Harta de escuchar "llorando no resuelves nada". Sí, yo sé que llorar no me resuelve, pero llorar me ayuda a desahogarme, me ayuda a sacar lo que siento, me ayuda a conocerme mejor, a descubrir nuevas formas de atravesar el caos, de navegar en tiempos de crisis, y de hacer mejor análisis de por qué el vaso se derramó. Llorar no me resuelve pero me ayuda, me sana, me deja sentir, es mi forma de expresar lo que siento, es mi forma de demostrarle al mundo que soy vulnerable, que soy reactiva, que soy sensible, que soy HUMANA. No me digas que llorar no resuelve nada porque aún llorando, aún frustrada, aún triste, aún estresada, y aún enojada... resuelvo.

Porque demostrar mis emociones y permitirme sentirlas no me hace menos capaz, no me hace menos fuerte, ni me hace menos madura. Me hace humana. Y me siento orgullosa de sentir tan fuerte como siento.

Cuando esos colapsos emocionales se dan es porque durante mucho tiempo estuviste guardando emociones en la caja, pero esa caja no puede con tanto, y va a llegar un momento en que no va a poder cerrar. Va a necesitar que la vacíes para poder hacer espacio. La forma en la que la vacíes es lo de menos, en todos es distinta.