial, término que le debemos a Manuel García de Venezuela.

    Llegando ya a fines del 2022 me percaté que esos tres años de trabajo con tantos profesionales no podían quedar solo guardados en YouTube, donde están la mayoría de ellos, sino que debíamos juntar todo lo aportado por los disertantes y los asistentes, de quienes también hemos aprendido muchísimo con sus preguntas y comentarios y compaginar toda esa riqueza en un texto que perdurara en el tiempo y, que todo aquel que quisiera crecer en esta hermosa y valiosa escuela de vida lo pudiera hacer. Esta es la obra que les presento y como V. Frankl pusiera su corazón a nuestros pies, yo hago lo mismo con este libro Avances en la Logoterapia y el Análisis Existencial. Aportes de Logoterapeutas del mundo. Diversidad en la Unidad de la Logoterapia de Viktor Emil Frankl.

    Dicho texto está compuesto por una secuencia temática de 6 (seis) capítulos, cada uno de los cuales contiene una diversidad de artículos correspondientes a los expositores del mencionado ciclo de Encuentros Internacionales. Dada dicha diversidad puede ser leído sin necesidad de tener en cuenta el orden de los mismos, lo cual no altera la unidad con la teoría de la Logoterapia, es decir podemos elegir el modo de leerlo acorde a las temáticas que nos urgen y luego, continuar con el resto del material. En cuanto al contenido de los mismos es responsabilidad de sus respectivos autores velar por el auténtico espíritu frankliano, de quienes contarán con sus respectivos e-mails a los fines de poder dialogar con cada uno de ellos.

    Quiera Dios que con este libro podamos contribuir a humanizar la humanidad, parafraseando a G. Mistral y, a hacer del mundo un HOGAR cálido y digno para todos.

    Que la marea de la vida nos llene de salud, felicidad y sentido,

    Afectuosamente

    Dr. Roberto Juan Mucci

    (Coordinador).

    Agradecimientos

    Quiero agradecer de corazón a todos los que han hecho posible esta obra que seguramente será de mucha utilidad y sentido para todos.

    En primer lugar, a nuestro querido maestro y padre de la Logoterapia el Dr. Viktor Emil Frankl, por la grandeza de su vida y su obra dedicada a la humanización del mundo y a descubrir el sentido de la vida.

    En segundo lugar, a Alexander Vesely, nieto de Viktor E. Frankl, quien en todo momento nos apoyó con su participación como expositor en varias oportunidades y, en particular por su generosidad y calidez humana estando a nuestro lado en cada proyecto realizado.

    En tercer lugar, al Dr. Oscar Ricardo Oro, gracias a quien pude conocer el apasionante camino de la Logoterapia.

    En cuarto lugar, a todos los expositores-autores que generosamente donaron su tiempo y sus conocimientos, poniendo en práctica la autotrascendencia y la solidaridad.

    En quinto lugar, agradecer a los que participaron de estos encuentros en días y horarios un poco complicados por los compromisos familiares e igualmente se hicieron un espacio para estar.

    En sexto lugar, al Dr. José Martínez-Romero Gandos, quien desde su sabiduría, experiencia y contención estuvo siempre a mi lado asesorándome y alentándome.

    En séptimo lugar, al Dr. Francisco Bretones por el ser pionero en el mundo, de lo que Manuel García llama la democratización de la Logoterapia, por ser mi maestro en comprender la importancia de la misión de llevar el mensaje frankliano al hombre común de la calle y principalmente por su coherencia entre el decir, el hacer y el ser.

    En octavo lugar, a quienes nos ayudaron con el armado de los flyers para la publicidad de cada encuentro, Pablo Bukavec, Natalia Mucci, Antonio Sposato y a Estefanía Sol Bukavec, mi musa inspiradora con su amor y bondad.

    En noveno lugar y de modo principalísimo al Padre Pedro Pitura, Director de la Editorial Guadalupe de Argentina, quién nos ayudó en la concreción material de este proyecto tan valioso.

    Por último, quiero agradecer a todo aquel que habiendo leído este libro decida convertirse en un militante de la vida, en un protagonista de una nueva humanidad, la que el hombre necesita y merece, en un profeta y misionero de sentido.

    Índice

    Capítulo I. Logoterapia y Filosofía

    1. Sentir el sentido: hacia una comprensión emocional de la existencia

    2. Aprendiendo a pensar lo pensado

    3. Dialogando sobre la dimensionalidad del sentido como realidad existencial

    4. Ser persona en-circunstancia y más allá de ella

    5. Permitir que lo que es… sea. Aportaciones fenomenológico-existenciales a la Logoterapia

    6. Paradojas de la temporalidad humana

    7. Nuestro lenguaje construye nuestro mundo: tal como lo nombramos, así es que vivimos

    8. Fenomenología del ejercicio de la libertad. Una propuesta desde la logoterapia y el análisis existencial

    9. La vida, nuestra única oportunidad para ser nosotros mismos

    10. Historias como fuente de cambio y de sentido

    11. Para un instante y piensa conmigo

    12. La Escucha Activa como apertura a la Coexistencia

    13. Ética de la subjetividad: Para un examen de conciencia

    14. La Inteligencia Espiritual Desde la Mirada De Viktor Frankl

    Capítulo II. Logoterapia y Salud

    15. La logoterapia frente a la crisis espiritual de nuestro tiempo

    16. El sentido de la lealtad y el sentido de la vida

    17. ¿Unidad Psicosomática o Cuerpo-Existencia como un todo?

    18. Alma Sin Ansiedad

    19. Importancia de la logoterapia como factor de salud cultura

    20. Apuntes sobre el bienestar psicológico

    21. El secreto de la voluntad de sentido

    22. Mirada existencial de la vejez: apertura a nuevos sentidos y compromisos.

    23. Encuentros terapéuticos a través del uso de la tecnología, Tele Salud mental transformación personal y profesional

    24. De la hoja roja de la vida a la plenitud existencial en la vejez. Aportes de la Logoterapia a la intervención Psicogerontológica

    25. Abuelidad, generatividad y sentido de vida

    26. Calidad de vida y logoterapia

    27. Significado respecto a la calidad de vida que han construido pacientes intervenidos por cirugía bariátrica desde una perspectiva logoterapéutica

    28. Adversidad como oportunidad de vida

    29. Vacío existencial y redes sociales

    30. Encontrando el sentido del dolor. Logoterapia en el cáncer infantil y del adolescente.

    31. La logoterapia en Japón, una propuesta necesaria para el mundo de hoy

    32. Incidencia del Síndrome del Duelo Migratorio Extremo (Síndrome de Ulises) y Logoterapia

    33. Diálogo entre la logoterapia y la pedagogía ignaciana. Una propuesta de intervención logoterapéutica

    Capítulo III. La Logoterapia y su aplicación en la clínica

    34. Psicoterapia fuera de la consulta a partir del Análisis Existencial y la Logoterapia

    35. El Sentido en la Cura y Prevención del Agotamiento Profesional

    36. Utilidad y significado del sufrimiento. Autotrascendencia

    37. Aportes de la intervención clínica en la infancia para la prevención del suicidio y el vacío existencial

    38. La Logoterapia como psicoterapia específica en el tratamiento de adolescentes que viven en Barrios Vulnerables.

    39. Depresión. Un reto para el profesional de la salud.

    40. Los valores de creación, experiencia y actitud en tiempos de crisis.

    41. Del duelo al sentido: contribuciones de la Logoterapia en el espacio de acompañamiento en el duelo.

    42. Logoterapia aplicada al terapeuta

    43. Logoterapia y desarrollo personal

    44. Logoterapia y Depresión

    Capítulo IV. Logoterapia y Educación

    45. Las decisiones como instrumento de crecimiento y de cambio personal. Una reflexión basada sobre un escrito de Viktor E. Frankl

    46. La culpa en el contexto penitenciario

    47. La pareja como oportunidad de cambio y sentido

    48. Educadores profetas del sentido

    49. El arte y la creatividad en el proceso de aprendizaje

    50. La escritura, medio transmisor de valores

    51. El camino de la ofensa al olvido

    52. La contribución de la Logoterapia a la orientación vocacional de los adolescentes desde la escuela pública

    53. La adolescencia Sentido de Vida en la adolescencia

    54. Los adolescentes en la vida actual empezando su trascendencia y su autodistanciamiento"

    55. ¿Qué implica vivir desde la dimensión espiritual?

    56. Logoterapia: apreciaciones a la educación, específicamente sobre los estudiantes con discapacidad y el abordaje del equipo de orientación educativa

    57. Notas para el alma: la enseñanza musical y la logoterapia

    58. Logoterapia y Educación: Un reto hacia la Rehumanización

    Capítulo V. Logoterapia y Valores

    59. El Sí constructor de Vida y Sentido

    60. La ecuación existencial en el contexto hipermoderno

    61. Los Valores de Viktor Frankl y la Naturaleza

    62. Tomar conciencia de lo cotidiano con sentido y esperanza

    63. La finitud, motivación para el sentido

    64. El llamado de la vida, el honor de la persona

    65. La presencia ignorada del sentido la voluntad de sentido

    66. La revolución ética mundial aún pendiente

    67. La espiritualidad en la logoterapia

    68. El amor como intentio espiritual. Presente en todos los valores y alcanza todos los sentidos

    69. El hombre en busca de ser feliz

    70. Construyendo una cultura de vida en paz desde la musicoterapia y la logoterapia: musicologoterapia

    Capítulo VI. Dimensión Organizacional, Social y Política de la Logoterapia

    71. Autotrascendencia en los vínculos familiares: Presencia y Acción

    72. Familia y el sentido del encuentro

    73. El Fondo Monantrópico Internacional FMI, una vía para vivir la triada positiva: Fraternidad, coraje y esperanza

    74. PNL y Coaching para la Búsqueda de Sentido en las Organizaciones

    75. El trabajo como oportunidad y puente hacia la Autotrascendencia

    76. Hacia una democratización de la Logoterapia

    77. El sentido del trabajo y la capacidad de oposición personal del trabajador de las universidades en Venezuela

    78. Logopolítica: Dimensión Social y Política de la Logoterapia

    Capítulo I. Logoterapia y Filosofía

    1. Sentir el sentido: hacia una comprensión emocional de la existencia

    Daniele Bruzzone¹

    Italia.

    Desde cuando el profesor Viktor Frankl falleció, en 1997, las Sociedades e Institutos de Logoterapia y Análisis Existencial se han multiplicado rápidamente en todo el mundo. Ha crecido entonces el interés alrededor de las cuestiones existenciales y la difusión del pensamiento frankliano y sus aplicaciones. Al mismo tiempo, se ha desarrollado enormemente el potencial de la logoterapia en muchos ámbitos: respecto al tiempo en que Frankl escribía sus libros más importantes, en los años 1940-50, cuando las escuelas de psicoterapia acostumbraban a distinguirse y separarse por contraposición, hoy en día, el diálogo y la integración son actitudes más comunes, y el tema del sentido ya no es un elemento exclusivo (y excluyente) de la Logoterapia y el Análisis Existencial, sino que recurre en varios enfoques, aunque con connotaciones a veces diferentes. Es entonces más viable encontrar sintonías con otras perspectivas teóricas y colaborar con profesionales e investigadores que pertenecen a otras tradiciones. Precisamente, por esta razón, es necesario aclarar el significado del sentido en la logoterapia y análisis existencial, con el fin de tomar las distinciones que quedan, a lado de las similitudes que nos acercan a otros enfoques.

    En mi último libro sobre la vida emocional (Bruzzone, 2022a), publicado también en inglés por la Editorial Springer, traté de esbozar un análisis fenomenológico de una dimensión de cierta manera descuidada o subestimada y sin embargo fundamental para la comprensión de la existencia y su la orientación hacia el sentido y los valores: la dimensión afectiva, como presupuesto (a veces implícito) de toda cognición y decisión responsable. Creo que este punto, entre otros, es determinante para entender correctamente la noción logoterapéutica de sentido.

    Podríamos empezar por una pregunta legítima - o talvez insinuar una duda razonable:

    ¿Es la logoterapia una terapia cognitiva?

    Fue Alfried Längle el que afirmó, en el II Congreso mundial de Logoterapia, que la logoterapia es la primera psicoterapia cognitiva, y por cierto esta definición no carece de fundamento: la forma metodológica del diálogo socrático se sirve de argumentaciones y contraargumentaciones filosóficas y se realiza a través de un intercambio de ideas entre terapeuta y paciente, como Frankl dice en sus escritos juveniles (Frankl, 2000, pp. 27; 112). Según Längle, la logoterapia propuso un desplazamiento del énfasis de lo afectivo a lo cognitivo ya a partir del 1925, criticando la unilateralidad del psicoanálisis clásico, y de esta manera se puso con antelación en el marco de un enfoque cognitivo.

    No cabe duda que la logoterapia apela a la dimensión espiritual (geistige) y que el espíritu (Geist) se manifiesta sumamente a nivel intelectual. Sin embargo, desde el punto de vista de la ontología psicoterapéutica (o sea, de la visión del ser humano en que se basa el tratamiento) la logoterapia no es una psicoterapia cognitiva. El mismo Längle, continuando su exposición, aclaró que la idea del lógos, en efectos, estaba solo parcialmente esbozada en el término clásico de cognición, porqué el lógos, de acuerdo a Frankl, incluía la cognición o percepción del sentido (cit. en Frankl, 2005, p. 108). Ahora bien, la percepción del sentido no consiste simplemente en un acto intelectual, sino en un juicio de valor – y cada juicio de valor se basa en una intuición de carácter emocional.

    Por eso Frankl habla de conciencia (Gewissen), y no de cognición (Bewußtsein): el fenómeno de la conciencia es más profundo que la cognición, o como dice Frankl: "El lógos es más profundo que la lógica" (Frankl, 1985, p. 66). Es más profundo porque está enraizado en el núcleo más íntimo del alma, el centro espiritual de que surgen nuestros actos más auténticos, podríamos decir con una expresión metafórica: en nuestro corazón.

    Frankl desarrolla hasta incluso el concepto de una espiritualidad inconsciente, con lo cual, dice, se sale al paso de toda posible intelectualización y racionalización unilateral respecto a la esencia del hombre (Frankl, 1990b, p. 72). La dimensión espiritual, por lo tanto, no se puede de ninguna manera reducir a la cognitiva: "en lo profundo de lo espiritual (...) lo racional y lo intelectual no representan el carácter auténtico del ser humano; más bien detenta esta primacía la esfera emocional y existencial" (Frankl, 2001, p. 71).

    Con estas declaraciones, Frankl se enmarca en la línea trazada por la tradición fenomenológica (Bruzzone, 2008; Bruzzone, 2011; Bruzzone, 2012; Bruzzone, 2022b), asimilada especialmente a través de la lectura de la obra de Max Scheler, cuyo Formalismo el profesor Frankl llevaba siempre consigo como una Biblia (Frankl, 1990a, p. 134). En ese libro, el filósofo de Múnich revolucionaba el fundamento de la ética kantiana, afirmando la primacía de la intuición emocional en la percepción de los valores. Fue, pero el mismo fundador de la fenomenología, Edmund Husserl, el primero en afirmar que la constitución más originaria del valor tiene lugar en el ámbito emocional (Husserl, 2002, II, p. 14). En una primera fase de su pensamiento (en las Investigaciones lógicas) Husserl creía que el acto emocional (el acto de sentimiento) se basaba en un acto cognitivo previo (el acto de representación). Pero más tarde (en sus Ideas), él reconoció que las emociones, en cuanto fenómenos intencionales, están al origen de la posibilidad de hacer experiencia de las cosas: las cosas mismas se dan siempre dotadas de cierta mayor o menor importancia, relevancia para nosotros. Y nuestra capacidad de tomar ese valor de las cosas es debido a nuestra sensibilidad afectiva.

    El sentido de la afectividad

    El acto de sentimiento es una forma originaria de tomar a las cosas, justamente en su sentido y valor, o sea en su capacidad de alcanzarnos, de atraernos y de motivarnos. Un objeto, un evento, una persona pueden afectarnos de forma diferente, de manera más o menos impactante, dejando una huella más o menos marcada, y provocando por nuestra parte una respuesta más o menos firme y duradera. De hecho, el término afecto tiene que ver precisamente con este asunto: ad-fectum (del lat. adficio) quiere decir ser alcanzado o impresionado por algo, y al mismo tiempo tener una inclinación, ser dispuesto o propenso hacia algo. La afectividad supone una receptividad y una respuesta; una pasividad y una toma de posición. Algo que experimentamos, conforme a la intensidad con que nos afecta, atrae nuestra atención, moviliza nuestro deseo, nos orienta hacia una dirección, influye sobre nuestra manera de actuar. Por lo tanto, nuestra conducta es inteligente y eficaz en la medida en que corresponde al sentido y valor de las cosas; de otro modo, puede ser desordenada e incoherente en la medida en que percibe de forma inadecuada o trastornada el sentido y el valor de las cosas mismas.

    De todas maneras, emociones y sentimientos no son ciegos y arbitrarios o peligrosos; al contrario, son clarividentes: nos permiten tomar una dimensión del mundo que de otra forma no podríamos aferrar, es decir: la dimensión axiológica de la realidad. El mismo Frankl escribe, en La presencia ignorada de Dios, que el sentimiento, al menos cuando en el sentido de Scheler se puede llamar intencional, no es para nada erróneo; de hecho, puede ser mucho más perspicaz el sentimiento que la sagaz y penetrante facultad racional (Frankl, 1990b, p. 45).

    Perspicaz (del latín perspicere) quiere decir examinar, observar atentamente, mirar de manera más profunda: es la mirada aguda de quien ve lo que a los demás se les escapa. El sentimiento, entonces, puede llegar donde la razón no puede. Frankl habla, hasta incluso, de una "superioridad cognoscitiva y volitiva del animus y del sentimiento respecto a la facultad racional e intelectual" (Frankl, 2021, p. 189), entendiendo con esto destacar que la vida emocional no es simplemente concomitante y accesoria, sino más bien originaria y esencial.

    Por consiguiente: ser humanos no implica solamente la capacidad de pensar de forma correcta, sino la capacidad de sentir de forma apropiada. Afinar la conciencia (Frankl, 1990b, p. 108) no quiere decir entonces hacer más aguda y genial la comprensión intelectual de la vida, sino cultivar la capacidad de percibir el sentido inherente en cada situación y responder de manera conforme y adecuada. Lo cual sería radicalmente imposible si fuéramos seres insensibles o desencarnados.

    En definitiva: el sentido se siente. Exactamente cómo se siente el sinsentido. De hecho, cuando Frankl habla de la frustración y del vacío existencial, siempre nos habla de un "sentimiento de insignificancia (Frankl, 2010) o de un sentimiento de falta absoluta de sentido" (Frankl, 2021, p. 18). Es decir: el sentimiento de que no hay sentimientos: nada me afecta, nada me atrae, nada me motiva. Es más: el sentido es principalmente sentido, y no pensado, porqué la interrogación conciente sobre el sentido nace del sinsentido. No dudamos del sentido de la vida cuando lo tenemos; sin embargo, nos preguntamos por el sentido cuando nos hace falta. Es la lección de los filósofos: el pensamiento nace del vacío, de la incertidumbre, del temor y del dolor; no de la plenitud o de la certeza y tampoco de la alegría. Por eso la noción de la tríada trágica (dolor, culpa, muerte) es extremadamente interesante desde un punto de vista filosófico: porqué estas situaciones-límite, de acuerdo a Frankl, no tienen un valor negativo, a pesar de que parecen quitarle a la vida su sentido; ellas tienen paradójicamente un valor positivo, en cuanto nos permiten plantear de forma explícita la pregunta por el sentido que, de lo contrario, quedaría inconsciente.

    Solo se ve bien con el corazón…

    Todo lo anterior demuestra que el lógos frankliano no es una entidad lógica, sino axiológica. Y en efectos Frankl habla de una voluntad de sentido, porqué el sentido no hay que simplemente entenderlo: hay que decidirse para ello y realizarlo. El sentido nos llama a la acción: no se puede tan solo descubrir, sino que hay que cumplirlo. Por eso Frankl dice que una vida con sentido es una vida llena de tareas (Frankl, 1990b, p. 108): llena de posibilidades que nos esperan para llegar a ser.

    El lugar propio del sentido, entonces, no es el intelecto, sino la voluntad, y por lo tanto la logoterapia no tiene que ver simplemente con una toma de conciencia, sino con una toma de posición. La humanidad de la existencia humana consiste exactamente en su hacerse conciente y responsable, y esto supone la capacidad de (a)coger la llamada del sentido o (en otros términos) de escuchar la voz de la transcendencia.

    Podríamos explicarlo con un ejemplo muy conocido: la parábola del Buen Samaritano. Este cuento evangélico nos plantea un dilema ético: tres personas pasan por la misma calle donde se encuentra un pobre necesitado, pero solo una se detiene en su camino y se encarga de él, es decir: actúa de forma responsable frente a esa situación. ¿Por qué? El texto lo sugiere en un versículo: el Samaritano, frente al pobre, Lo vio y se conmovió (Lc 10, 33). Exegéticamente es como un único verbo: no quiere decir que se conmovió porque lo vio (de hecho, los demás personajes también vieron al pobre, pero no se conmovieron lo suficiente como para ayudarlo); al contrario, quiere decir que él lo vio porqué se conmovió. El Samaritano vio porque sintió lo que los demás no veían porque no sentían. Los tres personajes vieron una situación (un hombre necesitado al lado de la calle), pero solo uno fue capaz de tomar en ella un valor, de sentir una llamada: es decir, una posibilidad de actuar de forma responsable.

    Toda ética brota entonces de la vida emocional. Detrás de nuestras decisiones siempre hay un sentir que las posibilita: el sentimiento es el fondo en que estamos inmersos y del cual las decisiones mismas pueden (o, a veces, no pueden) emerger. Un asunto de la fenomenología de las emociones extremadamente interesante para la psicoterapia - especialmente para la logoterapia - tiene que ver con ese fenómeno que Martin Heidegger llama Befindlichkeit (normalmente traducido con disposicionalidad), o sea el hecho de sentirnos situados en el mundo de una cierta forma, que nos dispone a un determinado modo de ser-en-el-mundo. Como escribe el filósofo de Meßkirch: En el sentimiento se abre y se mantiene abierto el estado en el que en cada caso estamos, al mismo tiempo, respecto de las cosas, de nosotros mismos y de los seres humanos que nos rodean (Heidegger, 1994, p. 63). Es este fenómeno originario que el mismo Heidegger llama Stimmung (tonalidad emotiva), y que otros autores, como por ejemplo Otto Bollnow (2009), desarrollaron posteriormente. Toda existencia se encuentra a cada momento entonada según cierto tono emocional y todas sus vivencias son condicionadas por ello.

    Podríamos decir que la emoción no es dentro de nosotros, sino que nosotros somos siempre dentro de una emoción.² A veces, incluso, nos encontramos encerrados, casi aprisionados en estados emotivos que limitan o determinan por completo nuestra forma de ser. Esto aparece con mucha claridad en algunas condiciones psicóticas, no reductibles simplemente a un acontecimiento anímico, sino a una verdadera transformación de ser-en-el-mundo.

    Si tomamos por ejemplo los casos clínicos descritos por Ludwig Binswanger (1973a; 1973b), lo que vemos son existencias encadenadas a un destino, entregadas totalmente a un tema exclusivo. Y si efectuamos un análisis existencial de estas biografías, al fondo de ellas podemos vislumbrar una tonalidad emotiva persistente o cristalizada: en Lola Voss es el presentimiento del peligro y de una catástrofe inminente, que arroja su vida en un conjunto irracional de ritos y supersticiones; en Suzanne Urban es el delirio de persecución, el sentimiento de horror frente a la hostilidad del mundo; en Ellen West es el rechazo de su corporeidad y de su sexualidad, que la hace precipitar en un conflicto fatal entre lo que es y lo que quiere ser; en el caso de Ilse, se trata de una pasión inconfesada por el padre, que la lleva a poner su mano en el fuego de una estufa encendida. Son casos extremos, evidentemente, que representan de manera contundente hasta qué punto una emoción puede determinar el pensamiento, la conducta y, por fin, la existencia entera de una persona.

    Re-injertar emocionalmente la existencia

    La concepción de la logoterapia como intervención cognitiva supone que el análisis existencial no se ocupe de lo inconsciente, y esto es otro modo de reducir la conciencia a la cognición. La conciencia tiene una estructura estratificada: cada experiencia particular tiene un sentido en el marco de una historia de vida y la reestructura a su vez. Por lo tanto, cada experiencia es concatenada con las demás que preceden y que siguen. Esta textura invisible es lo que Sigmund Freud llamaba inconsciente. Según Freud, las manifestaciones del inconsciente (sueños, síntomas) remiten a algo que ya no sabemos y que tenemos que suponer, aunque no sea evidente, para reconstruir una explicación de esos actos aparentemente injustificados. El inconciente, entonces, no es una voluntad obscura y antagónica respecto a la conciencia: simplemente es la otra cara de la conciencia, su parte en sombra, como dice Jacques Lacan.

    También para Frankl la conciencia y el inconciente están relacionados. El sentido se hace conciente, gracias a la logoterapia, pero está arraigado en lo inconciente (no en un inconsciente impulsivo y meramente psíquico, sino en un inconsciente intencional y espiritual). Lo que el logoterapeuta hace, como el psicoanalista, es poner en luz una motivación latente. No se trata, pero, de la motivación oculta de lo que el paciente es, sino de la motivación posible de lo que él puede llegar a ser. Lo que hace el logoterapeuta es buscar junto al paciente un para qué en la vida, frente al misterio del porqué de ciertos acontecimientos.

    Tomamos, por ejemplo, el caso del viejo doctor que se presentó a consulta tras una fuerte depresión (Frankl, 1991, p. 114):

    "No podía sobreponerse a la pérdida de su esposa, que había muerto hacía dos años y a quien él había amado por encima de todas las cosas. ¿De qué forma podía ayudarle? ¿Qué decirle? Pues bien, me abstuve de decirle nada y en vez de ello le planteé la siguiente pregunta: «¿Qué hubiera sucedido, doctor, si usted hubiera muerto primero y su esposa le hubiera sobrevivido?» «¡Oh!», dijo, «¡para ella hubiera sido terrible, habría sufrido muchísimo!» A lo que le repliqué: «Lo ve, doctor, usted le ha ahorrado a ella todo ese sufrimiento; pero ahora tiene que pagar por ello sobreviviendo y llorando su muerte».

    No dijo nada, pero me tomó la mano y, lentamente, abandonó mi despacho. El sufrimiento deja de ser en cierto modo sufrimiento en el momento en que encuentra un sentido, como puede serlo darle sentido de sacrificio. Claro está que en este caso no hubo terapia en el verdadero sentido de la palabra, puesto que, para empezar, su sufrimiento no era una enfermedad y, además, yo no podía devolverle la vida a su esposa. Pero en aquel preciso momento sí logré modificar su actitud hacia ese destino inalterable, en cuanto que a partir de ese momento al menos pudo encontrar un sentido a su sufrimiento".

    En este caso de duelo, la tristeza del paciente es una forma comprensible y legítima de vivir la pérdida de su esposa, pero en el duelo queda implícito otro significado (otra forma posible de vivirlo) que Frankl simplemente pone en luz: el dolor es la otra cara del amor. Es posible, entonces, mutar un sufrimiento en un acto de amor. El que se hace conciente de esto, puede cambiar su actitud frente al destino, trasformar la pérdida en un sacrificio, una condición sufrida en una decisión responsable, y así devolverle un sentido a lo que aparentemente no tiene ninguno.

    El análisis existencial es precisamente este intento de desenredar la madeja de la existencia para captar sus conexiones intencionales (en este caso, la conexión entre duelo y amor); la logoterapia consiste en poner en luz las posibilidades de sentido que, de otra forma, quedarían implícitas, inconcientes, y en su mayoría incumplidas. El análisis existencial y la logoterapia, entonces, tienen que ver con el inconciente: no para drenarlo (como decía Freud) sino para traer a la luz lo que de otro modo quedaría en la sombra.

    Ahora bien: ¿Qué es lo que acontece a nivel emocional en este caso? Parece que la intervención de Frankl no se coloca a nivel emocional, sino cognitivo – podríamos decir hasta incluso filosófico porque se trata de una argumentación puramente hipotética («¿Que hubiera sucedido si usted hubiera muerto primero?»). En realidad, esta pregunta desplaza no solo cognitivamente, sino emocionalmente, al paciente. Porque, al estar inmerso en una tonalidad depresiva, se le hace difícil, hasta incluso imposible, reconocer las posibilidades de sentido paradójicamente latentes en la experiencia del sinsentido. La pregunta de Frankl de cierta manera permite quebrar esta capa depresiva y deja penetrar un rayo de luz: otra perspectiva de pensar que, sin embargo, es al mismo tiempo otra posibilidad de sentir. Se podría decir que Frankl injerta lo que el paciente está viviendo dentro de un contexto de sentido más amplio. «El sufrimiento deja de ser en cierto modo sufrimiento»: en fin, el duelo del doctor no ha desaparecido, pero, al encontrar un sentido diferente, se ha convertido en algo soportable.

    Frankl, entonces, no trata directamente las emociones, sino las posibilidades de acción que ellas abren o cierran. Es decir: él sabe que las emociones, como decía Jean-Paul Sartre (2004, p. 184), son una cierta manera de percibir el mundo. Las emociones iluminan determinadas posibilidades y oscurecen otras. Lo que quiere hacer el logoterapeuta no es trabajar directamente la emoción, sino devolverle al mundo sus posibilidades de sentido, para que el paciente pueda escoger más libre y responsablemente su modo de ser.

    Bibliografía de referencia

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    Frankl V.E. (1990b), Dio nell’inconscio. Psicoterapia e religione, Morcelliana, Brescia.

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    Frankl V.E. (2000), Le radici della logoterapia. Scritti giovanili 1923-1942, ed. E. Fizzotti, LAS, Roma.

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    Frankl V.E. (2005), La sfida del significato. Analisi esistenziale e ricerca di senso, eds. D. Bruzzone y E. Fizzotti, Erickson, Trento.

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    Husserl E. (2002), Idee per una fenomenologia pura e per una filosofia fenomenologica, ed. V. Costa, 2 voll., Einaudi, Torino.

    Sartre J.-P. (2004), L’immaginazione. Idee per una teoria delle emozioni, Bompiani, Milano.

    Scheler M. (2013), Il formalismo nell’etica e l’etica materiale dei valori, ed. R. Guccinelli, Bompiani, Milano.

    Schmitz H. (2011), Nuova fenomenologia. Un’introduzione, ed. T. Griffero, Marinotti, Milano.

    2. Aprendiendo a pensar lo pensado

    Juan Pablo Díaz Del Castillo B.³

    Colombia.

    "Juzga a un hombre por sus preguntas

    en vez de hacerlo por sus respuestas".

    Voltaire.

    Durante una parte de nuestra infancia, empezamos un período que lo conocemos como la etapa del ¿por qué?, increíblemente lo venden como un momento muy difícil de la infancia y seguramente tiene que ver con la gran capacidad de preguntar que tenemos como seres humanos, para muchas personas es una etapa muy difícil, según me han contado, puede ser agotador recibir tantas preguntas para las que no siempre tenemos las respuestas, ahí me llama mucho la atención algo, ¿acaso tenemos que tener todas las respuestas?

    Esto me lleva a preguntarme ¿qué nos sucede cuando no tenemos respuestas a ciertas preguntas?, ¿por qué nos hemos acostumbrado a tener respuestas?, es muy posible que todo esto venga de algunos modelos pedagógicos, que le han dado mayor importancia a memorizar fechas, lugares y eventos importantes, es decir, mayor importancia a las respuestas que a las preguntas, creando la idea que las primeras son más importantes que las segundas; llenándonos de certezas, porque como dicen por ahí, lo importante es tener respuestas o por los menos el teléfono del que si sabe. Cuando yo estaba en el colegio una de mis materias favoritas era geografía y nos enseñaron que las nieves perpetuas empezaban a los 3900 metros sobre el nivel del mar y yo aprendí eso, quedó en mi memoria de largo plazo.

    En mayo del 2014 tuve la oportunidad de ir a Salzburgo, es una ciudad rodeada de muchas montañas y muchas tenían nieve, lo extraño era que yo las veía como muy cerca, me parecía extraño. Entonces pregunté, yo siempre he sido muy preguntón - ¿esta montaña cuánto mide? y me dijo - esa montaña mide 1400 metros, yo rápidamente empecé a buscar la información en mi disco duro y dentro de mi lógica hasta ese momento empecé a pensar lo siguiente, Bogotá está a 2700 metros de altura, es decir que, si Bogotá estuviera en Austria, estuviéramos en nieves perpetuas, mi cabeza se iba aturdiendo mucho y era algo que no lograba organizar debido a mi certeza que había aprendido en el colegio.

    Unos días después subí a esa montaña, su nombre es Untersberg que por lo general se mantienen con nieve, y aprendí algo, parece que las certezas también dependen del lugar. El gran problema de ellas es que nos llevan a creer que el mundo es de cierta manera y hemos aprendido que el mundo funciona así, pero cuando llegamos, no son como creíamos que eran y empiezan a surgir algunas incoherencias, como me pasó a mí con lo de la montaña que nos hacen sospechar que algo está pasando.

    Afortunadamente existe la filosofía, que nos ha llevado precisamente a aprender la importancia de la pregunta por encima de las respuestas, porque la filosofía no busca respuestas si no preguntas que abran y nos abre a las posibilidades, por eso desde la actitud filosófica, cuando tenemos una certeza, es decir una respuesta, de ella se genera una nueva pregunta llevándonos a aprender a preguntar. Por lo general no es fácil vivir de esta manera, porque encontrar preguntas y no respuestas hace que nos enfrentemos a la angustia de la incertidumbre, y si, que tiene mala fama la incertidumbre hasta puede llegar a ser considerada como un fracaso, algunas personas piensan que cada decisión que tomemos debe estar acompañada de certezas, es decir de respuestas y nos dedicamos a buscarlas para evitar equivocarnos, porque eso parece que nos hiciera peores seres humanos, definitivamente ¿qué difícil es vivir sin certezas?, por eso las buscamos y evitamos las preguntas.

    Cuando yo estaba en la facultad de publicidad, en algunas ocasiones mis amistades me decían - ¿nunca has pensado en estudiar psicología?, yo les decía -no, ya tomé una decisión y me debo mantener en ella- en esa época estaba convencido en que las buenas personas, se mantenían en sus decisiones, es decir mantenerse en sus respuestas. Esas creencias me hicieron muy difícil tomar la decisión de dejar una carrera y lanzarme al vacío de la incertidumbre y estudiar psicología, cuando hablo de este tema con algunos adolescentes me dicen ¿en serio? ¿está permitido equivocarse? Y si, está permitido.

    Y seguramente uno de los grandes miedos a no tener las respuestas es la posibilidad de equivocarse; entonces nos dedicamos a buscar respuestas y además que sean respuestas exactas, como si ellas nos permitieran evitar la incertidumbre, y al tener certezas no equivocarnos. Entonces nos dedicamos a buscar libros con respuestas, estudiamos para tener respuestas, conversamos con personas para tener respuestas, seguimos a personas porque nos dan respuestas y de esa manera el mundo se vuelve cada vez más pequeño, más reducido, y cuando el mundo se experimenta como algo reducido, vuelve a aparecer la angustia, la ansiedad o la depresión, porque esa sensación de estrechez, es la reducción de las posibilidades, es decir, la posibilidad de preguntar, de ampliar el mundo, de la alteridad y la libertad.

    Las preguntas también tienen su propia experiencia del tiempo, las preguntas por lo general lentifican el tiempo, mientras que las certezas lo aceleran, estamos en una época donde todo va a gran velocidad, cambiando muy rápido y se debe a la velocidad de las comunicaciones, queremos comunicarnos rápidamente y Apps como WhatsApp, aceleran la comunicación, Instagram te facilita conocer a alguien, es decir podemos tener respuestas y las certezas rápidas, en muchas ocasiones convirtiéndonos en intolerantes al no saber, buscando quienes nos den respuestas y respuestas ya mismo, de esa manera surgen otras Apps, TikTok, respuestas rápidas y cortas, ya ni siquiera leemos el primer párrafo de Wikipedia, sino que buscamos el video en las redes sociales y entre más

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