El Dinero puede Sanar

Por Siegfried E Finser

Explorando las maravillas de todo tipo de transacción monetaria, Siegfried Finser revela cómo todas las transacciones interactúan con la psique humana. Tras haber evolucionado a lo largo de los siglos, el dinero ha dejado de ser un objeto para convertirse en un "viento mundial" de circulación, que se mueve a distintas velocidades y consigue una miríada de resultados. Nuestras intenciones humanas confieren al dinero sus cualidades y determinan su velocidad y su efecto en las personas de todo el mundo. De objeto a puro movimiento, el dinero está ahora preparado para servir a nuestros objetivos más elevados. Al igual que hemos nutrido al dinero en su evolución, ahora debemos asumir la responsabilidad de dirigir su gran potencial para transformar la vida social, aportando así sanación al mundo. El autor pone a RSF Social Finance como ejemplo de organización que trabaja para sanar nuestra vida social. El dinero puede curar muestra un camino más allá del dinero como "una cosa que se adquiere" hacia el dinero como "movimiento" entre las almas humanas. Nunca volverás a ver el dinero de la misma manera.

• Idioma: Español
• Editorial: Stay True Organic
• Fecha de lanzamiento: 10 jul 2023
• ISBN: 9789878899459

Siegfried E Finser

Siegfried Finser, antiguo maestro de escuela Waldorf, ha dirigido una división de Xerox y fue Director de Desarrollo Ejecutivo a nivel mundial para ITT. Ha sido consultor de muchas grandes empresas y presidente de la Threefold Educational Foundation, tesorero de la Anthroposophical Society in America y fundador de la RSF Social Finance (Fundación Rudolf Steiner), de cuyo consejo de administración sigue formando parte. Es licenciado por la Universidad Rutgers y máster en Psicología Educativa por la Universidad de Nueva York. Suele dar conferencias sobre la naturaleza del dinero y el potencial curativo de las transacciones monetarias. El Sr. Finser vive en Cape Cod, Massachusetts, y Delray Beach, Florida, y ahora en Mill Valley, California, con su esposa desde hace cincuenta y un años, profesora y euritmista terapéutica.

Vista previa del libro

Prólogo a la Edición en Castellano

La primera impresión que he tenido al terminar el libro de Siegfried E. Finser, es que su lectura ya es sanadora. La segunda impresión ha sido: este libro es imprescindible. Me explicaré...

Este libro se publicó originalmente en inglés en USA en el año 2006, y su llamada al despertar de la conciencia en el uso del dinero nos aparece ahora como premonitoria de la terrible crisis financiera que estalló en todo el mundo dos años después, y del caos social y económico que desde entonces se han instalado en nuestras sociedades. En pocos meses, billones de dólares (trillones en el lenguaje de algunos países como USA) desaparecieron de los mercados, dejando a millones de personas sin ahorros, y en muchos casos sin su vivienda.

Toda mi vida profesional (48 años) ha estado vinculada a las finanzas, los primeros treinta años a un banco tradicional, en el que aprendí el oficio, y el resto desarrollando la Banca Ética, primero en España, y ahora en Latinoamérica. Cuando estalló la crisis de 2008, muchas personas me preguntaban: ¿cómo es posible que el dinero desaparezca? ¿Pero que han hecho los bancos con nuestro dinero? Era la primera vez que millones de personas se preguntaban sobre su dinero. Una vez más, el dolor había ayudado a despertar la conciencia. Por supuesto, yo no podía alegrarme de ello, porque a mí me educaron para la compasión con el dolor ajeno. Y cuando digo compasión, no me refiero a lástima, sino a una verdadera empatía con el proceso anímico del otro ser humano. Pero, ingenuamente, se me despertó una cierta esperanza de que, por fin, las personas comenzarían a despertar la conciencia sobre el uso del dinero.

En los treinta años de profesional en un banco, nunca jamás ningún cliente me preguntó, ni a mí ni a ningún conocido mío bancario (y conozco a muchos): ¿si deposito mi dinero en el banco, ustedes qué harán con él? O dicho de otra manera: ¿A quién sirve mi dinero? Si las personas hubieran tenido la oportunidad de leer el libro de Finser con antelación, y hubieran permitido que sus reflexiones y ejemplos entraran en sus almas, quizás no se habría llegado a esa crisis, o quizás no habría sido tan destructiva. Pero si he utilizado la palabra ingenuamente, es porque el despertar de la conciencia duró poco tiempo, y tristemente se volvió al modelo especulativo. Es difícil hablar con precisión, porque las fuentes de información difieren unas de otras, pero creo que puedo afirmar que más del 99% del dinero que cada día se mueve en el mundo, es pura especulación, no se invierte en economía real. Y, por otro lado, existen miles de proyectos en el mundo, que ayudarían a reducir las desigualdades sociales, a crear riqueza en el mundo de la educación y la cultura, y a combatir el proceso de cambio climático y de destrucción de la Tierra, pero que no pueden desarrollarse porque no encuentran financiación, o no encuentran financiación adecuada. La especulación se ha convertido en un arma de destrucción masiva. Pero lo realmente grave es que millones de personas están participando de ese modelo especulativo, y no lo saben.

Lo mismo sucede con nuestro consumo, en la mayoría de los casos no es consciente. Los motivos que mueven a comprar un producto y no otro, pocas veces están basados en un conocimiento real de las consecuencias que van a tener nuestras decisiones. Hablamos de productos baratos, y esta palabra barato es una falsedad, oculta una trágica realidad. Las cosas tienen un valor, y cuando pagamos por debajo de ese valor, alguien lo pagará caro por nosotros, en nuestro país, o en un país lejano que quizás ni sabemos ubicar en el mapa.

Precisamente el libro de Finser nos lleva a un despertar progresivo de la conciencia de ¿qué es el dinero? ¿De qué diferentes formas puede usarse? Y, sobre todo, cuáles son las consecuencias de mis decisiones, no solo para mí, sino también para las otras personas y para la Tierra. Por eso podemos decir que se trata de un libro de autoconocimiento y de transformación personal, un autoconocimiento a través de nuestra relación con el dinero y de las fuerzas subconscientes que actúan en él.

Por eso es tan adecuado el título del libro, porque realmente el autoconocimiento es un camino de sanación personal, y porque el uso consciente del dinero supone una sanación social. Sería maravilloso que este libro se utilizara en las escuelas -quizás al principio en las Escuelas Waldorf-Steiner, por afinidad de ideas- como trabajo conjunto entre padres y profesores, y luego con los alumnos adolescentes. He colaborado, y sigo colaborando, con muchas Escuelas Waldorf de Latinoamérica y de Europa, y siempre me encuentro con problemas similares. Y resultan difíciles de afrontar, porque muchas veces se buscan soluciones mágicas, una fórmula económica que lo resuelva todo, a alguien que lo resuelva. Y cuando me piden ayuda, y les digo que solo les puedo ayudar si están dispuestos a conocerse a sí mismos, y a emprender un camino de transformación personal y social, me doy cuenta de que muchas veces se sienten defraudados.

Este maravilloso libro de Finser nos muestra también el proceso evolutivo de la humanidad, y cómo los Dioses se han ido retirando para finalmente dejarnos solos en nuestra libertad de decisión. Ellos están y seguirán ayudando, pero nunca previamente, sino a partir de nuestro compromiso y de nuestras acciones. El libro lo muestra muy claro, ahora nos corresponde a nosotros solucionar los problemas, a cada uno de nosotros. Tampoco podemos seguir esperando a un Estado patriarcal que nos resuelva los problemas, porque ni puede hacerlo ni le corresponde hacerlo.

Finalmente, es muy interesante conocer la historia y el desarrollo de la Fundación Rudolf Steiner, porque nos muestra cómo cuando ponemos nuestras capacidades al servicio de la humanidad, y somos capaces de trabajar en comunidad co-creativa, aparecen soluciones a los problemas que tenemos hoy planteados. Y si vemos cómo han ido surgiendo otras iniciativas sociales con la misma inspiración que la FRS, podemos albergar cierta esperanza en el futuro. Debemos ser optimistas, pero no podemos ser ingenuos ni excesivamente confiados. Falta mucho por hacer, y puede hacerse, pero tenemos que hacerlo nosotros. Y lo que hoy no hagamos con iniciativa libre por amor, deberemos aprenderlo en el futuro con dolor.

Agradezco personalmente al autor la claridad y sentido pedagógico de todo el libro, y me comprometo a difundirlo para contribuir a sanar nuestro mundo.

Joan Antoni Melé Cartañá

Presidente de la Fundación Dinero y Conciencia

Promotor de la Banca Ética Latinoamericana

Prefacio

Este libro es algo más que un libro sobre el dinero; es un notable ejemplo de cómo la vida de autodesarrollo y práctica del autor se revela a través de este libro. En muchos sentidos, es una autobiografía - no del tipo habitual. Es una autobiografía de pensamiento, de acción y de la voluntad. Demuestra la gran capacidad del espíritu humano para lidiar con el fenómeno que el mundo nos presenta en una vida determinada, y para transformarlo a través de las capacidades individuales de pensamiento, sentimiento y voluntad. Este libro es un homenaje especial a la sabiduría inherente al ser humano (Antroposofía). Rudolf Steiner acuñó la palabra Antroposofía a principios del siglo XX. Ahora, casi cien años después de su muerte, Siegfried Finser nos ofrece este extraordinario libro que se nutre de una vida impregnada y transformada por la aplicación de las ideas centrales que Steiner desarrolló.

La publicación de este libro, creemos, arrojará mucha luz sobre el poder curativo del dinero para la humanidad. Explora las maravillas de una variedad de transacciones monetarias a través de ejemplos reales con facilidad reconocibles por todos nosotros. Siegfried se centra en especial en el mundo de las transacciones y cómo éstas constituyen un vehículo de transformación. Este libro muestra cómo la humanidad está experimentando una evolución de la conciencia y puede asumir más responsabilidad sobre cómo se mueve el dinero en nuestro mundo.

Mark A. Finser, presidente y director general, FRS

Lynne Twist, recaudadora de fondos y activista mundial,

autora de The Soul of Money: Reclaiming the Wealth of Our Inner Resources.

Introducción

E stamos en una época de creciente interés por la naturaleza y el carácter de lo que llamamos dinero. En su mayoría, los libros disponibles en la actualidad describen las cualidades de la moneda o adoptan un punto de vista sistémico. Algunos libros nos animan a adoptar una visión moral y proponen normas éticas de suficiencia, o defienden la necesidad de monedas alternativas como las millas de viajero frecuente y los dólares del tiempo.(concepto de divisa en la que se intercambia tiempo o actividades) ¹ Son en especial interesantes los escritos de Edgar S. Cahn, fundador de los bancos del tiempo y los dólares-tiempo, así como de Bernard Lietaer, que ha hecho que muchos reconsideren sus relaciones personales con el dinero mediante su definición del dinero como un acuerdo entre partes. Sin duda, le recomendamos que lea El Alma del Dinero, de Lynn Twist, por su pasión y su persuasivo argumento a favor de una forma diferente de tratar el dinero.

La opinión expresada en El Dinero puede Sanar, no entra en conflicto con lo descripto en otros libros, sino que se deriva de un punto sencillo: la magia en la transacción. Transacción no es una palabra del todo adecuada, porque implica una corriente unidireccional. Si así fuera, tendríamos que decir que cada evento de este tipo implica dos transacciones; vender sería una transacción, comprar otra. He comprobado que no es así. La compra nunca se produce sin la venta, ni la venta se produce sin la compra. No son transacciones separadas, sino que juntas constituyen una sola transacción, y ahí radica la maravilla de este acontecimiento puramente humano. Ninguna otra criatura de la naturaleza realiza una transacción semejante. Es algo en exclusiva humano, ya que surgió de la vida social y comunitaria de la humanidad.

Mientras que los animales se cuidan unos a otros y defienden a sus crías, no crean transacciones mutuas para obtener sus necesidades, y es cierto que no piden prestado ni dan en la forma en que estoy usando los términos. Los animales no tienen la capacidad de inventar o utilizar el dinero. Solo nosotros, de entre todas las criaturas de la naturaleza, hemos creado el dinero como medio social aceptado para obtener lo que necesitamos y ayudarnos en forma mutua a conseguir objetivos.

Por lo tanto, he adoptado el punto de vista de que, puesto que todas las transacciones son en exclusiva humanas, nos debemos a nosotros mismos impregnar cada transacción con nuestra plena comprensión e intenciones conscientes. Debemos comprender lo que estamos haciendo, cómo las ideas, los sentimientos y la naturaleza de nuestra voluntad en cada transacción financiera afectan al orden mundial y a nuestro futuro social. A través de cada transacción alteramos nuestra vida personal y la de todos los futuros seres humanos sobre la faz de la Tierra. Lo que llevamos en nuestra conciencia en cada transacción tiene el potencial de cambiar el mundo. Este libro es un ejercicio de concientización que nos anima a tomar las medidas oportunas.

A finales de los años setenta, me pidieron que fuera tesorero de la Sociedad Antroposófica en Estados Unidos, una rama de la Sociedad Antroposófica General fundada e inspirada por Rudolf Steiner, que inauguró las escuelas Waldorf, la agricultura biodinámica, una serie de terapias, incluida la medicina antroposófica ampliada y el arte de la euritmia, y muchas otras actividades que surgieron de lo que él denominó ciencia espiritual, la introducción del individualismo ético como movimiento mundial. Inherente al individualismo ético es que todos los seres humanos tienen la capacidad en desarrollo de transformar lo que aún no es perfecto en ellos mismos y en el mundo. En otras palabras, la individualidad que hay en cada uno de nosotros está creciendo y asumirá cada vez más la responsabilidad de la suerte de la humanidad y de la Tierra.

Como parte de mi servicio como tesorero, me vi obligado a interesarme en profundidad por la naturaleza del dinero y su movimiento. Con gran interés, estudié la serie de conferencias de Steiner publicadas como Curso de Economía, en las que hace sorprendentes revelaciones sobre la naturaleza del dinero. Empecé a darme cuenta de que el dinero necesita nuestra atención tanto como la filosofía, la educación, la agricultura, las artes y las ciencias. Mi relación personal con el dinero cambió cuando reconocí que nuestro sistema monetario es un reflejo del ser humano, y que a medida que el ser humano se desarrolla también lo hará nuestra conciencia sobre el dinero. Así, cada transacción en la que estoy involucrado tiene un nuevo significado y un nuevo potencial al saber que es una extensión de mí mismo y que expresa hacia fuera cuáles son mis intenciones.

En 1979 me pidieron que participara en traer a tres banqueros del Gemeinschafts Bank de Bochum, Alemania, para una breve gira por los EE.UU. Ernst Barkoff, Gisela Reuter y Rolf Kerler visitaron nueve ciudades y asistieron a muchas reuniones y debates sobre el dinero, y Ernst Barkoff dio una increíble serie de conferencias. Describió lo que había descubierto sobre la naturaleza del dinero y explicó cómo es una expresión exotérica de lo que vive en la vida anímica de la humanidad.

Mi experiencia con Ernst Barkoff se describe con más detalle en la sección 7. A pesar de mi limitado vocabulario alemán, esa experiencia me permitió traducir todo lo que Barkoff tenía que decir, porque aprendí una nueva forma de escuchar; me convertí en un niño pequeño que absorbe todo sin filtros. Por mis años de profesor, sé que todos los niños pequeños tienen esa capacidad de interiorizar las experiencias de la vida sin filtros.

De qué otra manera podríamos aprender a gatear, a estar de pie, a caminar, a hablar y a pensar, si no fuera por la imitación de lo que se experimenta en la sociedad humana. En aquel momento no lo sabía, pero hubo un beneficio añadido cuando volví a caer en esa conciencia de niño pequeño y absorbí todo lo que Ernst Barkoff vertió en sus palabras. En mi estado de indefensión, había absorbido ideas e impulsos espirituales de este gran hombre que se quedaron en mí como una especie de tesoro individualizado al que llamar y consultar en los siguientes años. Me sirvió para muchas conferencias y conversaciones con clientes. También me dio el valor y la visión necesaria para fundar la Fundación Rudolf Steiner.

En 1984, encontré colaboradores que, juntos, desarrollaríamos la nueva Fundación Rudolf Steiner, conocida ahora como FRS, una organización de servicios financieros que se esfuerza por aportar alma y espíritu a las transacciones financieras. Queríamos cambiar el modo en que el mundo trabaja con el dinero, el modo en que los seres humanos piensan en el dinero, y las cualidades del alma que los seres humanos infunden en el movimiento del dinero, para que éste pueda convertirse realmente en la sangre vital purificada de la sociedad humana. Sección 7 de este libro describe la historia de RSF y su misión en relación con el movimiento de dinero.

Dado que la mayoría de las transacciones implican a todo el ser humano -pensamiento, sentimiento y voluntad-, a lo largo del libro describo situaciones de la vida para que las consideremos y penetremos con nuestro entendimiento. Me interesa menos la teoría monetaria o los sistemas económicos que la anatomía de este maravilloso acontecimiento que llamamos transacción. En lugar de postular una teoría y construir un experimento para demostrarla o refutarla, mi método consiste en extraer la teoría del suceso. Por lo tanto, encontrará este libro compuesto por historias y preguntas que provocar la comprensión a través de los propios acontecimientos.

Un profesor experimentado de niños pequeños sabe que un buen ejemplo es mil veces más valioso que una supuesta instrucción. Mi profesor de matemáticas en el instituto nunca respondía a una pregunta. Siempre empezaba con: Bueno, ahora, ¿cómo haríamos para trabajar en esto; qué tiene sentido hacer primero?. Nos demostraba un pensamiento claro, porque no estaba tan interesado en obtener la respuesta al problema. Nos permitía evolucionar nuestra capacidad de pensamiento para que estuviera disponible para todos los problemas que pudiéramos enfrentar en la vida.

Por ejemplo, cuando miro un arce puedo observar muchas cosas, como los colores y las formas. Sin embargo, para dar sentido a lo que veo, tengo que ir más allá de mis percepciones para llegar a las ideas que viven en ellas. Las hojas tienen una forma plana con cinco puntas de distintos tamaños y están recubiertas de venas por las que se mueve la savia y sostiene la forma. ¿Veo realmente las cinco puntas, las venas y la savia viva? No, no lo veo. Esas partes de mi experiencia no me las dan mis sentidos. Mis sentidos no pueden contar, pero yo sí porque tengo el concepto de los números y sus interrelaciones. Voy más allá de lo que puedo observar y toco los límites del espíritu: lo que vive detrás de lo perceptible por los sentidos y todo lo que puedo revelar a través de mi capacidad de pensar. Mi profesor de matemáticas revelaba los límites del espíritu cuando me enseñaba a pensar.

No soy economista, ni contable. Tampoco soy un místico ni un fiel creyente en lo que hoy la mayoría llama espíritu. Defino el espíritu como el atributo invisible de los fenómenos visibles que puede experimentarse e identificarse mediante los dones del pensamiento, el sentimiento y la voluntad humana. En otras palabras, el espíritu está en todas partes, oculto en la materia, para ser descubierto por nosotros a través del pensamiento. No solo busco el conocimiento, sino también la sabiduría basada en la experiencia y no en la teoría. Soy solo, como todos, una persona que ha tratado con el dinero durante toda su vida e incluso ha tenido que ayudar a otros a tratar con el dinero en el contexto de sus situaciones vitales. Como tesorero de la Sociedad Antroposófica, tuve que aprender lo que implica el dinero de las organizaciones. A menudo he tenido que trabajar con clientes en la elaboración de presupuestos y proyecciones. La relación de cada cliente con el dinero es única, y mi consejo necesitaba toda la imaginación que pudiera reunir.

La mayor parte de este libro procede de las numerosas conferencias y artículos que he dado y escrito durante los últimos veintiún años. Esta es la primera oportunidad que he tenido de organizarlos todos en una sola declaración coherente sobre el significado espiritual del dinero. Reconozco la gran deuda que tengo con Ernst Barkoff por mucho de lo que tengo que decir. También debo gran parte de mi investigación personal y mis conocimientos al gran pensador, maestro y artista de lo invisible, Rudolf Steiner.

A Steiner le debo no solo muchas de las ideas que me inspiran si no la visión del mundo que me ha dado un sentido de misión y propósito. Gracias a él y a sus numerosas conferencias y libros traducidos, aprendí por primera vez el concepto del triple ser humano: el aspecto nervioso y sensorial, el aspecto respiratorio y rítmico circulatorio, y el sistema metabólico y de las extremidades. También me ayudó a aclarar las diferencias entre el pensamiento, el sentimiento y la voluntad. La necesidad de distinguir entre el cuerpo, el alma y el espíritu también me llegó a través de la lectura de sus numerosas conferencias y libros.

Su primer libro, La Filosofía de la libertad, me llevó en forma sistemática por un camino de investigación que no solo aclaraba muchas otras filosofías, sino que las situaba en un contexto de desarrollo de la conciencia del ser humano.² Pasé tres años con un grupo de jóvenes estudiando ese libro, reuniéndonos una vez a la semana para argumentar y discutir los distintos puntos. Resultó ser un tiempo bien empleado que me ayudó a formar los cimientos de mi visión del mundo.

Al final, a través de las descripciones de Steiner sobre el proceso evolutivo del ser humano, comencé a comprender quién era yo. Entonces pude entablar una conversación de por vida con el único ser angelical de las jerarquías espirituales que había elegido acompañar mi lucha humana con sabiduría y bondad de propósito.

Tengo una gran gratitud por todo lo que aparece en mi biografía y por la ayuda que recibí en todo momento de familiares, amigos y profesores. Debo mucho a mi esposa Ruth, cuyo amor y apoyo inquebrantables me ayudaron a expresarme con palabras y acciones. Ella fue en todo momento un ejemplo vivo de buen ser humano. También estoy agradecido a mis dos hijos; Torin Finser, con su erudita penetración en el pensamiento de Rudolf Steiner y sus imaginativas descripciones, me dio el valor para escribir este libro a través del ejemplo de sus propios y numerosos volúmenes. Mark Finser unió su vida a la de FRS y aportó sus increíbles dotes sociales a un organismo que yo solo podía empezar pero no completar. Su profunda comprensión del elemento vida y alma que emana de su conexión con el espíritu de nuestro tiempo me aportó infinita felicidad y confianza en el crecimiento y desarrollo de FRS.

También quiero dar las gracias a los numerosos profesores de la Rudolf Steiner School y de High Mowing School por haberme dado una base sobre la que he podido construir. Son demasiados como para mencionarlos a todos, pero Beulah Emmet, la fundadora de la High Mowing School, creó un lugar en el universo donde alguien como yo podía pasar de la infancia a la juventud con las capacidades intactas y listas para aplicarlas a lo que la vida me trajera. Este libro y todo lo que contiene surge de una inmensa gratitud por la biografía que pude crear en compañía de tan benévolos seres humanos y otros seres. Es la crónica del camino que tomé, en forma intelectual y emocional, para acabar conectando el dinero con un impulso curativo.

El Dinero puede Sanar, es una llamada a los médicos sociales de todas las razas, religión, nación, género y persuasión personal que deseen sanar nuestra vida social. Es una llamada a los que quieran dejar que sus fuerzas fluyan en el ámbito de la realidad de manera que afecten de forma positiva a nuestra circulación monetaria. Al igual que nuestro cuerpo se sostiene y se cura a través de la maravillosa circulación de nuestra sangre, la circulación llamada dinero puede sanar nuestra vida social. La circulación de la sangre en nuestro cuerpo se renueva todo el tiempo a través del oxígeno, que se extrae del ancho mundo y se integra en el flujo de la sangre tocando todos los aspectos de nuestro ser. La circulación del dinero se renueva de continuo a través de la penetración de la iniciativa espiritual humana y de las intenciones sociales en él también.

Como el corazón, sede del sentimiento y del amor, nos da a cada uno de nosotros el motivo para vivir, por lo que las fuerzas del amor entran en la corriente del tiempo a través del ser humano para hacer evolucionar nuestro universo lleno de sabiduría en un universo impregnado de amor.

La sociedad humana puede convertirse en un organismo sensible a las mejores cualidades de la naturaleza humana. Además de las historias y los ejemplos y de la información básica sobre la forma en que se mueve el dinero, en este libro encontrarás unos sencillos ejercicios que pueden transformar a cada uno de nosotros y transformar la forma en que el dinero se mueve y afecta al mundo. Animo a todos los que lean este libro a emprender la tarea humana de sanar el mundo a través del dinero.

Sección Uno

Imaginación y Dinero

1. Conocimiento Imaginativo

U samos dinero todos los días y asumimos con bastante naturalidad que sabemos que es. ¿Qué podemos aprender adentrándonos en sus significados más profundos? Como seres humanos estamos cambiando todo el tiempo a través de nuestras experiencias, nuestros sentimientos y el contenido de nuestros pensamientos. Todos nosotros estamos en un proceso de desarrollo. Dado que el dinero está en forma íntima relacionado con la vida social humana y es un invento humano que no se encuentra en la naturaleza, ¿es posible que el dinero también esté en proceso de desarrollo? Si el dinero no es una materia mecánica o fija, sino que está ligado en su propia naturaleza a lo que es el ser humano, entonces también puede imitar la naturaleza humana en su funcionamiento en sociedad. Debido a que