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La Medida Del Desorden: Como Salí De Algunas De Las Crisis En Mi Vida. Disminuyendo  El  Caos,  Aumentando  La Consciencia
La Medida Del Desorden: Como Salí De Algunas De Las Crisis En Mi Vida. Disminuyendo  El  Caos,  Aumentando  La Consciencia
La Medida Del Desorden: Como Salí De Algunas De Las Crisis En Mi Vida. Disminuyendo  El  Caos,  Aumentando  La Consciencia
Libro electrónico111 páginas1 hora

La Medida Del Desorden: Como Salí De Algunas De Las Crisis En Mi Vida. Disminuyendo El Caos, Aumentando La Consciencia

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Richard, como sus amigos lo conocen, describe de forma amena su versin del perfecto orden universal y encuentra la similitud con el equilibrio, con la velocidad y como estas afectan nuestras vidas.

Como podemos perderlo y en situaciones extremas, usando sus propias experiencias de prdidas en su vida reciente, como las que nos describe con precisin, cmo sali de ellas y que esto nos sirva como ayuda para nuestro propio acontecer, de la mano de Dios, de la familia y de los amigos, siempre conservando la calma y el buen humor.

Es un relato de momentos de prdida y dolor, que han sido transformadas en experiencia y liderazgo que ansa derramar para bien de sus lectores.

Sus pginas repletas de experiencias y reflexiones sobre el orden y desorden del universo, relacionndolo con el ir y venir en el tiempo, a la forma de enfrentar y salir de situaciones adversas extremas y el desorden que a veces ocasionamos.

Es tambin una reflexin del paso de la vida a la muerte, y utilizando sus propias vivencias, se pregunta si hay algo ms all de la muerte, y si antes de partir, lo sabemos, o lo presentimos. De una forma u otra, nos dejar reflexionando.

IdiomaEspañol
EditorialPalibrio
Fecha de lanzamiento31 oct 2017
ISBN9781506522036
La Medida Del Desorden: Como Salí De Algunas De Las Crisis En Mi Vida. Disminuyendo  El  Caos,  Aumentando  La Consciencia
Autor

Ricardo Alegre Bojórquez

Ricardo Alegre Bojrquez, como su apellido, de sonrisa permanente, autor de La Medida del Desorden, y su inquietud por el conocimiento de las cosas lo llev a estudiar la carrera de ingeniero Qumico, en la UNAM, padre de cuatro hijos, empresario desde 1986. Despus de encontrarse con su vocacin de servir, ha sido tambin funcionario pblico desde el ao 2000 hasta la fecha. Ha sido diputado federal, interesado en el sector energtico, dos veces secretario de Desarrollo Sustentable en el Gobierno Municipal de Quertaro. Fungi como asesor del director general de PEMEX en el ao 2005, llevando el Enlace con el poder Legislativo Federal, desde donde decidi reincorporarse a su vida familiar y al trabajo y crecimiento en Quertaro. Ah recibi la invitacin para integrarse al gabinete municipal, donde inici su carrera en el sector de la vivienda y el desarrollo econmico y urbano sustentable, mismo donde ahora se desarrolla desde el INFONAVIT, del sector hipotecario federal. Amante de los deportes extremos y la adrenalina, los ha combinado con su pasin por la poltica y la vida empresarial, dejando estos una huella imborrable en su vida y en su actuar, que busca transmitirnos en estas breves pero densas pginas.

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    La Medida Del Desorden - Ricardo Alegre Bojórquez

    DEDICATORIA

    A mis hijos, André, Constanza, y Patricio Ricardo, que están en el presente, con quienes compartiré mi futuro, y a quienes se nos adelantaron, mi querida hija Michelle, mi hermano Rubén, mi sobrino Rafael Jan y a mis padres, Rafael y Lilliam, a quienes admiro por su sabiduría y fortaleza. A Mónica, mi compañera de aventuras y de vida, a quien agradezco por la vida de mis dos hijos menores, quiero dedicarles este libro, mi versión de los hechos en los que compartimos momentos de crisis, rechazo, dolor, pero también de mucha transformación y aprendizaje.

    Un abrazo a todos los que sufren por alguna razón, y a quienes han sufrido y lo han superado les dedico este libro. A quienes afortunados como yo, el sufrimiento les ha traído un aprendizaje, deseo que esto nos sirva para ayudar a otros.

    Por último, agradezco a Dios, por permitirme estar aquí para dar testimonio de su Amor Incondicional y su Gran Poder transformador.

    AGRADECIMIENTOS

    S ería injusto dejar de mencionar los nombres de mis familiares, amigos, socios, jefes, compañeros de trabajo, competidores y adversarios y todos quienes en algún momento de las crisis o de los momentos agradables de mi vida me aportaron o enseñaron algo valioso, no importa que tan insignificante haya sido.

    Agradezco a todos aquellos que estuvieron presentes con su apoyo, cariño y oraciones, especialmente a la familia De Anda, por todo su apoyo durante los momentos más difíciles de mi vida.

    Agradezco a Klaus Aceves, mi primera editora, por su valioso apoyo para concluir este documento lleno de vida.

    Introducción

    INTRODUCCIÓN

    ¿Y todo para qué?

    E stoy narrando este breve pero sustantivo relato de hechos que me ocurrieron directa e indirectamente y me afectaron de tal forma que han transformado mi vida y dejado huella; el tiempo dirá si hubo un aprendizaje útil y con un mejor propósito. No estoy para juzgarlo, y creo que nadie debería hacerlo, sólo el tiempo traerá la respuesta y sólo a Dios le corresponde el juicio que todos tendremos al final del camino.

    No soy escritor, pero he sentido nuevamente la necesidad de escribir todo lo que pude recapacitar en estos siete años y durante esos días tan difíciles después del accidente que sufrí en moto y les aseguro que tuve el tiempo suficiente de reflexionar.

    Después de describir los momentos de crisis por los que he pasado, descubrí en éstos un patrón, actitudes en común, por la forma en que las había enfrentado. Lo destaco a efecto de que puedan ser de utilidad.

    Hoy, me encuentro con ánimos renovados para seguir adelante, aunque debo reconocer, que aún golpeado física, económica, socialmente y emocionalmente por la situación que vivo ya que después de año y medio viviendo solo en mi departamento del centro histórico, en silla de ruedas y muletas, donde identifiqué a mis amigos, gente solidaria, ahí también aprendí a disfrutar de mi libertad, y de mi soledad, que hoy disfruto, soledad a la cual temía. Hoy me he integrado nuevamente al trabajo al 100%, en lo que realmente me apasiona, enfocado en el servicio a los demás, como Delegado del INFONAVIT en el estado de Querétaro, y recuperando terreno en la empresa que me ha costado todo mi patrimonio mantener con vida. Me quisiera detener nuevamente a disfrutar de mis ratos a solas para escuchar mi música favorita, tomar clases de piano, leer, ver y escuchar el equipo de audio y video a todo lo que dan, ver películas con efectos especiales y llorar ¿por qué no? a solas, y así limpiar el alma. Como dice mi amigo Peter: Que alguien pare el tren pa’ que me baje

    Hace ya casi ocho años que decidí salirme nuevamente de mi casa del Campanario, de mi matrimonio con Sandra, de mi círculo de seguridad o zona de confort, y enfrentar el dolor de la pérdida nuevamente, pero esta vez de sus y de mis sentimientos, los de mi hijo André y de la sociedad.

    Y a pesar de no estar al 100% de mis facultades físicas, tomé esta decisión, pues el tiempo es oro para todos, y la vida no sabemos cuánto va a durar. Para muestra basta un botón… Sino, después de unas páginas me entenderán.

    Este párrafo lo agregué después de un año de haber iniciado este relato, y es que mi hermano mi room-mate de la infancia y adolescencia, 3 años mayor, murió inesperadamente, hace cinco años. Pensábamos que su enfermedad le daría otros cinco años más.

    Hoy, acaricio la posibilidad de ser exitoso nuevamente como empresario independiente, con más experiencia que hace treinta años cuando empecé mi primer negocio.

    Una pequeña fábrica de inyección de plásticos y que coincidió con el mundial de México 86. Lo recuerdo muy bien porque no quería perderme ni un solo partido en el estadio Azteca. ¡Qué buen mundial de futbol! La ola, La CHICHIquibum de los anuncios de cerveza y el ambiente en Reforma e Insurgentes con los triunfos de la selección. Por todo eso, renuncié a la oportunidad de un salario seguro y un futuro prometedor con la familia Miguel, reconocida en la comunidad libanesa de México.

    Revivo hoy el sentimiento de alegría de aquél entonces, ahora con la

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