La fuerza del amor: Cómo cambiar el mundo a través de la sencilla fuerza del amor en acción

Por Heidi Baker

Qué tiene que ver el confiar en Dios con TODO?



Heidi Baker, en La fuerza del amor, le brinda un vistazo de la dependencia total y de la auténtica comunidad cristiana con un novedoso enfoque en las Bienaventuranzas.



En Mozambique, país devastado por la guerra y asolado por la pobreza, ella y su esposo han recibido las milagrosas provisiones de Dios y han visto los corazones transformados de personas atrapadas en desesperadas situaciones de vida o muerte. Únase a ellos y descubra la realidad del Reino de Dios en la tierra.



-      Para cualquiera que se cuestione si, en realidad, podría llevar una vida de amor radical...



-      Para cualquiera que se plantee si las Bienaventuranzas significan algo...



-      Para cualquiera que se pregunte cómo seguir a Jesús hasta el final...

• Idioma: Español
• Editorial: Casa Creación
• Fecha de lanzamiento: 1 oct 2013
• ISBN: 9781621364832

Vista previa del libro

El nuevo libro de Heidi Baker, La fuerza del amor, con Shara Pradhan, es un texto poderoso y conmovedor que puede provocarle un choque cultural sin salir de su lugar de lectura. Se basa en las Bienaventuranzas vistas a través de los ojos de pastores y misioneros del tercer mundo. Las historias de milagros y pobreza en las que hay plenitud de gozo son hermosas y conmovedoras. Uno puede escuchar la voz de Heidi Baker emergiendo de las páginas del libro.

Se trata de una obra que no se ha escrito desde las torres de marfil de la academia sino a partir de la pasión por un avivamiento. Para aquellos que pudieran leer los relatos con dudas, pensando que Heidi pudiera ser el estereotipo de una mujer rubia, no podrían estar más lejos de la verdad. Dios decidió revelarla a los Estados Unidos como una ebria consuetudinaria, pero ebria del Espíritu Santo; como los apóstoles en Hechos 2, que fueron acusados de estar ebrios. Heidi obtuvo un doctorado en una de las escuelas teológicas más prestigiosas de Inglaterra.

La fuerza del amor es fiel al texto griego y creo que está más cerca del corazón de Cristo que la mayoría de los libros sobre las Bienaventuranzas. Heidi, con la ayuda de Shara, ha escrito una obra muy útil para los cristianos occidentales. Prepárese para tener un examen del corazón realizado por el Espíritu Santo.

—RANDY CLARK

SUPERVISOR APOSTÓLICO

Si quiere experimentar una gama de emociones, lea La fuerza del amor. Si quiere una dosis de convicción profunda, lea La fuerza del amor. Si quiere tocar al amor mismo, lea La fuerza del amor. Si usted quiere ser cambiado para siempre, lea La fuerza del amor. Yo lo hice.

—PATRICIA KING

EXTREME PROPHETIC, AUTORA DE SUEÑE EN GRANDE Y

LA LUZ PE RTENECE A LAS TINIEBLAS

Lejos de la rancia teología catedrática, en la cual los hechos del Espíritu Santo son debatidos y—finalmente—negados, el ministerio de Jesús a través de Rolland y Heidi Baker ha conquistado el actual corazón apostólico de Dios. La fuerza del amor no es simplemente otro gran libro; es una epístola de amor vivida por personas que aman la Palabra y cuyas miradas están fijas en su Novio y Rey: Jesús. Lea, llore y deje que su corazón sea transformado por estos testimonios de sacrificio y por su gran gloria.

—JAMES W. Y MICHAL ANN GOLL

ENCOUNTERS NETWORK AND COMPASSION ACTS MINISTRIES

AUTORES DE ENCUENTROS ANGELICALES, CÓMO VIVIR UNA VIDA

SOBRENATURAL, UNA FE RADICAL Y MUCHOS MÁS LIBROS

No puedo pensar en nadie mejor para escribir sobre las Bienaventuranzas que mi buena amiga Heidi Baker. ¿Por qué? ¡Porque las vive! Este libro puede revolucionar su vida, su familia, su ministerio y su trabajo en la medida en que ejercite las enseñanzas de Jesús, tal como son expuestas e ilustradas por la asombrosa vida y ministerio de Heidi Baker.

—CHÉ AHN

PASTOR PRINCIPAL, IGLESIA HARVEST ROCK,

EN PASADENA, CALIFORNIA

FUNDADOR Y PRESIDENTE DE HARVEST INTERNATIONAL MINISTRY

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La fuerza del amor por Heidi Baker

Publicado por Casa Creación

Una compañía de Charisma Media

600 Rinehart Road

Lake Mary, Florida 32746

www.casacreacion.com

No se autoriza la reproducción de este libro ni de partes del mismo en forma alguna, ni tampoco que sea archivado en un sistema o transmitido de manera alguna ni por ningún—electrónico, mecánico, fotocopia, grabación u otro—sin permiso previo escrito de la casa editora, con excepción de lo previsto por las leyes de derechos de autor en los Estados Unidos de América.

A menos que se exprese lo contrario, todas las citas de la Escritura están tomadas de la Santa Biblia, Nueva Versión Internacional® NVI® Copyright © 1999 por Bíblica, Inc.® Usado con permiso. Todos los derechos reservados mundialmente.

Traducido por: Nahúm Sáez

Director de diseño: Bill Johnson

Originally published in the U.S.A. under the title: Compelled by Love

Published by Charisma House, A Charisma Media Company

Copyright © 2008 Heidi Baker

All rights reserved

Copyright © 2013 Casa Creación

Todos los derechos reservados

Library of Congress Control Number: 2013945763

ISBN: 978-1-62136-482-5

E-book ISBN: 978-1-62136-483-2

Nota de la editorial: Aunque la autora hizo todo lo posible por proveer teléfonos y páginas de internet correctas al momento de la publicación de este libro, ni la editorial ni la autora se responsabilizan por errores o cambios que puedan surgir luego de haberse publicado.

El amor de Cristo nos obliga, porque estamos convencidos de que uno murió por todos, y por consiguiente todos murieron. Y él murió por todos, para que los que viven ya no vivan para sí, sino para el que murió por ellos y fue resucitado.

—2 CORINTIOS 5:14-15, ÉNFASIS AÑADIDO

Este libro es para ti, Señor. Nuestras vidas son para ti. Cada hálito es para ti. Que cada palabra te adore. Jesús, recibe la gloria; llama a muchos a amar a los pobres y a tener intimidad con ellos.

EN PRIMER LUGAR quiero agradecer a mi esposo, Rolland, por caminar conmigo en esta jornada de amor desde mayo de 1980. Quiero agradecer a mis—extraordinarios, hermosos y llenos del Espíritu Santo—, hijos: Elisha James y Crystalyn Joy, por compartir a su mamá con muchos otros hijos y por mostrar sus espíritus generosos y amorosos.

Quiero retribuir a mi hija espiritual, Shara Pradhan, por ayudarme a recopilar los mensajes y pasar incontables horas estudiando detenidamente el material con un corazón lleno de compasión. Ella es un ejemplo de un creyente. Sin Shara, yo no habría terminado este libro. Ella es ¡sencillamente asombrosa!

También quiero honrar a algunas personas talentosas que hicieron de esta obra una realidad. Muchas gracias a los doctores Bob Ekblad y Scott Dolff por la increíble y considerada percepción académica que me brindaron. Agradezco a Mary-Ann por ayudar a Shara a leer cuidadosamente todos los mensajes sobre las Bienaventuranzas, a fin de seleccionar los mejores. Gracias también a Wendy Dermott por transcribir y editar tanto material, así como también a Dominique Phillips por su contribución. Agradezco a María Chico por integrar muchos de los detalles de última hora.

Quiero reconocer el trabajo arduo y la ayuda de Charisma Media. Aprecio profundamente a Barbara Dycus y Donna Hilton. Por último, quiero dar las gracias a nuestra familia «Iris Global»; los que nos apoyan, los misioneros y los obreros nacionales, jóvenes y adultos, que solo viven a diario para Cristo.

Soy eternamente bendecida por el ejemplo de la Madre Teresa, que abrió el camino del amor para que todos lo siguieran; por los pastores Surpresa Sithole y José Novella, y por todos nuestros niños mozambiqueños que me enseñaron el camino del amor.

Contenido

Prólogo por Rolland Baker

Prólogo por Bill Johnson

Introducción

1 Dichosos los pobres en espíritu

2 Dichosos los que lloran

3 Dichosos los humildes

4 Dichosos los que tienen hambre y sed de justicia

5 Dichosos los compasivos

6 Dichosos los de corazón limpio

7 Dichosos los que trabajan por la paz

8 Dichosos los perseguidos por causa de la justicia

Epílogo

Notas

Prólogo

EL SERMÓN DEL Monte es un pasaje intimidante de la Escritura y un modelo de perfección que usualmente veo como irreal e inalcanzable. Como quizás suceda con la mayoría de los creyentes, nunca esperé ver que se cumpliera mucho de ese patrón en la vida de los líderes y ministros, menos aun en mi vida. Es más, fue decepcionante formularles tantas preguntas sobre ese sermón a los maestros que yo conocía, ya que muchas veces me dijeron que fuera pragmático puesto que esas enseñanzas no significaban realmente lo que yo pensaba. Tal vez no exista pasaje de la Escritura que haya sido estudiado tan minuciosamente como este; es muy grande y glorioso el cuadro que pinta acerca de la justicia bajo el poder del Espíritu Santo, sostenida por la inextinguible y eterna llama ardiente de Dios mismo.

A menudo he estado expuesto a destellos de este divino nivel de vida en el registro de los muchos avivamientos de la historia de la iglesia en todo el mundo. Debido a mi herencia misionera y a que crecí en Asia, estoy familiarizado con el avivamiento en China y con los testimonios de los grandes santos que perseveraron bajo infame persecución. Fui especialmente influido por mi propio abuelo, cuyo libro Visiones más allá del velo, registró la propia decisión misericordiosa de Dios de revelarse a sí mismo radicalmente al más pequeño de estos niños mendigos de las calles de Kunming, China, donde nací. En verdad, Él muestra su gracia con mayor claridad cuando busca a los desechados, a los olvidados y a los que no tienen influencia y crea en ellos las cualidades de su propio carácter para enseñar al resto del mundo las riquezas de su bondad.

Sin embargo, en mi propia experiencia, los elevados vuelos de espiritualidad de los que había oído y con los que soñaba parecían inalcanzables. Ni los años de especialización académica en estudios bíblicos y teológicos parecían acercarme a la esperanza de caminar en la libertad gloriosa de la vida en el Espíritu que Jesús describiera en los evangelios. Particularmente, necesitaba aliento. Necesitaba un ejemplo auténtico de Jesús viviendo en alguien, al punto que me inspirara y motivara a considerar vivir el sermón no solo como algo real sino también como el único camino viable para abordar la vida y el ministerio en el Señor.

Yo sé que nuestro Señor tiene muchos de esos monumentos de su gracia entre su pueblo, que a menudo se esconden en los rincones más lejanos del mundo; pero para mí ese estímulo vino durante la década de 1970, cuando conocí a Heidi en una pequeña iglesia carismática en Dana Point, California. Ella tuvo una crianza privilegiada, vivía en una playa privada, no le faltó nada en cuanto a educación, comodidades y oportunidades. Pero aun pequeña, vibraba e irradiaba con un hambre de Dios que la consumía. Radicalmente influida por su maestra de sexto grado que había sido misionera, el corazón de Heidi se volcó hacia los pobres y los que sufrían en otras culturas. Esa maestra resultó ser mi madre y así fue que nuestras familias se relacionaron.

Cuando la conocí, era una verdadera hippie, idealista de espíritu, una adolescente que a los dieciséis años ya había sido místicamente llevada al cielo y comisionada por Cristo para ser misionera y ministrar en Asia, Inglaterra y África. Nunca miró hacia atrás y, por puro placer, comenzó una vida de confianza en su perfecto Salvador, como desde entonces lo ha predicado y ministrado en cada oportunidad posible. Cuando escuchaba sus testimonios por horas, ella era para mí un vivo cumplimiento del Sermón del Monte, sobre todo, de las Bienaventuranzas.

En sus viajes misioneros, ella confiaba en Jesús en todos los aspectos, constantemente y sin dudar, esperando que Él dirigiera y proveyera. A la vez, adoraba por horas con su hermosa voz, la mayoría de las veces escuchando la voz de Él, cuando se internaba en su presencia. Ansiaba, sin medida, más de Cristo. Su amor por la gente, y sobre todo por los desfavorecidos, fluía naturalmente y sin esfuerzo. Tenía sus críticos cínicos, sus momentos de desaliento y sus desengaños, pero ha perseguido a su Jesús con un corazón puro como nadie que yo haya conocido.

Inmediatamente me di cuenta de que esa era la persona con la que yo podía vivir el Sermón del Monte como siempre lo soñé, a un nivel que nunca podría haber considerado con nadie más. Ahí había alguien que podría no preocuparse por el día de mañana, buscar primeramente su reino y su justicia bajo cualquier circunstancia en cualquier parte del mundo y—con la simplicidad más infantil—perseguir el cielo en la tierra, a pesar de toda la oposición y el desaliento. Y en armonía con los deseos de mi corazón, Jesús nos unió a Heidi y a mí. Nos fuimos al campo misionero dos semanas después de casarnos, con las sencillas instrucciones de Él, boletos de ida solamente y

Comentarios para La fuerza del amor

[Marcelo Ignacio Soto · Calificación: 5 de 5 estrellas]

Desafiante. Conmovió las entrañas de mi espíritu para desafiarme a más intimidad con el Espíritu Santo.