El Sendero Perdido: El Sendero Pérdido

Por Adelfo Chino Carrillo

El ser humano est constituido especialmente para no pertenecer en un solo estado mucho tiempo, tenemos la gran capacidad para elevarnos espiritualmente o retroceder, todo depende de cada uno. El cuerpo humano, es la mxima creacin que existe y que ha existido, es el vehculo o instrumento que como humanos tenemos para poder alzar nuestro espritu por encima de la conciencia.
El Sendero Perdido, es el camino que la mayora de la humanidad ha olvidado, es la fuente de la cual un da sali y a la cual regresar.

Para encontrar este Sendero Perdido, debemos de ser fuertes y buscar la meditacin en nuestro interior, hacer despertar nuestra alma, buscar a Dios en nuestro interior, a cualquier precio dejar los apegos mundanos, ya que estos nos hacen ms difcil la estancia aqu.

• Idioma: Español
• Editorial: Palibrio
• Fecha de lanzamiento: 16 jun 2014
• ISBN: 9781463385767

Adelfo Chino Carrillo

SOY ADELFO CHINO CARRILLO, NACI EL 29 DE AGOSTO DE 1976, EN EL POBLADO DE TRES PALOS, ACAPULCO, GUERRERO-MEXICO. ESTUDIE INGENIERIA ELECTROMECANICA EN EL TECNOLOGICO DE ACAPULCO. CASADO CON LA ÑINA MAS HERMOSA YOSELIN MINELLY ORTIZ GARCIA. SOY PROFESOR DE ARTES MARCIALES " TAEKWONDO, WING CHUN, KALI ESCRIMA, KRAV MAGA", ACTUALMENTE ME DESEMPEÑO COMO PROFESOR EN UNA ESCUELA PRIVADA.

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El texto Bíblico ha sido tomado de la versión Reina-Valera © 1960 Sociedades Bíblicas en América Latina; © renovado 1988 Sociedades Bíblicas Unidas. Utilizado con permiso. Reina-Valera 1960™ es una marca registrada de la American Bible Society, y puede ser usada solamente bajo licencia.

Fecha de revisión: 12/06/2014

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Índice

Diferencia Entre El Amor Verdadero Y La Lujuria.

Introducción

Dedicatoria

Gracias Señor

El Señor Lo Ha Dicho

El Ayuno

El Sendero De Luz

¿Los Humanos Somos

Los Únicos Seres De Luz?

¿Quién Soy?

¿Cómo Encontrar A Dios?

¿Somos Los Humanos

Únicos Hijos De Dios?

El Cuerpo Humano

Mi Fortaleza

La Mente

El Pensamiento

La Naturaleza Del Pensamiento

El Virus Mental

Los Ojos

¿Nacimos Por Casualidad?

La Inmortalidad

La Maldad

La Muerte

Nuestra Misión En Este Mundo

Vive El Presente

Cuando En El Hogar,

Falta Armonia, Amor.

Amigo

Ley De Santidad

Los Preceptos De Moisés, De Jesús Y Los Del Hijo Del Hombre

El Eterno Retorno

Reflexiones

Oración De La Mañana

Oración Del Medio - Día

Oración De La Noche

Oración De Protección Contra Los Enemigos

Oración

La Magnifica

Oración De Protección,

Sello De La Preciosa Sangre Para La Casa

A La Santísima Trinidad

Oración Al Santo Niño De La Boca Del Rio Manuelito

Ave Maria

El Credo De Nicea

El Credo De Atanasio

Oracion A Nuestro Señor Jesucristo

Conclusiones

Ven Espíritu santo, mándanos del cielo, un rayo de tu luz.

Ven, Padre de los pobres; ven, luz del corazón, ven a darnos tus dones.

Ven Espíritu Santo, llena los corazones de tus fieles y enciende en ellos el fuego de tu amor.

Ven, luz santificadora, penetra hasta lo más íntimo del corazón de tus fieles.

Eres el descanso de la fatiga, fresca brisa en el calor y consuelo en el llanto.

Purifica nuestras manchas, riega nuestra aridez y cura nuestras heridas.

DIFERENCIA ENTRE EL AMOR VERDADERO Y LA LUJURIA.

El amor verdadero no se rompe aún después de haber abandonado el cuerpo.

El otro se le nombra pasión, lujuria o apego y existe una gran diferencia entre los dos.

El amor a Dios nos libera, nos da alegría, felicidad y toda bienaventuranza.

La lujuria, pasión o apego, nos esclaviza, nos hace mezquinos, intolerantes.

Si amas a alguien, sentirás envidia si otra persona comparte ese amor, pero quienes aman a Dios, será también amado, por ti, ya que aman a Dios.

El amor de Dios nos da amor para que amemos a todos. El amor por las cosas externas únicamente los hará mezquinos, cerrados de criterio.

Unos viven para Dios y otros para el mundo.

Quién comprenda el amor y su verdadera naturaleza, vive y se mueve en su luz

                                   Sant Kirpal Singh

INTRODUCCIÓN

Estimado lector, espero que al leer estas páginas nuestro Señor envié sus rayos de luz e ilumine tu mente, tu cuerpo y de gozo a tu espíritu.

Recuerda siempre que estamos en este mundo terrenal como viajeros, nuestro destino no es permanecer aquí para siempre, solo somos viajeros, con vehículos acorde al lugar donde estamos.

Pero este vehículo tiene principio y tiene fin, entonces debemos estar consientes de ello y aprender a usar el vehículo que nos servirá cuando dejemos esté.

El primer vehículo es nuestro cuerpo físico, al dejar este cuerpo el siguiente vehículo será nuestro espíritu, por lo tanto debemos de darle mantenimiento constantemente a nuestro espíritu porque la hora de usarlo llegará cuando menos lo esperemos.

Somos espíritus, atrapados en este cuerpo humano, nuestra estancia aquí es usar nuestro cuerpo físico para alzar nuestro espíritu por encima de la súper conciencia, y de esa forma dar el salto y dejar esta cárcel humana y seguir acercándonos a la fuente de la que salimos un día.

El primero que la encontró no le verá el fin, el último que llegó no la agotará, porque sus pensamientos son más vastos que el mar y sus proyectos abarcan más que el gran océano.

Yo, por mi parte, no era más que un canalito del río, un arroyo que se pierde en un jardín.

Pero pensé Voy a regar mi jardín, voy a rociar mis flores ¡Y he aquí que mi arroyo se convirtió en un río, y mi río en un mar!

¡Brille mi doctrina como la aurora y extienda su luz a lo lejos!

Propáguense mis lecciones como palabras proféticas: porque quiero dejarlas a las futuras generaciones.

Vean: No he trabajado sólo para mí, sino para todos los que buscan la sabiduría.

                                   (Sira 24:28-34)

DEDICATORIA

Gracias Padre por mostrarme cuan inmensa es tu sabiduría, gracias por darme una mujer con quien poder compartir momentos de

Comentarios para El Sendero Perdido

[Digna María Albrecht · Calificación: 5 de 5 estrellas]

estoy agradecida por encontrar este libro el busca encuentra. Es porque leía y no me cuadraba porque fue dictada ya por otra persona y la palabra tiene poder si una palabra decís mal ya cambia la perspectiva