Amor Firmado con la Sangre de Jesús

Por Blady Cg

Los científicos aseguran que la tierra se puede medir, estimar la cantidad de agua que hay en los océanos y, calcular la distancia que existe entre la tierra, la luna y el sol, sin embargo el amor de Dios nadie lo puede medir, porque este va mas allá del razonamiento humano, y es obvio que la única vía para tener una idea de su excelso amor, es aceptar el regalo sublime que nos dio, es decir: a su único hijo Jesús, quien ofreció su vida, para morir en la cruz por todos los pecados de la humanidad, y así descubrirás que la única medida de su amor, es su vida misma.

• Idioma: Español
• Editorial: Palibrio
• Fecha de lanzamiento: 19 dic 2023
• ISBN: 9781506552088

Blady Cg

Blady Cg Nació en el estado de Tabasco Mexico Para mas Información escribanos a [e-mail]

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Copyright © 2024 por Blady Cg.

Número de Control de la Biblioteca del Congreso de EE. UU.: 2023923811

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Esta es una obra de ficción. Los nombres, personajes, lugares e incidentes son producto de la imaginación del autor o son usados de manera ficticia, y cualquier parecido con personas reales, vivas o muertas, acontecimientos, o lugares es pura coincidencia.

El texto Bíblico ha sido tomado de la versión Reina-Valera © 1960 Sociedades Bíblicas en América Latina; © renovado 1988 Sociedades Bíblicas Unidas. Utilizado con permiso. Reina-Valera 1960™ es una marca registrada de la American Bible Society, y puede ser utilizada solamente bajo licencia.

Fecha de revisión: 14/12/2023

Palibrio

1663 Liberty Drive, Suite 200

Bloomington, IN 47403

857069

ÍNDICE

Introducción

1 Así comenzó la historia

2 Un Hombre excepcional

3 Pequeña ciudad

4 Camino a Damasco

5 Sublime Maestro

6 El poder de la palabra en el ADN

7 La tormenta

8 La mentira de la evolución

9 El monte Hermón

10 Sublime amor

11 En Belén

12 Él va contigo en la tormenta

13 Un judío converso

14 Vástago de salvación

15 Nombre, sobre todo nombre

16 Jesús es el Señor

17 Getsemaní: entre el pecado y el amor

18 Su amor lo mantuvo en la cruz

19 La Resurrección

20 Él dijo que volvería

21 Una señal de su venida

22 Visita inesperada

23 ¿Y, nosotros…?

Dedicado de todo corazón al que me ha

dado la vida, el perdón y la salvación,

Y me ha sostenido en mis peores batallas,

a mi amado Señor Jesús.

INTRODUCCIÓN

Líderes de renombre han recibido el premio Nobel, ese famoso galardón, cuyo propósito es reconocer sus luchas en pro de la paz. Estos nobles personajes son elevados en un pedestal de oro por los poderes de élite, tan solo por el intento, desde luego infructuoso, de imponer paz a su estilo. A pesar de estas condecoraciones, el mundo sigue desplomándose en pedazos, empujado cada día por el egoísmo individual, pantano de la miseria moral y espiritual.

Una guerra está ocurriendo, los más poderosos se han levantado contra la humanidad, hasta el punto de aplastar y tratar a su especie, como bichos de basurero.

La inmoralidad, el odio, la envidia, y la autodestrucción están en el corazón de nuestra especie; basta documentarse un poco, pues es casi imposible discernir qué es bueno y qué es malo. Todos y cada uno, corren en un afán por encontrar una solución; y la buscan imponiendo sus ideas relativas y absurdas. Hoy en día, cada quien vive como se le antoja, imponiendo su verdad y escribiendo sus propias reglas.

No hay dirección en este mundo lleno de falsedades y depravación moral; puedes hacer, pensar y hablar todo lo que quieras, aunque sea incoherente o perjudique a los demás, y no provocar problema alguno;… pero no pongas en contexto a Jesús, el hombre que cambió la historia, porque entonces, serás socavado y perseguido, como el centro de ataques y de burlas.

A continuación, ponemos en tus manos estas fascinantes páginas, para motivar tu espíritu y tu conciencia, veremos por qué ese hombre llamado por él mismo, El Camino; La Verdad y La Vida, fue motivo de un choque religioso, político y cultural en el mundo. Acompáñanos a un paseo a lomo de camello, desde las arenas del desierto Sirio, hasta las calles de la antigua Jerusalén y sus alrededores; caminemos tras las huellas del Gran Maestro llamado Jesús de Nazaret, El Verbo que se hizo carne, y la Luz que vino para alumbrar a este mundo.

Fue un largo camino desde el cielo, hasta un reseco y cruento madero, bañado con su misma sangre, de cuya sangre brotó el excelso milagro de la salvación. Hoy tenemos la historia viva, historia única…, sublime, pura y consistente que permanece para siempre. Se grabó en 66 libros magistrales que apuntan al mismo propósito. Ahí nos cuentan parte de su vida, su potestad y su autoridad. Es un legado y herencia para los que le creen y le aman, contada de manera sublime en su propio lenguaje.

I

Así comenzó la historia

El viaje es agobiante, ya hace cuatro días que dejamos Tarso, pasando por la frontera Turca; manejamos hasta llegar a la ciudad de Alepo, me acompaña el profesor de filosofía, Ariel Samir, oriundo de Silicia. Nuestra aventura inició con un estilo característico del Medio Oriente, a lomo de camello, a partir del último suburbio de la ciudad. Ahí, sin brecha alguna, nos internamos por las arenas del desierto sirio.

El agua está a punto de agotarse, Ariel tomó el cuero que colgaba del camello y lo agitó…

—¡Oh no! ya no tenemos agua. —Exclamó muy preocupado.

—Sabes en dónde estamos? —Le pregunté.

—Sí. Este lugar lo conozco muy bien, he pasado por aquí durante algunos años a la fiesta de sucot.

—Entonces ya tienes el sendero esculpido en tus sandalias. —Vacilé.

—Así parece. —Replicó Ariel suspirando; se detuvo para mirar al cielo y, sin poder ocultar su admiración, cuestionó:

—¿En qué momento de la historia hizo su aparición como nuestro Salvador?

—Dime.

—Lo recuerdo muy bien, hace 25 años, y parece que fue ayer. Por varios años consecutivos, he viajado desde Tarso a Jerusalén; ahí tengo algunos familiares descendientes de la tribu de Benjamín.

El profesor Ariel Samir recorría con su mirada el árido desierto: de baja estatura, nariz aguzada y ojos castaños, rasgos físicos que le hacen resaltar sus orígenes Judío-romano. Los dos camellos continuaban a paso lento subiendo y bajando las interminables dunas de arena.

—Un día en el año 1980 en la celebración de la Pascua, después de estudiar la Toráh, subí a la fiesta y escuché un escándalo, la avenida principal de Jerusalén estaba atiborrada, no pude pasar con mi auto, me obligaron a orillarme y estacionarlo en el patio de un rabino, las puertas de la ciudad estaban custodiadas con diez soldados en vez de dos, me subí a la azotea de la casa del rabino y, mientras miraba como celebraban; en medio del bullicio, empecé a sentirme muy mal, pero cuando me acerqué un poco más a la calle, sentí que se me salía el alma, ignoro si fue un desmayo, o me quedé dormido y soñaba; pero me di cuenta de que era Él, ¡Jesús!, el hombre que sin haber escrito un libro, y nunca salió en televisión, ya era de amplia fama, inspirando a miles de escritores, artistas y poetas; le llamaban el maestro de Galilea. Por encima de cualquier mortal, él tenía algo muy especial, llevaba una enorme y pesada cruz que rasgaba sus hombros, los soldados le pegaban con crueldad y unas mujeres iban cerca de él, llorando…, ¡nunca vi algo igual!

—Qué gran revelación! —Le interrumpí con asombro.

—Lo mismo pensé. —Contestó Ariel, y agregó:

—Ya había escuchado antes acerca de él, pero en nuestra cultura religiosa no se le da mucha importancia, y…, ¡cuán herrados estamos! Pero desde entonces, empecé a interesarme en conocer más de él; y para ser honesto, solo era una curiosidad, quería saber ¡quién era Jesús!

El profesor Samir se sentó en una piedra y vociferó:

—Esta noche, aquí nos quedaremos a descansar. El Sol se está metiendo y debemos recuperar energía para continuar mañana; si el Señor así lo permite.

Una caravana de beduinos fenicios nos encontró, venían con su rebaño y Ariel les preguntó:

—¿Pueden vendernos agua? —El jefe de la caravana se bajó de su caballo le miró a la cara, y con gesto no muy amistoso. Le espetó con grave voz:

—Tenga amigo, el agua no se vende, es sagrada. —El profesor la tomó, y llenó su