Libro electrónico48 páginas41 minutos
La belleza. La Iglesia: Prólogo de Etsuro Sotoo
Calificación: 4 de 5 estrellas
4/5
()
Información de este libro electrónico
"Benedicto XVI nos dice dos palabras sustanciales para comprender el Misterio de la salvación cristiana. la primera es la palabra belleza. Ésta revela la inexorable nostalgia del hombre por la verdad, la justicia y el bien, es decir, la nostalgia de Dios (...) La segunda es la palabra Iglesia. La Iglesia es el lugar a través del cual cada hombre encuentra el acceso al Padre y se hace hijo de Dios en Su pueblo" (de la Introducción).
Lee más de Joseph Ratzinger (Benedicto Xvi)
Relacionado con La belleza. La Iglesia
Títulos en esta serie (70)
El respeto político a la creencia: Laicidad y laicismo Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesHuellas de experiencia cristiana Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificaciones¿Hay que desconstruir la metafísica? Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesLa belleza. La Iglesia: Prólogo de Etsuro Sotoo Calificación: 4 de 5 estrellas4/5Crisis del derecho de defensa Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesLa gran dictadura Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesSoy yo, no tengáis miedo: Sobre los refugiados y los inmigrantes Calificación: 5 de 5 estrellas5/5El bicentenario de la independencia de los países latinoamericanos: Ayer y hoy Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesHistoria de la confianza en la Iglesia Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesBreve historia del Concilio Vaticano II Calificación: 3 de 5 estrellas3/5Dialéctica de la secularización: Sobre la razón y la religión Calificación: 5 de 5 estrellas5/5El sacrificio Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesCincuenta maneras de mejorar a tu familia Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesUna pizca de alegría: ...siempre que sea honda Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesEl pensamiento de Leonardo Polo Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesCita con la muerte Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesElogio del libro de papel Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesLa asamblea que condenó a Jesucristo Calificación: 4 de 5 estrellas4/5Y comieron perdices... Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesVaya usted con Dios... Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesSan Josemaría Escrivá Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesSentido del sufrimiento Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificaciones¿Un mundo sin Dios? Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesUn país de chiste Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesDios existe. Yo me lo encontré Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Héroes anónimos Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesEl Islam y España Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesPapá, ¿por qué existen las moscas? Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Bien, mejor, ¡excelente! Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesEnvidia de la mala, envidia de la buena Calificación: 5 de 5 estrellas5/5
Libros electrónicos relacionados
Ser cristiano en la era neopagana Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Signos de la nueva vida: Homilías sobre los sacramentos de la Iglesia Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesLibertad en Raztinger: Riesgo y tarea Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Seguir hoy a Cristo: Vida sacerdotal y consejos evangélicos Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Catolicismo: Aspectos sociales del dogma Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesEl Amor que hizo el sol y las estrellas: Fundamentos de doctrina cristiana Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesLa Confesión explicada hoy Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Amar a Dios con san Agustín Calificación: 4 de 5 estrellas4/5Jesucristo, nuestro Salvador Calificación: 4 de 5 estrellas4/5Catolicismo: Viaje al corazón de la fe Calificación: 5 de 5 estrellas5/5La verdad nace de la carne: Ejercicios Espirituales de Comunión y Liberación (1988-1990) Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesDiccionario de textos escogidos: John Henry Newman Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesUna extraña compañía Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificaciones365 días con Carlos de Foucauld Calificación: 1 de 5 estrellas1/5El sacrificio de la misa Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesEl viaje de la oración Calificación: 5 de 5 estrellas5/5La Trinidad explicada hoy Calificación: 4 de 5 estrellas4/5Retorno a Dios: Días de retiro para dilatar el corazón Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Jesús y las raíces judías de la Eucaristía Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Toda la tierra anhela ver tu rostro Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesTrabajo del hombre, trabajo de Dios: La dignidad del trabajo manual en las enseñanzas de san Josemaría Escrivá Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesUna mirada a Europa Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Cooperadores de la verdad: Una meditación para cada día del año Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesYo creo: Prólogo de Monseñor Alfonso Carrasco Rouco Calificación: 4 de 5 estrellas4/5Revelacion y tradicion Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Mirar a Cristo: Ejercicios de Fe, Esperanza y Caridad Calificación: 5 de 5 estrellas5/5La teología de la historia de San Buenaventura: Estudio introductoria de Mons. Jesús Sanz Calificación: 4 de 5 estrellas4/5Y Dios se hizo hombre: Homilías de Navidad Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Presente y futuro de Europa Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Episcopado y primado Calificación: 5 de 5 estrellas5/5
Ética y ensayos religiosos para usted
Dignos de ser humanos: Una nueva perspectiva histórica de la humanidad Calificación: 4 de 5 estrellas4/5Ética cristiana: Cómo navegar en tiempos turbelentos Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Sobre la felicidad Calificación: 4 de 5 estrellas4/5Literatura infantil Calificación: 4 de 5 estrellas4/5El Problema del Dolor Calificación: 4 de 5 estrellas4/5La enfermedad de escribir Calificación: 4 de 5 estrellas4/5Y Dios se hizo hombre: Homilías de Navidad Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Un rabino habla con Jesús: El libro con el que Benedicto XVI dialoga en Jesús de Nazaret Calificación: 1 de 5 estrellas1/5Ética bíblica cristiana Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Yo creo: Prólogo de Monseñor Alfonso Carrasco Rouco Calificación: 4 de 5 estrellas4/5Jesús es el Señor: Llamado a un discipulado radical Calificación: 5 de 5 estrellas5/5La experiencia de leer Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Cartas para el ejercicio de la oración mental Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesObras completas Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Pueblo y casa de Dios en la doctrina de san Agustín sobre la Iglesia Calificación: 4 de 5 estrellas4/5Código Ratzinger Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Historia oculta del Satanismo: La verdadera historia de la Magia Negra desde la antigüedad hasta nuestros días Calificación: 5 de 5 estrellas5/5El drama del humanismo ateo: Prólogo de Valentí Puig Calificación: 4 de 5 estrellas4/5Los orígenes históricos del cristianismo Calificación: 4 de 5 estrellas4/5Los enemigos: O cómo sobrevivir al odio y aprovechar la enemistad Calificación: 5 de 5 estrellas5/5No leer Calificación: 4 de 5 estrellas4/5CeroCeroCero: Cómo la cocaína gobierna el mundo Calificación: 4 de 5 estrellas4/5Laboratorio lector: Para entender la lectura Calificación: 5 de 5 estrellas5/5El gran teatro del mundo Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Las alegorías de Olodumares: Símbolo y memoria cultural en la regla Oscha e Ifá Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Evangelizar Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificaciones¿Soy yo normal?: Filias y parafilias sexuales Calificación: 5 de 5 estrellas5/5La pasión del poder Calificación: 5 de 5 estrellas5/5El Opus Dei: Los secretos de una Obra entre creencias y escándalos Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesLa moda justa: Una invitación a vestir con ética Calificación: 4 de 5 estrellas4/5
Categorías relacionadas
Comentarios para La belleza. La Iglesia
Calificación: 4.142857142857143 de 5 estrellas
4/5
7 clasificaciones0 comentarios
Vista previa del libro
La belleza. La Iglesia - Joseph Ratzinger (Benedicto XVI)
Libros de bolsillo
71
Joseph Ratzinger
La belleza
La Iglesia
Prólogo
Etsuro Sotoo
ISBN DIGITAL: 978-84-9920-767-4
Título original
La bellezza. La Chiesa
© 2005
Itacalibri, Castel Bolognese, Italia
© 2006
Ediciones Encuentro, S. A., Madrid
Traducción
Carmen Salgado
Diseño de cubierta: o3, s. l. - www.o3com.com
Queda prohibida, salvo excepción prevista en la ley, cualquier forma de reproducción, distribución, comunicación pública y transformación de esta obra sin contar con la autorización de los titulares de la propiedad intelectual. La infracción de los derechos mencionados puede ser constitutiva de delito contra la propiedad intelectual (arts. 270 y ss. del Código Penal). El Centro Español de Derechos Reprográficos vela por el respeto de los citados derechos.
Para cualquier información sobre las obras publicadas o en programa y para propuestas de nuevas publicaciones, dirigirse a:
Redacción de Ediciones Encuentro
Ramírez de Arellano, 17-10.ª - 28043 Madrid - Tel. 902 999 689
www.ediciones-encuentro.es
PRÓLOGO
«En el principio era el Verbo». Así comienza el Evangelio según San Juan. El Verbo es la Palabra. Nosotros, los hombres y mujeres de todos los tiempos, nos enriquecemos por la Palabra. Sobre esta idea he tratado de estudiar la obra de Gaudí, en la que me he integrado con mi trabajo profesional como escultor en el Templo Expiatorio de la Sagrada Familia de Barcelona desde el año 1978.
Antoni Gaudí ideó, para esta obra arquitectónica, la ventanal de la nave central que en su parte exterior presenta frutos, en la zona superior del edificio, y hojas, en la zona inferior. Habría que pensar qué llevó al genio a actuar de esta forma para saber qué buscaba expresar. En su profundo estudio de la naturaleza, en su observación de la Creación, una vez más, había encontrado en los frutos y en las hojas una vía de catequesis y a la vez de expresión estética para hablarnos del valor de la Palabra de Dios y de cómo ésta acompaña la Historia de los hombres. Los frutos reciben el alimento gracias a la luz del sol que llega a las hojas de cada planta. Sin las hojas y su función, nunca una planta llegaría a producir sus frutos. Todas las plantas necesitan la luz para alcanzar el fruto maduro. Así ocurre con nosotros, los hombres. Necesitamos la Palabra de Dios para madurar. Para nuestro desarrollo auténtico como personas, nos es imprescindible el alimento de la Palabra.
El simbolismo de Gaudí, a la hora de colocar los frutos en la parte superior de la nave, y las hojas en la parte inferior, creo que da para una reflexión más. Nuestro mundo tiene frutos y hojas. Cuando el alma humana madura, sube, asciende hacia Dios y ya no necesita las hojas. Por eso los frutos ocupan el nivel superior. Las hojas, los instrumentos que le han servido en la tierra para alimentarse en lo espiritual, quedan en el suelo, en la parte inferior del edificio, porque una vez que
¿Disfrutas la vista previa?
Página 1 de 1