El Vuelo de la Gaviota: Vera Lúcia Marinzeck de Carvalho

Por Vera Lúcia Marinzeck de Carvalho y Por el Espíritu Patrícia

"El Vuelo de la Gaviota" es una continuación de los libros "Violetas en la Ventana", "Viviendo en el Mundo de los Espíritus" y "La Casa del Escritor" recientemente traducidos al español por el World Spiritist Institute.
En esta novela, Patrícia, ahora más adaptada al mundo espiritual, participa en un importante rescate en el plano espiritual: rescatar desde el Umbral, un lugar habitado por espíritus aun carentes de luz y entendimiento, quienes, al encarnarse, se involucraron con las drogas. Con su lenguaje sencillo y atractivo, Patrícia nos muestra las consecuencias de la dependencia química y el desencanto que provoca; consuela y aclara a quienes han sufrido decepciones y les cuesta superar el dolor. 
En palabras de la propia autora espiritual, "trabajar con amor, superando nuestras obligaciones, por nuestro bien y el de los demás, y más, sin esperar nada a cambio."

• Idioma: Español
• Editorial: World Spiritist Institute
• Fecha de lanzamiento: 28 ene 2023
• ISBN: 9798215289938

Vista previa del libro

El Vuelo de la Gaviota

Romance de

Patrícia

Psicografía de

VERA LÚCIA MARINZECK

DE CARVALHO

Traducción al Español:

J.Thomas Saldias, MSc.

Trujillo, Perú, Febrero 2020

Título Original en Portugués:

O VÔO DA GAIVOTA ©

Vera Lúcia Marinzeck de Carvalho

Revisión:

Yenny Chura Chura

Karen Funes Valenzuela

Houston, Texas, USA      

E–mail: [e-mail]

De la Médium

Vera Lúcia Marinzeck de Carvalho (São Sebastião do Paraíso, 21 de octubre -) es una médium espírita brasileña.

Desde pequeña se dio cuenta de su mediumnidad, en forma de clarividencia. Un vecino le prestó la primera obra espírita que leyó, El Libro de los Espíritus, de Allan Kardec. Comenzó a seguir la Doctrina Espírita en 1975.

Recibe obras dictadas por los espíritus Patrícia, Rosângela, Jussara y Antônio Carlos, con quienes comenzó en psicografía, practicando durante nueve años hasta el lanzamiento de su primer trabajo en 1990.

El libro Violetas na Janela, del espíritu Patrícia, publicado en 1993, se ha convertido en un éxito de ventas en el Brasil con más de 2 millones de copias vendidas habiendo sido traducido al inglés y al castellano y adaptada al teatro.

Esta nueva traducción de Violetas en la Ventana es un primer avance de los otros tres libros dictados por su sobrina Patricia: Viviendo en el Mundo de los Espíritus, La Casa del Escritor y El Vuelo de la Gaviota todos traducidos y disponibles a través de World Spiritist Institute.

Del Traductor

Jesus Thomas Saldias, MSc., nació en Trujillo, Perú.

Desde los años 80's conoció la doctrina espírita gracias a su estadía en Brasil donde tuvo oportunidad de interactuar a través de médiums con el Dr. Napoleón Rodriguez Laureano, quien se convirtió en su mentor y guía espiritual.

Posteriormente se mudó al Estado de Texas, en los Estados Unidos y se graduó en la carrera de Zootecnia en la Universidad de Texas A&M. Obtuvo también su Maestría en Ciencias de Fauna Silvestre siguiendo sus estudios de Doctorado en la misma universidad.

Terminada su carrera académica, estableció la empresa Global Specialized Consultants LLC a través de la cual promovió el Uso Sostenible de Recursos Naturales a través de Latino América y luego fue partícipe de la formación del World Spiritist Institute, registrado en el Estado de Texas como una ONG sin fines de lucro con la finalidad de promover la divulgación de la doctrina espírita.

Actualmente se encuentra trabajando desde Peru en la traducción de libros de varios médiums y espíritus del portugués al español, así como conduciendo el programa La Hora de los Espíritus.

ÍNDICE

El Vuelo de la Gaviota

Palabras de un amigo

Introducción

Asumiendo una Tarea

Escuchando una Historia

Coloquio Interesante

Amor y Desapego

Un Pedido Diferente

El Túnel Negro

La Sala E y el Ala A

Desencarnaciones

Una Reunión Espírita

Recuperación de los Rescatados

Natan

El Médico Nazi

La Historia de Elisa

El Vuelo de la Gaviota

Con gran alegría regreso a la Literatura, motivada por el cariño de los lectores. Y es a ti, querido lector, a quien dedico este trabajo con inmensa ternura.

También lo hago a los desencarnados y, principalmente, a los encarnados que son útiles por su capacidad y tienen como meta progresar en el aprendizaje.

Me extiendo a los anónimos, desconocidos para los encarnados, pero conocido por el Plano Mayor, que hace el bien por amor, sin siquiera preocuparse por los nombres famosos.

Patrícia

São Sebastião do Paraíso, MG

Palabras de un amigo

Patrícia, nuestra joven escritora, que nos ha presentado su literatura simple y sincera, que nos trae buenas y profundas enseñanzas, vuelve a darnos otro libro.

Nos cuenta sobre el viaje que emprende tareas nuevas y diferentes, su desprendimiento y desapego.

Patrícia trabaja y estudia en el Plano Espiritual, pero aceptó esta tarea de escribir a los encarnados, con la intención de alertarlos del error de adorar personajes famosos. La Doctrina Espírita no está en manos de unos pocos, ya sean encarnados o desencarnados. Hay muchos espíritus trabajadores por el Bien de la Humanidad.

Nuestra alegre escritora, en su humildad, piensa que es pequeña, pero está dispuesta a aprender, no queriendo que le rindan culto y que le den más valor del que ella se cree merecedora.

La trama de este libro es muy interesante. Participando en ayuda a un drogadicto desencarnado, nos narra importantes hechos que traen muchas aclaraciones sobre el daño causado por las drogas, el gran mal de hoy. El desarrollo atractivo de esta historia hace de este libro otro hito en la Literatura Espírita.

António Carlos

Introducción

Cuando encarnada, a menudo miraba maravillada a las gaviotas. Estaba encantada con sus vuelos, que me dieron la sensación de libertad. ¡Son tan libres! Por la tarde, caminando en la playa, siguía sus movimientos por el aire. Libres y felices, realizaban acrobacias ofreciendo un espectáculo de rara belleza.

El inmenso espacio es el entorno preferido para las gaviotas. Pero no pueden dejar de posarse en la arena de la playa, para completar la alimentación necesaria para el mantenimiento de su cuerpo.

Incluso sintiendo la posibilidad de encontrar depredadores enemigos, este valiente pájaro no se siente intimidado y, muy vigilante, aterriza en la playa. Si fallas en tu precaución, infeliz habrá sido su descenso, ya que será presa fácil para algún enemigo natural. Si es cuidadosa y atenta, feliz será su pose. Tomará lo que necesita y nuevamente emprenderá vuelo, permaneciendo en la arena, hasta la próxima ola, solo la marca de sus delicados pasos, indicando que pasó una gaviota, llevando a cabo con placer y alegría la función de vivir y participar, con vida, en el anhelo de ser y existir.

Sabiendo que rara vez vengo al plano físico, ese día Elisa me comparó con una gaviota.

– Gaviota, ¿por qué desciende a la Tierra? ¿Buscando alimento?

No respondí de inmediato. Miré a la amiga que me veía como un pájaro tan hermoso. Sus ojos negros, dulces y bondadosos brillaron. Ella sonrió. Su maravillosa sonrisa infectó a los que la rodeaban, además de exponer las hileras de dientes perfectos. Elisa es una hermosa mujer negra, la belleza de sus sentimientos muestra y embellece aún más su espíritu.

Me preguntaba qué me estaba llevando de regreso a la Tierra. ¿Qué estaba haciendo allí? ¿Ayuda? ¿Tarea ¿Trabajo? ¿Lo bueno que hacemos es un crédito, una necesidad o un alimento?

Di la vuelta y vi que la gaviota dejaba marcas de sus patas en el piso arenoso. Regresé mis pensamientos, al pasado reciente y me aseguré de que, al intentar ayudar a los que quedaban atrás en la Tierra, terminé haciendo muchos afectos. ¿El Bien realizado dejaría marcas?

Nota de la Autora Espiritual: Volitarizar, en la literatura espírita, es el nombre del acto de los espíritus desencarnados que se mueven en el espacio, cuando lo hacen sin que sus pies toquen el suelo. En los libros espíritas, hay innumerables ejemplos de esto.

Asumiendo una Tarea

Encarnados, nuestras accioness están condicionadas a un propósito personal, que es la adquisición monetaria o un diploma que nos permitirá ejercer funciones bien remuneradas entre nuestros compañeros de caminata. Aquí, en el Plano Espiritual, para aquellos que entienden y viven la unidad del Universo, trabajar o estudiar no significa una oportunidad para emuneración personal, sino una oportunidad favorable para evitar quedar fuera de la evolución. La belleza de la existencia está en su actividad dinámica. Nunca es monótona. La vida parece un gran río que, a pesar de estar en el mismo lugar, nunca es el igual, porque se renueva cada segundo. Nuestra personalidad es, por naturaleza, inactiva. Si no nos despertamos con una mejora en nuestra forma de ser, correremos el riesgo de ver pasar el río de la vida y estar a su lado, perdiendo la oportunidad de ir junto con aquellos que caminan con él hacia el infinito. Aceptar nuevas, más responsabilidades, es un motivo de alegría para todos los que queremos participar, en nombre de Dios, en el mantenimiento y progreso de todos los seres humanos.

Fui llamada a enseñar en un curso de Reconocimiento del Plan Espiritual, en el cual la profesora titular, Marcela, estaba ausente porque ella también había aceptado la asignación de trabajos superiores. Aunque feliz de ser recordada y radiante de sentirme útil, no pude evitar tener momentos de preocupación, ya que habría varios espíritus bajo mi responsabilidad.

Como en otras ocasiones, fui a buscar el consejo de mis amigos. Cuando vi a Mauricio, fui alegremente a su encuentro. Mi amigo sonrió. Qué bueno es verlo siempre así. Recuerdo su dulce y segura sonrisa. Él respondió a mis deseos, con calma, transfiriéndome hermosas enseñanzas.

– Patrícia, ¿cómo comienza el aprendizaje de un profesor universitario en la Tierra? En los primeros años escolares, aprende las primeras letras. Estudioso, toma todas las calificaciones requeridas. Un día, la escuela terrenal concluye sus estudios y la clasifica apta para enseñar, a veces incluso en la escuela donde estaba preparada. Si eres sensato, ciertamente reconocerás que solo conoces lo razonable del tema en el que te especializas, y luego continuarás estudiando toda tu vida. Pero conocimiento adquirido es su patrimonio, logrado por su esfuerzo. Queriendo enseñar, puedes y debes hacerlo, porque muchos ni siquiera tienen este conocimiento que consideras moderado. Y los grupos felizmente transmiten sus conocimientos a los demás. ¿Cuántos preguntan: podré enseñar? Si tienen conocimiento del tema en cuestión, tendrán la capacidad, sí. Este es también el caso aquí. Todos tenemos que aprender para saber. Qué tristeza sería sentir que no hay nada más que aprender. El estudiante no debe permanecer mucho tiempo en el mismo grado. Su estudio debe rendir frutos hasta que pase de estudiante a maestro. He estado siguiendo tus estudios: has aprendido con amor y ahora puedes enseñar lo que has adquirido.

– Pero, Mauricio – insistí – ¿y si no lo estoy?

– ¡Lo estás! ¿Qué crees que es un instructor aquí en el Plano Espiritual? Es solo un espíritu dedicado y estudioso quien comenzó su aprendizaje como todos los demás. Uno no debe ser mezquino con el conocimiento, no sentirse incapaz o presuntuoso lo que crees saber. El sentido común es necesario e indispensable; porque a través de él tenemos la medida exacta de nuestro cabezal, sin llegar a la vanidad. Entonces, Patrícia, no deberías querer poder enseñar, sino a quienes transmiten el conocimiento que tienen con amor. Si te llamaron, es porque piensan que ya estás en forma. Aquí no hay un arreglito que lleve a muchos a tener posiciones no merecidas. Luego, los cursos vienen listos para ti. Es cierto que tendrás que responder muchas preguntas. Confío en ti. Acepta la carga y aprovecha la experiencia.

También fui a hablar con la abuela Amaziles. Realmente me gusta visitarla a ella y a sus amigas, para suavizar el deseo que siento por la casa donde viven y que fue mi primer alojamiento, después de la desencarnación. Después de los abrazos, hablé de mi duda.

– Patrícia – respondió la abuela – este curso es muy importante. Aprendes mucho del Plano Espiritual, en teoría y en práctica. La adquisición teórica o intelectual son solo archivos de información y conocimiento. Las excursiones realizadas durante el curso son la experiencia del hecho. Con comprensión, todos los que han vivido saben cómo adoptar el mejor enfoque para cada problema. La intención del curso es que todos los que asistan tengan este entendimiento. Porque solo la experiencia de estos hechos o conocimientos se transmitirá a nuestras células periespirituales y, en consecuencia, impresionará a las células físicas. Y cuando reencarnemos, estas experiencias surgirán en nuestra mente como un don natural o como una mente inconsciente.

¡Acepta, eres capaz! ¡Has estudiado mucho! Pon en práctica lo que has aprendido y aún aprendes.

De António Carlos, escuché:

– No hacerlo, por considerarte incapaz, no se acepta como una excusa ni aquí en el Plan Espiritual, ni como encarnado. Si no lo es, conviértete. Todos somos capaces, especialmente si no se requiere lo imposible. Lo hiciste bien, prudentemente, consultando a los amigos. Cuando nos sentimos inseguros, deberíamos pedir opiniones de amigos que consideramos y para quienes somos considerados. Con las sugerencias recibidas, debemos elegir qué es lo mejor para nosotros y para los demás. No es correcto hacer lo que no somos capaces en este momento. A veces, imprudentemente, nos haremos daño a nosotros mismos y a los demás al hacer algo por ambición, poder y vanidad. No es tu caso. Acepta y recuerda: aprendemos mucho más cuando impartimos conocimiento.

También consulté con papá y recibí una preciosa lección de él.

– Hija, la vida sabe mejor lo que es bueno para cada uno de nosotros. Siempre se nos pide que asumamos alguna tarea. Para mí, el mejor lugar es donde somos más útiles. Al olvidarnos de nosotros mismos, vivir en el bien de los demás, creamos condiciones para que Dios actúe a través de nuestra humilde personalidad. Y, nunca olvides, hagas lo que hagas, hazlo bien.

Y allí