Descubre millones de libros electrónicos, audiolibros y mucho más con una prueba gratuita

Solo $11.99/mes después de la prueba. Puedes cancelar en cualquier momento.

Tu yo seductor
Tu yo seductor
Tu yo seductor
Libro electrónico235 páginas4 horas

Tu yo seductor

Calificación: 0 de 5 estrellas

()

Leer la vista previa

Información de este libro electrónico

Secretos de la atracción, seducción y dinámica social.

La atracción, el deseo sexual, el amor, las relaciones de pareja, la vida en comunidad y sus reglas existen con un solo fin: la supervivencia de la especie.

La selección natural en el mundo moderno que utiliza la comunicación eficiente como principal arma en una lucha por el éxito social, la satisfacción sexual y romántica. Títeres de los genes que programan tus rituales de apareamiento a través del placer o el dolor. Leyes y mecanismos sacados a la luz que te permiten tener el mayor control posible sobre tu vida sexual y romántica.

IdiomaEspañol
EditorialCaligrama
Fecha de lanzamiento16 sept 2020
ISBN9788418310522
Tu yo seductor
Autor

Yordanis Isla

Yordanis Arley Isla Betancourt nació el 24 de marzo de 1980 en Banes, Holguín (Cuba). Es Licenciada en Ciencias de la Computación.

Autores relacionados

Relacionado con Tu yo seductor

Libros electrónicos relacionados

Psicología para usted

Ver más

Artículos relacionados

Comentarios para Tu yo seductor

Calificación: 0 de 5 estrellas
0 calificaciones

0 clasificaciones0 comentarios

¿Qué te pareció?

Toca para calificar

Los comentarios deben tener al menos 10 palabras

    Vista previa del libro

    Tu yo seductor - Yordanis Isla

    Tu-yo-seductorcubiertav21.pdf_1400.jpg

    Tu yo seductor

    Yordanis Isla

    Tu yo seductor

    Primera edición: 2020

    ISBN: 9788418310058

    ISBN eBook: 9788418310522

    © del texto:

    Yordanis Isla

    © del diseño de esta edición:

    Penguin Random House Grupo Editorial

    (Caligrama, 2020

    www.caligramaeditorial.com

    info@caligramaeditorial.com)

    © de la imagen de cubierta:

    Shutterstock

    Impreso en España – Printed in Spain

    Quedan prohibidos, dentro de los límites establecidos en la ley y bajo los apercibimientos legalmente previstos, la reproducción total o parcial de esta obra por cualquier medio o procedimiento, ya sea electrónico o mecánico, el tratamiento informático, el alquiler o cualquier otra forma de cesión de la obra sin la autorización previa y por escrito de los titulares del copyright. Diríjase a info@caligramaeditorial.com si necesita fotocopiar o escanear algún fragmento de esta obra.

    Prólogo

    Muchos han sido los amigos que me han incitado a escribir sobre las relaciones de pareja, atracción, técnicas de seducción, incluso sobre sexo. He decidido hacerlo, aunque no vamos a hablar de sexo esta vez. He aprendido que las palabras suelen ser fugaces y, peor aún, son susceptibles a las transformaciones cuando pasan de una persona a otra. El lenguaje en su expresión oral ha hecho vulnerable las ideas. Es común encontrar personas defendiendo enérgicamente un criterio marcado por una mala interpretación; y lo peor, transforman un mensaje eficazmente concebido en algo totalmente erróneo y ruidoso.

    Si no eres uno de mis amigos, te preguntarás: ¿con qué autoridad puedo escribir un libro sobre este tema? Vamos a partir de una realidad que no siempre es fácil reconocer: si eres como la gran mayoría de los hombres, no has tenido el éxito que has deseado con las mujeres. Has deseado a alguna mujer en silencio viendo cómo otro es el protagonista de tus fantasías, nunca supo de tu interés o, peor aún, has sido rechazado por ella. De seguro recuerdas esos chicos en la escuela que tenían colgadas a las niñas más lindas y sexys y que mirabas con una mezcla de admiración y odio. Bueno, yo era de esos que tenían a las chicas que tú deseabas. Quizás piensas que tú no eres esa clase de hombres y que no tenemos nada en común y que esa especie de «suerte» o «don» tú simplemente no la tienes, que no hay nada que pueda hacerse para cambiar esa realidad.

    No poseo un poder sobrenatural que por arte de magia despierte deseo sexual o amor en cada mujer que encuentro en mi camino y que puedo cederte un poco de ese poder. Tampoco tengo un camino corto para darte todo el conocimiento y habilidades que necesitas. Tengo una licenciatura en Ciencias de la Computación y una maestría relacionada con la misma ciencia, ninguna de las materias parece estar relacionada con las relaciones heterosociales. Soy un hombre que una vez tuvo el deseo de cambiar la vida sexual poco enriquecedora de algunos de sus amigos más cercanos y descubrió verdades ocultas que le fascinaron.

    Mi carrera profesional me enseñó a ser objetivo e incluso materialista, quizás por el hábito de escribir programas informáticos que simulaban y resolvían problemas del mundo real con un modelo computacional. Soy de los que piensan que todo tiene explicación lógica, que la magia real no existe y que todo puede estudiarse y aprenderse. Todo tiene una causa y un efecto, que alguien tenga éxito en su vida sexual y otra persona no lo tenga no es producto de un fenómeno paranormal, tiene que estar regido por algunas leyes o reglas y, si estas existen, entonces pueden ser estudiadas y aprendidas y, si pueden ser aprendidas, pueden utilizarse para influir en el resultado. Eso me enseñó mi carrera como programador. Así que me di a la tarea de investigar y descubrir la forma de utilizar este conocimiento luego. Después de años de investigación, respondí a la mayoría de mis preguntas de ese momento y otras que fueron apareciendo, como resultado ha surgido este libro que estoy poniendo en tus manos.

    No soy ajeno al poder del conocimiento que voy a brindarte ni las consecuencias de su uso inadecuado. Vas a adquirir el poder de herir psicológicamente a otras personas, y esto puede ser más dañino que la violencia física.

    Ahora, si los conocimientos que voy a ofrecerte pueden dañar a otras personas, ¿por qué escribo este libro? Existe una fuerte razón: el éxito personal de un hombre, su sentido de realización, está ligado a su éxito con el sexo opuesto en buena medida, así que mereces al menos respuestas. Por otra parte, las manos pueden crear o destruir, todo depende de quién las controla.

    Introducción

    ¡Convertirte en un «seductor»! El cine, la literatura quizás te impulsen a creer que esa sea la palabra que más se ajuste a mi intención. Por el momento, voy a utilizarla, solo por el momento.

    Soy matemático, me gustan las estadísticas y las estadísticas dicen que la gran mayoría de los hombres no están contentos con su vida sexual ni sus relaciones son todo lo enriquecedoras que quisieran; fuentes de placer y felicidad. En adelante voy a asumir que tienes este libro en tus manos porque tu éxito con las mujeres dista del deseado, como ocurre a la gran mayoría de los hombres, aun cuando no lo confiesen abiertamente. Reconocer el problema siempre es el primer paso para resolverlo. Cuando termines tu lectura, tendrás algo que todo hombre ha deseado; control de la vida sexual de la misma forma con que lo harías con otras esferas de la vida. No total, es una utopía pensar que se tiene el control total de algo en la vida, menos controlar cosas que dependen de las emociones de otra persona. Aun así, tendrás el mayor control posible sobre tus relaciones.

    Lamentablemente, las reglas sociales y los mecanismos de atracción de la especie humana no fueron inventados por mí, no tenemos poder para cambiarlas, somos simples piezas sobre el tablero que su único poder sobre las reglas es utilizarlas. Las reglas sociales nos las impusieron y los mecanismos de atracción los heredamos y fueron camuflados por el medio en el que vivimos. Camuflados, no cambiados, como puede parecer. Los mecanismos de atracción no cambian, cambian sus instrumentos, la esencia es la misma.

    Realmente no tenemos muchas opciones. Si nadamos contra la corriente, perderemos energía y al final acabaremos siendo arrastrados, ahogándonos por la falta de esa energía, una opción más sabia sería utilizar la fuerza de la corriente a nuestro favor. Extrapolando: utilizar los hechos, estudiarlos y sacar provecho de este conocimiento en vez de tratar de cambiarlos; esta es mi intención para contigo.

    Voy a advertirte, mucho de lo que descubrirás en este libro chocará con creencias y hechos que has dado por ciertos toda tu vida. Este no es un libro sobre cómo deberían ser las cosas, no es un libro de ética o de moral, así que no te asustes o pongas a la defensiva mientras recorres las páginas. En este libro descubrirás verdades que contradicen creencias que has dado por ciertas toda tu vida. Supuestas verdades que son las responsables de tu situación actual. Mi intención no es crear una polémica sobre los temas que abordaré a lo largo de todo nuestro tiempo juntos. Mi intención es mostrarte otra perspectiva de las mujeres, de las relaciones sociales, e incluso de tu estilo de vida, mi intención es, sobre todo, darte una «nueva verdad» que te sea más útil.

    He elegido hacer especial énfasis en los fundamentos más que en las técnicas por el hecho de que los fundamentos son la base del conocimiento.

    Podría darte técnicas sin fundamentarlas, pero las técnicas te brindarían un éxito ocasional. Un albañil puede construir una vivienda utilizando técnicas aprendidas; pero la casa puede colapsar si las condiciones cambian. Es difícil para el albañil resolver el problema, y todo por no conocer los fundamentos.

    ¿Qué crees que haría un ingeniero civil o un arquitecto? Él posee los conocimientos sobre distribución de cargas, resistencia de los materiales, diseño, etc. Puede enfrentar el problema. Analiza la causa del fracaso y busca soluciones sencillamente porque conoce los fundamentos matemáticos, físicos y químicos que le permiten entender la naturaleza del problema y cómo enfrentarse a él. Quiero hacerte el arquitecto de tu vida sexual.

    Las personas aprenden por asociación. Parten de lo conocido para llegar a lo desconocido. Los estudiantes piden ejemplos prácticos que los lleven a soluciones rápidas, sin embargo, este camino no conduce al conocimiento verdadero.

    Partamos de una realidad: no existen palabras mágicas ni acciones para que todas las mujeres abran sus corazones o sus piernas y caigan rendidas a tus pies. Tampoco existe un camino corto que recorrer, no caigas en la trampa de pensar que porque los planetas se alinearon al segundo día de haber leído un folleto sobre «seducción» que te dio un amigo e intimaste con alguna mujer ya eres todo un donjuán moderno infalible.

    Solo hay un camino; obtener el conocimiento, utilizarlo en la práctica y aprender de los errores —calibraje—. Te mentiría si te dijera que es algo sencillo; pero puedo guiarte durante tu proceso de «transformación». Si decides emprender el camino desde el principio, verás cambios en tu vida y principalmente en la forma de ver el mundo y, por ende, en el modo en que interactúas con él, estudio, práctica y análisis. No hay otra forma.

    Conozco a hombres que son afortunados con las mujeres y, sin embargo, solo dominan algunos conceptos básicos que saben aplicar, esos conocimientos esenciales les dan una ventaja enorme sobre sus compañeros. Entonces te pregunto: ¿qué podrían hacer estos hombres si contaran con fundamentos sólidos sobre la seducción, psicología y la dinámica social?

    El poder de un seductor —Sarger, PUA, AVEN— es increíble, no lo confundamos con el éxito de algunos hombres que poseen recursos materiales, éxito social y una buena genética que los hace afortunados en el amor. Un Sarger cuenta con conocimientos que lo hacen merecedor de la mujer que elija. Dichos conocimientos no se heredan.

    No estoy afirmando que un Sarger es un seductor absoluto, no vamos a caer en esa trampa. Hay mujeres «enamoradas» de hombres con carácter y actitudes alfas, con proyectos de vida bien definidos que no ceden aun frente al más experimentado, al menos, no en todo momento. El seductor siempre triunfador no existe. Tampoco existe una técnica específica para un tipo de mujer universal. Las diferencias de carácter son tantas como personas existen y, por lo tanto, también varían los métodos utilizados y los factores influyentes.

    Nuestras acciones, por lo general, son el resultado de firmes convicciones acerca de la realidad que nos rodea. Estas convicciones son creadas y reajustadas durante toda la vida partiendo de nuestras experiencias personales y las de las personas que, de alguna forma, influyen sobre nosotros y también tienen influencias genéticas.

    Nuestra forma de actuar está muy influenciada por nuestras creencias. Todos tenemos creencias sólidas sobre muchos temas, aun cuando no seamos conscientes de ello. Es muy común que, si nuestro proceder no trae los resultados esperados, es porque nuestras convicciones y conceptos sobre el tema están equivocados o mal planteados. Así que vamos a trabajar sobre esto. Quizás tengas que hacer algo extremo, como olvidar todo lo que has escuchado sobre cómo «enamorar» a una mujer. Es muy probable que sea incorrecto; porque, de lo contrario, tu problema actual no sería cómo tener más mujeres sexys en tu vida, sino todo lo contrario.

    Hablemos un poco de tu futuro. En el proceso de transformación —que es inevitable—, cambiarás tu vida en la mayoría de los sentidos, puedes descubrirte cambiando tus amigos, pues de repente ya no te identificas con ellos. Tu forma de vestir y de comunicarte puede transformarse. Tus intereses, tus hábitos, tus costumbres, tus convicciones serán reevaluados. Verás el mundo de una forma distinta. Encontrarás respuestas a interrogantes que tuviste durante mucho tiempo y tendrás nuevas interrogantes como resultado de tus nuevas respuestas. Observarás parejas y grupos de personas en parques, playas, centros nocturnos y percibirás detalles ocultos para la mayoría de las personas. ¿Quién tiene el control en la relación?, ¿quién manipula?, ¿quién está condenado al fracaso?, ¿quién será rechazado y quién correspondido?, ¿quién intenta manipular?, ¿quién no lo hace?, ¿quién está interesado en quién?, ¿quién está ganando interés y quién lo está perdiendo? Estas interrogantes empezarán a tener respuestas para ti utilizando la observación de la manera más simple.

    Sonreirás en silencio al ver los métodos poco eficientes que utilizan los hombres para seducir. Te reconocerás en algunos de ellos y te alegrarás de empezar un proceso de transformación. Es una sensación embriagadora y provista de un placer enorme, sin contar el poder que lleva implícita. Experimentarás la vida de una forma enriquecedora y aunarás en ti un poder que no sabías que existía; llegado este punto, deberás proceder con cautela, pues créeme, los estados de placer que alcanzarás son altamente adictivos.

    Espero que no estés pensando algo tan repetido e inútil para el mejoramiento como «dejaré de ser yo mismo». No, no dejarás de ser tú, te trasformarás en una versión mejorada de tu YO, mejor adaptada, vas a evolucionar. Recuerdo que un amigo me dijo una vez en forma de broma: «Siempre que haces lo mismo sucede igual», que venía siendo su versión de «no esperes resultados distintos haciendo las mismas cosas» —no puedo evitar sonreír por los recuerdos que me trae esta frase—, y es cierto, si lo que hacías hasta este momento no te trae el tipo de mujer que quieres a tu lado, entonces es hora de hacer otra cosa o la historia se repetirá constantemente. Comencemos por el principio.

    La evolución humana y la herencia

    La mejor forma de iniciar el proceso es… ¡por las bases! Hay errores en el principio que suelen arrastrarse toda la vida, así que nosotros no vamos a tomar atajos.

    Voy a tratar un tema medular: la selección natural. El ser humano como ser vivo y las estrategias de los genes para perpetuarse. Todo parte de acá, todas las preguntas y las respuestas sobre atracción, relaciones de pareja y sexo tienen su origen y respuesta en este tema.

    No cometas el error de saltarte estas páginas.

    Todos los seres vivos están formados por genes y su objetivo primordial es darles continuidad a los mismos, esta es la idea a grandes rasgos, sin entrar a describir en detalles las teorías sobre la evolución. Los seres vivos como individuos aislados tienen una existencia efímera. Todos mueren, sin excepción; ahora, si logran dejar descendencia, es decir, si logran dejar réplicas de sus genes, han cumplido su objetivo.

    Es cruel, pero todo ser vivo es esclavo de sus genes. Somos contenedores, máquinas programadas. Nuestras características físicas, nuestros instintos, incluso nuestra conducta, están regulados por nuestros genes, aunque pueden experimentarse algunas variaciones en dependencia de algunos factores externos.

    Los genes sufren mutaciones con el transcurso del tiempo y a través de los cruzamientos. Estas traen cambios que, de ser exitosos, dotan al individuo de características que le dan ventaja sobre otros de la misma especie, es decir, son mejores desde el punto de vista evolutivo. Por el contrario, si la mutación genotípica no dota al individuo de características fenotípicas más ventajosas, no logrará reproducirse exitosamente, no sobrevivirá, no tendrá descendencia y perderá frente a otros individuos mejor adaptados. El resultado de este proceso de filtrado de miles de años nos deja a los seres modernos actuales y sus características comunes. Los genes son los responsables de todo cuanto ocurre en los seres vivos, desde sus características físicas hasta sus instintos básicos, incluso de su tendencia a un comportamiento en específico.

    A nivel genético, la raza humana tiene dos instintos básicos muy poderosos: el instinto de conservación y el instinto reproductivo. La parte de supervivencia es imprescindible si queremos llegar a la madurez sexual, por lo que están estrechamente ligados. Así que, por regla, un individuo elegirá vivir antes que reproducirse, lo otro más poderoso que existe es la necesidad de reproducción. Así que si garantizamos lo segundo tomando medidas para no comprometer lo primero… Esto es muy importante por una simple razón: La atracción y el sexo son los mecanismos que utilizan los genes de la especie humana para replicarse creando copias de ellos, alinearse con otros y perpetuarse, aun cuando el individuo desaparezca. Para que todo esto sea posible, tienen que existir las relaciones de pareja y el sexo.

    Estrategias reproductivas

    El proceso de selección natural hace que los individuos mejor adaptados sobrevivan y dejen descendencia. El hombre ha estado sometido a este proceso desde el principio de su existencia y continuará en este proceso hasta el final de la misma. Esto implica que todos los que ahora estamos vivos tenemos genes exitosos y hemos heredado características y comportamientos comunes de nuestros antecesores gracias a un filtro de miles de años. ¿Cómo fue posible este proceso de perfeccionamiento y supervivencia? Esta es una buena pregunta y la respuesta es simple: a través de la correcta elección de los individuos con los que se entrelazaron y replicaron. Esa «correcta elección» ocurre en este mismo instante y no se detendrá, es esencial para la supervivencia de los genes la correcta elección del individuo con el cual cruzamos nuestro cóctel genético. Este proceso «filtra» de forma continua, buscando descendencias más fuertes y mejor adaptadas.

    Esto es una buena noticia para ti, esto significa que tú tienes genes exitosos heredados de tus antecesores. También significa que esos genes dictarán características y comportamientos que pueden ser estudiados. Dos buenas noticias, ¿no crees?

    Ahora, la pregunta del millón de dólares que puede estar rondando tu cabeza; si estoy programado para tener sexo y dejar descendencia, ¿por qué no está sucediendo? Hay un par de cosas que sabotean tu éxito sexual, la principal es la existencia real de individuos mejor adaptados que tú. En términos de la cruda realidad,

    ¿Disfrutas la vista previa?
    Página 1 de 1