Descubre millones de libros electrónicos, audiolibros y mucho más con una prueba gratuita

Solo $11.99/mes después de la prueba. Puedes cancelar en cualquier momento.

DE MÚSICA Y DE MÚSICOS / Volumen III
DE MÚSICA Y DE MÚSICOS / Volumen III
DE MÚSICA Y DE MÚSICOS / Volumen III
Libro electrónico98 páginas1 hora

DE MÚSICA Y DE MÚSICOS / Volumen III

Calificación: 0 de 5 estrellas

()

Leer la vista previa

Información de este libro electrónico

De música y de músicos recoge selecciones de textos publicados en la revista Proceso por el doctor, violinista y escritor Samuel Máynez Champion en su columna Estro armónico. 
IdiomaEspañol
EditorialProceso
Fecha de lanzamiento14 sept 2022
ISBN9786077876731
DE MÚSICA Y DE MÚSICOS / Volumen III

Lee más de Samuel Maynez Champion

Relacionado con DE MÚSICA Y DE MÚSICOS / Volumen III

Libros electrónicos relacionados

Música para usted

Ver más

Artículos relacionados

Comentarios para DE MÚSICA Y DE MÚSICOS / Volumen III

Calificación: 0 de 5 estrellas
0 calificaciones

0 clasificaciones0 comentarios

¿Qué te pareció?

Toca para calificar

Los comentarios deben tener al menos 10 palabras

    Vista previa del libro

    DE MÚSICA Y DE MÚSICOS / Volumen III - Samuel Maynez Champion

    A manera de introito

    Con este volumen sale a luz la tercera recopilación de textos que la columna Estro armónico colige para la revista Proceso desde 2007. Huelga decir que en su autor pulula una honda satisfacción por verlos publicados pero, sobre todo, por contar esta vez con el aval de la querida Elena Poniatowska Amor, a quien tuvo la desfachatez de pedirle que prologara, precisamente, lo que ahora aparece como un conjunto de entrevistas. Siendo sabedor de la huella que dejaron las de ella en la literatura mexicana, el atrevimiento no puede calificarse más que como el acto de una inconsciencia que se emparenta con la desfachatez aludida. Sin embargo, doña Elena volvió a hacer acopio de la solidaridad con las causas nobles que la caracteriza, plasmando sus siempre certeras palabras.

    Frente a la vaga intuición de que a usted, distinguido lector, a lo mejor le gustaría saber algo más personal del realizador de las siguientes entrevistas, va incluida una breve semblanza que descubre filias y fobias. Es, quizá y no obstante la tercera persona del singular, la manera más honesta que SMCh tiene para presentarse ante los leyentes:

    Desembarcó en las playas de la vida el 12 de octubre de un año cualquiera.

    Desde niño sintió fascinación por la música y Euterpe lo reclutó sin dejarle opciones. Tuvo buenos y regulares maestros, mas ahora está seguro de que el autoaprendizaje es el único camino que trasciende y que es infinito.

    Fue hijo de un matrimonio complejo, padre mexicano y madre argentina que se desvivieron por él. Ha sudado la gota gorda para poner en justa perspectiva sus figuras paterna y materna, dándose de santos de tener la certeza sobre la identidad de ambos progenitores.

    Estudió académicamente en varias latitudes y altitudes durante demasiados años. Hoy en día es maestro de violín, pero sabe que, en el fondo, es él quien sigue aprendiendo en compañía de sus discípulos.

    Ha tocado para los ojos de muchos públicos y los oídos de muchas personas; ha grabado alguno que otro disco compacto.

    Se sabe un privilegiado por haberse podido elevar al universo de los sonidos, y está consciente que su misión es compartirlo con los demás.

    Como buen Libra tiene debilidad por lo bello, en cualquiera de sus manifestaciones, sobre todo si emana aromas de jazmín o Poisson.

    Goza de la buena mesa y trata de llevar una vida sana, al menos en el plano físico, en el espiritual a menudo se enreda.

    Descubrió a su debido tiempo que sus semejantes son patológicamente vulnerables a la codicia y, en menor medida, al altruismo.

    Incapaz de sentir envidia por los polígamos, divide también sus afectos entre mascotas, colibríes y plantas (también incluye a sus dos hijos).

    Con poca tolerancia hacia la tiranía del ruido, preferiría que hubiera más árboles que militares, más homeópatas que discotecas.

    Cree en la reencarnación y no comulga con fanatismos religiosos.

    Aunque generoso con sus donativos a los organilleros, considera que las limosnas no le resuelven ningún problema a nadie.

    Nunca ha celebrado con particular convicción el 10 de mayo ni el 24 de diciembre.

    Le cuesta trabajo definir el valor monetario de su actividad profesional y quisiera no tener pretensiones hacia los bienes materiales.

    El cine ocupa un lugar preeminente en su devenir y desearía poder leer mucho más y con mejor retención.

    Ávido lector de Mafalda, lamenta su ignorancia sobre el Talmud.

    Perfeccionista con su entorno auditivo y visual, se ha abstenido de llevar serenatas en altas horas de la noche a dulcineas propias o ajenas.

    Ferviente armador de rompecabezas e impuntual cliente de tintorerías, nunca se ha visualizado en un campo de golf.

    Cultor del humor negro, reconoce que no domina ni una sola lengua, a pesar de leer en varios idiomas.

    Visitante desenfadado de los museos, siente poca atracción hacia la charrería.

    Sus formas de autocastigo nunca han incluido drogas: peyote, cigarro o alcohol en exceso.

    Con historia clínica saludable, no ha acabado de identificar netamente los fantasmas de su psiquis.

    Desconfiado de todos los sistemas políticos, está convencido de que el héroe y el traidor pueden cohabitar en un mismo

    ¿Disfrutas la vista previa?
    Página 1 de 1