En un laúd la catedral
()
Información de este libro electrónico
Relacionado con En un laúd la catedral
Libros electrónicos relacionados
El azul en la flama Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesSi ríe el emperador Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesPoesías escogidas Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesA buen juez, mejor testigo (Anotado) Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesEstridencias Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesPoemas Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Poesía completa: Tomo I Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesUltramar: Odas Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesMi jardín salvaje: Antología Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesPoemas de un cielo antiguo Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesAltisonancias Crepusculares Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesLa rosa azul Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesLa procesión de la naturaleza Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesProyecto de interiorismo Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesMármoles Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesEste lugar que soy Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesLas ramas del azar Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesFuente de salud Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesEl objeto de la visión Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesFrente al Ángel Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesLos resquicios del silencio Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesLa inquietud humana Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesEl altar del diablo Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesInalámbricas: Y otros poemas Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesIluminaciones Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesEcos, zen y yo Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesOficio de vivir Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesAntología Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Noches sin luz Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesLa duquesa ciervo Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificaciones
Comentarios para En un laúd la catedral
0 clasificaciones0 comentarios
Vista previa del libro
En un laúd la catedral - Silvia Eugenia Castillero
Pórtico
El ángel
No quiere ver el cielo
resbala por el cordel
hacia una penumbra color sepia
en el vano de columnas.
No quiere el cielo, en sus manos
el temblor:
rúbricas de la tierra.
Y sus dedos alargan el tacto
sobre la desnudez de la bóveda.
Las alas abiertas;
mas su cuerpo se inclina
ávido de cierzos y cabras,
se va con nuestro paso:
ese ángel.
A una virgen
Aperlada sobre madera al centro
del altar, la virgen se mofa de la historia,
entre uvas y velos sonríe
voluptuosa, la ninfa, núbil
graciosa, lleva en sus manos
los rastros de amor, en su reojo
desprecia las normas, abandona
de los ángeles su candorosa
desnudez. Prefiere ocultarse tras
de árboles, prefigurar un río
y huir, en caudalosa fuga
de bosques y destellos. En el altar
la única estrella es el rastro de su paso,
una sonrisa abanicándose
balancea su encanto.
Santo Santiago
Desde la altura
el santo de mirar
translúcido abastece de luz
al templo. Monolito vertido en
incienso hacia los puntos cardinales,
captura los rayos del sol. Sus ojos
trafican brillos de cuarzo y ágata
con siete árboles rojos
dentro y en su tronco
un tinte de piel salpicado
de opacidad. Mirada de color
sanguíneo, con círculos casi artificiales.
Por la espalda se llega al santo,
sus ojos en la perfección
se vuelven pura bóveda.
La noche
En la columna Dionisos
profiere como Tritón el nuevo
desorden, con matemático tino
organiza una noche minuciosa
pero la inunda de bruma, oblicua
sin orden avanza su ley: ya junta
y favorece, ya desalma a las musas.
Sus árboles desbordan
racimos sobre multitudes; llegan
de oriente y del sur. La piedra
lleva la firma del dios en forma
de uvas y rosas furtivas.
Abrupta la roca
se yergue tempestuosa.
Diablos
Esos polvos
de universo quedan entre
los hombros y los gestos:
en la cautela de la piedra.
De tanto subsistir labrados
son versiones sigilosas,
vidas falsamente urdidas,
en remolino incendian los ojos
de los bajorrelieves y
adjetivan quebrando
la expresión de las