En la vida diaria la gran mayoria de las personas no invierten tiempo en su trabajo interior, no se ocupan de ellos mismos y entonces es por esto que hay tanto sufrimiento, quejas, miedo, depresion, etc…
 
Probablemente una de las cosas más difíciles de entender del Ho'oponopono, al menos a nivel racional, es que no hay nadie afuera tratando de fastidiarnos o tocarnos las narices. 
 
Nadie nos hace nada, son nuestras memorias proyectadas en los otros las que actúan y las que hacen que nuestra experiencia de los demás sea precisamente la que experimentamos y no otra. 
 
Cuando elegimos limpiar con Ho´oponopono, retiramos nuestras memorias y nuestros juicios y podemos experimentar a las otras personas y situaciones desde la visión que la Divinidad tiene de ellas. Serán la práctica y el tiempo los que, poco a poco, nos irán ayudando a dejar de culpar a los demás y a asumir el cien por ciento de responsabilidad.