Charlas Con Un Ángel: Mensajes Del Ángel Samuel

Por Claudia Villaseñor y Aurora Varela

Los Angeles son parte de la humanidad y el universo. Muchos humanos no aprenden a escuchar a los ngeles que nos rodean y hoy, est libro te invita a atravesar los obstculos del tiempo y el espacio para que leas las palabras directas de un Angel y conozcas sobre ellos , como nos ven, como funcionamos en esta tierra, que hay mas all de nosotros y nos da mensajes llenos de amor para ayudarnos a comprender el para que estamos en esta existencia.

• Idioma: Español
• Editorial: Balboa Press
• Fecha de lanzamiento: 24 ene 2017
• ISBN: 9781504372572

Claudia Villaseñor

(Aurora) Desde pequeña, Aurora Varela Sansores ha tenido la capacidad de ver, escuchar y comunicarse con los ángeles. Buscando la espiritualidad, ha trabajado insistentemente durante muchos años para conseguirla. A lo largo del camino, ha conocido innumerables maestros de luz, que han aportado mucho en su búsqueda. Egresada como Licenciada en Comunicación, posteriormente dentro de su desarrollo personal, fue encontrando diversas herramientas para complementar su conocimiento. La pasión por descubrir el secreto de la paz interior a través de las enseñanzas de los ángeles, la llevó a convertirse en maestra en Cartomancia, Consteladora Familiar, Coach Reconstructivo y Floriterapetura. Actualmente se desarrolla como guía espiritual, conferencista, realiza una gran diversidad de talleres, ayudando a miles de seguidores que llegan para encontrar el contacto espiritual con los ángeles, abriendo la posibilidad maravillosa de transformar a quien decide hacer un cambio exitoso en su vida. Aurora está convencida que la espiritualidad no es una meta, es dar pasos firmes en consciencia, aceptando y comprendiendo, que en esta existencia venimos a trascender, a evolucionar y a ser la mejor versión de nosotros mismos. (Claudia) Tras terminar su bachelor y master en Nutrición Holística en el Clayton College of Natural Health, Claudia María Villaseñor escribió y publicó “Tu salud está en tus manos”, un libro que ha llevado con éxito información sobre salud natural a la población de habla hispana en Estados Unidos, México y Latinoamérica; al haber ella sanado su cuerpo a través de medios naturales decidió enseñarle a otros cómo mejorar su salud y conservarla con prácticas diarias sencillas. A través de “Tu salud está en tus manos”, Claudia se convirtió en autora, escritora, instructora y conferencista. Claudia lleva un profundo camino espiritual y es en este camino donde se cruzó con el ángel que transmite el conocimiento en este libro. Actualmente pasa su tiempo entre su ciudad natal Guanajuato en México donde es anfitriona de retiros espirituales y de salud en “El Faro de Alonso”, un centro holístico de desarrollo humano fundado por ella, y Austin Texas donde viven sus hijos. Claudia se dedica a practicar lo que enseña ya que su misión de vida es la de impactar positivamente la vida de otros enseñándoles cómo mejorar sus vidas en todas las áreas, en su salud física, en sus relaciones y en sus finanzas. Para contactar a Claudia visita su sitio www.elfarodealonso.com

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Derechos reservados © 2017 Claudia Maria Villaseñor Rangel de Alba & Aurora Varela Sansores.

Creditos del Autor: Claudia, Nutriologa, Escritora, Conferencista & Aurora, Canalizadora de Angeles, Consteladora Familiar, Maestra en Cartomancia, Floriterapeuta, Coach Reconstructivo

Todos los derechos reservados. Ninguna parte de este libro puede ser reproducida por cualquier medio, gráfico, electrónico o mecánico, incluyendo fotocopias, grabación o por cualquier sistema de almacenamiento y recuperación de información sin el permiso por escrito del editor excepto en el caso de citas breves en artículos y reseñas críticas.

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El autor de este libro no ofrece consejos de medicina ni prescribe el uso de técnicas como forma de tratamiento para el bienestar físico, emocional, o para aliviar problemas médicas sin el consejo de un médico, directamente o indirectamente. El intento del autor es solamente para ofrecer información de una manera general para ayudarle en la búsqueda de un bienestar emocional y spiritual. En caso de usar esta información en este libro, que es su derecho constitucional, el autor y el publicador no asumen ninguna responsabilidad por sus acciones.

ISBN: 978-1-5043-7256-5 (tapa blanda)

ISBN: 978-1-5043-7257-2 (libro electrónico)

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Fecha de revisión de Balboa Press: 01/24/2017

Índice

AGRADECIMIENTOS

PRÓLOGO

INTRODUCCIÓN

1. Antes de comenzar: ¿qué es una canalización?

2. Charlas con el ángel Samuel

¿Quiénes somos y qué hacemos aquí?

La muerte: ¿Cuándo nos vamos? ¿A dónde vamos?

¿Por qué elegir venir a la Tierra? ¿Y por qué vivir la dualidad?

¿Existe un jefe? ¿Existe lo que algunos llaman Dios?

Los seres que habitan la Tierra… no son todos iguales

¿Cómo manejar las emociones?

¿Qué son y quiénes son los ángeles?

Más sobre los ángeles

El cuerpo humano y la salud física

Karma y Dharma

Más sobre Karma y Dharma

Los apegos

¿Podemos elegir regresar o no a la Tierra?

La Tierra, Nuestra Madre

¿Cómo es la muerte?

El Juicio

La magia de los ángeles

¿Cómo comunicarnos con los ángeles?

La constancia es la que te da los resultados

¿Qué es la Magia?

¿Cómo alineo mi energía con aquello a que le temo

para dejar de temerle?

3. Testimonios

4. Oración y Magia

GLOSARIO

AGRADECIMIENTOS

Gracias a mis hijas y grandes maestras de luz, Sabine y Nicole, cuyo amor plasma la más grande Bendición de mi vida.

A mis padres, con profundo agradecimiento y amor. Gracias por darme Vida y creer en mí.

A ti, compañero entrañable de vida, en el pasado, presente y futuro: gracias por todas las enseñanzas.

A mis maestros, pacientes, consultantes y amigos, cuya fe y sabiduría me han transformado.

A mis Ángeles, que con amor y paciencia están junto a mí, mostrándome que vale la pena luchar en este presente llamado Vida.

A ti mi Creador, te amo.

AURORA VARELA

Gracias a mi madre Cristina Aurora Rangel de Alba, por haberme iniciado también en el estudio de los ángeles y haberme incitado a preguntarle a mi Ángel Guardián su nombre.

A Miguel, mi Ángel Guardián, por cuidarme y reconfortarme.

A mis hijos, Alonso, Paula, Nicolás, Miguel y Victoria, a Bernardo, y a todos los demás ángeles encarnados que me acompañan y que han hecho posible todo lo que he logrado. Los amo a todos.

CLAUDIA MARÍA VILLASEÑOR RANGEL DE ALBA

PRÓLOGO

Toqué el mundo de los Ángeles desde muy pequeña. Verlos y escucharlos causaban confusión en mi mente, pero tuve la fortuna de elegir una madre que respetó y me ayudó a poder desarrollar esta visión diferente, lo que algunos llaman fuera de lo común. Fue hasta los 19 años cuando llegó a mi vida mi gran maestra de luz, Alma, esa mujer que a través de su simple nombre abrió las puertas a un nuevo despertar. Me guió con amor para hacerme comprender, y sobre todo sentir, que uno de los grandes aprendizajes en mi vida era, sin duda, servir a otros. Y así caminé, a veces con incertidumbre y incredulidad en mí misma, pero no paré y poco a poco las herramientas necesarias llegaron a mi vida, dándome la posibilidad de aprender, desarrollar y conocer el mundo mágico de los Ángeles.

Recuerdo que en el año 1993, una noche soñé con mi ángel, mi guardián. Su voz clara, profunda y con cierta picardía al hablar, me dijo: Soy Samuel. Dudé, no lo niego, pero una y otra vez, como un entrenador de alto rendimiento, pedí, reté e inclusive puse a prueba a mi amado Samuel. Con enorme paciencia, un amor infinito, un humor maravilloso y una sabiduría indescriptible, fue cumpliendo cada una de mis peticiones, cariñoso, entregado y, sobre todo, confiando en mí. Samuel se convirtió en mi compañero, mi escucha, mi guía y en muchas ocasiones un paño de lágrimas ante adversidades en mi vida. Su amor siempre lo sentí, lo sigo sintiendo. Podía inclusive en ocasiones percibir cómo su inmensa y amorosa energía me abrazaba, me cobijaba y me daba la fuerza para seguir, una y otra vez.

En el año 2006, conocí a una mujer que canalizaba Ángeles. Recuerdo que me invitaron a una sesión y fui. Al verla canalizar, me emocioné, sentí una conexión total y gran respeto. Recuerdo que pensé yo quiero hacer eso. Yo me había manejado únicamente siendo una canalizadora de Ángeles a través de cartomancia. Después comprendí que todo era, lo que yo llamo un plan celestial. Poco tiempo después, Samuel me dijo: ¿Te gustaría prestar tu cuerpo físico para permitir que un ángel pueda hablar a través de ti?, a lo que inmediatamente respondí que sí. Fue un proceso largo, de dolor físico en un principio muy peculiar, pero después de prácticas interminables con mi gran entrenador Samuel, logré fluir en amor para que este maravilloso milagro se diera.

Los Ángeles aman, cobijan, guían, responsabilizan, aclaran, resuenan, alientan, comprometen y nos ayudan a la evolución del SER. Su energía llena de amor y sabiduría está aquí para ayudarnos a trascender, a encontrar las herramientas necesarias para vivir en plenitud, a responsabilizarnos de nuestros actos y decisiones, pero sobre todo están aquí para acompañarnos en este maravilloso camino llamado… Vida. Es inevitable no creer en ellos. Una vez que elijes entrar en este juego espiritual, la mejor aventura de tu vida comienza a tomar forma. La consciencia se expande, el corazón se abre a recibir todo lo mejor, y la mente en humildad comprende que es parte de un cuerpo que sirve como vehículo del SER, para poder seguir aprendiendo y así, expandirse infinitamente.

Aquí un poco de todas las enseñanzas que Samuel ha compartido. Hoy en estas páginas, Claudia, mi compañera de viaje espiritual, y una servidora, te invitamos a una aventura llena de amor y magia. Un camino lleno de luz que nos hace comprender para qué estamos aquí, experimentándonos como seres humanos. Un viaje a lo que parece desconocido, pero que en realidad es el camino de lo que somos. Deseo desde mi corazón que a través de esta aventura encuentres la realidad, tu propia realidad.

Luz, paz y amor

AURORA VARELA SANSORES

INTRODUCCIÓN

Un encuentro con el Ángel

En enero del 2014 mi compañero, y el hombre que amaba, fue arrebatado abruptamente de mi lado. Una tarde me encontré con que estaba sola. El trauma de este evento me llevó a huir, literalmente, de mi cuidad natal Guanajuato, en busca de refugio a la ciudad de Querétaro. En Querétaro encontré refugio y algo más. Encontré a Aurora y a Samuel.

Unos meses más tarde, en el verano de ese año, en uno de mis tantos intentos por aliviar mi profunda tristeza derivada de esta separación, durante una conversación con una terapeuta de Flores de Bach en Juriquilla ella me dijo que yo necesitaba hablar con el ángel. En tono burlón le contesté que eso era justo lo que necesitaba, a la vez que pensaba ¿y cómo diablos le hago para hablar con un ángel, eh?. Fue entonces que ella me habló de Aurora Varela y lo que me contó me intrigó sobremanera. Me propuse esa misma semana buscarla. Y así lo hice. Cuando llegué al consultorio de Aurora recuerdo que me impactó el aura angelical que reinaba. Por todos lados se respiraba eso… ángeles.

Me saludó una alegre, cordial y hermosa mujer con la que sentí una profunda conexión inmediatamente. Sentí que éramos hermanas. Aurora me guió a la parte superior de la casa donde me indicó que me sentara en un silloncito; frente a este había una silla y una mesa con varios objetos como velas y cuarzos con cordones o algo así. Aurora se sentó frente a mí y me preguntó cómo podía ayudarme. Le dije que estaba perdida, que la separación del amor de mi vida me tenía deshecha, con el corazón hecho pedazos, y que no encontraba la paz por más que aplicaba todo lo que yo conocía de desarrollo humano y superación personal. Le dije que quería que su ángel me diera algo de luz.

Bien, me dijo, entonces charla con Samuel. Y acto seguido me explicó varias cosas sobre él. Entre lo que me dijo mencionó que él hablaba un español como antiguo o mezclado con varias lenguas, que cuando llegaba su saludo era siempre el mismo Luz, paz y amor y que cuando yo escuchara esas palabras entonces él me podía escuchar y responder. Que yo podía saludarlo de la misma manera si así lo quería.

Tomó de la mesa lo que yo veía como cordones con cuarzos y otros objetos colgando de él como cascabeles y se lo amarró a la cintura, vi entonces que era un cinturón de lo más curioso.

Voy a entrar en meditación, anunció, nos vemos al rato. Me sonrió y cerró los ojos. Yo había presenciado canalizaciones antes. En Austria había visto a Bárbara Brennan la autora de Manos que curan y Hágase la luz canalizar a una entidad de luz, y en una ocasión mi amiga Martha me había aterrado con una canalización de un ser que no era de mucha luz que digamos. Sabía de muchas otras canalizaciones, había leído a Lee Carrol quien canaliza a Kryon; a Esther Hicks quien canaliza a Abraham, a quien considero uno de mis mas grandes maestros, y a JZ Knight quien canaliza a Ramta, así que entendía el proceso. Pero nada de eso me preparó para lo que sentí cuando Samuel se hizo presente.

De pronto escuché ¡Luz, paz y amor! de una alegre vocecita que no era la de Aurora.

Me invadió el amor más grande que había sentido jamás. Me sentí tan llena de amor y alegría que comencé a llorar a sollozos. Una energía me consoló y me abrazó. Samuel comenzó a hablar sin yo haberle mencionado nada excepto la breve descripción que le había dado a Aurora. Sus palabras me brindaban alivio, luz y consuelo. Sus palabras aliviaban la tristeza y el pesar de mi corazón. Y de toda esta charla con él ese día, lo que más me impactó