LA SOUL FOOD, O COMIDA DEL ALMA, NACÍA PARA HOMENAJEAR A LA VIDA INCLUSO EN LOS PEORES MOMENTOS
Hablar de Tennessee, Alabama, Mississippi o Carolina del Sur es hablar de soul y jazz, de mecedoras en porches coloniales, de luz y sufrimiento, de James Brown y Aretha Franklin o de William Faulkner y su obra . Pero el sur de Estados Unidos esconde también un tesoro gastronómico construido gracias a la aportación de culturas muy diferentes: la Soul Food, o ‘comida del alma’. Una cocina que comenzó a fraguarse cuando los esclavos provenientes de África pisaron tierra norteamericana en el siglo. De esta forma, la comida del alma nacía para homenajear a la vida incluso en los peores momentos.