Los ángeles son particularmente sensibles a los ambientes agradables, la música suave y los aromas delicados. Por lo tanto, todo ambiente que reúna estas características resultará propicio para alojarlos. Sin embargo, su presencia es más segura cuando se les destina un lugar específico en el hogar. El sólo hecho de preparar ese lugar pone de relieve la importancia que tiene nosotros la presencia del ángel y constituye un entrenamiento espiritual previo al encuentro.
Recordá que todos los magos angélicos de la historia construyeron su altar, porque dicha construcción constituye el primer paso del ritual. Por lo general, se trataba de un círculo mágico donde se colocaban los objetos y los nombres sagrados. Si no se dispone de un sitio en el que te resulte posible dejar el altar armado, podés levantarlo cada vez que desees comunicarte con
