ROBERTO LEAL (44) es de los que te aprieta la mano. Su abrazo resulta parecido al de alguien que conoces de toda a la vida y es ahí, junto a otras tantas buenas aptitudes, en donde radica su éxito: su naturalidad y cercanía.
“Un cortadito, por favor”, le dice a una las azafatas que están presentes. “Me podría tomar diez cafés y no me canso”, nos dice entre risas para luego explicarnos porqué no ha citado en este día tan especial para él.
Roberto, te noto muy feliz y tranquilo, Roberto.
Es que no puedo estar de otra manera que no sea esta. Tengo la suerte de que en su día me señalaran con el dedo para presentar , que en su momento fue un reto que volviese a Antena 3 con otro presentador porque Cristian estaba en Mediaset y se iba a quedar en