Mitologia Personal: Historias De Nuestro Pasado, Una Inspiracion Para Nuestro Futuro

Por David Feinstein

En este libro los autores utilizan la experiencia ganada en talleres con ms de tres mil personas, para delinear de manera comprensiva y accesible al lector, una gua para un interminable viaje del auto-descubrimiento. los lectores de este libro tambin aprendern habilidades que intentan traer a luz e influenciar los procesos dinmicos por los cuales crean sus relaciones con sus seres queridos, su sociedad y ellos mismos. La mitologa ha sido redescubierta como resultado de los avances en la psicologa hechos durante este y el siglo pasado; tiene el potencial de tomar el lugar que una vez tuvo, el de ser una gua en un mundo que ha sido inmerso en la trivialidad y la confusin. Como resultado, la mitologa es capas de llevarnos paso a paso a una consciencia de la forma en que determinamos las reglas que moldean nuestras decisiones, actitudes, y otros aspectos de sus vidas. El mismo tiempo, los lectores comenzaran a observar la manera en que sus viejos mitos han ido llevndoles por caminos que han limitado su crecimiento y relaciones personales.

El camino empieza en el pasado del lector, en las races mticas plantadas por sus ancestros, y esta bsqueda es trada al presente donde el lector observa el papel que estas historian juegan en sus vidas cotidianas, las consecuencias que ellas tienen en la manera que las decisiones se forman, y en la influencia que tienen con sus otras relaciones.

Nunca antes la habilidad de observarnos a nosotros mismos ha sido tan importante como en la presente poca. La forma en que las personas entran en contacto con otras culturas y las formas de vida que son experimentadas en estos diferentes sitios y tiempos, puedo abrir los horizontes del lector a las diferentes formas que sus decisiones son consideradas. La gente en la actualidad vive en un mundo que es ms consciente de su propia diversidad. Esta realizacin puede ser una interminable fuente de inspiracin, motivacin y crecimiento - uno que puede ser compartido con el mundo.

Los autores invitan a sus lectores a explorar su universo interno por medio de un viaje provocativo dentro de sus profundidades mticas, entrando en dialogo con la sabidura interior que habita en todos, llenndoles de inspiracin que puede ser parte de sus viajes. Como resultado, los lectores de este libro podrn usar sus manos, mentes, corazones y espritus para influenciar su tiempo y espacio en una excitante odisea hacia un mejor futuro.

• Idioma: Español
• Editorial: AuthorHouse
• Fecha de lanzamiento: 21 jun 2012
• ISBN: 9781477233047

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© 2012 by David Feinstein, Ph.D. Stanley Krippner. All rights reserved.

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Published by AuthorHouse 04/04/2012

ISBN: 978-1-4208-7899-8 (sc)

ISBN: 978-1-4772-3304-7 (ebook)

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La obra en este libro no es ficticia pero en algunos casos, los nombres y lugares han sido cambiados para proteger la privacidad de aquellos involucrados. Mientras que este libro fue hecho con la intención de guiar a personas en su desarrollo personal y espiritual, no es un sustituto para la psicoterapia y no esta hecho con la intención de ser utilizado como tratamiento para enfermedades psiquiátricas.

Ilustraciones por Dierdre Luzwick

Contents

Introducción

Prólogo

CAPITULO 1 :    En Tus Profundidades Míticas

CAPITULO 2 :    Primera Etapa:  

 Reconocer Cuando Un Mito Guía Ya No Es Un Aliado

CAPITULO 3 :    Segunda Etapa:  

 Aclarando las Raíces del Conflicto Mítico

CAPITULO 4 :    Tercera Etapa:  

 Concibiendo una Visión Mítica Unificante

CAPITULO 5 :    Cuarta Etapa

De la Visión al Compromiso

CAPITULO 6 :    Quinta Etapa:  

 Entretejiendo

CAPITULO 7 :    Su Mitología Evolucionando

Epílogo

Apéndice A

Apéndice B

Apéndice C

Notas

Este libro está dedicado a la memoria de  

 June Singer, Ph.D.

Los autores quisieran agradecer la ayuda proporcionada por El Centro de Estudios de la Conciencia, Saybrook Escuela de Postgrado y Centro de Investigación, San Francisco, California, E.U., y a la editorial pasada de las versiones en ingles de este libro Personal Mythology (Tarcher / St. Martin’s 1988) y The Mythic Path (Tarcher / Putman’s 1997), y una versión previa publicada en español Mitología Personal (Arquetipos Planeta 1992).

Introducción

Los mitos personales no son lo que piensas que son. No son creencias falsas, no son historias que nos contamos para explicar nuestras circunstancias y comportamientos. Tu mitología personal es la vibrante infraestructura que dirige tu vida, aunque no nos demos cuenta de ello. Vivimos a través de nuestra mitología, conciente e inconcientemente. En este excepcional libro, los autores nos desafían a reconocer nuestra mitología, por medio de rituales, sueños e historias, a confrontarla y obtener algún control sobre ella. Este libro es un ejercicio sobre la evolución de la conciencia nuestra conciencia y la conciencia de la cultura en que estamos inmersos.

Vivir una vida mítica significa reconocer nuestros orígenes tanto personales como colectivos. En el proceso de aprendizaje, descubriremos o afirmaremos que no somos seres aislados, independientes, sino el producto de milenios de cultura y de maduración de la raza humana. La mitología personal no es sino la flor en el arbusto, el mito familiar es la rama, las estructuras sociales el tronco y la raíz es la condición humana.

Los mitos personales estructuran nuestra conciencia y nos señalan el rumbo que seguiremos. Si no estamos familiarizados con el contenido de nuestra mitología personal, ella nos dirigirá inconcientemente con el resultado de que confundiremos lo que existe de manera objetiva en el mundo con la imagen del mundo que vemos con lentes distorsionados. Basándonos en una mitología personal inconciente o en una mitología rígida impuesta por nuestro grupo social, tendemos a ver solo un camino correcto. No lo vemos como nuestro camino, sino como el camino y no percibimos que puede conducir al desastre tanto como a la satisfacción.

El libro tiene sus raíces en un proyecto de investigación en la Facultad de Medicina Johns Hopkins, donde Feinstein comparó distintos sistemas de terapia de crecimiento personal con terapias más tradicionales. Encontró un común denominador: cada terapia, a su manera, intentaba influir en la manera en que los individuos construyen su comprensión de sí mismos y de su lugar en el mundo. El utilizó el término mitología personal para describir esta construcción evolutiva de la realidad interior y para señalar que todas las construcciones humanas de la realidad son mitologías.

El papel del doctor Krippner en este libro ha consistido en ofrecer inspiración y perspicacia al autor principal. Aporta a esta colaboración treinta años de investigación pionera sobre la conciencia humana, en particular sus estudios sobre sueños, curación y estados alterados de conciencia. Durante la década pasada los autores organizaron talleres y desarrollaron métodos por medio de los cuales se puede llegar a reconocer las mitologías que han guiado a los participantes en el pasado. Entendiendo esto, es posible llegar a desarrollar mitos más vitales y viables. El proceso está ordenado sistemáticamente y abarca la mayor parte de este trabajo. Paso a paso, el libro expone una guía para la transformación personal a través de explicaciones, de experiencias participativas y de casos reales. No solo proporciona la información conceptual necesaria, sino que ayuda al lector a integrar el conocimiento por medio de rituales y de prácticas, y a aplicar después esta nueva conciencia a la vida cotidiana.

Se ofrece un enfoque que delinea cinco etapas de crecimiento. Las etapas han sido tomadas de fuentes entre las que se cuentan muchas escuelas, desde la antigua filosofía griega, pasando por los métodos y teorías de la psicología Freudiana y Junguiana, hasta los enfoques prácticos contemporáneos del conductualismo y la psicología cognitiva. Ninguno de estos sistemas son aplicados sin criterio y los autores han logrado integrar una síntesis coherente de una importante colección de teoría psicológica en este trabajo.

Las tres primeras etapas recuerdan a la tesis, la antitesis y la síntesis socráticas. La primera etapa se enfoca en reconocer y definir nuestro mito personal y a descubrir hasta que punto este mito deja de ser un aliado. La Etapa Dos requiere la identificación de un mito personal opuesto, aquel que crea un conflicto en la psique de la persona. Se centra la atención en los mitos conflictivos y son examinados para comprobar la conexión entre cada uno de ellos con el pasado. La persona pronto reconocerá que es muy poco probable que los mitos de la niñez sean útiles para la vida adulta.

La Etapa Tres la síntesis, lleva a la concepción de una visión unificadora. Aquí se produce la confrontación, entre el mito antiguo y el mito opuesto. Se les puede personificar para llegar a una solución del conflicto a través de la representación de la vida interior y como tan agradablemente lo expresan Feinstein y Krippner, para no tener que verlos jugar en el campo de la vida. En el proceso, los obstáculos a la armonía son revisualizados como oportunidades de crecimiento.

La Etapa Cuatro comienza donde diversos tipos de terapia terminan. Se titula De la Visión al Compromiso. Aquí se prueban y se refuerzan las percepciones para que el proceso visualizado pueda pasar del reino de lo hipotético o imaginario hasta la fase de la intención y luego llegar a la acción. La Etapa Cinco implica entretejer vida a la nueva mitología. Aquí se sugieren una serie de pasos prácticos donde la transformación interior puede ser mostrada en el mundo. La mariposa emerge de la crisálida y es (y no es) un nuevo ser. De aquí en adelante, el proceso continúa a través tanto del trabajo interior como de vivir en el mundo de una forma nueva, más libres de restricciones y de suposiciones inconcientes.

La gran contribución de Mitología Personal me parece ser, está en la forma en que facilita a los individuos reconocer las causas fundamentales de sus dificultades y luego el responsabilizarse de su propia salud. En esta época, la información es más disponible a mayor cantidad de personas que en el pasado, y los individuos están mejor informados sobre que es lo que se necesita para obtener y mantener un estado saludable, tanto físico como psicológico. En consecuencia, el médico, el psiquiatra y el psicoterapeuta ya no son los únicos que pueden conducirnos hacia una mejor salud. En muchas situaciones es posible, y hasta deseable, que los individuos sean responsables de su propio bienestar. Se llega a esto mediante prácticas tales como la gimnasia, la buena nutrición, y por el hecho de interesarse en temas diversos. Feinstein y Krippner señalan el camino y proporcionan una muy buena guía sobre como cuidar la salud y el desarrollo psicológico personal. Cada persona que lea este libro se verá ante el desafío de emprender el viaje de la manera que le parezca apropiada, a solas, con un compañero, con amigos o en un grupo comprometido con el proceso de crecimiento.

En algún punto del camino, los mitos personales convergen con los mitos culturales que gobiernan toda actividad humana. Llega un momento, cuando trabajamos sobre nuestros temas personales en el que nos damos cuenta de que nuestras preocupaciones personales tienen un grado limitado de importancia. El individuo independiente es un mito en decadencia. Siempre hemos dependido de otros para satisfacer nuestras necesidades básicas: comida, amparo, seguridad y afecto. ¡Cuanto más nos necesitamos mutuamente para suplir todas las exigencias complicadas de la vida actual! Usted es participe en la creación de lo que ocurrirá en este planeta. Al mirar hacia el futuro, los autores señalan que un nacionalismo rígido, el ego ferozmente independiente, fuera de control, pierde credibilidad como figura social. En la emergente aldea global, como la denominara Marshall McLuhan, las lealtades trascienden los límites regionales y culturales. La información, los negocios, las artes plásticas, los medios de comunicación, las noticias, nada de esto conoce de fronteras nacionales.

Ya no podemos separarnos del destino del planeta, se trata de una sociedad global en donde la gente viva en confianza mutua y alta productividad, la alternativa, una aniquilación nuclear. El siguiente desafío, que Feinstein y Krippner plantean cerca del final, es aplicar a la comunidad humana los principios derivados de observar el modo en que los individuos piensan de acuerdo a su mitología. Los métodos que los autores han presentado para trabajar con los conflictos interpersonales ¿podrán utilizarse para trabajar con los mitos culturales que generen conflictos intergrupales e internacionales? Igual que en cualquier sistema abierto, la solución de una serie de problemas abre las puertas al trabajo con una serie de problemas a un nivel más alto. El reto que bien podría llevarnos al próximo paso en la evolución de la conciencia.

Prólogo

Expandiendo Nuestra Mitología

Más Allá de los Limites de las Imágenes Culturales

Las imágenes míticas… son imágenes que nos involucran tanto psicológicamente en nuestras reacciones corporales a ellas, como espiritualmente en los pensamientos elevados que tenemos al respecto. Cuando una persona descubre que vive míticamente, ella o él experimenta la vida con intensidad y de una manera reflexiva.

-NAOMI GOLDENBERG (1)

Ser conciente que uno vive míticamente es comprender la vida como una dramatización cuyo significado supera las preocupaciones cotidianas. Es nutrir una apreciación en constante maduración sobre nuestras raíces culturales y ancestrales. Vivir míticamente es buscar dirección en los sueños, en la imaginación y en otras reflexiones de nuestro ser interior, así como también en las personas más inspiradoras, en prácticas y en instituciones de nuestra sociedad. Vivir míticamente también es cultivar una relación cada vez más profunda con el universo y con sus grandes misterios.

Desde mediados de la década de los setentas en los Estados Unidos, hemos instruido a unas cinco mil personas en un sistema para aprender a vivir más mitológicamente. En este libro presentamos ese sistema como una serie de rituales personales diseñados para lograr una mayor concientización de la mitología oculta que ordena nuestros pensamientos, emociones y comportamientos. La orientación en silencio que nos brinda nuestra mitología personal otorga significado a cada situación a la cual nos enfrentamos y determina la actitud que luego tomaremos. Nuestra mitología personal actúa como una lente que colorea nuestras percepciones de acuerdo a sus propias suposiciones y valores. Destaca ciertas posibilidades y ensombrece otras. A través de ella, vemos el panorama de cambios constantes de nuestras experiencias en el mundo.

Todos solemos vivir con poca conciencia del lente a través del cual vemos. De acuerdo a la analista junguiana Frances G. Wickes: El hombre actual no ha tomado conciencia del mito que vive en su interior, casi siempre invisible, que de manera dinámica lo impulsa a la elección(2). Es posible, sin embargo, retroceder y comenzar a inspeccionar el lente, la mitología que conduce nuestras elecciones. Para Wickes, el arte de vivir es, en esencia, el desarrollo de la capacidad de la elección interior. Ella considera que de todas las artes creativas es la más difícil y la más distinguida(3). Desarrollar la capacidad de la elección interior es el desafío que presenta este libro. Los autores ofrecemos este desafío con la convicción de que el examinar la mitología personal reforcemos nuestra capacidad de hacer elecciones más creativas y más válidas.

Gran parte de lo que experimentan las personas que tienen algún padecimiento psicológico está entretejido con mitos personales que no armonizan con las necesidades, con los potenciales y con circunstancias reales. Intentar mantener un mito personal que no está en armonía con nuestra forma de ser o con el mundo en el que habitamos que resulta doloroso, y una mitología incapaz de servir como puente hacia significados más profundos y hacia una mayor inspiración que la encontrada en el mundo exterior suele estar acompañada por una ansiedad profunda e indefinida. A medida que desarrollamos una mayor concientización de nuestra mitología emergente, experimentamos una mayor intimidad con nuestro ser interior. El conócete a ti mismo de esta inspirada y sustancial manera nos inmuniza contra por lo menos una cadena de las tensiones provocadas por la ansiedad generalizada de hoy en día al proporcionarnos de un mayor soporte de nuestro yo interior.

Su mitología personal es la distintiva y a veces imperceptible, autopsicología (4) que guía su comportamiento y prepara el camino a medida que evoluciona en el mundo. Mitología Personal: Historias de nuestro pasado una inspiración para nuestro futuro presenta un conjunto integrado de principios y procedimientos psicológicos que puede dominar para promover el desarrollo personal. El libro le ayudará a examinar, revisar y revitalizar las teorías privadas que ordenan sus vidas. Kurt Lewin, quien fue distinguido por su ingeniosa aplicación del conocimiento psicológico a problemas sociales, gustaba señalar que nada es tan práctico como una buena teoría. Su observación es válida no solo para teorías científicas, sino también para las teorías privadas o mitos personales que todos tenemos. Tales teorías son más que simples constructos intelectuales: son modelos de la realidad establecidos que determinan nuestra forma de ver el mundo y de comprender el lugar que ocupamos en él. Cuando esos modelos fallan o quedan desactualizados, conducen a expectativas irreales, elecciones pobres y angustia emocional. Cuando funcionan bien, tenemos mejor acceso a nuestra sabiduría interior y una mayor comprensión del medio que nos rodea.

Los mitos, en el sentido en que nosotros utilizamos el término, no son leyendas ni falsedades. Antes bien, son los modelos con los cuales los seres humanos codificamos y organizamos nuestras percepciones, sentimientos, pensamientos y acciones. Nuestra mitología personal está arraigada en el suelo mismo de nuestro ser y es además un reflejo de la mitología sustentada por la cultura en la cual vivimos. Todos creamos mitos basados en fuentes que se encuentran en nuestro interior y en fuentes externas, y vivimos de acuerdo a esos mitos. Sobre ellos, el psicólogo Henry Murray pensó así: los mitos sirven para inspirar, generar convicción, orientar la acción y unificar a una persona o a un grupo al crear participación apasionada de todas las funciones de la personalidad (mito individual), o de todos los miembros de una sociedad (mito colectivo). (5)

Por medio de nuestra mitología personal, interpretamos la experiencia de nuestros sentidos, damos orden a nueva información, encontramos inspiración y nos orientamos hacia los poderes del universo que quedan fuera del alcance de nuestra comprensión. Sin nuestra mitología, nuestras experiencias serían desarticuladas y caóticas. En este sentido más amplio no deben entenderse que los mitos sean verdaderos o falsos, correctos o incorrectos. Son formas de organizar la experiencia que finalmente pueden juzgarse más o menos efectivamente, para el bienestar y el desempeño de un individuo o de un grupo.

Nuestro enfoque está organizado alrededor de tres premisas básicas:

1.   La construcción del mito, tanto en el nivel individual como en el colectivo, es el principal mecanismo psicológico, aunque usualmente inadvertido, por el cual los seres humanos navegan su camino en la vida.

2.   Las personas en las culturas contemporáneas son más capaces de construir mitologías personales distintitas y de reflexionar sobre estas mitologías que en cualquier periodo previo de la historia - y la necesidad de tomar conciencia de la mitología que vivimos es más urgente que nunca.

3.   Al comprender los principios que gobiernan nuestros mitos implícitos, quedamos menos limitados por la mitología de nuestra infancia y de nuestra cultura, y podemos comenzar a introducir en nuestra vida modelos que alguna vez parecieron predeterminados y que quedaban fuera de toda discusión.

MITOLOGIA EN UN

CONTEXTO CONTEMPORANEO

En estos últimos tiempos ha renacido el interés por la mitología como un camino a una vida interior más rica y a un panorama espiritual más sofisticado. Bruno Bettelheim, Robert Bly, Jean Shinoda Bolen, Joseph Campbell, Joan Halifax, James Hillman, Jean Houston, Robert Johnson, Sam Keen, Rollo May, Arnold Mindell, Paul Rebillot, William Irwin Thompson y Barbara Walker se cuentan entre las figuras contemporáneas que han ofrecido perspectivas psicológicas más vitales por medio de la invocación de la mitología. Nos agrada pensar que nuestro trabajo también constituye una ayuda para revitalizar este antiguo y poderoso concepto y aplicarlo de una manera contemporánea y en cierto sentido novedoso. Además de sugerir que las mitologías funcionan en el mundo moderno igual que funcionaron en tiempos pasados, y que operan tanto a nivel personal como cultural, queremos destacar que todos podemos desarrollar un conjunto de habilidades con el objeto de corregir nuestra mitología personal de manera benéfica. Cuando alteramos un mito guía, obtenemos como resultado cambios decisivos en nuestras percepciones, sentimientos y conducta.

Un mito es una narrativa que puede ser definida como una declaración o historia concerniente a preocupaciones o temas existenciales humanos que tienen consecuencias en el comportamiento. Debajo de esta narrativa hay una matriz de símbolos, metáforas, sentimientos y motivos imaginarios que se organizan a sí mismos fuera de la conciencia. Pueden ser culturales, institucionales, étnicos, familiares o personales.

Nuestra mitología es, hasta cierto punto, la mitología de nuestra cultura en microcosmos. Todo lo que hacemos y cada pensamiento que tenemos conlleva la marca distintiva de la mitología de la cultura en la que crecimos. Hasta las actividades que puedan parecer naturales y universales están dictadas por supuestos básicos y por imágenes implícitas reflejadas en nuestra cultura. Lo que comemos y el modo de comerlo, la ropa y el modo en que la vestimos, si nuestro pensamiento está orientado hacia el presente o hacia el futuro, si nuestra experiencia del momento acentúa pensamientos o acciones, de que modo tratamos a los extraños y recibimos a los amigos, y la manera en que adquirimos, acumulamos y exhibimos las posesiones materiales todo está moldeado, de manera muy importante, por la mitología de nuestra cultura.

Los mitos de hoy aparecen bajo aspectos menos característicos que las historias elaboradas y los rituales exóticos de los pueblos tribales de la antigüedad. Los espíritus y las deidades cuya autoridad no tenía rival en las culturas tribales, clásicas y medievales, han pasado a ser reliquia. Hoy encontramos una abundancia de héroes y heroínas mortales, tanto reales como imaginarios en las novelas, en las historietas, en el cine y en la televisión. Mientras estas imágenes son menos que venerables -en vez de pasar a través de generaciones, aparecen repentinamente y se desvanecen abruptamente - ellas son diseminadas a través de poderosos medios y dejan fuertes impresiones. Las letras de las canciones populares suelen portar mensajes míticos apremiantes que más tarde pueden aparecer palabra por palabra en boca de un adolescente como una declaración de amor, como una manifestación de insolencia a como una nota de suicidio.

Los mitos impregnan todas las áreas de la vida moderna. Se reflejan y son transmitidos a través de escenarios, pantallas y canciones; educación, religión y política; literatura, arte y arquitectura; publicidad, moda y diseño. Están entrelazados con la manera en que educamos a nuestros hijos, con las normas sexuales y sistemas sociales. Son sostenidos por las tendencias en nuestros libros de historia y noticieros, y expuestos por la diferencia de salarios entre un buen profesor, un buen vendedor y una estrella de cine. Los mitos que operan en las sociedades modernas tienden a alentar el progreso material y el control de la naturaleza, en lugar de la armonía y la participación en los ciclos naturales que caracterizan a las mitologías clásicas. Dado que las culturas orientadas hacia la tecnología han descontado la dimensión mitológica que subyace al reino de lo material, como sociedad hemos llegado a ser muy poco versados en nuestra interacción con los niveles más profundos de la existencia.

La lógica de la mitología occidental, de acuerdo a Sam Keen, ha sido dictada por la obsesión erótica con la máquina(6). El identificó unos veinticuatro artículos de fe que acompañan esta mitología de la siguiente manera: sensación, intuición y sentimiento son formas primitivas e inmaduras de pensamiento; las mujeres, como la naturaleza, deben ser controladas y excluidas de posiciones de poder; la vida humana se organiza alrededor de las leyes del mercado, el conocimiento y el poder son pilares gemelos de la identidad humana. Estos axiomas ahora están siendo desafiados gracias a la cada vez mayor cantidad de ramificaciones peligrosas.

Uno de los principales papeles del mito ha sido siempre el de traer el pasado al presente. A través de este enlace de épocas, el conocimiento y la sabiduría acumuladas por nuestra cultura son comunicadas a una nueva generación. Hoy, sin embargo las circunstancias en las que nuestras mitologías deben servir de guía cambian a una velocidad sin precedentes. Mitos que perduraron por mucho tiempo han comenzado a quebrar bajo el peso de cambios bruscos en las bases mismas de la organización social, tales como sobrepoblación, escasez de recursos y riesgos crecientes para futuras generaciones. Desde de la mitad del siglo pasado, los mitos culturales han pasado a ser obsoletos con más rapidez que en cualquier otro periodo en la historia. La vida útil de un mito guía jamás ha sido tan corta y vemos que cada día se forjan mitos nuevos en el yunque de la vida del individuo.

Al escribir sobre la experiencia de ser una joven estadounidense en la década de los ochentas, Wanda Urbanska observa que los límites de la imaginación están:

definidos por el sombrío proyecto de una aniquilación nuclear, no por la esperanza de un mejor mañana… Crecimos con la vergüenza de Vietnam y del Watergate, no con la estabilidad de la presidencia de Eisenhower. Crecimos con las presiones de la secta Moon y el temor al terrorismo político y a los secuestros aéreos, no con la certeza de ir a misa los domingos y de la supremacía de los Estados Unidos. Crecimos con el punk rock y los videos musicales por televisión, no con las hermanas Lennon y Papá sabe lo que es mejor . . . Somos una generación alimentada con hamburguesas y refrescos, no con comidas caseras y leche entera. (7)

Los valores guía y las apreciadas convicciones de las generaciones anteriores suelen resultar inaplicables a los temas contemporáneos. Los mitos que alentaban la formación de familias numerosas no estaban preocupados con la sobrepoblación. Las expectativas de ascensión con hogares más grandes y mayor consumo asumían recursos naturales ilimitados. Las imágenes culturales que exaltaban a la mujer sumisa la definían como un apéndice del hombre. Las políticas externas beligerantes que desde siempre fueron consideradas como la fuerza de una nación crearon una espada de Damocles de destrucción nuclear que reverbera en las pesadillas de los niños y en la inquietante tasa de suicidio de los adolescentes. Los mitos guía que eran factibles en memoria reciente han perdido su viabilidad a una velocidad vertiginosa. Así como la historia avanza con mayor rapidez lo mismo sucede con la necesidad de facilitar la revisión de los mitos que nos guían.

La diversidad de las imágenes míticas que encontramos a través de los medios electrónicos, también puede resultar abrumadora. Durante la mayor parte de la historia de la civilización, los mitos ostentados por los individuos de una sociedad fueron relativamente uniformes, lo que casi no dejaba lugar a ser cuestionados o a variaciones. El diferenciarse era arriesgarse a la censura e incluso a la muerte. Las mitologías antiguas se veían limitadas por tradición o quizás alteradas por las visiones sagradas de un shaman. Sin embargo, no hay una sola fuerza unificadora en esta compleja civilización que tenga la fuerza suficiente para preservar la cohesión entre la multiplicidad de mitologías competidoras a las que están expuestas las personas en la actualidad.

Es probable que nuestras actitudes y valores difieran de la de nuestros vecinos en aspectos que no podrían haber sido concebidos en las culturas tribales. Además, nos hemos visto obligados a aprender a reflexionar sobre la brecha que existe entre nuestros mitos y las situaciones con las cuales nos enfrentamos, con mucha más agilidad que nuestros padres o las generaciones anteriores a ellos. Jamás se había podido elegir entre tantas visiones, y tampoco había medios de comunicación que tuvieran la capacitad de hacer desfilar esas visiones frente a nosotros. Crecer ya no es simplemente cuestión de seguir el camino ya recorrido por nuestros ancestros, que por generaciones pueden haberse dedicado a la misma ocupación, que pueden haber tenido convicciones religiosas similares y haber considerado que los papeles del hombre y la mujer fijados por la tradición eran parte del orden natural.

La necesidad de liberarnos de mitos anticuados es cada vez más urgente. Rollo May comentó que los mitos y los símbolos antiguos por los cuales nos orientamos desaparecieron, la ansiedad es desenfrenada… El individuo se ve forzado a volver hacia sí mismo (8). Ante la desilusión causada por las cautivantes imágenes culturales del pasado, sensación que se combina con la capacidad que tiene nuestra imaginación para remontarse más allá de lo real y del presente, cada uno de nosotros puede ver distintas posibilidades personales, cuyo alcance era imposible de imaginar previamente. En pocas palabras, la mitología se ha convertido en un asunto cada vez más personal, y una de las características distintivas de la vida moderna, es la velocidad del avance de ese desarrollo.

Hemos sido convocados a participar en la selección, realineación y actualización de nuestros mitos. Este libro presenta un sistema que enseña a ser más competente en la contemplación del camino por recorrer. Los organizadores creemos que una mitología bien articulada y cuidadosamente examinada es una de las herramientas más eficaces para combatir las influencias perturbadoras de un mundo inmerso en una confusión mitológica. Tal mitología también señala el camino de regreso al profundo mundo de la psique. Dado que tenemos menos posibilidades de contar con los mitos del pasado o de la sociedad en la que vivimos, nos vemos obligados a permitirnos un grado mayor de confianza en nosotros mismos. Las personas que tienen éxito en lo que hacen usan instintivamente mitos concebidos de manera creativa para trabajar con los problemas a los cuales se enfrenta. El famoso inventor R. Buckminster Fuller, en la última etapa de su vida, describió la importancia para él de su vista, muy deteriorada desde niño. Todo lo que veía era borroso en extremo hasta que, a los cuatro años, comenzó a usar anteojos y quedó sorprendido por la manera en que de pronto logró enfocar el mundo. Este moderno pensador renacentista especuló sobre el hecho de recibir esos anteojos como la probable razón a la convicción que mantuvo a lo largo de su vida: aunque las ideas y las relaciones le parecieran borrosas al principio, eventualmente se aclararan. Ese fue, para él, un mito guía positivo, eficaz y realista.

Al tomar conciencia del desarrollo de nuestra mitología somos más capaces de encontrar una guía creativa de nuestro interior y de sacar conclusiones confiables de las lecciones de nuestras experiencias personales, en lugar de vernos obligados a perpetuar creencias, códigos familiares o imágenes culturales anticuadas. Al ganar cierta autonomía a partir de las imágenes míticas limitantes de nuestra cultura y de otras fuentes anteriores, se incrementa nuestra libertad psicológica y se afianza nuestra capacidad para manejarnos en un mundo que va cambiando sin cesar. Este libro ofrece un conjunto de herramientas que ayudará a comprender mejor y a trabajar de manera constructiva con su mitología que está siempre evolucionando.

MITOLOGIA PERSONAL EN UN

CONTEXTO PSICOLOGICO

Los psicólogos han ofrecido numerosas palabras y conceptos para ayudar a los individuos a pensar en su vida interior. Nosotros nos concentramos en la mitología porque el mito es el idioma que se aproxima con más exactitud al funcionamiento natural de la psique. Sin embargo, la expresión mitología personal muchas veces se malinterpreta porque mito, en el habla cotidiana, ha pasado a tener un significado equivocado. No obstante, no conocemos mejor definición que mitología personal para denotar la forma en que la conciencia humana refleja imágenes psicológicas profundas mientras simultáneamente es moldeada por la mitología de la cultura que le rodea. En oposición a términos tales como libretos, actitudes o creencias, mito logra abarcar la dimensión arquetípica del inconciente, que trasciende condicionamientos anteriores y fijaciones culturales. La visión mítica también nos recuerda que formamos parte de un escenario mayor que el de nuestras preocupaciones inmediatas. El traer una perspectiva mitológica a la psicología muestra un marco que es más potente en la facilidad con que trabaja con los procesos inconcientes, en la sensibilidad con las fuerzas culturales y en la dignidad que le otorga al acto de examinar la historia humana.

La expresión mito personal fue introducida por primera vez en la literatura psiquiátrica en 1956 por Ernst Kris, que la utilizó para describir ciertos elementos evasivos de la personalidad humana que los psicoanalistas deben explicar para que los efectos de la terapia sean duraderos (9). Sin embargo, pueden encontrarse conceptos similares en la obra de Sigmund Freud, Alfred Adler y Carl Jung. A Freud le fascinaba la mitología, y seleccionó el mito de Edipo para presentar el dilema fundamental del desarrollo humano. Adler creía que los primeros recuerdos de un individuo revelaban una ‘mitología privada’. Los paralelos asombrosos encontrados por Jung en los sueños, obras de arte y mitos culturales lo llevaron a realizar estudios profundos sobre la importancia de psicológica en la mitología y llegó a exponer su propio mito personal en su autobiografía. (10)

Se considera que los enfoques psicoterapéuticos que utilizan como base los trabajos de Freud, Adler y Jung son, en conjunto, psicología profunda, debido al énfasis que ponen en los procesos subconcientes. La psicología profunda, según las palabras de James Hillman es la forma actual de la mitología tradicional, la gran portadora de la tradición oral(11). Hace hincapié en que los mitos hablan con la psique en su propio idioma: se comunican por medio de emociones, dramatizaciones, sensualidad y fantasía(12). La psicología profunda ofrece un marco y un método para examinar la psique humana, el órgano de la vida psicológica, que opera tanto dentro como fuera del campo del estado conciente, que pone en equilibrio innumerables deseos, impulsos e intuiciones, y que es capaz de expresarse con imágenes, sentimientos, pensamientos y acciones. El compromiso de la psicología profunda es que a medida que vamos conociendo nuestra psique tendremos menores probabilidades de experimentar impulsos inconcientes y mayores posibilidades de acceder a la sabiduría inconciente.

A pesar de que en un principio el psicoanálisis y otras psicoterapias profundas fueron propiedad de unos pocos privilegiados, un