¿CÓMO ERES DE FOODIE?
En Barcelona, una conocida empresaria del mundo de la comunicación organiza desde hace tiempo encuentros para zurdos todos los martes 13 del año. La idea surgió como protesta contra lala idea de recordar lo demonizado que estaba no ser diestro y celebrar la de los que no usamos con soltura la mano derechaTuve la suerte de asistir a una de esas divertidas reuniones. Consistió en una cena con un grupo de lo más variopinto, de toda edad y condición, en la que la mesa estaba puesta al revés y los platos se servían por el lado derecho. Como fin de fiesta –ya con unas cuantas copas de vino en el cuerpo–, se organizó un concurso para medir el grado de que si cómo abres un paraguas, que si en cuál de los pies te apoyas para saltar a la pata coja, que si con qué mano te santiguas... Gané yo, que soy total. Me ha recordado esta historia la llamada de una amiga para anunciarme su inminente boda, con una confidencia que me ha divertido mucho: ya de niña, no soñaba con el vestido de novia que luciría ese día tan especial, sino con el menú que ofrecería a sus invitados. «Es lo que más ilusión me hace», me confesó emocionada. Pensé de inmediato que merecía estar en la primera posición del de foodiesimpenitentes.
