Colección de cuentos infantiles: Tomo 1

Por Ana María Núñez

COLECCIÓN DE CUENTOS INFANTILES surge por la necesidad de contar historias interesantes a los niños, ayudarles en su día a día respondiendo a sus dudas, miedos, sentimientos, alegrías y preguntas sobre todo lo que los rodea de una manera fácil y entretenida que los lleve al mundo mágico de la lectura. Est

• Idioma: Español
• Editorial: ibukku, LLC
• Fecha de lanzamiento: 6 nov 2022
• ISBN: 9781685742270

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COLECCIÓN DE

CUENTOS INFANTILES

TOMO I

Ana María NÚñez

ILUSTRADORES:

ROGELIO ARVIZU SALAS

ÁNGEL CASTILLO SALAZAR

ERNESTO GONZÁLEZ RAMÍREZ

Reservados todos los derechos. No se permite la reproducción total o parcial de esta obra, ni su incorporación a un sistema informático, ni su transmisión en cualquier forma o por cualquier medio (electrónico, mecánico, fotocopia, grabación u otros) sin autorización previa y por escrito de los titulares del copyright. La infracción de dichos derechos puede constituir un delito contra la propiedad intelectual.

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Publicado por Ibukku, LLC

www.ibukku.com

Diseño y maquetación: Índigo Estudio Gráfico

Ilustrado por:

Rogelio Arvizu Salas

Ángel Castillo Salazar

Ernesto González Ramírez

Copyright © 2022 Ana María Núñez

ISBN Paperback: 978-1-68574-226-3

ISBN eBook: 978-1-68574-227-0

Índice

Agradecimientos

Malika

Jipo

Mausi

Rafi

Leyla

Arcoíris

Bonnie

Allegro

Masusau

Susy

Finn

Aurora

Pichirilo

Nickie

Numibia

Agradecimientos

A mis nietos Rafael, Mariana, Susana, Aurora y Alan.

Gracias por pedirme cuentos que no eran ya conocidos.

Su imaginación fue mi fuente de inspiración.

Ha sido para mí la más maravillosa experiencia.

A mi madre, quien me animó a no sólo contarlos,

sino ponerlos por escrito.

A mi hermana Eva Esther y a mi cuñado Ernest

por su invaluable ayuda en la traducción al inglés.

Malika

Cierra tus ojos e imagina un bosque muy grande lleno de árboles y vegetación y, si sigues el río, llegarás a su parte mágica. Aquí los animales son diferentes: hay elefantes lila, jirafas azules, tigres blancos, venados verdes y conejos multicolores.

Esta historia es acerca de una familia de conejos: Papá y Mamá conejos con cinco conejitos, todos muy lindos y esponjosos y de diferentes colores: amarillo, naranja, rosa, azul cielo y la más pequeña de color rojo; una conejita sensible y soñadora con ojos muy azules y un gran corazón. Su nombre es Malika.

—Malika, ¿dónde estás? —preguntaban sus hermanos. Ella, como siempre, estaba observando el bosque y soñando.

—Aquí estoy —decía Malika—, ¿qué quieren?

—Ven, vamos a jugar a los escondidillas.

Pero Malika prefiere caminar por el bosque, observar a los demás animales y soñar…

Un día que paseaba siguiendo el río, escuchó una música muy bonita. Se alejó de los lugares que frecuentaba para seguir el sonido, hasta que llegó a un claro y vio a una niña bailando.

—¡Oh!, qué hermoso baila esa niña.

La contempló por un buen rato hasta que decidió acercarse.

—Hola —dijo Malika.

La niña volteó cuando escuchó el saludo, pero no vio a nadie.

—Qué curioso, juraría que escuché a alguien saludándome —se dijo.

Malika contestó:

—Sí, fui yo, acá abajo, ¿me puedes ver? Soy roja con ojos azules.

Cuando la niña miró hacia abajo vio a un precioso conejito rojo.

—¿Tú me saludaste? Pero si los conejos no hablan.

—Claro que sí, estamos en el Bosque Mágico, y todos aquí podemos hablar. Mi nombre es Malika.

—Vaya, vaya, esto es maravilloso. Mucho gusto, Malika. Yo soy Susana.

—¿Dónde aprendiste a bailar? Te he estado observando y me encanta como bailas.

—Pues tomo clases de ballet en una escuela de danza y lo disfruto mucho.

—¿Y tú me podrías enseñar? Me encantaría bailar como tú lo haces.

—Claro —dijo Susana—, si quieres puedo venir todas las tardes como a esta hora y enseñarte.

—¿De verdad? —dijo Malika—, sería maravilloso, ¿podemos empezar mañana?

—Sí, hasta mañana, sólo te voy a pedir que si realmente quieres aprender tienes que ser constante, no faltar y no desesperarte, pues toma mucho tiempo llegar a ser una bailarina de ballet.

—Por supuesto, es mi sueño hecho realidad, estaré sin falta todos los días —prometió Malika.

Y desde el siguiente día, por muchos días, Malika fue a sus clases de ballet con Susana. Se aplicaba tanto y ensayaba siempre, que muy pronto empezó a bailar acompañada de la música clásica, así la llamaba Susana, de autores