Querido Hijo, voy a ser papá

Por Reynaldo Pareja

Existen muchos buenos Diarios de madres embarazadas, pero un diario escrito por un “padre expectante” no es común. La mayoría de los hombres suelen ocultar sus emociones y sentimientos bajo el arquetipo de tener que ser un “hombre fuerte y duro”, a pesar de que la llegada de su primer hijo suscite en él una oleada de nuevas y profundas emociones. L

• Idioma: Español
• Editorial: XLibris.com
• Fecha de lanzamiento: 7 dic 2021

Reynaldo Pareja

Reynaldo Pareja, PhD en Comunicación y Sociología del École des Études en Sciences Sociales, Paris. Maestría en Comunicación por la Universidad de Cornell, Estados Unidos. Licenciatura en Filosofía y Letras de la Universidad Javeriana, Bogotá, Colombia. Todos los libros en español del autor se pueden ver y adquirir en: amazonbooks.com

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Enero 8

Querido Hijo,

Voy a ser Papá!

Hoy fuimos al doctor. Le hizo a tu Mami el chequeo de rutina de estos casos y confirmó lo que ella venia diciendome pero yo me resistía creerle: que tú vienes en camino, que ella se encuentra ya en el tercer mes y que no hay duda de que está embarazada. Según las cuentas que el doctor sacó estarás naciendo el 25 de junio de este año.

El cúmulo de sensaciones que pasaron por mi fueron muchas. Era la confirmación de algo oficial que Mami lo sabía desde el comienzo pero que yo me resistía a aceptar por miedo a que ella se equivocara y que todas las esperanzas e ilusiones se me fueran a diluir en una falsa alarma.

Asi que llevas ya tres meses largos de vida. Mami lo sabia desde Octubre cuando comenzó a sentir en su cuerpo los cambios tipicos de esta situación: mareos, vómitos, sueño, cansancio; en fin, un cambio interno que se va detectando día a día mientras van acomodandose tantos sistemas tan delicados que entran en el proceso de hacerte una realidad.

Ella supo con seguridad que no se equivocaba cuando no le vino la menstruación regular y cuando persistieron los cambios fuertes, especialmente cuando fuimos a ver a mi padre que vivia en Baranquilla, Colombia con su esposa. Alli si fue Troya. Pasó unos dias verdaderamente negros en los que se sintió mal de veras. Durante un par de días se le subió y bajó la presión que la dejó fuera de combate, con una jaqueca que creia que se le explotaba la cabeza. Tanto que me pidió que llamara un doctor recomendado por la esposa de mi Padre y le preguntara qué le podia dar a Mami que no fuera a afectarte. Desde el principio ella se percató de que venias en camino y ha hecho todo lo que sabe que tiene que hacer, como no tomar medicinas, ni alcohol, ni nada que pueda causarte algún daño a tu desarrollo. Cómo la quise en ese momento por la responsabilidad con que ha tomado tan en serio tu venida, aunque no teniamos aun confirmacion oficial de su embarazo.

A la única persona que le contamos en el viaje fue a Ines, la señora de mi Papá. Ella lo intuyó desde el primer momento que Mami estaba embarazada. ¿Cómo se dio cuenta?, No lo se; cosas de mujeres. Hasta te puso nombre, Catalina, convencida de que vas a ser niña. Tan buen impacto nos causó el nombre que hemos decidido, que si eres niña, ese será el nombre que tendrás.

Estos tres meses han sido para Mami un verdadero torbellino de cambios como te lo decia atrás. Uno, como hombre, no puede ni imaginarse lo que significa convertirse de buenas a primeras en el receptáculo de una nueva Vida. Es algo que se nos escapará siempre porque no podemos asumir esa maternidad fisica. Algo tan íntimo, tan profundamente personal, tan indiscutiblemente individual, que solo lo puede vivir cada mujer. Es una experiencia que no se puede transferir, ni describir en su totalidad. Es verificar todos los dias una constante transformacion, muchas veces sin darse ella misma cuenta de lo que le está ocurriendo porque es un proceso que se va realizando por si mismo, y sin embargo afectándola profundamente.

Si yo quería esperar esta confirmación del doctor no era porque no pudiese confiar plenamente en la intuición y en la sabiduría de Mami para conocer su cuerpo.

No. Era porque la sola premonición me hacia tan feliz y contento que no quería por nada del mundo que ella se fuera a equivocar. Habíamos estado esforzándonos durante el año para que Mami quedara embarazada, sin mayor éxito. El examen del conteo de espermatozoides que me hicieron no contribuía puesto que había salido que tenia técnicamente un ‘conteo bajo’ de espermatozoides, alrededor de 60 millones. Imagínate, conteo ‘bajo’ cuando se necesita un solo espermatozoide para que pudieras ser concebido. La razón principal que más había contribuido a que no ocurriera fue la intensidad de mi trabajo que no me permitía aprovechar los días fértiles de Mami; estos se nos estaban pasando casi desapercibidos.

Así que por cualquier lado todo parecía indicar que lo mejor era pensar seriamente en una adopción y precisamente una de las razones por la cual fuimos a visitar a los viejos en Colombia fue para aprovechar y llenar los papeles de adopción en una institución que Mami conoce. ¿Ves por qué no quería hacerme demasiada ilusión y después descubrir que de pronto la intuición de Mami había fallado? Prefería hacerme el indiferente y más bien dejar pasar el tiempo suficiente para estar completamente seguro.

Pero ahora ya no hay duda. La confirmación oficial está ya dada, el doctor ha dado su dictamen profesional; eres una realidad asegurada, estás vivo de verdad! Eres el capullo de nuestras ilusiones desde hace tantos días buscado. La dicha se agolpa en mi corazón al oír estas palabras. No eres más intuición, ni deseo sino una realidad viva y palpitante dentro de Mami. No puedes oír ni ver, no tienes todavía todos tus órganos, pero eres tú y eres real. Eso me basta. Tenemos la paciencia de esperar lo que falta para que salgas un bebé completo.

Desde ahora eres bienvenido, hijo mío!

Bienvenido a compartir nuestro cariño que fue el que hizo posible que comenzaras a existir y que hizo posible que llegues a un hogar que se quiere preparar para tu arribo.

Crece fuerte y lozano!

Goza de esa paz que solo se goza cuando se está dentro de Mami. Paz que será lo más próximo que experimentes como Paraíso mientras vivas en la Tierra. Paz que añoramos en todos los momentos de la vida. Especialmente cuando nos sentimos cansados con el peso de vivir, con la angustia de la experiencia, con la fragilidad de ser hombres, con todo el temor de asumir cualquier responsabilidad.

Bienvenido a nuestro corazón que te ha concebido y que ha deseado tu presencia. Que crezcas en lo que resta del tiempo todo lo que puedas para que salgas fuerte y juguetón, que vengas con energía que nos agote, pero con la salud de quien ha pasado su mejor época de gestación en la forma de vivir más agradable posible: en protección, en paz, en amor.

Crece y llega sano para que nos des la alegría de tenerte entre nosotros, con nosotros, para nosotros, como nosotros para ti. Ven a llenar el corazón de quienes te hemos hecho en Amor para compartirlo contigo de manera que nunca te sientas arrepentido de haber sido hecho para la Vida.

Mira como pensando en ti se me ha subido la vena de la inspiración. Quisiera en esta carta atrapar toda la emoción que nos invade al presentirnos padres, a las perspectiva de que algún día me puedas decir Papi.

Duerme bien hijo, que mañana será otro día. Otro día más para seguir desarrollando lentamente tus pies, uñas, pelo, orejitas. Prepárate bien para cuando llegue el momento del aterrizaje que allí te estaremos esperando con los brazos abiertos y el corazón henchido de Amor por ti.

Buenas noches,

Papi

Febrero 10

Querido Hijo,

Ayer fuimos al doctor porque era día de cita para ver cómo estabas creciendo. A tu Mami la encontró divinamente bien. Se sorprendió de lo poco que ella había aumentado de peso en los cuatro meses que llevas de vida. Quedó satisfecho al comprobar que ella tenía bien su nivel de hemoglobina y que tú no presentabas ninguna anomalía de crecimiento.

Para verificar tu presencia el doctor colocó sobre la barriga de tu Mami un amplificador que permite capturar los sonidos que ocurren dentro de la membrana que te da vida, que te protege y te sirve como casa temporal. Es difícil poner en palabras la cantidad de sentimientos que me cruzaron por la mente y el corazón cuando los escuché. Parece casi increíble que detrás de ese pequeñísimo abultamiento en el abdomen de tu Mami te encuentres ahí vivo y ya dando señales de vida.

El sonido que hace la envoltura en donde estás (se llama la placenta) es como una brisa suave y constante. Como esas brisas que soplan sobre un campo lleno de espigas creando un manto de olas rubias. Estoy seguro que algún día verás un campo de