El terror y la piedad
Por Marcel Schwob
()
Información de este libro electrónico
Lee más de Marcel Schwob
Vidas imaginarias Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesLa lámpara de Psique Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificaciones
Relacionado con El terror y la piedad
Libros electrónicos relacionados
La Metamorfosis Ed. 2022 Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesBuscanidos Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesTexto y deconstrucción en la literatura norteamericana postmoderna Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesConvalecencias: La literatura en reposo Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesCircular 22 Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesRelatos del Capitán Yáber Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesZuritax60: Textos críticos sobre su obra y su ensayo «Los poemas muertos» Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesAntípodas Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesSiete Años Enterrado Vivo Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesJahuel Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesHorroroso Chile Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesLos cuerpos partidos Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesLas moras agraces Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesDilemas en el aire Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesPoesía continua & Deber de urbanidad: (Antología 1965-2001) Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesPostales desde el fin del mundo (2017-2022) Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesPeces mudos Calificación: 2 de 5 estrellas2/5El ángel del olvido Calificación: 4 de 5 estrellas4/5José Donoso: paisajes, rutas y fugas Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesLa casa de la poesía Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesTransversal-Opus morbo Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesArtistas de la supervivencia: Viñetas literarias del siglo XX Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesCuadros color de tiempo: Ensayos sobre Marcel Proust Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesEl árbol viene Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesDeudas contraídas Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesEl faro Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesLa tonalidad precisa del rojo Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesMi Lai Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesQuien golpea primero golpea dos veces Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesPosibilidad y utopía: Mundos posibles entre filosofía y literatura Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificaciones
Crítica literaria para usted
Manual de escritura Calificación: 4 de 5 estrellas4/5Manipulación: Guía para el Dominio de la Manipulación Usando Técnicas de PNL, Persuasión y Control Mental Calificación: 4 de 5 estrellas4/5Cien años de soledad de Gabriel García Márquez (Guía de lectura): Resumen y análisis completo Calificación: 4 de 5 estrellas4/5El Alquimista de Paulo Coelho (Guía de lectura): Resumen y análisis completo Calificación: 4 de 5 estrellas4/5Leer o Morir Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Ensayo sobre la ceguera de José Saramago (Guía de lectura): Resumen y análisis completo Calificación: 4 de 5 estrellas4/5El evangelio de Tomás: Controversias sobre la infancia de Jesús Calificación: 5 de 5 estrellas5/5La insoportable levedad del ser de Milan Kundera (Guía de lectura): Resumen y análisis completo Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Una Pena en Observacion Calificación: 4 de 5 estrellas4/5Hogar Feliz: Claves Milenarias de la Tradición Judía Calificación: 5 de 5 estrellas5/5El amor en los tiempos del cólera de Gabriel García Márquez (Guía de lectura): Resumen y análisis completo Calificación: 4 de 5 estrellas4/5El poder del mito Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Cuentos para Demián: Los cuentos que contaba mi analista Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Breve historia de la literatura universal Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesDragon Ball Cultura Volumen 1: Origen Calificación: 1 de 5 estrellas1/5Gabriel García Márquez. Nuevas lecturas Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesEl banquete o del amor Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Escribir por ejemplo: De los inventores de la tradición Calificación: 5 de 5 estrellas5/550 Clásicos que debes leer antes de morir Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesLa muerte: Siete visiones, una realidad Calificación: 5 de 5 estrellas5/5García Márquez en 90 minutos Calificación: 5 de 5 estrellas5/5El universo de los superhéroes: Historia, cine, música, series y videojuegos Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Albert Camus: Del ciclo de lo absurdo a la rebeldía Calificación: 5 de 5 estrellas5/5La utilidad de leer: Ensayos escogidos Calificación: 5 de 5 estrellas5/5La mente alerta: Usa tus primeros pesamientos para conquistar tu día y mejorar tu vida Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Borges en 90 minutos Calificación: 4 de 5 estrellas4/5Magia universal Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Cartas de relación Calificación: 4 de 5 estrellas4/5Laboratorio lector: Para entender la lectura Calificación: 5 de 5 estrellas5/5
Comentarios para El terror y la piedad
0 clasificaciones0 comentarios
Vista previa del libro
El terror y la piedad - Marcel Schwob
Marcel Schwob
El terror y la piedad
Traducción: Iair Kon
Ilustración De Tapa: Nicolás Arispe
Ilustración De Contratap: María Rabinovich
Diseño: Verónica Feinmann
© Libros del Zorzal, 2006
Buenos Aires, Argentina
Este libro se realizó con el apoyo de la Dirección General de Industria, Comercio y Servicios de la Subsecretaría de Producción, G.C.B.A.
Libros del Zorzal
Printed in Argentina
Hecho el depósito que previene la ley 11.723
Para sugerencias o comentarios acerca del contenido de El terror y la piedad, escríbanos a:
info@delzorzal.com.ar
www.delzorzal.com.ar
Índice
El arte de la biografía | 5
El terror y la piedad | 14
La diferencia y la semejanza | 28
La perversidad | 34
El verbo | 41
El realismo | 47
La risa | 51
Il libro della mia memoria | 58
Vida y obra de Marcel Schwob | 65
El arte de la biografía
¹
La ciencia histórica nos deja en la incertidumbre acerca de los individuos. No nos revela más que los puntos por los cuales fueron vinculados a las acciones generales. Nos dice que Napoleón estaba enfermo el día de Waterloo, que hay que atribuir la excesiva actividad intelectual de Newton a la absoluta continencia de su temperamento, que Alejandro estaba ebrio cuando mató a Klitos y que la fístula de Luis XIV pudo haber sido la causa de algunas de sus resoluciones. Pascal especula sobre la nariz de Cleopatra –si hubiese sido más corta– o sobre una arenilla en la uretra de Cromwell. Todos esos hechos individuales sólo tienen valor porque modificaron los acontecimientos o porque hubieran podido desviar su desarrollo. Son causas reales o posibles. Hay que dejarlas a los especialistas.
El arte está en las antípodas de las ideas generales, sólo describe lo individual, sólo desea lo único. No clasifica; desclasifica. En lo que a nosotros atañe, nuestras ideas generales pueden ser similares a aquellas que tienen lugar en el planeta Marte y tres líneas que se cortan forman un triángulo en todos los puntos del universo. Pero observen una hoja de árbol, con sus nervaduras caprichosas, sus tonalidades que varían por la sombra y el sol, la hinchazón que ha producido en ella la caída de una gota de lluvia, la picadura que ha dejado allí un insecto, el rastro plateado del pequeño caracol, el primer dorado mortal que le imprimió el otoño; busquen una hoja exactamente igual en todos los grandes bosques de la tierra: los desafío. No hay ciencia del tegumento de un folíolo, de los filamentos de una célula, de la curvatura de una vena, de la manía de un hábito, de los arrebatos de un carácter. Que tal hombre haya tenido la nariz torcida, un ojo más arriba que el otro, la articulación del brazo nudosa; que haya tenido costumbre de comer a tal hora una pechuga de pollo, que haya preferido el Malvoisie al Château-Margaux, he allí lo que no tiene paralelo en el mundo. Al igual que Sócrates, Tales hubiera podido decir GNWJI SEAUTON, pero no se hubiera refregado la pierna en la prisión de la misma forma antes de beber la cicuta. Las ideas de los grandes hombres son el patrimonio común de la humanidad: cada uno de ellos sólo poseía realmente sus rarezas. El libro que describa a un hombre en todas sus anomalías será una obra de arte, como una estampa japonesa en la que se observa eternamente la imagen de una pequeña oruga vista una vez a una hora determinada del día.
Las historias permanecen silenciosas sobre esas cosas. En la vasta colección de materiales que proveen los testimonios no hay muchos quiebres singulares e inimitables. Los antiguos biógrafos son ante todo avaros. Al considerar tan sólo la vida pública o la gramática, nos transmitieron sobre los grandes hombres sus discursos y los títulos de sus libros. Fue el mismo Aristófanes quien nos dio la dicha de saber que era calvo, y si la nariz chata de Sócrates no hubiera servido para comparaciones literarias, si su costumbre de caminar con los pies descalzos no hubiera sido parte de su sistema filosófico de desprecio por el cuerpo, no habríamos conservado de él más que sus interrogatorios de moral. Los cotilleos de Suetonio son sólo odiosas polémicas. El buen genio de Plutarco hizo a veces de él un artista; pero no supo comprender la esencia de su arte, puesto que sólo imaginó paralelos
–¡como si dos hombres claramente descritos en todos sus detalles pudieran parecerse!–. Estamos limitados a consultar a Atenea, Aulo Gelio, los escolásticos, Diógenes Laercio, que creyó haber creado una especie de historia de la filosofía.
El sentimiento de lo individual se ha desarrollado más en los tiempos modernos. La obra de Boswell sería perfecta si no hubiera considerado necesario citar en ella la correspondencia de Johnson y hacer digresiones sobre sus libros.