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Escogidos por el Pabre: Una alianza productiva
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Libro electrónico351 páginas9 horas

Escogidos por el Pabre: Una alianza productiva

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Jesús dijo: Ustedes no me escogieron a mí, sino que yo los he escogido a ustedes y les he encargado que vayan y den mucho fruto, y que ese fruto permanezca. Así el Padre les dará todo lo que le pidan en mi nombre. Juan 15:16 (DHH)

El texto bíblico que preside este libro nos habla de la elección de Dios, esto implica su gracia, su amor, su favor hacia nosotros, sin merecerlo nos escogió. También está el tema de su asignación, que es su encargo de dar mucho fruto, ese es el propósito de su elección. Se nos habla del poder que conlleva esta elección y asignación del Padre, al decirnos que traen implícita la promesa de que se nos conceda todo lo que necesitemos. En resumen: Dios te elige, te asigna un propósito y te equipa con lo necesario para dar mucho fruto, para ser productivo.

Tu vida en este mundo no es un accidente, Dios tiene un plan para ti. La clave para vivir en ese perfecto plan es permanecer unido a Jesús. Se trata de aprender a depender del poder y guía del Espíritu Santo diariamente. Esto te hará una persona productiva. A veces asociamos la palabra productividad solo con los bienes materiales, pero una vida productiva es más que eso, se trata de personas que dejan huella, que
bendicen a otros, que transforman su entorno, que se multiplican en la vida de los demás siendo un ejemplo de virtud y generosidad. Dios se hizo hombre en Jesucristo y por su sacrificio en la cruz nos ha hecho herederos de preciosas y grandísimas promesas (2 Pedro 1:4). Jesús, como nuestro modelo a seguir, aceptó la elección del Padre, asumió su asignación viviendo para el propósito de Dios, caminó equipado por el poder del Espíritu Santo, y su vida sigue dando fruto abundante y permanente. A lo largo de estos estudios queremos que descubras, junto a tu grupo de crecimiento, que puedes vivir siguiendo el ejemplo de Jesús al asumir que:

• Fuiste escogido por el Padre para cosas trascendentes, tu vida tiene significado, eres parte de un propósito eterno que lleva tu nombre.

• Has sido asignado con un propósito, tienes un llamado de Dios, un camino que espera ser transitado. Nada te dará más plenitud que andar en el perfecto plan de Dios para tu vida.

• Estás equipado para la obra de Dios con el poder y la presencia del Espíritu Santo. El Padre puso y pondrá en ti, aquello que necesitas para ser y hacer todas las cosas que te llevarán al destino glorioso que Él soñó para ti.

• Si permaneces en Dios, serás productivo, darás mucho fruto, y tu fruto permanecerá por la eternidad.

Fuiste escogido por el Padre para ser parte de una alianza productiva.
¿Te atreves a creerlo y vivirlo
IdiomaEspañol
EditorialBookBaby
Fecha de lanzamiento22 dic 2023
ISBN9798350939514
Escogidos por el Pabre: Una alianza productiva

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    Escogidos por el Pabre - Daniel Chamorro

    Fuiste ESCOGIDO por el Padre para cosas trascendentes, tu vida tiene significado, eres parte de un propósito eterno que lleva tu nombre.

    ESTUDIO 1

    Somos escogidos

    Paso 1 (10 minutos) • Testimonios de autoevaluación

    Compartamos en el grupo como nos ha ido con las decisiones tomadas la semana anterior. Si hay personas nuevas en el grupo demos espacio para presentarnos y que se presenten.

    Paso 2 (15 minutos) • Lectura del estudio

    Leemos entre todos el estudio. Un párrafo por persona voluntaria. Durante la lectura subraya o toma notas de las cosas que te parezcan más relevantes o importantes para ti.

    Ustedes no me escogieron a mí, sino que yo los he escogido a ustedes y les he encargado que vayan y den mucho fruto, y que ese fruto permanezca. Así el Padre les dará todo lo que le pidan en mi nombre. (Juan 15:16, DHH)

    Alabado sea Dios, Padre de nuestro Señor Jesucristo, que nos ha bendecido en las regiones celestiales con toda bendición espiritual en Cristo. Dios nos escogió en él antes de la creación del mundo, para que seamos santos y sin mancha delante de él. En amor nos predestinó para ser adoptados como hijos suyos por medio de Jesucristo, según el buen propósito de su voluntad, para alabanza de su gloriosa gracia, que nos concedió en su Amado. En él tenemos la redención mediante su sangre, el perdón de nuestros pecados, conforme a las riquezas de la gracia. (Efesios 1:3–7, NVI)

    No eres un accidente. No eres una casualidad. Tu vida es única, es valiosa, tiene significado y un propósito desde y para la eternidad.

    Cuando vemos personas que llegan a niveles de popularidad muy grandes o destacan con habilidades prodigiosas, podemos pensar que ellos son más especiales que nosotros, que nacieron con una capacidad única que les permite brillar sobre los demás. Y esto último puede ser verdad en cuanto a determinadas habilidades, pero lo que no es verdad es que tu no tengas esa singularidad que te hace una persona única en la historia. Nadie puede ser tú y no es sano que quieras ser otro.

    Es preciso que conozcas la verdad acerca de quien eres. No debes compararte con otros. Necesitas creer que Dios te escogió, que el Padre te conoce por tu nombre y sonríe al verte vivir con alegría en sus propósitos. Eres un escogido, eres especial.

    Escogidos

    La palabra bíblica para escogido es empleada principalmente para describir la iniciativa de Dios en la elección de un pueblo o individuos para sus propósitos. El Señor dio el primer paso de buscarnos, lo nuestro fue una respuesta a su amor inmerecido e incondicional.

    No fuiste elegido por tus habilidades, no fuiste escogido por tus ideas, no se te seleccionó por tu origen étnico o familiar. Eres escogido por puro amor del Padre celestial. Dios te ama tanto que te escogió para ser parte de su reino, de su familia, de su perfecto plan para la humanidad. (1a Pedro 1:1-2, 2a Tesalonicenses 2:13)"

    Muchas de nuestras inseguridades, heridas de rechazo, autoestima baja y miedos se desvanecen al saber que Jesús nos escogió, porque es la voluntad del Padre. Sabernos amados por Dios lo cambia todo, pero sobre todo, transforma y sana nuestro corazón dándonos vida nueva y esperanza.

    Significado

    Mucha gente duda de Dios, de su existencia, de su amor, de su poder, del sentido de la vida y lo que es peor, muchos dudan del significado de su propia vida. Cristo vino a cambiar eso. Dios dejó el cielo y se hizo hombre para venir a buscarte, para que puedas volver a Dios y recobrar el significado trascendente que tu vida tiene. Cristo murió por ti, lo dio todo, se sacrificó a sí mismo. El creador de todo el universo se interesa por ti, te ama y dio su vida para poder tenerte a su lado. (Romanos 5:8; 1 Corintios 15:3)

    El sentido de la vida se encuentra en el dador de la misma. Sin Dios, todo es pasajero, efímero e intrascendente. Pero cuando tienes una relación personal con Dios, se te revela el significado de tu vida. Es mucho más que un pensamiento o una filosofía de vida, es una realidad presente en tu mente, tus emociones, tu propio cuerpo y sobre todo en tu espíritu. Descubres que tienes una luz única que debe brillar en este mundo y para tu generación. (Efesios 2:5; Juan 5:24; )

    La Palabra de Dios abre tus ojos a la verdad: Fuiste escogido por Jesús, El Padre te adoptó, y el Espíritu Santo te revela el significado trascendente de tu vida y te guiará con Su Presencia a la verdad. Nunca más la mentira debe dominar tu corazón. Eres un elegido.

    Propósito

    Dios te eligió con un propósito, no fue la suerte, ni el destino, se trata mas bien de un plan deliberado de Dios para que seas parte de algo más trascendente que solo existir. No se trata solo de ti, eres parte de algo mucho más grande y relevante.

    Jesús nos dice: les he encargado algunas versiones traducen: los comisioné; os asigné; os puse para. Esto habla de una misión, de un propósito para tu vida. El Señor quiere que seas parte de su plan de salvación para la humanidad, llevando el evangelio a otros, siendo un testimonio vivo del poder transformador de Cristo.

    Estás en el mundo para ser parte de la historia de la salvación de otros. Para ayudar a otros a conocer a Dios, a crecer, a servir, a amar y a todas las cosas que Jesús nos enseñó. Vale la pena vivir por esa causa, no hay otra mas grande ni más trascendente. Nada te hará sentir más pleno, ni le dará mayor sentido a tu vida. (2 Corintios 5:18-19; Hechos 1:8; Mateo 28:18-20)

    ¿Que te hace pensar y sentir saber que has sido escogido? ¿Que ha puesto Dios en ti que el mundo necesita recibir? Necesitas tomar decisiones y llevar adelante tu vida, ya sea relaciones, familia, trabajo, ministerio, de acuerdo a estas verdades que Jesús afirma: Eres escogido, tienes un propósito y tu vida es significativa para este tiempo.

    Entender que tienes un propósito y que tu vida posee significado, hará una gran diferencia en ti y en quienes te acompañan en el camino de la vida. Esta verdad será poderosamente transformadora en tu vida si la crees, si tienes fe en aquello que Dios dice. El te ama, te considera una persona de gran valor, el confió en ti, te eligió con un propósito. Ahora te toca a ti caminar hacia ello.

    Paso 3 (10 minutos) • Aplicación personal

    Responde honestamente a cada pregunta. Recuerda que para crecer debes ser intencional en dar pasos concretos que te ayuden a mejorar.

    ¿Que frase, párrafo o enseñanza del estudio llamó más tu atención?¿Por qué?

    ¿Que área o aspecto de tu vida necesitas mejorar con respecto al tema de este estudio?

    ¿Qué acción específica puedes llevar a cabo esta semana para mejorar tu situación?

    Asegúrate de incluir quién, qué, dónde, cómo y cuándo realizarás esta acción. El Espíritu Santo te guiará y te ayudará. Tus compañeros y líder de grupo serán también tu apoyo en tu crecimiento.

    Paso 4 (10 minutos) • Compartir mi desafío semanal

    Toma un minuto para compartir tus respuestas con el grupo, incluyendo la acción que vas a realizar para mejorar en esa área. Mientras los compañeros de grupo comparten sus desafíos personales, aprovecha a apuntarlos en los motivos de oración.

    Paso 5 (10 minutos) • Oración

    Revisamos que hemos apuntado todos los motivos de oración de la semana de nuestros compañeros de grupo. Es importante también que podamos orar unos por otros en la semana para apoyarnos en las decisiones que tomamos para nuestro crecimiento.

    Concluimos el estudio con un tiempo de oración.

    Motivos de oración de mi grupo:

    Comparte la frase que más te gustó de este estudio en tus redes sociales con el hashtag #EscogidosPorElPadre

    ESTUDIO 2

    Identidad y propósito

    Paso 1 (10 minutos) • Testimonios de autoevaluación

    Compartamos en el grupo como nos ha ido con las decisiones tomadas la semana anterior. Si hay personas nuevas en el grupo demos espacio para presentarnos y que se presenten.

    Paso 2 (15 minutos) • Lectura del estudio

    Leemos entre todos el estudio. Un párrafo por persona voluntaria. Durante la lectura subraya o toma notas de las cosas que te parezcan más relevantes o importantes para ti.

    El Señor le dijo a Abram: «Deja tu tierra, tus parientes y la casa de tu padre, y vete a la tierra que te mostraré. »Haré de ti una nación grande, y te bendeciré; haré famoso tu nombre, y serás una bendición. Bendeciré a los que te bendigan y maldeciré a los que te maldigan; ¡por medio de ti serán bendecidas todas las familias de la tierra!» (Génesis 12:1–3, NVI)

    Cuando Abram tenía noventa y nueve años, el Señor se le apareció y le dijo: —Yo soy el Dios Todopoderoso. Vive en mi presencia y sé intachable. Así confirmaré mi pacto contigo, y multiplicaré tu descendencia en gran manera. Al oír que Dios le hablaba, Abram cayó rostro en tierra, y Dios continuó: —Éste es el pacto que establezco contigo: Tú serás el padre de una multitud de naciones. Ya no te llamarás Abram, sino que de ahora en adelante tu nombre será Abraham, porque te he confirmado como padre de una multitud de naciones. (Génesis 17:1–5, NVI)

    Mas a cuantos lo recibieron, a los que creen en su nombre, les dio el derecho de ser hijos de Dios. Éstos no nacen de la sangre, ni por deseos naturales, ni por voluntad humana, sino que nacen de Dios. (Juan 1:12–13, NVI)

    Por lo tanto, si alguno está en Cristo, es una nueva creación. ¡Lo viejo ha pasado, ha llegado ya lo nuevo! (2 Corintios 5:17, NVI)

    Abraham, el patriarca del Antiguo testamento es reconocido como el padre del pueblo hebreo. Su vida es un modelo que se levanta en la antigüedad para mostrarnos que, cuando alguien recibe un claro llamamiento para un propósito trascendente, necesita tener una identidad bien definida. Ningún otro personaje bíblico es más importante para la fe judía que Abraham. Aún en el Nuevo Testamento es considerado el padre de la fe.

    Una nueva identidad por medio de la fe

    Dios le dijo a Abram: haré de ti una nación grande… haré famoso tu nombre (12.1). Cuando Abraham recibió esta promesa aún no tenía hijos y ya tenía 75 años, su esposa era estéril. ¿Cómo se llevaría a cabo esta promesa? Abram no sabía los detalles, pero le creyó a Dios.

    Dios confirma el pacto y lo hace cambiándole el nombre: Abram significaba mi padre es exaltado, pero ahora Dios lo engrandece, lo llama Abraham, le mete una de las letras de su nombre Yahvé, la h, como una impronta, como un sello de pertenencia, y símbolo de calidad, a partir de ese momento se llamaría: padre de multitudes.

    En nuestros días, el nombre es lo que nos identifica socialmente. Pero en la antigüedad, el nombre era mucho más que eso, era sinónimo de carácter, hablaba de la naturaleza de la persona. A aquellos que creemos en Jesús, Dios nos otorga, al igual que a Abraham, un nuevo nombre, una nueva identidad, un nuevo ADN espiritual.

    Nosotros, al igual que Abraham, recibimos por medio de la fe una nueva identidad. Recibir a Cristo por la fe, nos hace acreedores de la identidad de hijos de Dios, nacidos por su propia voluntad (Juan 1:12–13; 2 Corintios 5:17)

    La fe es la clave para entender nuestra nueva identidad en Cristo. No se trata de ir cambiando de a poco o ir mejorando mi antigua vida, se trata de una nueva identidad, un nuevo ser, una nueva creación. Ya no me identifico con los gustos de antes; ya no me atrae lo que antes me atraía, tengo una nueva identidad, esto significa intereses, deseos, pasión, forma de pensar, de sentir, de vivir, un nuevo nombre.

    Sucede en muchas ocasiones que hay cosas en nosotros que cambian de a poco o que nos cuesta cambiar, estas cosas suelen ser las costumbres que arrastramos de nuestra vieja naturaleza sin Cristo, pero la identidad es algo nuevo que se adquiere por la fe, lo cual transforma nuestros intereses y valores.

    ¿Sabías que Dios nos puso un nombre? ¿Por qué? Sencillamente porque él es nuestro Papá y los papás son los que ponen los nombres a los hijos: Ahora, así dice Jehová, Creador tuyo, oh Jacob, y Formador tuyo, oh Israel: No temas, porque yo te redimí; te puse nombre, mío eres tú (Isaías 43:1, RV60).

    Un llamamiento

    Dios le habló a Abram: Deja tu tierra, tus parientes y la casa de tu padre, y vete a la tierra que te mostraré… (Génesis 12:1). No sabemos la forma en que se lo dijo, pero lo cierto es que supo que Dios le habló y le dijo vete a tal lugar…, y él obedeció.

    El llamamiento está basado en la elección libre y soberana de Dios. Es Él que tomó la iniciativa, fue Él quien convocó a Abram, quien le propuso que dejara su comodidad y se lanzara a un proyecto nuevo, donde lo guiaría.

    Luego le vuelve a hablar, y se revela como el Todopoderoso. Cuando Dios va a hacer algo, primero se revela así mismo, y allí está todo lo que necesitamos para lo que el hará: era muy grande lo que haría con Abraham, así que le dice yo soy el Todopoderoso.

    Cuando nos movemos sin haber escuchado a Dios, entonces corremos el peligro de guiarnos por nuestras emociones o tomar iniciativas propias que solamente nos harán perder el tiempo y frustrarnos.

    Todo en la vida cristiana debe comenzar con Dios, el es el gran iniciador, es quien nos invita a unirnos, quien nos escoge para la gran tarea que nos toca realizar en su reino. El primer llamado que Dios hace a nuestras vidas es a seguirle. Luego vendrán llamados específicos a servirle de determinada manera, a movernos a alguna parte, etc… pero todo comienza con el llamado a seguirlo. (Lucas 9:23).

    Un propósito trascendente

    Abraham era una persona muy bendecida en el concepto popular del término. Pertenecía a una familia numerosa, era muy rico, tenía reconocimiento de sus contemporáneos, tenía liderazgo. Sin embargo, su llamado ahora le otorga un propósito más alto que ser bendecido. Le otorga un propósito trascendenteque se extiende más allá del propio Abraham y su familia: serás de bendición. De tal manera que hoy lo conocemos como el padre de la fe.

    Dios escogió a Abraham para que fuera el padre de una nación, que a su vez fuera de bendición para todas las naciones de la Tierra. La historia nos muestra cuánto le costó a Israel entender este propósito. Muchos de los profetas se dedicaron a hacer ver cómo Israel había perdido ese propósito y su identidad de pueblo destinado a ser luz a las naciones (Isaías 49:6; 60:2-3).

    El propósito está íntimamente ligado a la identidad, como la identidad al llamado. La mayoría de las personas comparten los mismos propósitos en la vida: tener una carrera, formar una familia, tener cierto bienestar económico. Pocas personas lo consiguen, muchas pierden la capacidad de disfrutarlo en el camino. Todos estos propósitos, son añadiduras. Son propósitos egoístas que no hacen más que poner el foco en nosotros mismos. El nuevo Testamento nos enseña que debemos poner a Dios primero que todo y que nuestra mirada debe estar en las cosas de arriba, en el gobierno de Cristo (Mateo 6:33; Colosenses 3:1-3).

    Cada vez que los israelitas se referían a Dios, decían el Dios de Abraham. La persona de Abraham señalaba a Dios. Las personas que tienen propósitos más altos que ellos mismos, se convierten en vidas usadas por el Señor para mostrar su gloria. Abraham fue un hombre que escuchó a Dios y le creyó hasta las últimas consecuencias. Siempre vivió de acuerdo a su llamado y nueva identidad. Manifestó así la gloria de Dios a través de un propósito trascendente: ser el padre de toda una nación y el padre espiritual de miles de generaciones.

    ¿Eres consciente de tu identidad y tu propósito trascendente en Cristo? ¿Quién o qué cosas están definiendo tu identidad y tu propósito? El diablo está muy interesado en definirte, y que creas una mentira acerca de quien eres. Te puedes ver afectado por tus propias emociones o pensamientos acerca de tu identidad. Muchas veces son los demás o la cultura la que te define. Por eso como Abraham, necesitamos ejercer la fe y dejar que sea el Señor quien nos revele nuestra identidad y nuestro propósito. Solo así nuestra vida manifestará la Gloria de Dios al mundo.

    Paso 3 (10 minutos) • Aplicación personal

    Responde honestamente a cada pregunta. Recuerda que para crecer debes ser intencional en dar pasos concretos que te ayuden a mejorar.

    ¿Que frase, párrafo o enseñanza del estudio llamó más tu atención?¿Por qué?

    ¿Que área o aspecto de tu vida necesitas mejorar con respecto al tema de este estudio?

    ¿Qué acción específica puedes llevar a cabo esta semana para mejorar tu situación?

    Asegúrate de incluir quién, qué, dónde, cómo y cuándo realizarás esta acción. El Espíritu Santo te guiará y te ayudará. Tus compañeros y líder de grupo serán también tu apoyo en tu crecimiento.

    Paso 4 (10 minutos) • Compartir mi desafío semanal

    Toma un minuto para compartir tus respuestas con el grupo, incluyendo la acción que vas a realizar para mejorar en esa área. Mientras los compañeros de grupo comparten sus desafíos personales, aprovecha a apuntarlos en los motivos de oración.

    Paso 5 (10 minutos) • Oración

    Revisamos que hemos apuntado todos los motivos de oración de la semana de nuestros compañeros de grupo. Es importante también que podamos orar unos por otros en la semana para apoyarnos en las decisiones que tomamos para nuestro crecimiento.

    Concluimos el estudio con un tiempo de oración.

    Motivos de oración de mi grupo:

    Comparte la frase que más te gustó de este estudio en tus redes sociales con el hashtag #EscogidosPorElPadre

    ESTUDIO 3

    Obras de arte

    Paso 1 (10 minutos) • Testimonios de autoevaluación

    Compartamos en el grupo como nos ha ido con las decisiones tomadas la semana anterior. Si hay personas nuevas en el grupo demos espacio para presentarnos y que se presenten.

    Paso 2 (15 minutos) • Lectura del estudio

    Leemos entre todos el estudio. Un párrafo por persona voluntaria. Durante la lectura subraya o toma notas de las cosas que te parezcan más relevantes o importantes para ti.

    Porque somos hechura de Dios, creados en Cristo Jesús para buenas obras, las cuales Dios dispuso de antemano a fin de que las pongamos en práctica. (Efesios 2:10, NVI)

    Ahora bien, hay diversos dones, pero un mismo Espíritu. Hay diversas maneras de servir, pero un mismo Señor. Hay diversas funciones, pero es un mismo Dios el que hace todas las cosas en todos. A cada uno se le da una manifestación especial del Espíritu para el bien de los demás. A unos Dios les da por el Espíritu palabra de sabiduría; a otros, por el mismo Espíritu, palabra de conocimiento; a otros, fe por medio del mismo Espíritu; a otros, y por ese mismo Espíritu, dones para sanar enfermos; a otros, poderes milagrosos; a otros, profecía; a otros, el discernir espíritus; a otros, el hablar en diversas lenguas; y a otros, el interpretar lenguas. Todo esto lo hace un mismo y único Espíritu, quien reparte a cada uno según él lo determina. (1 Corintios 12:4–11, NVI)

    Somos especiales, si bien la biología nos coloca en el rango de animales mamíferos, la misma biología reconoce en el ser humano la única especie con la capacidad de razonar, de pensar, de tener valores morales y éticos.

    Creados únicos

    Dios no nos creó como un animal más, nos diferenció haciendo de nosotros la corona de la creación, puso todo lo creado para que lo cuidáramos y administráramos (Salmo 8). No sólo fuimos creados por Dios, sino que nuestro diseño está basado en su modelo, a imagen y semejanza de Dios nos creó (Gn. 1:27) .

    Esto le da un valor de dignidad por encima de todo lo creado a nuestra vida. Cada vida es importante, el valor de cada ser humano es incalculable.

    Entender la verdad bíblica de nuestro origen en Dios, nos hace ver que nuestra vida tiene un claro propósito dentro del plan de Dios. Entender la visión que Dios tiene para nuestra existencia será la clave para desarrollarnos y ser plenamente felices.

    Creados por su mano

    La palabrahechura suya(en griego poiema) evoca a la palabra poema en español, contiene la idea de armonía, hermosura y equilibrio, pero ser hechura habla también de su poder y la manifestación de su gloria. Además somos creados, esto es diseño y trabajo, todo lo creado es para la gloria del artista supremo. Somos, en pocas palabras, una obra de arte de Dios, diseñada para darle gloria.

    Nadie debiera creer la mentira diabólica de que su vida no es valiosa o útil. Cada uno de nosotros fue diseñado con un propósito. Nuestra tarea en esta tierra es desarrollar nuestra vida en esa visión que Dios tiene. Necesitamos creer en el plan de Dios, conocer su propósito para nuestra vida y apostarlo todo allí. Nada nos hará más plenos y felices que vivir en su voluntad, como declara la Biblia: … para que comprobéis cuál sea la buena voluntad de Dios, agradable y perfecta. (Romanos 12:2, RVR60).

    Adquirir la visión de Dios para nuestra vida

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