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Esos Ángeles Llamados Humanos: En Dónde Está Dios?
Esos Ángeles Llamados Humanos: En Dónde Está Dios?
Esos Ángeles Llamados Humanos: En Dónde Está Dios?
Libro electrónico318 páginas4 horas

Esos Ángeles Llamados Humanos: En Dónde Está Dios?

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Información de este libro electrónico

Es esencial para todo ser humano el descubrir o reconocer su verdadera identidad y su verdadera naturaleza angelical o espiritual.
Es tambin esencial que cada cual viva todo su potencial espiritual y cumpla as el verdadero rol o funcin para la que ha sido creado(a); dndole as verdadero sentido y direccin a su vida. y
Es ms esencial an, el que todos y cada uno de nosotros encaminemos nuestros pasos hacia nuestro re-encuentro con el creador; pues de ello depender el resto de la eternidad de nuestro ser espiritual.
IdiomaEspañol
EditorialiUniverse
Fecha de lanzamiento28 jun 2012
ISBN9781475929522
Esos Ángeles Llamados Humanos: En Dónde Está Dios?
Autor

Jaime V. Altamirano

Biografía del Autor Jaime V. Altamirano Nacido en Cuenca Ecuador. 10 De septiembre de 1953. Residen en USA. desde 1980; Nacionalizado en USA. ESTUDIOS: * Graduado como Doctor en Medicina y Cirugía en la Universidad de Cuenca - Ecuador * Estudió inglés y alemán idiomas en la Facultad de filosofía, Cuenca Ecuador. * Graduado como Master en Salud Pública en la Universidad de Texas, * Post doctorado en Epidemiología en la Universidad de Michigan. * Administración y Microeconomía de Salud. Escuela de Negocios Edwin L. Cox,. * GIS Análisis de Investigación Geoespacial; Instituto de ATSDR. * Entrenamiento como Líder Ejecutivo. en el CDC University. * Análisis de Sistemas. En Andrew Young, Escuela de Estudios Políticos-Georgia. EXPERIENCIA PROFESIONAL: * Jefe de Residentes y Director encargado del Hospital, Alamor-Ecuador, (1Año), * Profesor de Bioquímica en la Universidad de Cuenca-Ecuador, (4 Años), * Coordinador de Educación de Salud para el Departamento de Salud de la Ciudad de Houston. (1 Año), * Epidemiólogo del Departamento de Salud de Estado Michigan (7 Años) * Médico Epidemiólogo para la Prevención del VIH. Centros de control y prevención de enfermedades. CDC. (14 Años). * Presidente de la Asociación Ecuatoriana de Georgia. (2 Años) * Fundador - Presidente de la Camara de Comercio Ecuatoriano Americana (1 Año) * Fundador - Director del Programa de Latín Steps Services Inc. (Servicios para el Caminar Latino. Asistencia Social Humanitaria a países de América Latina) (6 Años) * Fundador, Director del programa de MEDPATH Global (Asistencia Social Humanitaria Global, a países africanos y Asiáticos) (1 Año) * Fundador, Director del programa AIDEC Inc. ayuda internacional a familias de desplazados Colombianos, debido a la Guerrilla. (2 Años) * Fundador - Presidente de Casa de la Cultura Hispana Americana.(4 Años) AUTOR: de varias publicaciones y artículos de Medicina y Salud Pública. Autor del Modelo de Modificación de la Conducta Social, Aplicada a la Prevención del VIH. Coautor-revisor, del libro "Principios de Salud Pública" publicado por el CDC., Autor del libro "Espíritu y Poesía" Poesía con mensaje. Autor de Estrategias de Capacitación para los Países en Vias de Desarrollo Asistencia Técnica y Facilitación de “Planificación Estratégica”, Evaluación de Programas, y organización de “Comunidades de Práctica” COP; uniendo múltiples agencias bajo un objetivo común. Jaime V. Altamirano, MD. MPH. 4553 Bogan Meadows Court; Buford, GA 30519 Officina: 404 639 0937; Fax: 404 639 0944 E-mail: molito2@yahoo.com

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    Vista previa del libro

    Esos Ángeles Llamados Humanos - Jaime V. Altamirano

    CONTENTS

    DEDICATORIA

    REVISION

    SEGUNDA REVISION

    CAPÍTULO PRIMERO

    CAPÍTULO SEGUNDO

    CAPÍTULO TERCERO

    CAPÍTULO CUARTO

    CAPÍTULO QUINTO

    CAPÍTULO SEXTO

    CAPÍTULO SÉPTIMO

    CAPÍTULO OCTAVO

    CAPÍTULO NOVENO

    CAPÍTULO DÉCIMO

    DEDICATORIA

    He terminado de escribir este libro en este quinceavo día de Septiembre del año 2009; día en el que he recibido un regalo especial de Dios, el nacimiento de mi último hijo Christian David Altamirano. Quiero permitirme dedicar estos escritos a mis hijos: James, José y Christian Altamirano; así como a mis hijos adoptivos: Sebastián and Daniel Ortiz; a mi esposa Alba Yaneth Sotelo de Altamirano; y una dedicatoria especial a mis padres José Antonio Altamirano y María Luisa León de Altamirano, a quienes debo especial reconocimiento y a quienes doy crédito de muchos de estos pensamientos que los aprendí justamente de ellos, durante mi infancia y mis primeros años de juventud. Siempre con palabras de amor y de sabiduría ellos dirigieron mis primeros pasos e impregnaron en mi Corazón el verdadero significado del amor. Hoy puedo decir que este libro es simplemente un fruto de esas semillas que ellos supieron plantar.

    Durante el proceso del pensamiento, la escritura y las revisiones de este libro, repetidamente he rogado a Dios, que permita que estas ideas un día lleguen a ser luz y guía para aquellos quienes con corazón abierto y humilde actitud busquen el verdadero camino hacia Dios. Es por esto que en su nombre yo me permito dedicar este libro a todos quienes tengan el deseo de invertir su tiempo en esta lectura, en busca del camino correcto hacia encontrar a Dios, o hacia mantener y/o mejorar su relación con Dios.

    Con sincero amor en Cristo.

    Jaime V. Altamirano león, MD., MPH.

    REVISION

    En diciembre de 1993 la primera versión de este libro fue presentada para su revisión y crítica por el Dr. Antonio Castro Guerrero, Doctor en teología y profesor de filosofía y literatura en la Universidad de Loja—Ecuador. El Dr. Antonio Castro Guerrero envió sus comentarios en julio de 1994. Eran tan afirmativas que sirvió de aliento para continuar hacia el objetivo de publicar este libro, seguro que podría ser beneficioso, o al menos, podría traer alguna luz o inspiración en su búsqueda del camino hacia Dios, para aquellos que lo leyeran.

    Adjunto es una copia de la crítica del Dr. Antonio Castro Guerrero.

    EN DONDE ESTÁ DIOS? . . . ACTO RELIGIOSO (Este fue el nombre original de este libro.)

    Esta es una profunda reflexión teológica, escrita con admirable sencillez por el Dr. Jaime Altamirano. Este trabajo de diez capítulos, redactado en un estilo conversacional, perfectamente adecuado a un guion radiofónico, presenta a PAPÁ o PADRE, jefe de familia, muy versado en el conocimiento de la Biblia y, sobre todo, como un hábil e ingenioso transmisor de la Buena Nueva; un hijo admirablemente entusiasmado por los mensajes de su papá, y una esposa y mamá, muy solidaria y co-participante en una relación familiar iluminada por la luz de la Fe.

    En síntesis, esta reflexión compartida, e inspirada por el Espíritu de Dios, sin apartarse en lo más mínimo de los dogmas de Fe sostenidos por la Iglesia Católica, fundada por Cristo, nos da un riquísimo mensaje de afirmación evangélica para compartirlo en familia y que hace más viva la tarea santificante de la Iglesia en el ejercicio de su ministerio de salvación.

    Dr. Antonio Castro Guerrero.

    SEGUNDA REVISION

    Guiado por Espíritu de Dios y sensible a la necesidad de diseminación de estos escritos entre las comunidades de habla inglesa, en Mayo del 2006 el autor se tomo la tarea de hacer la traducción del texto inicial al Ingles, y de revisión de su contenido, concluyendo con la presente edición, que adoptó el nombre de Esos Ángeles Llamados Humanos dando especial énfasis a la apertura de nuestro entendimiento a vernos, identificarnos, y considerarnos a nosotros mismos como seres espirituales, y por tanto a actuar como tales; dando el valor que se debe a la eternidad de la vida venidera después de la muerte. Esta revisión fue completada en Septiembre del 2009.

    En esta edición, el Rev. Fabio A. Sotelo fue agregado como coautor, por sus invaluables aportes en la revisión de las citas bíblicas y en la discusión de algunos aspectos teologales incluidos en esta versión.

    Además, un reconocimiento especial a mi hijo James Steward Altamirano, ahora ya convertido en un joven adulto, con quien he tenido múltiples oportunidades de discutir las aplicaciones prácticas de muchos tópicos presentados en este libro; a mi esposa Alba Yaneth Sotelo de Altamirano quien debería ser listada como coautora de este libro por cuantas conversaciones que hemos tenido sobre los asuntos tratados.

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    Dr. Jaime V. Altamirano.

    CAPÍTULO PRIMERO

    EN DÓNDE ESTÁ DIOS

    LA PREGUNTA INICIAL, EN DÓNDE ESTÁ DIOS?

    LA CREACIÓN DEL HOMBRE.

    EL PLAN DE REDENCIÓN.

    NARRADOR:

    A los siete años de edad, James se encontraba jugando con sus juguetes en su cuarto, cerca de su cama. Era en la mañana, cuando la luz del sol entraba a través de su ventana iluminando la cruz que colgaba en el borde de su cama. La luz proyectaba la sombra de la cruz en la pared opuesta, esto llamó la atención del pequeño James, y le inspiró a doblar sus rodillas para persignarse haciendo la señal de la cruz en su frente; pero entonces pensó . . .

    JAMES: (Pensando en voz alta)

    Oh, oh; Eso es solamente la sombra, Dios no ha de estar allí, yo mejor me arrodillaré en frente de la cruz de mi cama . . .

    NARRADOR:

    Mas, ya frente a la cruz, James pensó nuevamente . . .

    JAMES: (Pensando en voz alta)

    Pero esto solamente es una cruz de madera, y yo creo que Dios tampoco esta allí metido . . . Entonces, EN DONDE ESTÁ DIOS? . . . hum, Papi y Mami me han dicho que yo debo siempre amar a Dios y obedecerlo, y que debo orarle todos los días, y pedirle por su ayuda y las cosas que necesitamos . . . pero . . . Yo no puedo ni siquiera verlo, ni se en donde está, ni como se parece en realidad; ni sé cómo hablarle. Lo que sé es que yo le quiero muchísimo a mi Dios y quiero rezarle todos los días para que EL me ayude y me proteja siempre! . . . Mejor le preguntaré a mi papá.

    NARRADOR:

    James fue a ver a su papá que ya había regresado del trabajo, y estaba en la sala, esperando para que la mamá llamara a almorzar. En su camino James iba pensando . . .

    JAMES: (Pensando en voz alta)

    MI papito me ha dicho que Dios es muy bueno con los niños pequeños . . . Oh si, Yo necesito saber en dónde esta Dios . . . Yo quisiera verle y hablarle, y pedirle muchos juguetes . . . Me gustaría tanto jugar con el niño Jesús, él seria como un hermanito mío. Oh si, debe ser súper divertido jugar con él por todos los poderes que él tiene. Además, anoche me dijo mi mamita que la Virgen María, la mamá del niño Jesús es la mujer más hermosa del universo, que es la más buena, que es Nuestra Madre, y que nos ama desde el cielo, nos cuida y nos protege de todo peligro . . . Me encantaría verle a mi mamita del cielo y pedirle que me cuide a mí también . . . Ella tiene que ser tan linda!

    Yo voy a pedirle a mi papito que me diga en dónde esta Dios, y mi mamita del cielo, y como puedo hacer para verles y hablarles.

    NARRADOR:

    Se escucha una música instrumental semi-clásica saliendo de la sala.

    El papá suele escuchar esa música mientras lee o escribe algo, esperando que la mama disponga la mesa para el almuerzo de la familia.

    El papá se encontraba sentado al extremo de la mesa, leyendo el periódico.

    Él es un buen hombre, a él le gusta ayudar a la gente, y frecuentemente se le ve dando consejos a todo el que puede.

    James llegó corriendo hasta la puerta del comedor, pero se detuvo unos pasos antes para entrar despacio, como tratando de no interrumpir lo que su padre estuviera haciendo.

    JAMES:

    Papito, puedo interrumpirte por un minuto? . . . Es que yo quiero hacerte una pregunta.

    NARRADOR:

    Con una ligera sonrisa, el papa puso a un lado los papeles que leía, y le dijo.

    PADRE:

    Claro que si mi hijito, qué es lo quieres saber esta vez? Soy todo oídos para ti . . .

    JAMES:

    Papi, yo quisiera saber en dónde esta Dios? Y cómo es El? Y como le puede uno hablar? . . . Así, yo puedo llamarle a Dios cada vez que yo necesite de su ayuda, . . . y además yo quiero hablarle al Niño Dios y pedirle que juegue conmigo . . . Oh y a mi mamita del cielo, la Virgen María yo quiero verla, saber cómo es ella, y hablarle a ella también . . .

    NARRADOR:

    La expresión del rostro del padre mostraba una mezcla de sorpresa y de reto; pero a la vez, al oír estas preguntas se lleno de complacencia y lo mostró con una sonrisa.

    PADRE:

    Muy buenas preguntas mi hijo; ven siéntate aquí; la verdad es que estoy muy contento de que me hayas hecho estas preguntas.

    Yo también fui un niño aun pequeño cuando a mi me dijeron sobre estos temas acerca de Dios, y ahora es tiempo de pasarte estas enseñanzas y los misterios de nuestra fe, los mismos que aun guían mi vida.

    Mi hijo, lo que acabas de preguntar son prácticamente algunos de los fundamentos básicos de nuestra fe, de nuestra religión, y de nuestra vida . . . Es difícil explicar esto en pocos minutes, o en pocas palabras, pero trataré de ponerlo lo más simple posible para que tú me entiendas hijo mío; mas si algo de lo que yo te diga no lo entiendes, por favor interrúmpeme en cualquier momento, y me lo preguntas. Si? Estamos de acuerdo?

    JAMES

    Sí, papito;

    NARRADOR:

    Con los ojos ansiosos James se sentó en frente de su padre esperando por sus respuestas.

    PADRE:

    Veamos hijo mío . . . tu me has hecho tres preguntas importantes, así que vamos a tomarlas de una en una, OK?

    En primer lugar, en dónde está Dios, y cómo es EL?

    Hijo mío, tú tienes que saber que Dios no tiene forma, así como nosotros la tenemos, ni es semejante a nada en este mundo o en este universo. (Gen 1:26) Nosotros, así como todo el universo, fuimos creados por Dios; de tal modo que nada podría llegar a ser igual que Dios . . . Dios es un ser spiritual que no tiene límites en el espacio; por lo tanto Dios es Infinito. Además, Dios es infinito en el tiempo; por lo cual, Dios no tiene edad; lo quiere también decir que Dios ha existido siempre; o sea que no tiene ni principio ni fin.

    Dios tampoco tiene límites en su poder, en su capacidad, en su conocimiento, en su amor. Es por esto que decimos que Dios es Omnipotente lo cual quiere decir que nada es imposible para El.

    Contestando tu segunda pregunta: En Dónde está Dios? . . . Como te acabo de decir hijo mío, Dios no tiene límites físicos, por lo tanto, Dios está presente en todo lugar; no hay ningún lugar en este mundo en donde que puedas ocultarte de la presencia de Dios.

    Finalmente, tu tercera pregunta: Como comunicarnos con Dios? . . . Como te había mencionado hijo mío, Dios es el espíritu más alto y más perfecto, lo que significa que no hay barreras físicas para llegar a Él. Más tarde te explicaré cómo exactamente puede uno hablarle a Dios, por ahora te digo que simplemente Dios está siempre a nuestro lado, listo a escucharnos . . .

    NARRADOR:

    La expresión en el pequeño rostro de James cambió progresivamente, al parecer algo desconcertado, descontento, o decepcionado, al darse cuenta de que no iba a ser tan fácil el ver y hablar con Dios, como él lo esperaba. Pero poco a poco se fue tornando en admiración y curiosidad acerca de las nuevas cosas que estaba aprendiendo sobre Dios. Al notar esto, el padre quiso seguir con la explicación un poco más allá . . .

    PADRE:

    Déjame decirte algo más hijo mío . . . Nunca olvides que Dios está dentro de nosotros, y de la misma manera, está dentro de todas las demás personas de este mundo . . . es por eso que tu mami y yo siempre te estamos diciendo que sea bueno con los demás niños, que respetes a tus hermanitos, que ames a tus padres, y en general que des amor a todas las personas, ya que todos y cada uno somos como representantes de Dios, que lo llevamos dentro de nosotros mismos . . . Eso incluye también a nuestros enemigos o personas que nos hayan hecho algún daño u ofensa. OK, mi hijo? (Te prometo que encontraremos tiempo para explicarte esto un poco más detalladamente.)

    NARRADOR:

    El padre entonces movió la silla como tratando de estar más cerca de su hijo, y de establecer contacto de ojos, para continuar con una conversación un poco más cercana y profunda, a la vez que se aseguraba de que James le prestara la suficiente atención y estuviera entendiendo lo que iba a decir.

    PADRE:

    Ahora hablemos un poco más sobre la pregunta de cómo tener contacto con Dios? . . . Hijo mío, esta es una pregunta muy importante, y lo que te voy a decir espero que lo graves y lo lleves en tu mente y en tu corazón . . . quizás por el resto de tu vida.

    Muchísima gente, incluso los adultos se hacen la misma pregunta. Es probable que mucha gente piense que es algo muy difícil o casi imposible hablar con Dios y finalmente llegar a verlo o estar en su presencia . . . Mucha gente piensa que Dios es demasiado importante o está tan ocupado como para que se ponga a atendernos a nosotros que somos muy pequeñas criaturas, o a solucionar nuestros pequeños problemas. Pero te diré hijo mio que quienes piensan así están completamente equivocados!

    Déjame decirte algo muy sencillo, pero que a la vez es de suma importancia ya que más adelante en tu vida, esto te ayudará a definir tu relación con Dios.

    LA CREACIÓN:

    Remontémonos hijo mío hacia el comienzo de los tiempos cuando Dios se movía en la obscuridad, cuando nada existía excepto Dios mismo . . . Ahora bien, siendo Dios un Espíritu de infinito amor, decidió crear otros seres similares a El, que tuvieran la capacidad de recibir y de corresponder a su amor . . . y creó así un gran número de ángeles (seres espirituales) en quienes habría de descargar su amor. Estos estaban inicialmente en el paraíso, en donde se movía Dios.

    "El infinito Espíritu de AMOR

    Nos hizo por AMOR

    Nos hizo para AMAR"

    "Dios puso en nosotros un Espíritu similar al suyo,

    Y nos dio la única misión para nuestras vidas,

    De que lo amaramos a El por sobre todas las cosas,

    Y nos amaramos los unos a los otros como a nosotros mismos"

    "Y para que el AMOR sea genuino,

    Nos dio razón libre y libre voluntad,

    Para que escogiéramos con toda libertad

    Obedecer su mandamiento de AMOR o su AMOR rechazar"

    (De la poesía Creación—Libro: Poesía y Espíritu; Jaime V. Altamirano . . . 2005)

    Imaginemos hijo mío, un gran río de amor que se derramaba constante desde Dios hacia todas sus criaturas. Imaginemos que ese río de Amor bajaba del Espíritu de Dios hacia nuestros primeros padres, o sea los primeros seres creados por Dios con alma y espíritu, (a imagen y semejanza de Dios mismo.)

    La Biblia nos dice que tenían directa comunicación entre Dios Padre y sus creaturas. Es probable que también lo podían ver directamente y que tenían algunos poderes espirituales, como El. Si, hijo mío; vuestros primeros padres probablemente eran inmortales (la enfermedad y la muerte vino después como consecuencia de su pecado) y además ellos podía hablar con los animales . . . Es así que justamente un día, tentados por el espíritu del mal (demonio rechazado del paraíso) que les habló tomando la forma de una serpiente, ellos decidieron desobedecer a Dios y romper con el único precepto que se les había impuesto. (Gen. 2-3) Dios les había dicho que podían disfrutar de todo lo que encontraran en el paraíso, y ser los amos de todas las criaturas que habitaban en el, pero que no debían tomar del fruto del árbol de la vida. Mas para que el amor y la obediencia sean genuinos, (no obligados, ni correspondiendo al amor de Dios como robots) quiso Dios mismo darles la oportunidad de escoger libremente entre corresponder al amor de Dios, seguirlo y obedecerlo, o no.

    Por desgracia no todas las criaturas quisieron corresponder al amor del creador. Algunas incluso se rebelaron abiertamente en contra de El; y es así que convertidos en demonios fueron expulsados del paraíso.

    De todo el universo creado, Dios había puesto a sus creaturas humanas en la tierra, para que sean los amos de todo lo creado en este mundo material, pero con el precepto de cumplir el único mandato de no tomar de los frutos del árbol de la vida; mas por desgracia nuestros primeros padres fallaron:

    El Pecado Original, y su Sentencia:

    Cayendo en la tentación del espíritu del mal, nuestros primeros padres desobedecieron a Dios, pensando que podrían llegar a ser iguales a Dios, o superiores a Él. (Gen. 3:6)

    Desde luego que Dios no podía permitir tal desobediencia, arrogancia, vanidad y desafío de sus creaturas quienes trataban de ser iguales o superiores al creador; de modo que, a pesar de que Dios amaba mucho a todas sus creaturas, nosotros mismos, los humanos nos ganamos un castigo, que más bien diríamos, la consecuencia por nuestras faltas.

    Así, además del castigo impuesto a la serpiente, (Que en este caso representaba al espíritu del mal) Dios puso puertas cerradas entre el hombre y su paraíso. En otras palabras, Dios puso a los humanos fuera de su paraíso . . . Nuestros primeros padres y toda su descendencia fuimos condenados a sufrir dolor, enfermedad y muerte. Fuimos también condenados a trabajar para ganarnos el pan, la subsistencia y la satisfacción de nuestras necesidades. (Gen 3:14-24)

    Es importante clarificar que Dios no tenía en sus planes la intención de castigar a sus creaturas a las que tanto amaba, pero si permitió que sufriéramos las consecuencias de nuestras transgresiones al nosotros romper justamente el orden universal de la creación. Tampoco se trata de que Dios estaba tomando venganza ni ira contra sus creaturas (Pues Él nunca se sintió amenazado ni celoso de la acción del hombre; mas simplemente las leyes universales de la creación estaban establecidas para una perfecta armonía, y simplemente el romper estas leyes habría de traer las debidas consecuencias . . . las que muchas veces las tildamos como el castigo

    Afortunadamente Dios aun amo tanto a sus creaturas humanas (recordemos que su amor es infinito) que al mismo tiempo que permitía el castigo (o las consecuencias) El mismo en su infinita misericordia nos concedió su perdón, y propuso un plan de redención para un día liberarnos de nuestra sentencia. (Jn 3:15-17)

    El Plan de Nuestra Redención:

    Desde el comienzo de los tiempos Dios planeó la forma de restablecer la unión y la comunicación entre Dios y sus creaturas humanas . . . Así Dios dijo a la serpiente, (que en este contexto representaba al espíritu del mal) Una mujer vendrá y pisará tu cabeza y tu (la serpiente o el espíritu del mal o el pecado) no podrás morder ni siquiera el talón de su pie (Gen. 14-15) Esto quiere decir que esa mujer será libre de todo pecado, blanca como la nieve, llena de la gracia del espíritu de Dios. (Lc. 1:26)

    Y Dios planeó que en esta mujer, Dios mismo haría su encarnación; y el Espíritu de Dios tomaría forma humana, nacería entre nosotros, y vendría a salvarnos y reabrir las puertas del paraíso.

    En esta forma Dios quiso eliminar la distancia o romper las barreras establecidas entre Dios y los hombres. Dios se inclinó hacia nosotros; ya que nosotros no podíamos regresar al cielo y unirnos en amor al padre Dios, nuestro creador. Dios nació entre nosotros como un niño llamado Jesús quien creció y nos enseñó lo que debíamos hacer para regresar al padre; luego ofrendó su vida en la cruz para redimir nuestras faltas, y después de muerto, resucitó al tercer día, destruyendo así el poder de la muerte, y después de un tiempo de habitar entre nosotros, por su propio poder y gloria ascendió al cielo a reunirse con el Padre Dios con quien son uno solo.

    Lo que es importante es entender que en esta forma, Dios-Jesús—El Cristo destruyó los poderes del espíritu del mal, nos liberó de todos nuestros pecados y nos abrió la oportunidad de unirnos a El nuevamente en dos formas: Durante nuestra vida en este mundo, por medio de la Eucaristía que nos permite recibir en nosotros su cuerpo y su sangre; y un día, después de nuestra muerte volver a reunirnos con Él para siempre en la gloria de Dios Padre en el cielo.

    Esta mujer sin mancha hijo mío, es justamente la Santísima Virgen María la madre de Dios en su naturaleza humana, y que es también nuestra madre del cielo . . . Es a través de ella que Dios hizo posible la redención del género humano; gracias a su aceptación y a su participación en el plan de Dios, el Espíritu de Dios se encarnó en su vientre, y nació entre nosotros como Jesús el Cristo, quien vino a romper las barreras que separaban a Dios y a los hombres. Gracias a este plan de redención, ahora en cualquier tiempo, cualquiera de nosotros, podemos establecer comunicación directa con Dios, pero todo tiene que ser en nombre de o a través de Jesús—Cristo. (Está escrito Nadie llega al Padre si no es a través de mí (Jn 14:6)

    Al declarar nuestra FE en Jesús, aceptar su redención, recibir su perdón, creer en su gloriosa resurrección y en su ascensión al cielo,(La misma que nos abrió las puertas del paraíso) . . . nosotros podemos ahora alcanzar la gloria de Dios Padre.

    Te das cuenta hijo mío de lo importante que es el que entendamos este plan de nuestra salvación?

    Vamos a clarificar esto un poco más; pero, te ruego que pongas mucha atención porque es esencial que tengamos estos conceptos y creencias muy claras en nuestra mente y en nuestro corazón. Así podremos entender el gran amor que Dios nos da, así como nuestra realidad y nuestro rol en este mundo. y nuestra relación con Dios durante esta vida y después de nuestra muerte.

    A pesar de que seamos las más pequeñas a insignificantes creaturas en este vasto universo, al mismo tiempo nosotros somos unos seres muy importantes, ya que de verdad somos parte de una Familia Divina. Nuestra Madre del cielo, es también la madre de Dios. Cada uno de nosotros somos verdaderos hijos(as) de Dios, y hermanos(as) de Jesucristo; y Dios Padre, que desde el cielo nos ama y espera ansiosamente con los brazos abiertos a que regresemos a su casa, y a su amor.

    Regresemos entonces hijo mío, con la imaginación a ese río de AMOR que inicialmente estábamos dibujando . . . Imaginemos cómo desde el principio de la creación, se derramaba AMOR abundantemente desde Dios hacia todas las creaturas que tenían espíritu semejante a Él, y que eran capaces de recibir y corresponder a ese amor . . . (Pues Dios quiso crearnos con las capacidades del alma, y nos dio inteligencia, entendimiento, razón, y libre voluntad . . . Dios quería que nuestro amor naciera de nuestra libre decisión, de nuestra voluntad y de nuestro corazón . . . y quiso establecer fuertes lazos de unión, lazos de amor, con cada uno de nosotros.)

    Desafortunadamente, al romper nosotros la armonía del plan de Dios, con el pecado original de nuestros primeros padres causamos que una gran barrera se estableciera entre Dios y los hombres . . . fuimos expulsados del paraíso

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