La Chica Nueva - Libro 2: La Chica Nueva, #2

Por Katrina Kahler

Alexa, la nueva vecina de las gemelas, no sabe qué pasará con su futuro  y lucha por encontrar su lugar en su nuevo mundo. Las gemelas deciden darle una segunda oportunidad a Alexa, pero debido a una reacción inesperada de Casey, la situación se descontrola.

Atrapada en el comportamiento problemático de Ronnie, Alexa no está preparada para lo que pueda suceder. ¿Logrará Ronnie dominarla por completo? ¿O se las arreglará para mantenerse firme y tomar sus propias decisiones como lo había planeado desde un principio? Y cuando se enfrente a un nuevo problema, ¿cómo reaccionará Alexa?

Tendrás que leer el libro hasta el final para saber lo que le espera a la nueva chica que ha sacudido el mundo de las gemelas. Este es otro libro fabuloso para chicas y todas las fans de la serie Las Gemelas.

• Idioma: Español
• Editorial: Kc Global Enterprises Pty Ltd
• Fecha de lanzamiento: 17 dic 2020
• ISBN: 9781071579909

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Libro 2

Otro Problema Más

Índice

CAPÍTULO UNO

CAPÍTULO DOS

CAPÍTULO TRES

CAPITULO CUATRO

CAPÍTULO CUATRO

CAPÍTULO CINCO

CAPÍTULO SEIS

CAPÍTULO SIETE

CAPÍTULO OCHO

CAPÍTULO NUEVE

CAPÍTULO DIEZ

CAPÍTULO ONCE

CAPÍTULO DOCE

CAPÍTULO TRECE

CAPÍTULO CATORCE

CAPÍTULO QUINCE

CAPÍTULO DIECISEIS

CAPÍTULO DIECISIETE

CAPÍTULO DIECIOCHO

CAPÍTULO DIECINUEVE

CAPÍTULO VEINTE

CAPÍTULO VEINTIUNO

CAPÍTULO VEINTIDOS

CAPÍTULO VEINTITRES

CAPÍTULO VEINTICUATRO

CAPÍTULO VEINTICINCO

CÁPITULO UNO

Alexa

Ronnie ya estaba al tanto de lo que estaba sucediendo,  parecía demasiada ansiosa por compartir cada detalle de lo que estaba pasando. Acabábamos de salir del aula y ella ya me estaba dando un tour exprés por el edificio. Con cada paso que daba iba largando más y más información. Cuando nos detuvimos junto al baño,  camino al patio, aprovechó el silencio para seguir con su cháchara. Era como si se hubiesen abierto las compuertas de un dique,  un sin fin de chismeríos fluían hacia mí.

Pasados unos minutos se dio cuenta que el cubículo del fondo estaba ocupado, bajó el tono de su voz hasta susurrar antes de arrastrarme de vuelta hacia el pasillo de entrada.

La historia de la vida de las gemelas era como sacado de una película, casi una novela,  yo me estaba esforzando por  poder entender todo lo que les había pasado. Cuando me enteré que la Sra.Jackson decidió dar a Ali en adopción al nacer, no podía creer lo que estaba escuchando. ¿Cómo hizo para elegir con cuál de las dos bebés se quedaría? Simplemente jugó al Piedra, papel o tijera.  No creía que hubiese sido tan simple como ese juego. ¿Había  algo en Casey que hizo que su madre la prefiriese, Ali era más llorona o Casey era más fácil de criar? ¿Cómo hizo esa madre para tomar semejante decisión,  para elegir quedarse con sólo una? Era imposible entenderlo así nomás. Al final de cuentas  mi madre tampoco me quería a mí. Después de todo al final Ali ahora estaba de vuelta con su madre biológica. ¿Sería que Ali y yo teníamos más en común de lo que creía?

Ronnie siempre decía que había sospechado desde un principio que algo pasaba ahí. Cuando Ali entró en nuestro aula, en su primer día de clases, al instante supe que Casey y ella estaban emparentadas. Era realmente muyyy freeky, en especial cuando Ali usaba el pelo suelto. ¡¡Era en esas veces cuando el asunto era realmente innegable!! ¡¡No puedo llegar a entender cómo sus padres se lo ocultaron!!

No me estaba siendo para nada fácil procesar todos los detalles del tema.

Si Ali no se hubiera mudado aquí, las chicas nunca se habrían conocido y no habrían tenido la oportunidad de conocerse.

¡Obvio, lo sé!

Era una historia tan bizarra. Imagínate, conocer a tu gemela idéntica, una persona que ni siquiera sabías que existía, doce años después de que nacieras, debe haber sido una experiencia  muy surrealista.

Lo de la Sra. Jackson era otro tema completamente aparte. Según Ronnie, ella se había abalanzado sobre el padre de Ali tan pronto como la madre adoptiva de Ali había fallecido.

Pasó de ser la mujer pobre a ser la señora ricachona de la noche a la mañana, se burló Ronnie. Todo el mundo sabe que sólo se casó con él por su dinero. Quiero decir, en serio... ¡es tan obvio!

Ronnie se dejó caer en un banco en medio del patio y se volvió hacia mí, con su rostro cubierto de  desdén. Me senté a su lado, sin saber qué decir. Acababa de conocer a la familia Jackson, pero era imposible  no notar las cariñosas miradas entre el Sr. y la Sra. Jackson durante la cena la noche anterior. Incluso estaban abrazados mientras se despidieron al final de la noche. No era una experta, por supuesto, pero el Sr. Jackson parecía estar totalmente enamorado de su esposa y ella parecía sentir lo mismo por él. ¿O eran como mi tía y su comportamiento era todo un show para los demás?

Antes Casey sólo tenía unas pocas prendas de ropa linda, comentó Ronnie, interrumpiendo mis pensamientos. Aparte ella solía vivir en una casa vieja y destartalada. Ahora vive en una mansión y usa marcas de diseño. La mayoría de sus cosas pertenecen a Ali, pero probablemente ahora recibe una gran asignación y puede comprarse  lo que quiera. 

Cuantos más detalles revelaba Ronnie, más se me caía la mandíbula. Notaba que Ronnie estaba celosa de las gemelas y probablemente exageraba, aunque no era razón suficiente para que mintiera a menos que tuviera un motivo oculto. Estaba tan ansiosa por despacharse con todos esos chismeríos, aun sabiendo que yo era amiga de las dos chicas. ¿De qué iba todo eso?

¿Cómo sabes todo esto? Le pregunté sacudiendo mi cabeza.

He oído cosas, dijo Ronnie. Todo el mundo ha estado hablando de ellas. Esas chicas se creen lo más. Sólo porque fueron votadas como capitanas de la escuela, además Casey también es la capitana de las animadoras. ¡Por segundo año consecutivo! Ronnie resopló con asco. Es totalmente injusto. Pero les hacen la pelota a todos los maestros a lo grande, me dan asco. Y tengo que advertirte... no son tan amorosas  como parecen. ¡Así que ten cuidado!

Las palabras de Ronnie resonaban en mis oídos,  fruncí el ceño. ¿Me estaba diciendo la verdad? ¿O se había inventado todo? Tan pronto como se me ocurrió esa idea, la borré de mi mente. Difundir falsos rumores como ese sería como demasiado,  a otro nivel totalmente. Además, Ronnie necesitaría tener una imaginación muy enroscada para inventar una historia como esa.

Me recordé a mí misma que Ronnie era monitora de pasillo y era mejor estar en buenos términos con ella. Por el momento, decidí guardarme lo que pensaba junto con los chismeríoss de Ronnie para mí misma.

Sus ojos se posaron en un grupo de chicos que caminaban por el patio. Estaban vestidos con camisetas de rugby y parecía que acababan de terminar su entrenamiento.

Hola, Sai. ¡Hola, Jake! Ronnie les gritó con una radiante sonrisa.

Dos de los chicos sonrieron y la saludaron.

Oh, Dios mío, dijo al borde del desmayo. El número once... ¡qué guapo es!

Sabía que se refería al novio de Casey, Jake. Puede que haya exagerado en sus historias sobre las gemelas, pero no exageraba sobre el chico que teníamos enfrente. Definitivamente era muy guapo.

¡Está saliendo con Casey! ¿Puedes creerlo? Ronnie resopló.

Sí, lo sé. Lo conocí el sábado, no mucho después de llegar a casa de mi tía.

¿Qué? ¿Lo conociste?

Sí, él y Casey se fueron juntos a dar una vuelta en bicicleta.

Ronnie  sacudió  su cabeza con amargura. Casey no lo merece.

No quería involucrarme en el enojo de Ronnie hacia mis vecinas. A pesar de lo que me acababa de decir, prefería llegar a mis propias conclusiones  sobre las chicas. En cambio, me centré en los chicos, se veían tan bien en sus uniformes de rugby. Pero los chicos como ellos nunca se interesarían  por alguien como yo.

Me encantan tu jean, bromeó Ronnie, logrando que volviera a fijar mi atención en ella. Necesito desesperadamente uno nuevo. ¿Dónde te lo compraste?

Oh, lo tengo desde hacen años, mentí. Creo que esa tienda ha cerrado.

Ronnie miró mi jean con curiosidad. Tengo algo de dinero ahorrado, estaba pensando en ir de compras el próximo fin de semana. Me miró y sonrió. Podrías venir conmigo, tienes buen gusto para la ropa. Me encantaría que me ayudaras.

Ronnie