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Diario de una Mujer Redimida: Relatos y enseñanzas de gracia y fe
Diario de una Mujer Redimida: Relatos y enseñanzas de gracia y fe
Diario de una Mujer Redimida: Relatos y enseñanzas de gracia y fe
Libro electrónico141 páginas1 hora

Diario de una Mujer Redimida: Relatos y enseñanzas de gracia y fe

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Información de este libro electrónico

Tu vida no es el resultado de la suerte o la casualidad, tu vida fue creada y pensada por Dios en la eternidad (Isaias 42:2). Vinistes de la eternidad a posicionarte en esta experiencia humana carnal para expresar la grandeza y la Gloria de Dios que vive dentro de ti. Por eso cargas un espíritu diferente y esa fuerza espiritual es la que te está impulsando a querer mejorar y superarte.

Te felicito por llegar hasta aquí. Te doy gracias por no rendirte. Celebro tus triunfos y doy gracias a Dios por los retos y desafíos que te han detenido en el camino pero te ayudaron a desafiarte a ti misma y revelar tu verdadera esencia de hija de Dios.

Gracias por caminar este viaje junto a mi. Las enseñanzas de este diario siempre estarán para ti, para que las repases y las compartas también con otras personas.
IdiomaEspañol
EditorialBookBaby
Fecha de lanzamiento13 nov 2022
ISBN9789589011089
Diario de una Mujer Redimida: Relatos y enseñanzas de gracia y fe

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    Vista previa del libro

    Diario de una Mujer Redimida - Normarelis Figueroa Font

    Introducción

    No se supone que estuviera aquí.

    «Ahora permanecen la fe, la esperanza y el amor, estos tres, pero el mayor de ellos es el amor» (1 Corintios 13:13).

    Este es uno de mis versos favoritos de la Biblia; sin embargo, fue apenas hace algunos años atrás que pude entender la diferencia que la fuerza del amor puede hacer en la vida de una persona. Era el año 1971, cuando yo tenía tan solo un año de edad. En aquel momento me encontraba postrada en una cama de hospital, luchando entre la vida y la muerte a causa de una fiebre muy alta producida por una enfermedad llamada meningitis.

    La meningitis, explicada en arroz y habichuelas (soy boricua pa’ que tú lo sepas), es una inflamación severa de las membranas que rodean el cerebro y que afecta tanto el sistema nervioso como el cordón espinal de la persona. Entre las secuelas más comunes que permanecen en las personas que han padecido esta enfermedad se encuentran la parálisis, la falta del habla y la incapacidad de coordinar de manera efectiva las ideas. Todo esto que estoy compartiendo en realidad me lo contó mi mamá cuando yo tenía unos treinta años, a raíz de un episodio que experimenté llamado usualmente oscuridad o bloqueo mental; entonces sencillamente todo se puso negro a mi alrededor y por varios minutos no podía ver. Gracias a Dios, luego de hacerme varios estudios médicos se concluyó que todo fue causa del estrés y afortunadamente pude recuperarme con rapidez.

    A pesar de estos padecimientos, nunca fui una niña sobreprotegida, ni recibí de mi familia un trato especial por haber estado marcada por esta enfermedad. Por el contrario, el amor, el cariño y la aceptación que me brindaron las personas más cercanas a mí, me dieron alas para volar, de modo que hoy gracias a esa fuerza maravillosa del amor y por la gracia de mi Dios pastoreo junto a mi esposo, el Apóstol Rodolfo Font, una hermosa congregación en Houston, Texas. Soy autora de libros de desarrollo personal y he tenido la oportunidad de ofrecer mis talleres y enseñanzas por medio de la Escuela de Diseño Redimido de Mujer, que fundamos en el año 2009.

    Por supuesto, he tenido que esforzarme y enfocarme el doble, pero no me avergüenzo por ello; por el contrario, hoy te puedo decir que la lección más grande que he aprendido es que sin importar la circunstancia o la situación por la que hoy puedas estar pasando, el Amor siempre será la respuesta y la solución para ti.

    Las experiencias y las lecciones que hemos enseñado durante todos estos años son las que deseo compartir contigo a través de este libro que tienes en tus manos.

    Tu vida no es el resultado de la suerte o de la casualidad; tu vida fue creada y pensada por Dios en la eternidad (Isaías 42:2). Viniste de la eternidad a posicionarte en esta experiencia humana carnal con el fin de expresar la grandeza y la Gloria de Dios que vive dentro de ti. Por esa razón, cargas un espíritu diferente y esa fuerza espiritual es la que te está impulsando a querer mejorar y superarte.

    Te felicito por llegar hasta aquí. Te doy gracias por no rendirte. Celebro tus triunfos y doy gracias a Dios por los retos y desafíos que te han detenido en el camino, pero que te ayudaron a desafiarte a ti misma y a revelar tu verdadera esencia de hija de Dios.

    Gracias por recorrer este viaje junto a mí. Las enseñanzas de este diario siempre estarán para ti, para que las repases y las compartas también con otras personas.

    Mientras participaba de uno de nuestros grupos de "mentes maestras", una joven se tornó a mí y me dijo: «Pastora, me gusta estar aquí porque tú me das una perspectiva diferente de cómo mirar mi vida». Eso es precisamente lo que deseo que ocurra en tu vida mientras lees este libro: que tu visión, tu perspectiva, tu manera de ver la vida se expanda. Aspiro a que puedas mirar más allá de lo que pueda estar frente a ti; que puedas reconocer oportunidades en donde otros solo miran problemas; que puedas sentirte conectada con tu verdadero ser que es tu espíritu, y que, sobre todo, puedas reconocer a Dios en todo lo que ocurre para ti.

    Eres amada, eres redimida.

    - 1 -

    ¿Por qué Diseño Redimido de Mujer?

    Redimir es una palabra que procede del vocablo latino redimĕre, verbo que permite referirse a la acción de ‘liberar a alguien de un sufrimiento o de un castigo’; también puede utilizarse para hacer referencia al hecho de ‘adquirir o recuperar algo que se había perdido o se encontraba embargado’.

    Cuando se acerca el final de año, mi esposo y yo tenemos la costumbre de retirarnos por varios días para, en primer lugar, repasar los logros, también los retos que todavía debemos enfrentar y, finalmente, discutir las metas por alcanzar.

    Durante uno de estos tiempos de reposo le mencioné que a mí me parecía que había vivido muchas vidas. Sé que es gracioso, pero ¿no te ha pasado que de repente observas hacia atrás y miras tu vida como si fuera una película? Son experiencias que hasta el día de hoy te generan esta pregunta: ¿y cómo llegué aquí? Pues una de esas películas de mi vida fue titulada la Divorciada. Desde ya te puedo decir que es una etiqueta muy fea y dolorosa; no obstante, fue una etapa de mi vida que me llevó a los rincones más profundos de mi ser.

    Pasé varios meses enterrada en un pozo oscuro en donde nada me hacía sentido, pues escuchaba voces a lo lejos, pero no lograba entender lo que decían. No voy a negar que en aquel momento la sensación de haberlo perdido todo me puso en un lugar del cual yo pensaba que nunca iba a poder salir. Sin embargo, un día, en medio de mi locura y desasosiego, escuché una voz que me dijo: «Si te vuelves loca, nunca vas a poder ver, crecer y desarrollar a tus hijos. Te vamos a meter a un manicomio y ahí te veremos una vez a la semana. ¿Es eso lo que quieres para tu vida?».

    Mi amiga hermosa, esas palabras retumbaron en todo mi ser, como una bofetada o un puño directo al hígado. Pero aquel día, después de haber tocado fondo, tomé el impulso necesario para salir a la superficie y desde entonces comencé mi propio viaje a la recuperación.

    Después de la tormenta viene la calma

    Un año después de toda esta experiencia, me encontraba comenzando a pastorear una hermosa iglesia en Dallas, junto a mi esposo, y comencé a escuchar las historias y los conflictos de las familias que pastoreábamos; en especial me acerqué a las mujeres y recordé en ese momento las palabras que una anciana de mi iglesia en Puerto Rico me había profetizado años antes, durante el divorcio: «Normarelis, lo que estás pasando ahora tal vez no lo entiendes, pero algo yo sé: Dios nunca desperdicia ninguna de nuestras experiencias y Él siempre buscará la manera de cumplir Su propósito en ti».

    En ese momento entendí que todo lo que había atravesado era tan solo un entrenamiento y una capacitación personal que me ayudaría a entender y a ayudar a estas mujeres.

    Diseño Redimido de Mujer nació en Dallas. Hasta el día de hoy, por la gracia de Dios, hemos visto a miles de mujeres redimidas, transformadas de orugas a mariposas.

    Eres amada, eres redimida.

    Mis notas

    - 2 -

    El Diseño

    ¿Te has preguntado alguna vez cuál fue el diseño que Dios le dio a la mujer?, ¿Cuál es el propósito de nuestra creación? ¿Cómo podemos ocupar nuestro lugar y formar parte del plan de Dios para bendecir al mundo?

    Indiscutiblemente, el diseño de la mujer, vino a ser la corona de la creación. ¿Por qué? ¡Porque fue

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