Guía para principiantes. Pintura al acrílico

Por Equipo Parramón Paidotribo

El objetivo de esta GUIA PARA PRINCIPIANTES es iniciar al lector en la técnica de la pintura acrílica. Sus brillantes colores, su versatilidad (pues puede trabajarse a partir de aguadas semejantes a la acuarela o con empastes densos y opacos que recuerdan la técnica del óleo), y su rápido secado son algunas de las características que han convertido este material en el preferido por muchos artistas actuales e ilustradores. Con este libro el lector podrá resolver cualquier cuestión técnica referente a los acrílicos, gracias a textos breves refrendados por numerosos pasos a paso, indicaciones y consejos que le ayudarán a solucionar las dificultades que puedan surgir durante el desarrollo de los ejercicio. Por eso, podemos decir que el presente cuaderno constituye una guía didáctica elemental para iniciarse en este apasionante procedimiento.

• Idioma: Español
• Editorial: Parramón Paidotribo
• Fecha de lanzamiento: 19 sept 2019
• ISBN: 9788434242333

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tradicionales.

LA TÉCNICA Y SUS POSIBILIDADES

Los colores acrílicos permiten igualar, y si cabe superar, los resultados que ofrecen las técnicas de pintura más tradicionales. Son capaces de aglutinar las principales características de los otros medios pictóricos en uno: pintar con la transparencia de la acuarela, la opacidad del guache y la densidad y pastosidad del óleo. Este carácter camaleónico se combina con un mayor desdén en la planificación del trabajo, pues la pintura acrílica puede trabajarse directamente sin apenas precauciones, aplicándola casi sobre cualquier soporte absorbente. Al secar la capa pintada queda una película impermeable y permanente, sin peligro de que cambie de color con el tiempo, ni se cuartee.

Sus ventajas convierten al acrílico en un interesante campo de pruebas para el artista principiante.

Presentación y CARACTERÍSTICAS del medio

Las pinturas acrílicas se adaptan a una gran variedad de superficies, y en las primeras fases del trabajo son más fáciles de usar que cualquiera de los medios tradicionales. Su componente resinoso proporciona a la pintura consistencia, viscosidad y estabilidad de la textura tras su secado.

Las manchas secas de pintura acrílica que se acumulan sobre una paleta al secarse se convierten en virutas de plástico.

Una pintura que se convierte en plástico

Los colores acrílicos son pigmentos aglutinados en una emulsión de polivinilo que se secan por evaporación del agua que contienen formando una película elástica, transparente y muy resistente, con una consistencia similar al plástico. Tras el secado, las pinturas acrílicas se vuelven más flexibles.

Gran versatilidad

El aspecto más importante del medio acrílico es la versatilidad. Se puede emplear en lavados y en veladuras muy finas, o empastado y muy espeso, con ricos efectos de textura.

La pintura acrílica permite imitar con facilidad los efectos que producen otros medios pictóricos como el óleo, la acuarela o el guache.

CONSISTENCIA DE LA PINTURA

Las pinturas acrílicas permiten pintar con la consistencia que se desee, creando veladuras, si añadimos abundante cantidad de agua o médium acrílico al color.

Texturas opacas con un importante relieve, si trabajamos con la pintura sin diluir. Los empastes pueden efectuarse con pincel o con espátula.

Con poca dilución del color se consiguen los efectos de sfumatto con pincelada seca. Este efecto produce unas pinceladas rotas y granuladas muy características.

Consejo

El rápido secado de los acrílicos permite utilizarlos como fondos de un cuadro pintado al óleo.

El secado rápido: ventaja o inconveniente

Los acrílicos secan rápidamente, lo cual permite superposiciones de color sin que apenas se mezclen entre sí. Lo que parece una ventaja también es un inconveniente, pues se dispone de menos tiempo para manipular la pintura sobre el soporte, obligando al artista principiante a trabajar precipitadamente, lo cual puede incomodarle.

Evitar el óleo

Los acrílicos se pueden aplicar sobre cualquier superficie, a excepción de una base de pintura grasa u oleosa. Por lo tanto, no es recomendable cubrir con acrílicos una superficie pintada previamente con óleo, aguarrás, barniz o esmalte sintético, de lo contrario el color puede cuartearse y desprenderse al cabo de unos meses.

Las pinturas acrílicas no amarillean ni se endurecen con el paso del tiempo. Tampoco es necesario conservar la superficie del cuadro con barniz. Pintado por Juan Gutiérrez.

UNA FUENTE INTERMINABLE DE EFECTOS

Además de las tradicionales técnicas de pintura transparente, opaca y granulada, el acrílico se puede aplicar a modo de chorretones o ribetes que, al secarse, se convierten en tiras de plástico.

No es necesario trabajar los acrílicos con cuidado, pues también se pueden rociar o arrojar sobre el soporte en busca de un tratamiento más expresivo y casual.

Cuando la superficie de un cuadro se encuentra cubierta por una capa de pintura opaca, se puede raspar para conseguir esgrafiados que introduzcan efectos lineales.

Pintando con AGUADA acrílica

El acrílico puede utilizarse de manera diluida, superponiendo diversas aguadas de color transparente. Su ventaja con respecto a la acuarela es que