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¡Enfermedad Estás Vencida!: Usted Debe Conocer Realmente El Origen De Su Enfermedad.
¡Enfermedad Estás Vencida!: Usted Debe Conocer Realmente El Origen De Su Enfermedad.
¡Enfermedad Estás Vencida!: Usted Debe Conocer Realmente El Origen De Su Enfermedad.
Libro electrónico158 páginas2 horas

¡Enfermedad Estás Vencida!: Usted Debe Conocer Realmente El Origen De Su Enfermedad.

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Información de este libro electrónico

Es un hecho que pasamos por problemas emocionales, sentimentales, espirituales, por crisis familiares y laborales; a menudo nos convertimos en seres cargados de enfermedades y nos preguntamos: Por qu yo? S, ya conocemos sobre el cncer, la diabetes, la hipertensin y sobre otras enfermedades e inconscientemente las aceptamos, pero Sabemos realmente lo que las causa? Fueron causadas por Dios, por las circunstancias? Intentamos lo que sea para contrarrestarlas, como adquirir hbitos de vida saludables, comer sanamente, pero solo logramos retrasarlas mas no detenerlas.

Hay una verdad que usted debe conocer, una verdad que llevaba mucho tiempo olvidada.
Identifique las races de su enfermedad y descubra de qu se trata esta. Librese de esa esclavitud, para que finalmente pueda decir: ENFERMEDAD ESTS VENCIDA!

Fernando Bedn Ypez.
l me puso lodo sobre los ojos, y me lav, y veo. (Juan 9:15)
IdiomaEspañol
EditorialPalibrio
Fecha de lanzamiento17 may 2013
ISBN9781463357146
¡Enfermedad Estás Vencida!: Usted Debe Conocer Realmente El Origen De Su Enfermedad.
Autor

Fernando Bedón Yépez

FERNANDO BEDÓN YÉPEZ. Nació en Quito-Ecuador el 25 de septiembre de 1958. Está casado con Magaly Jaramillo; juntos han procreado cuatro hijos: Edwin Fernando, Andrés David, Francisco Xavier y José Luis. Tienen cinco nietos, incluyendo uno que está en camino. Ordenado como Pastor en la iglesia Biblica El Inca, en junio de 1995. Profesor en el Seminario Asambleas de Dios y actualmente es Pastor principal de Ministerios de Restauración Integral Bernabé. Ha sido invitado en varias ocasiones a dictar conferencias y talleres sobre: “Fundamentos Bíblicos de Guerra Espiritual” y consejería dirigidos a pastores y líderes, entre los cuales se destacan: *Soltando las amarras. *Restaurando toda la salud. *Matrimonios de reino. e-mail : enfermedadestasvencida@gmail.com. blog: http://enfermedadestasvencidablogspot.com/

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    ¡Enfermedad Estás Vencida! - Fernando Bedón Yépez

    Copyright © 2013 por Fernando Bedón Yépez.

    Todos los derechos reservados. Ninguna parte de este libro puede ser reproducida o transmitida de cualquier forma o por cualquier medio, electrónico o mecánico, incluyendo fotocopia, grabación, o por cualquier sistema de almacenamiento y recuperación, sin permiso escrito del propietario del copyright.

    Las opiniones expresadas en este trabajo son exclusivas del autor y no reflejan necesariamente las opiniones del editor. La editorial se exime de cualquier responsabilidad derivada de las mismas.

    Los textos Bíblicos han sido tomados de la versión Reina-Valera © 1960

    Fecha de revisión: 08/07/2013

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    Fax: 01.812.355.1576

    ventas@palibrio.com

    470582

    Índice

    PREFACIO

    DEDICATORIA

    INTRODUCCIÓN O PUERTA DE ENTRADA

    ACERCA DE LA PORTADA: ¡ENFERMEDAD ESTÁS VENCIDA!

    CAPÍTULO 1 En el principio creó Dios los cielos y la tierra.

    CAPÍTULO 2 El PADRE CUBRE LA VERGÜENZA DEL HIJO

    CAPÍTULO 3 TESTIMONIO DEL AUTOR

    CAPÍTULO 4 NUESTRA RESPONSABILIDAD PRIORITARIA ES LA SALUD

    CAPÍTULO 5 PODER EN LA PALABRA

    CAPÍTULO 6 LA MEDICINA VIENE DE DIOS

    CAPÍTULO 7 REDIMIR SIGNIFICA: PAGAR UN RESCATE.

    CAPÍTULO 8 ORIGEN DE ALGUNAS ENFERMEDADES

    CAPÍTULO 9 EL CÁNCER Y SU ORIGEN EN UN ESPÍRITU DE REBELIÓN

    CAPÍTULO 10 LA BASE DE ATRACCIÓN DE LAS ENFERMEDADES CRÓNICAS

    CAPÍTULO 11 EL ORGULLO EL ESPÍRITU DE LEVIATÁN DESENMASCARADO

    CAPÍTULO 12 ANTE LA OFENSA Y EL DOLOR, SOLO EL PERDÓN.

    CAPÍTULO 13 El HÍGADO Y SU RELACIÓN CON ESPÍRITU DE RAÍZ DE AMARGURA

    CAPÍTULO 14 UN CASO DE FIBROMIALGIA

    CAPITULO 15 APLICACION DESAFÍO A CREERLE A DIOS, EN HUMILDAD:

    PREFACIO

    La manifestación del Espíritu Santo en el área de sanidad en la iglesia cristiana contemporánea ha tenido un fuerte resurgimiento desde los años sesenta, pero solo en las dos últimas décadas comenzaron a formarse ministerios internacionales con el fin de poner en evidencia dicho tema y su impelente necesidad en la vida de la iglesia, capacitando personas con llamado para este propósito.

    Junto con mi esposa, nos hemos dedicado a este ministerio desde hace ya más de 21 años, y no solamente he leído una cantidad significativa de libros sobre el tema, sino que, principalmente, al dedicar tantos años a esta área del ministerio, hemos constatado que la condición física del ser creado depende en gran medida de su condición espiritual.

    Por eso la presentación que Fernando Bedón hace es tan medular, y si ello no fuera suficiente, su revelación puntual sobre las enfermedades mencionadas saca al lector de nebulosas teológicas y lo lleva a una comprensión y aplicación clara y concisa. Sin embargo, lo que realmente resalta la importancia de este libro, es el hecho de que es directa voluntad de Dios para nuestros tiempos. Lo puedo decir porque he sido testigo de su gestación desde sus albores, y he podido ver como el Señor lo acompañó en cada paso, hasta en los mínimos detalles, en una serie de hechos que por la manera en que se dieron, evidenciaron el sello inequívoco de Dios; hechos que bien podrían ser un material precioso como para escribir otro libro.

    Sé por la experiencia que tengo en el tema, que cada libro de ésta índole tiene sus características, pero ninguno había logrado evidenciar la esencia de dicha problemática como el escrito por Fernando, y espero de corazón que Enfermedad estás Vencida!, sea solo el primero de una serie preciosa, como parte de lo que está haciendo el Espíritu Santo en estos tiempos, para crear una verdadera transformación en la vida de muchísimas personas, en la iglesia y el mundo.

    De hecho, en una iglesia que se parece cada vez más a un show Business; más allá de un compendio de sanidad para el ministro, este es un libro de discipulado para el necesitado, y como tal de enorme importancia en el contexto eclesiástico con fines de equipar y de entregar al feligrés las herramientas indispensables para un sano y fuerte crecimiento en el espíritu, pero también para el desarrollo del potencial que Dios ha puesto en cada uno de nosotros para Su Santo propósito.

    Un consejo al lector, léalo despacio, medite sobre los conceptos que en él encuentre, aplíquelo con su realidad y se sorprenderá con un fruto inesperado y de enorme bendición para su vida y la de aquellos que le rodean.

    Si anhela una nueva oportunidad, un nuevo comienzo, este libro es para usted.

    Valerio Magrini

    Ministerios Jerem, Fundación Rio de agua Viva

    DEDICATORIA

    Quiero dedicar éste libro al Inspirador y Autor del mismo: JESUCRISTO el Señor, Quien al darme Su vida, y la vida, me dio la verdad y con ella la Libertad; así que siendo libre escogí servirle; me concedió el honor de llamarme a ser parte de sus Ministros aquí en La Tierra, y con esto la gran tarea de presentar y predicar el evangelio del reino, sanando enfermos de toda dolencia y liberando cautivos del reino de la oscuridad, para, en Su nombre, trasladarlos al reino de la luz, reino cuyo Rey es El. - Gracias por tu misericordia Señor.

    Quiero también agradecer a las personas que confiaron en mí; a mis amigos y consiervos; el Pastor Teodoro Sauvé y a un hombre de fe José Shaw, Estadounidenses, quienes siendo sensibles a la voz de Dios y a la necesidad de muchos dolientes-necesitados de una palabra precisa para su sanidad, hicieron posible éste propósito con sus oraciones y apoyo de toda índole. Gracias de verdad.

    A mi familia, y de manera especial a mi hijo José, quien transcribió los primeros capítulos de éste manuscrito, y con paciencia y buen criterio trabajó conmigo haciendo los cambios necesarios propios de un trabajo de ésta naturaleza; conforme le solicitaba siempre estuvo allí. Gracias.

    También agradezco a Valerio Magrini, amigo y consiervo, quien siempre me animó, siendo el la persona que en varias ocasiones me hizo ver que en realidad Dios estaba respaldándome.

    Pero mi agradecimiento es mayor a quienes no confiaron, pues con respeto los escuché, aun cuando no hablaban, dudando de si en verdad debía escribir el libro; pero ante cada NO que surgía, había un de Dios en lo más profundo de mi corazón.

    Y no puedo dejar de mencionar a quienes conociendo del amor de Dios por los más pobres- los enfermos, me refiero a los intercesores que son los que visitan los hospitales, sus oraciones fueron escuchadas, sus nombres no constan aquí, porque son varios y no a todos los conozco, y los amo; me refiero a quienes tienen una verdadera compasión por estas personas, compasión desde el espíritu, sobre todo por aquellos que tienen los días contados, cuando les diagnostican una enfermedad en etapa terminal, aunque aún no haya llegado su momento de partir.

    Dedico entonces este libro, a cada persona que sufre o padece de alguna enfermedad crónica o terminal, y espero que sea llena de paz, de fortaleza y de sabiduría de Dios, confío en que su aplicación les sirva para vencer la enfermedad. Funcionó conmigo, funcionará con usted, confío en eso, por eso lo escribí. Ruego a Dios que así sea.

    Que el amor del Padre, la Gracia de nuestro Señor Jesucristo y la llenura del Espíritu Santo, sean en cada lector.

    El autor

    INTRODUCCIÓN O PUERTA DE ENTRADA

    Usted es lo más importante para Dios, por lo tanto, su bienestar es el de Él.

    Quise escribir este libro, partiendo de ése hecho, lo importante que somos para él; sí, tan importantes, que no escatimó ni a su propio Hijo, para darnos a conocer Su amor, Su persona, Su carácter.

    Jesús fue el Cordero que quitó el pecado que nos separaba del Padre, pero este sería solo el primero de los pasos, pues lo que seguiría era igual de importante y necesario. Nosotros, una vez sin pecado, es decir, sin el poder de éste en contra nuestra, por su Gracia, seríamos llenos de su plenitud, de su Gloria, de su Santo Espíritu; Esto es salvación.

    El propósito de la salvación o de la sanidad, busca establecerse en el espíritu de las personas, al punto que, al ser alcanzados, puedan obtener y gozar de buena salud; Mental, Física y Espiritual.

    Mental, por cuanto se nos renueva en ella, pues nos da una mentalidad acorde con su Reino; en cuyo sistema de Gobierno se vive libre de angustias y de miedo; una mente creativa y en función del servicio práctico hacia los demás; una mente capaz de generar ideas que se convierten en recursos para el bien.

    El apóstol Pablo dice: "En cuanto a la pasada manera de vivir, despojaos del viejo hombre, que está viciado conforme a los deseos engañosos, renovaos en el espíritu de vuestra mente y vestíos del nuevo hombre, creado según Dios en la justicia y la santidad de la verdad". (Ef.4:22-24). Esto significa, que para despojar se necesita de cierta violencia santa, o fuerza de voluntad para dejar el vicio de pensar mal y vivir en derrota. Pero una vez renovados actuar con mentalidad de fe, con claridad objetiva y direccionada por el Espíritu Santo; una mentalidad que confíe sencillamente en las promesas de Dios y que las aplique, porque fe también es: Vivir las promesas de Dios aún cuando todavía no se cumplan.

    Salud espiritual por cuanto vivificó el espíritu, nada más y nada menos que con su Espíritu Santo, dándonos fuerzas para caminar sobre las aguas, o sea, sobre las dificultades, porque todo esto hay que vivirlo en el espíritu.

    En el Libro de Isaías; Dios mismo dice: "Porque así dijo el Alto y Sublime, el que habita la eternidad, y cuyo nombre es el Santo: Yo habito en la altura y en la santidad, con el quebrantado y humilde de espíritu, para hacer vivir el espíritu de los humildes y para vivificar el corazón de los quebrantados". (Is.57:15) Vemos ahora a la luz de éstas palabras que la voluntad de Dios es resucitar nuestro espíritu; lo cual significa que tendremos de su Vida, pero la condición para llegar a ella es la humildad, la misma que se ve reflejada en una actitud que me permite reconocer que solo no puedo. Humildad, por cierto; no significa miseria económica.

    Cuando el corazón está vivificado, significa que se tiene fe y esperanza para alcanzar los objetivos planteados por Dios en cada corazón humano; más no los planes del hombre planteados a Dios; esto es lo que trae frustración. El estuvo presente en la formación de cada individuo, en cada vientre; todos traemos propósitos y los llevamos a cabo en cada oportunidad que tenemos de servir a alguien, al igual que cuando vencemos los obstáculos que nos desafían por difíciles que sean, pero que llegan a superarse solo cuando los vemos

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